Pasando el rato (Miriam)

Hacía rato que no iba a ver nada al Teatro, así que cuando pasé por allí y ví que estaba por comenzar la nueva obra ni dudé y enseguida me saqué un boleto.

Había escuchado que hoy estrenaban una obra interesante en el teatro de Fell's, llegué justo a tiempo y compré la última entrada antes de entrar dentro del recinto.

Ya había entrado y estaba acomodándome cuando sentí que una chica entraba y se pasaba para sentarse a mi lado. Miré bien, era Miriam. -Hola.- murmuré enseguida, no era que hubiéramos quedado en los mejores términos pero bueno.

Fuí a sentarme al lado de una chica rubia parecía que no había mucho más sitios.
Escuché la voz de la chica y era Alma -¡Hola! ¿Puedo sentarme aquí? Es esto está lleno- comenté con una pequeña sonrisa.

-Claro.- murmuré porque no es como si fueran míos los asientos o algo de eso. -Aún falta para que empiece pero bueno, así me da tiempo a estar bien acomodada y demás.- comenté por decir algo.

-Gracias- dije posando mi bolso sobre mis piernas tras sentarme a su lado.
-Si, tienes razón es mejor lelgar con tiempo para no perderse nada- comenté con una sonrisa.

No sabía muy bien qué decirle así que esperé un rato en silencio a que la obra comenzara. Luego ya se vería.

Me sentía mal al estar así sin hablar con ella pero no sabía ni que decirla, al final comenzó la obra y empezamos a verla.

La obra comenzó a desarrollarse y no estaba siendo mala para nada. No le había tenido mucha confianza porque bueno... convengamos que no es que Fell's Church fuera la cuna del arte ni mucho menos. Pero no estaba mal, de hecho era bastante interesante. No era una obra larga así que al cabo de un rato ya terminó dejándome un poco reflexionando porque iba sobre la guerra y esas cosas.

La obra transcurrió normalmente no era muy larga y estaba siendo entretenida. Al final terminó y la gente comenzó a levantarse, esperamos sentadas a que salieran y me giré para poder mirarla -Al final la obra ha estado bien- dije sonriendo.

-Sí, la verdad es que me gustó. No le tenía mucha fé que aquí no es que traigan las mejores cosas...- le dije con una leve sonrisa. -Pero bueno, que ha valido la pena.- dije mirándola. Cogí mi cartera y mis cosas para levantarme y ya salir.

-Yo ya había escuchado habalr de la obra y sentía curiosidad por verla y al saber que la daban aquí decidí venir a verla- le comenté mientras nos levantabamos para salir del teatro.

Me comentó que ya sabía de la obra y sonreí. -Sí, es que como traen tan pocas cosas pues que dan ganas de aprovechar cuando aparece algo interesante.- le comenté y ya salimos de la sala.

-Si , yo ya no soy tanto de ir al teatro me dió una época hace 100 años en que íba casi siempre peor los tiempos cambian- dije con una sonrisa saliendo de la sala.

-Ya... entiendo. Aunque claro que el teatro de principios del siglo XX no era ni parecido al actual...- le dije sacando cuentas y pensando en eso.
Ya salimos de ahí y me detuve en la entrada, me había pedido perdón y en parte quería perdonarla... pero aún no sabía qué tanto de verdad se arrepentía de haber hablado así de mí. -¿Cómo has estado?.- le pregunté más que nada por no irme así sin más como una maleducada.

Asentí cuando dijo eso y se detuvó en la entrada cuando salimos del teatro. Me preguntó como estaba y sonreí -Bien, mi vida ha dado un giro de 180º en unas semanas- dije con una pequeña sonrisa -¿Tu cómo has estado?- dije con una sonrisa.

-También he estado bien.- le dije con una leve sonrisa. Con las cosas de siempre al estar con Ben, idas y venidas, en fin... que era el ritmo que llevábamos. -Y porqué un giro de 180º?.- le pregunté después.

Sonreí alegrandome por ella -No creo que esto te guste, Stefan y yo lo hemos dejado y ahora estoy con Sam- le expliqué.

-Nah, me da igual.- dije porque la verdad es que en parte hasta prefería que lo dejara con Stefan, antes o después terminarían... eso de que estuviera con él y a la vez quisiera a otros no me caía bien.
-Y en verdad ya lo sabía por Stefan y luego Ben me ha contado que se encontró contigo, así que también me lo dijo.- le expliqué.

-Vaya las noticias vuelan, supongo que te alegraras por Stefan y que estoy con Sam- dije mirandola.

Sonreí cuando dijo eso porque no paraba de contradecirse intentando "adivinar" mis sentimientos. -Vaya... me dices primero que seguro que no me gusta y luego que seguro que me alegro?.- dije divertida.
-Da igual, en parte mejor por Stefan porque desde el principio te he dicho que no me gustaba la idea de que sufra...- le dije con una leve sonrisa dándole ya la respuesta a cuáles eran mis sentimientos y siendo directa como siempre. Esperaba que no lo tomara mal.

Sonreí cuando dijo eso de que primero le decía una cosa y luego otra debía ser lo que dijo el doctor sobre mi enfermedad.
-Bueno pues no te preocupes ya no sufrirá por lo menos no por mi culpa- dije con una pequeña sonrisa.

-Vale.- dije simplemente con una sonrisa. -Y espero que te vaya bien con Sam.- le dije sinceramente porque no tenía nada contra eso, por el contrario... sabía que estaba con todo eso del tumor y demás así que quizá le vendría bien sentirse acompañada y eso.

-Si y a mi confio en ello porque sé que me quiere me lo demuestra cada día y no me puedo quejar me hace feliz- dije sonriendo.

-Y tú le quieres?.- pregunté porque decía sólo que él la quería y me había dejado la pregunta un poco picando.