Tomando algo [Nate]

Era una sabado en la noche y estaba harta de mi casa. No había hecho nada más que acomodar muebles y desempacar cosas y me urgía salir. Me puse un vestido divino pero algo discreto y fui directo a un bar que vi el primer día que llegué.
Era espacioso y algo elegante. Pase por entre las mesas del billar hasta la barra y pedí un cherry bitch mirando alrededor.

Hoy me encontraba trabajando en el bar. La verdad es que había gente pero no demasiada por lo que no tenía mucho trabajo. Una chica estaba entrando, me quedé mirándola ya que me pareció atractiva. Apenas llevaba aquí dos días y me sentía afortunado de tener trabajo aunque fuera de camarero, tampoco es que supiera hacer muchas cosas más. La chica que me quedé mirando se acerco a la barra y le serví lo que me había pedido: Aquí tienes guapa

Levanté la vista al escucharlo y sonreí.
-Gracias -Tomé mi vaso y le di un trago mirando al bartender, examinandolo discretamente. Nada mal para un pueblo perdido en la nada, me dije.
-Soy Laine -le dije-, acabo de llegar al pueblo.

Sonreí y dije: De nada- comenté mientras cogía un trapo y limpiaba parte de la barra, ya que estaba algo sucia y era algo maníatico con eso. Ella se presentó y escuché lo que comentó y dije: Soy Nathaniel, pero puedes llamarme Nate o Nathan como más te guste- comenté mientras escuchaba eso de que era nueva y contesté: Igual que yo, recién acabo de llegar ¿Que te ha traído aquí?

Me volví sentandome a la barra y escuché su pregunta.
Me encogí de hombros:
-La suerte... el destino... Viajo mucho, y es la primera vez que estoy en un pueblo así, estoy más acostumbrada a las grandes ciudades... además algo ando perdida, no conozco a nadie.

Sonreí por lo que dijo y la verdad es que me hizo gracia y contesté: Bueno, a mi me gustan más los pueblos y se podría decir que yo no es conozca a nadie- ya que conocía a Alma, pero para lo que había servido mejor no contarla como conocida, la verdad es que preferiría si ella no estuviera en el pueblo.