Problemas (Ben)

Las cosas se habían precipitado de un modo que no me habían dejado ni un poco de margen. Salí de la universidad y volví a cada por la carretera de siempre hasta que alguien hizo que detuviera mi coche porque se me apareció de repente. Giré a demasiada velocidad y el coche volcó dando unas cuántas vueltas, iba con el condenado cinturón de seguridad así que hasta que me lo quité ya estaba bastante liada entre el asiento y el volante. Mil imágenes pasaron por mi mente pero cuando al fín logré salirme del coche que había quedado bastante destrozado sentí un fuerte golpe en mi cabeza, alguien me agredía, me defendí a puñetazos que no sabía dar y luego de pelear con alguien que ni sabía quien era me sentí desvanecer y fué lo último.

Spoiler:

Minutos más tarde (quizá horas, no podía decirlo con seguridad) todavía estaba tumbada en el suelo, apenas tuve algo de fuerza llamé a Ben y volví a tumbarme hasta que llegara confiando en el condenado GPS o en el vínculo o en lo que fuera, porque no podía ni explicarme con seguridad.

Estaba haciendo algunas cosas cuando recibí una llamada totalmente rara de Alma... No se explicó demasiado y me dijo que la fuera a buscar, aunque tampoco sabía muy bien decirme donde estaba. La llamada me dejó bastante preocupado así que claro que fue enseguida a recogerla.

No tenía muy claro donde estaba, pero me fui dejando llevar un poco por sus indicaciones y por el vinculo de sangre. Conduje con el coche hasta que vi su coche destrozado a lo lejos. ¿Había tenido un accidente?. Aparqué en el arcén enseguida y me bajé buscándola- ¿Alma?- la llamé enseguida mirando alrededor. La vi por fin tumbada en el suello y me precipité hacia ella preocupado para ver como estaba

Sentí la voz de Ben y me giré hacia él, estaba todavía confundida por todo y apenas podía pensar con claridad. -Ben...- dije ya incorporándome un poco y limpiándome los pantalones. -No sé qué pasó... Alguien se me cruzó en la carretera y luego me agredió, pero... no entiendo...- dije pensando y tratando de recordar. -Creo que no era un vampiro, no se movía tan rápido... no entiendo qué quería... luego se marchó....- dije arreglándome el cabello. -Joder! Los pendientes!.- dije al colocar el cabello detrás de mis orejas y advertir que no los tenía. Eran los de mi abuela, la única cosa que había querido tener de mi familia.

Llegué hasta ella y la cogí de la mano para ayudarla a ponerse en pie. Empezó a hablar mientras yo la miraba de arriba a abajo para ver si estaba bien. De verdad que según había quedado el coche agradecía que ahora fuera una vampira y no una simple humana...- ¿No pudiste contra un humano?- dije enarcando una ceja por eso que decia de que creía que no era un humano pero que la había agredido. Dijo enseguida lo de sus pendientes y cada vez estaba de verdad mas descolocado- ¿Alma estas bien?- pregunté casi pensando que estaba alucinando- Lo mismo hoy ni te los has puesto...-dije buscando alguna explicación porque me parecia raro que todo eso hubiera podido ser por unos simples pendientes.

-No era un humano común... era fuerte y ha de haberme adormecido con verbena o algo, ni recuerdo bien lo que pasó... Pero era un chico, estoy segura de eso.- dije incorporándome y tratando de recordar, no podía ser que me hubieran modificado a mí la memoria, sería el colmo.
Dijo lo de los pendientes y lo miré escudriñándolo con la mirada. -¿Unos simples pendientes???.- dije sin dejar de atravesarlo con la mirada. -No son unos simples pendientes Ben, joder... son los que robaste en París. Y claro que recuerdo que me los puse, joder, joder... joder.- dije ya para mí misma de la impotencia que sentía al tiempo que iba yendo a ver el coche con los ojos llenos de lágrimas de la pena que me daba, adoraba ese coche.

