Viaje de compras

Tal y como me dijo Alma, fui a su casa para el viaje de compras. Llené la cartera de dinero y de tarjetas de crédito y me vestí con uno de los conjuntos que me había creado ayer. Llevaba puestas nas botas negras que llegaban hasta la rodilla, una falda negra algo ajustada que comensaba en la cintura y una camisa blanca escotada sin mangas. Tenía el pelo largo y suelto y como siempre, llevaba puesta algo de rimel y brillo de labios. Aparqué el cohe y toqué la puerta.

Había quedado con Sheila que pasaría por casa para ir de compras. Casi terminaba de prepararme cuando escuché que llamaban a la puerta. Llevaba unos jeans desteñidos y unas botas negras de J. Campbell, faltaba elegir cartera, saco y listo.
-Shey!. Estás guapísima!. Cómo estás?.- dije mientras la saluda con dos besos.

-Hola, bien ¿y tu?-dije sonriendo y respondiendo a sus dos besos-Tu tampoco estás nada mal-dije mirandola atentamente. Me quedé fuera de su casa, no podía pasar.

-Vamos entra...- dije al ver que se quedaba en la puerta. En ese momento recordé a Zach y el hecho de que a los vampiros hay que invitarlos a entrar, Shey no podía ser vampira... no daba la impresión, pero igual estaría atenta. -Qué te parece la sala? Es sencilla, pero quedó cálida como quería... tuve que ir acomodándola un poco.- le expliqué mientras ingresábamos.


[off: la foto de la sala esta en otro post aquí en mi casa... jeje]

Entré aliviada de que me hubiese invitado-Me encanta, es como la de las pelis-dije mirando todo aquello. Me quedé mirando a Alma algo extrañada, parecía que le extrañara algo de mí...

-Qué lindo lo que dices... sí, era la idea que fuese un lugar cálido, donde dieran ganas de quedarse... es sencillo, pero no quería gastar demasiado dinero en cosas lujosas así que me esmeré en la decoración.- hice una pausa. -Sucede algo?.- pregunté al ver cómo me miraba.

-Es que...-hize una pausa-Nada, déjalo, cosas mías...

-Pero dime... en serio, no me conoces tanto pero quiero que sepas que aunque tengo 19 años he pasado por las circunstancias más extrañas que se te puedan llegar a ocurrir...- dije sonriendo para darle confianza. -De veras, ya nada me sorprende...- dije mientras elegía un bolso Tumi y me iba hacia el vestidor para elegir abrigo.

-He tenido la impresión de que sospechaste de mí o que desconfiaste o algo-le expliqué.

Evidentemente Shey había notado mi duda al dejarla entrar. -En realidad no sería la palabra sospecha o desconfianza...- expliqué. -Vale. Voy a decirte qué es lo que sucedió... Sé que tu crees en vampiros, Ben me lo dijo una vez, así que vas a comprenderme.- comencé diciendo. -Yo he salido... de hecho he vivido durante un año y medio con un chico que era vampiro. Sé que suena extraño y puedes no creerme, pero es mi verdad. Desde entonces sé algunas cosas sobre vampiros, por ejemplo, que no pueden ingresar a tu casa si no los invitas a pasar... Siempre que alguien nuevo llega a casa observo si entra directamente o espera que le diga algo. Es una manera de identificar a quienes no son vampiros...- sonreí.
-Ahora quizá creas que soy una loca, y sé que puede ser casualidad, pero la cosa es que tu te demoraste... y esperaste que te lo dijera.-

Sonreí-Siento decepcionarte no "creo" que los vampiros existan-hize una pequeña pausa-Sé que existen, aquí tienes un especimen-dije señalandome de arriba a abajo.

Realmente me sorprendió su respuesta. -Vale! Sí que me has sorprendido!.- exclamé sonriendo. -No pareces vampira, no tienes muchos años verdad?.-

-¿18 te parece poco?-pregunte alzando una ceja-Ya soy mayor de edas, eso es todo un mérito-dije sonriendo.

