Algunos ingredientes... [libre]

Habia salido aquel dia ha mirar si crecian ciertos ingredientes por aquel bosque para mis conjuros. Sabia que la señora Flowers cultivava algo tras la casa pero me daba cosa pedirle. Tras dar barias vueltas me sente un rato en una rama mientras revisaba lo que habia encontrado y lo apuntaba en un cuaderno.

El olor de una mujer hizo que lentamente se acercara, como un cazador, pero sin intenciones de hacer eso obviamente. No era como los chupasangre, aunque podía llegar a tener un carácter similar. Solo observaría... y encontró a una chica bastante bonita al hacerlo... sus rasgos eran orientales, como los suyos, lo que hizo que le llamara aún mas la atención

Lentamente se acercó mas, y al estar a un metro de distancia, sin que ella se diese cuenta, habló, solo para sobresaltarla

-Hay depredadores aquí en el bosque, tienes que estar mas atenta

Sonrió y esperó la respuesta de la muchacha

Seguia entretenida con mis notas y dibujos cuando oi a alguien ablar y me sobresalto, con la llegada de su voz tambien llego su Poder, el cual no era humano. Solte el lapiz y rapidamente cogi mi catalizador que lo llevava escondido en la manga de la sudadera que me habia puesto.
-No creo que seas el mas indicado para decirme eso-dije mientras giraba la cabeza para verlo y me horrorice al comprobar que sus rasgos eran orientales por lo que supuse que lo habia mandado obasan.

-Oh... veo que mucha gente aquí puede sentir mi naturaleza... que molesto es eso

Haciendo referencia a su condición de licántropo. Normalmente lo mantenía oculto y solo lo utilizaba para intimidar, o para divertirse cuando se transformaba, pero al parecer ella pudo darse cuenta, aunque notó su cara de susto, tampoco era para tanto... parecía que algo mas le perturbaba

-Creo que mas allá de eso me confundes con otra persona... estoy equivocado? Soy Lee Seong Min y tú eres...

Me puse de pie y lo observe mas detenidamente intentando percibir mejor su Poder para determinar que era.
-Todo depende de porqué estes aqui-le respondi mientras me daba cuenta de que no se trataba de un hechicero por lo que me relaje mas ya que obasan no trabajaba con otras especies que no fueran la nuestra.
-Nanaco-le respondi a su 2º pregunta

Nanaco... lindo nombre, pensó el lobo

-Qué haces por aquí a estas horas? Tengo entendido que hay muchos vampiros sueltos...

Mientras hablaba se sentaba al lado de la muchacha

-Buscar hiervas ¿ves?-le dije señalando las pocas que habia encontrado mientras guardaba el catalizador de nuevo en la manga.
-¿Y que pasa si hay vampiros?-le pregunte mientras recogia las pocas hiervas que habian caido.

-Intentarán tomar hasta la última gota de lo que te corre por las venas... así de simple, aunque algo me dice que les costará hacerlo contigo... eres una humana común y corriente?

Al decir esto se acomodó tranquilamente su peinado hacia atrás, por si algún mechón se escapaba

Rei y lo mire con una mueca divertida.
-¿Y tu? ¿Eres un humano normal y corriente?-le pregunte sarcastica.
-¿Tienes miedo a los cuentos de terror?-continue divertida

-Douché... no, como te habrás dado cuenta, no lo soy... a ver... qué soy? esto parece divertido, quizás podría matarte, ser un vampiro que solo juega con su comida, verdad?

Al decir esto, Lee la miró con una expresión macabra pero divertida, para luego responder a la segunda pregunta con una voz mas misteriosa

-Quizás yo soy el cuento de terror... me tienes miedo?

Dijo largando una risotada

-No, no eres un vampiro... tu Poder no es el de un vampiro...-le dije.
Me rei al ver como intentaba asustarme.
-¿Acaso te crees que tengo 5 años como para asustarme asi?-le dije extrañada mientras seguia intentando averiguar que era.

-No... no pareces de 5 años, pero a veces jugar es divertido, no crees?

Pensativo, luego de un momento dijo

-Qué sientes en mi? si puedes sentir los poderes de los vampiros... puedes sentir los míos verdad?

