Bonjour París... {Alma}

El viaje había sido casi relámpago, pero me sentía contenta de al fin decidirme por partir... y Corey era sin dudas una buena compañía.

Apenas volar sobre París me estremecí, casi podía recordar la sensación que me había dado volver aquella vez... tan desconcertante ese amor que sentía y las ganas de no pisar nunca más mi ciudad a la vez.

Suspiré y me sentí nuevamente en casa, hacía tiempo que no lograba sentirme así.

-Excelente... sábes? creo que por fin empiezo a sentirme como en casa.- dije aceptando su mano y bajando ya del avión.
-Se supone que no quiero que mis padres sepan que estoy aquí... pero igual tengo un piso así que podemos quedarnos allí, te parece?.- le pregunté mientras ya entrábamos en el aeropuerto.

-Lo de mis padres es una larga historia... Pero en fin, no tengo una buena relación con ellos, me fui de casa de chica y ahora no quiero que sepan que estoy aquí... Igual podemos ir a mi piso.- dije sonriendo y ya comenzamos a salir del aeropuerto, paramos un taxi y nos subimos.
-Me gustaría conocer a tu madre si no te parece un problema ni nada...- le dije sonriendo.

Asentí y le dije al taxista la dirección de mi piso en perfecto francés. -Qué hay contigo Corey? Eres demasiado bueno para ser cierto...- sonreí mirándolo de reojo y pensando en ello, estar en París me ponía de excelente humor.

-Ya... me he dado cuenta que eres un poco lento...- dije sonriendo en broma. -Sólo decía que me agrada tu compañía y que no esperaba estar acompañada en París y es mejor así....- dije mirándolo otra vez. Le pregunté al taxista si podía fumar en perfecto francés, aunque estaba lleno de carteles que indicaban lo contrario... me dijo que no, y bufé un poco, pero no faltaba tanto para llegar.

-Lo supose.- respondí como él había hecho. Ya estábamos en el Barrio Latino, allí estaba mi piso... hacía cerca de 4 años que no entraba y me daba algo pensar el estado en el que podría llegar a estar... habían pasado demasiadas cosas.

Pagué, bajamos del coche y me demoré un buen rato en encontrar las llaves del piso. Por fin entramos en el edificio... respiré hondo.
-No vengo desde hace 4 años, la verdad... ni sé con lo que me encontraré...- le dije a Corey con una sonrisa torcida.
Llegamos a la puerta y abrí.

Spoiler:

Lo recorrí con la mirada
-Sí, la verdad no está mal...- dije mirando todo. -No recordaba el cuadro...- dije mirándolo y luego seguí recorriendo haciéndole una seña para que dejara las cosas y se pusiera cómodo.

-Pues no sé... yo quisiera darme una ducha, si quieres coloca tus cosas y pide algo para comer...- le dije sonriendo, mientras me quitaba las botas y las dejaba por allí... no era precisamente ordenada.
-Tengo una sola cama, espero que no te importe.- le dije después recordando que tenía sólo mi habitación con la cama grande. -Igual podemos turnarnos con el sofá si te incomoda.- dije con sonrisa mientras ya habría mi maleta y buscaba cosas para bañarme.

-Vale. Si prefieres el sofá que compartir la cama conmigo... eso es tú asunto.- le dije picándolo con una sonrisa pero ya cogí mis cosas y me fuí al baño, el agua caliente me hizo tomar conciencia de que de verdad estaba otra vez en París, todo había sido rápido.

Acabé la ducha luego de un largo rato, había echado de menos el piso de París... cada detalle me traía recuerdos.
Me anudé una toalla blanca por encima del pecho y salí del baño. -Has pedido algo de comer?.- le pregunté sonriendo a Corey antes de ir a la habitación a cambiarme. -Creo que muero de hambre, si quieres darte una ducha está todo listo.- le comenté con una sonrisa.

[off: me voy ya a almorzar, bye!]

-Ok. Yo llamo.- dije cogiendo el teléfono y buscando en la agenda que tenía algún teléfono de comida. -¿Conseguiste hablar con tu madre?.- le pregunté mientras elegía uno de sushi.