-Ok. Lo sabía!.- dije riendo. -He conocido varios vampiros y, una vez que lo sabes, no pueden disimular la vejéz en sus ojos... tu no tienes eso, tu eres joven de verdad!.- sonreí.

De pronto una nube cubrió mis pensamientos, si Sheila era vampira entonces Benjamin no podía no saberlo... todo lo que había estado diciéndome acerca de qué no creía era una mentira, solo restaban dos explicaciones quería proteger a Sheila o era un vampiro.

Lo mismo se aplicaba a Aitana, porque si Benjamin era vampiro, entonces Aitana también podría saberlo o, peor aún, serlo. Así y todo quedaba el asunto de las memorias borradas, lo que complicaba un poco las cosas, Shey podía haber estado borrando la memoria de Benjamin o habérsela borrado al terminar la relación... Me sentía realmente cansada y confundida.

Me dejé caer en el sofá ante la mirada confusa de Sheila, necesitaba pensar.

-¿Qué te pasa?-pregunté preocupada sentandome a su lado a toda velocidad.

Estaba confundida, quería contarle todo lo que pensaba pero no quería preguntarle cosas que no querría contestar y tampoco sabía por donde empezar... -Le has borrado alguna vez la memoria a alguien?.- pregunté.

No pude evitar reirme-¿Qué clase de pregunta es esa?-dije sonriendo-Ni siquera he matado a un ser vivo en toda mi vida ¿voy a borrarle la memoria a alguien?

-Ok.- dije recuperando un poco la calma. -Es solo que en un segundo hice una serie de deducciones que me han llevado a darme cuenta de muchas cosas y... de algún modo... necesitaba procesar toda esa información.- dije con una pequeña sonrisa.

-¿Qué cosas?-pregunté curiosa.

off:me voy xau!

No sabía si decirle lo que había pensado... necesitaba primero ordenar mis pensamientos y tener alguna claridad. Pero tampoco podía ignorar el hecho de que había sido totalmente sincera conmigo y se merecía una explicación. -Es solo que tuve una conversación con Benjamin acerca de vampiros, en la que le confesé ciertas preocupaciones, de las que quizá te hable en algún momento, y él sostuvo que no creía que existieran. Ahora creo que sólo puede haber dos explicaciones: que lo haya hecho para protegerte o que él también es vampiro. Y si él es vampiro, bueno pues el problema se traslada a Aitana... en fin, son solo deducciones, no me hagas caso.- dije encogiéndome de hombros.


[off: vale, la seguimos en otro momento... ]

-Benjamin y Aitana son vampiros-le aclaré-pero no digas nada ¿vale?-le pedí.

Qué Sheila me confirmara eso con tanta naturalidad me sorprendió casi más que el hecho de que Ben y Aitana efectivamente fueran vampiros...
-No es posible... Benjamin me lo ha negado y Aitana... estuve de fiesta con ella, trabajo para ella...- sólo atiné a decir. La verdad es que se me habían ido las ganas de salir de compras, sólo quería café.
-Shey, te molesta si dejamos el viaje para más tarde... La verdad es que se me ha ido un poco el ánimo... sólo necesito un poco de café.- dije tratando de sonreir.

-¿Crees que un vampiro te dice así por toda la cara que lo es?-pregunté alzando una ceja-Esta bien, pues toma café-dije sonriendo.

El comentario de Sheila me resultó gracioso y me relajó un poco... -Ok. Tienes razón.- reconocí un poco avergonzada... -Es solo que... siento como si me hubiese engañado, pero supongo que si lo pienso es una tontería.- sonreí. -Ven, acompáñame a la cocina.- dije yendo para ahí.

-¿Te sientes engañada?-dije mientras me levantaba y la acompañaba a la cocina-Pues vamos mal...-dije sonriendo.