+18 Pasando la noche (Ben)

Recuerdo del primer mensaje :

Luego de demorarme un rato, saqué las llaves y abrí... le hice un gesto para que entrara y encendí la luz... no estaba tan caótico pero los muebles no estaban bien colocados y había pilas de libros y objetos que antes estaban en los muebles repartidos por sitios que no tenían nada que ver...

- Lo sé- dije sin más sonriendo y acercándome a darla un beso, no me consideraba un romántico en si pero cuando quería a alguien no me veía con motivos para ocultarlo así que no me cortaba para nada a la hora de decir las cosas.

Sonreí y continué el beso cuando se acercó. -Seá cosa de los franceses...- susurré apartándome un poco de sus labios y mirándolo con una sonrisa.

- ¿Tú crees?- dije con una pequeña sonrisa cuando dijo eso ya tras el beso y cuando se apartó un poco de mi.

-Sí, lo creo... les gusta decir palabras bonitas cuando hablan de sentimientos...- dije mirándolo con una sonrisa, sabía de lo que hablaba... -Es más, creo que les gusta oírse decir palabras bonitas...- dij pensando en eso y como si yo no fuera también francesa, aunque también me gustaba decir cosas bonitas y de hecho a él se las decía tranquilamente...

- Claro que nos gusta, y más cuando son en francés que queda todo mucho más bonito-murmuré sonriendo y besandola ligeramente- Je t'aime tant, je veux être près de toi...-susurré sonriendo contra sus labios como si buscara corroborarlo.

Sonreí cuando dijo lo primero y luego ya se acercó y murmuró en francés... me mordí el labio instintivamente mirándolo a los ojos antes de que me besara. Me encantaba oirlo decir eso... sonaba perfecto.

[off: vuelvo en 20, voy a cenar... si estás, seguimos ]

Sonreí cuando se mordió el labio y la besé enseguida, abriendo más sus labios con los mios y recorriendo su boca sin cortarme para nada, solo disfrutando del beso.

[off: Ok, bye! ]

Continuamos besándonos pausadamente, sintiendo nuestras lenguas y dejándonos llevar. Mordí levemente sus labios, lo acerqué a mi y volví a soltarlos antes de volver a hundirme en su boca.

Suspiré y continué besandola, siguiendo nuestro propio ritmo mientras con mis manos la pegaba más a mi para poder profundizar los besos cada tanto.

Seguimos besándonos. -No está tan mal este sofá...- murmuré con una sonrisa tras separarnos y suspirar. Enseguida volví a besarlo sin apurarme y disfrutando de cada contacto.

- ¿Tu crees? A mi me sigue gustando mas el otro- dije bromeando contra sus labios antes de continuar su beso en cuando volvió a besarme.

-Tú sólo porque quieres llevarme la contraria...- susurré contra su oído y besé luego detrás de su oreja bajando por su cuello. -Ya tendrías que saber que lo mejor es darme la razón y ya...- continué con una sonrisa contra su cuello mientras no dejaba de besarlo pausadamente.

- No te pienso dar la razón como a los locos...-murmuré sonriendo sintiendo sus besos por mi cuello y suspirando.

-No dije que tuvieras que dármela como a los locos...- murmuré sin dejar de besar su cuello y ya subiendo por su barbilla y dándole algunos pequeños mordiscos.

- Tu sigue así y puede que pronto me empiece a gustar el sofá- dije bromeando mientras volvía a sus labios al ver como subia y besandola.

Sonreí cuando dijo eso y enseguida ya me besó así que continué jugando con sus labios y sintiendo como nuestras lenguas se entremezclaban.
-Seguiré si tú quieres...- murmuré ya poniéndome de pié y bajandome la cremallera del vestido sensualmente mientras no quitaba la vista de sus ojos. Lo dejé caer quedando ya en ropa interior, me subí al sofá lentamente quedando sentada sobre él a horcajadas.

Sonreí y me mordí ligeramente un labio sin poder evitarlo al ver como se levantaba y se quitaba el vestido. Sonreí y la cogí de la cintura enseguida cuando se sentó sobre mi- Quiero...-dije para toda respuesta mientras besaba su cuello lentamente y acariciaba su espalda.

Sonreí cuando dijo eso tan claramente y enseguida comenzó a besarme así que volví a hundirme en sus labios disfrutando a la vez de las caricias en mi espalda.

Sonreí tomando su rostro para profundizar el beso antes de bajar poco a poco besando su barbilla hasta llegar a su cuello al igual que con mis manos acariciandola poco a poco.

Sentí como se fue deslizando lentamente con sus besos y caricias hasta llegar a mi cuello. Cerré los ojos disfrutando del contacto de sus labios en mi piel, y me dediqué a acariciar sus hombros y luego ir hacia adelante para comenzar a desabrochar su camisa.

Suspiré y enseguida abandoné su cuello hacía sus hombros porque por un momento me habían dado demasiadas ganas de morderlas al estar en esa parte y últimamente no me controlaba mucho así que intenté ya relajarme volviendo a sus labios y dejando que se deshiciera poco a poco de los botones de mi camisa.

Acabé de desprender su camisa antes de deslizarla suavemente por encima de sus hombros para librarnos de ella. Sentí como se alejaba de mi cuello para besarme los hombres antes de volver a mis labios y por un instante me llamó la atención la forma en la que se retiro... siempre estaba muy atenta cuando besaba mi cuello porque era una de las cosas que más me gustaban y a él también... pero lo dejé pasar porque quizá era sólo una impresión.

Comencé a acariciar sus hombros y su cuello mientras nos besábamos, bajando por su pecho y abdomen con suavidad, acariciándolo sin cortarme.

Me quitó la camisa deslizándola por mis hombros y sonreí enseguida contra sus labios al sentir ya como me acariciaba, me encantaba. Suspirando mordí su labio inferior juguetonamente mientras mis manos continuaban acariciando e iban hacía su espalda ya para desabrochar poco a poco su sujetador.

Mientras desabrochaba mi sujetador, continuamos besándonos con besos pequeños y sucesivos, jugando con pequeños mordismos, tironeando, rozando, buscándonos... me encantaba sentirlo allí conmigo.
Continué con las caricias, bajando a su cintura y desabrochándole el cinturón antes de comenzar a sacar los botones lentamente.

Me libré de su sujetador tras deslizar los tirantes lentamente por sus hombros antes de dejarlo a un lado y continué besandola disfrutando de eso y de sus caricias antes de que comenzara a hacerse cargo de los botones de mi pantalón.