Rei ante su comentario. Me eche hacia delante y apoye la cabeza sobre las manos y los brazos sobre las rodillas mientras lo obsevava pensativa. Asenti ante su pregunte.
-Pero no soy capaz de decir que eres...-le respondi pensativa mientras cerraba los ojos para concentrarme mejor en su Poder-Tu Poder es fuerte... y... salvaje...-le explique-pero no salvaje como el de los vampiros... sino... mas como... un animal...-continue explicandolo.
Y entonces me dio por enviar un poco de Poder a mi nariz y percibi aquel olor... era algo parecido a perro mojado mezclado con el olor alboles y tierra...
- Hueles a chucho mojado-le dije divertida mientras abria los ojos y volvia a sentarme normal.

El escuchaba atentamente lo que ella le decía, con una notable sonrisa, mezcla de orgullo y curiosidad. Estaba acertando en todo... que extraño. Habló leugo de que la chica se detuvo

-Chucho mojado? Es una extraña manera de decirlo... pero si, soy un hombre lobo, creo que eres buena adivinando cosas. Si tuvieras una escoba me habría dado cuenta antes de lo que eres...

Dijo con una sonrisa aún mas marcada mirandola fijamente

Me eche a reir ante su forma de darme entender que ya sabia que era.
-Que sepas que los aviones son mas comodos y rapidos...-le dije divertida. Agarre un poco de su chaqueta y tire de él hasta que pude oler su cuello sin usar mi Poder-y que eso de que hueles a chucho mojado solo se nota cuando usas mucho poder...-continue mientras lo soltaba.

-Corrección, huelo así porque tengo mucho poder

Largó una carcajada y mantuvo la sonrisa al ver como lo tomaba ella. Un segundo después hizo lo mismo con su cuello, aunque su olfato era mas poderoso que el de ella

-No huelo miedo, pero si un muy bonito perfume...

Me eche a reir.
-A no ser que tengas un olfato excepcional no se nota el olor a chucho, y el mio es humano asi que me es imposible percibir ese olor...-le dije.
-¿De veras esperabas que te temiera?-le pregunte incredula-gracias-le respondi a lo del perfume.

-No se... un tipo vestido de negro, acechando y con cara de pocos amigos en un bosque a altas horas de la noche

Le sonrió a la chica

-Estoy perdiendo mi toque

Me eche a reir.
-La primera persona con la que hable en este pueblo resulto ser un vampiro muy simpatico que me ayudo a llegar hasta casa, el segundo amigo amigo que hice resulto ser un pico que le gustaba que le mordieran los vampiros... ¡Ah! y en mi casa viven dos vampiros mas... ¿de veras crees que te puedo tener miedo?-le pregunte divertida.

Suspiró, mirando a la nada

-Odio a los vampiros, y hasta ahora ninguno me demostró que puedo tener con ellos algo similar a la compasión. Por eso vine a este pueblo

Continuó mirando a la nada. De verdad odiaba a esos miserables

La sonrisa se me desdibujo.
-¿De donde vienes?-le pregun te con un tono mas serio.

-Korea del sur

Dijo secamente. No le molestaba la presencia de la chica, aunque así pareciera, solo que le impactaba el hecho de que tuviese tanta relación con los vampiros

-Tú? japonesa?

Me encogi de hombres.
-Asi fue una vez, pero pase a mayoria de mi vida en Nueva York, mi padre era de alli-le explique mientras comenzaba a meter todas mis cosas en mi mochila. Mientras hacia esto un pequeño saquito cayo de la mochila y me abalance a toda prisa a recuperarlo.

Los reflejos del hombre lobo eran mucho mas rápidos que los de la muchacha, por lo que casi al instante agarró lo que se le había caído. Lo miró por un segundo y se lo entregó

-Quieres que te acompañe? hay muchos chupasangre por esta zona...

-No te preocupes, ¡tengo verbena!-le anuncie alegre mientras le mostraba el saquito que el me habia devuelto.
-Regla numero 1: no te acerques a un vampiro confiando solo en tus poderes y regla numero 2: no te confies solo porque se haya mostrado amable contigo-le explique divertida antes de que preguntara mientras volvia a guardar el saquito en la mochila