Fue escuchando lo que decía de la verbena, después de todo era muy probable según lo que contaba, suerte que no la había pasado nada más grave. Dijo lo demás y enarqué una ceja- No he dicho que sean unos simples pendientes, joder.... No te alteres- dije suspirando y desviando la mirada, claro que sabía que eran los pendieente de su abuela que había robado, sabía eran importantes para ella. No había dicho lo de "simples pendientes", al menos en voz alta, ¿tendría tan bajas las defensas de mi cabeza que ni me había dado cuenta de que podía leerme el pensamiento?. La seguí un poco hasta su coche y la cogí del brazo para que se girara a mirarme, suspiré al verla con los ojos llorosos- Venga Alma, tranquilízate...-dije porque cada vez la notaba mas alterada.

-Ya, está bien.- dije cuando se acercó y dijo que me tranquilizara, realmente quería estar tranquila pero eso me había pillado por sorpresa y desde lo de Paul ya no me sentía tan segura en Fell's. -No sé, tenemos que encontrarlo... Tiene que haber dejado algún rastro.- dije ya yendo hacia el coche y buscando algún olor, algo que me diera una pista de por dónde había pasado o hacia dónde había ido ese chico.

La vi ir hacia el coche y no dije nada, sería imposible razonar ahora mismo con ella, la conocía demasiado... La seguía hasta su coche destrozado y la vi buscar por allí alguna pista- Es una pena.... me gustaba este coche...-dije mirando lo destrozado que había quedado...En fin, la tocaría comprarse otro.

-Y a mí.- dije desviando un segundo la vista del coche para encontrarme con sus ojos. -Me compraré otro apenas pueda, uno igual, así verde y descapotable... Joder, ni aunque lo arreglara quedaría ya en condiciones... Es una pena, apenas me encuentre con ese chico me lo cargaré, mejor que lo vayas sabiendo...- dije volviendo a husmear por entre las ruedas en un intento de encontrar los pendientes por allí tirados, pero es que era obvio que había sido un ataque premeditado y me daba bronca haber caído en la trampa tan fácilmente.

-Vale...-dije ante eso de que se compraría otro coche en cuando pudiera. Dijo todo lo demás y la notaba tan agresiva que casi no quería ni abrir la boca- Nadie te ha dicho que no puedas hacerlo...-dije ante eso que decía de matar al chico, no es que yo fuera un santo y no fuera matanto por ahí a gente...- ¿Por qué querria tus pendientes?- dije pensando casi en voz alta sin entender nada.

-No tengo idea Ben, ojalá sea una casualidad.- dije mirándolo otra vez un segundo... -Pero es que no se llevó nada, tenía dinero en el coche.- dije acercándome a lo que quedaba de la guantera y cogiendo mi bolso con la cartera, todo intacto. -No fué un simple robo... Y si tiene que ver con los pendientes, tiene que ver con mi familia.- dije pensando en eso y recordando las palabras de mi abuela antes de morir, eso de los Blaquier y las dudas que me habían quedado dando vueltas sobre mis verdaderos padres.

No dije nada enseguida, todo me seguía pareciendo muy raro... Pero bueno es que ahora mismo era imposible salir de dudas- ¿Qué quieres hacer?- dije en referencia a todo lo que había pasado, por si quería ponerse en contacto con su familia o si se la ocurria alguna otra cosa que hacer para encontrar al chico que la había atacado.

-Quiero encontrarlo.- dije mirándolo cuando me preguntó eso. -Necesito saber quién es y qué tiene que ver conmigo.- dije pensando en que eran del tipo de cosas que me atormentaban y que me daban ganas de largarme de allí... pero es que con lo de Paul no podía hacerlo. Estaba presa en ese condenado pueblo y encima ahora me sentía insegura.

Me imaginaba que querría algo de eso así que no me negué- ¿Se te ocurre por donde empezar?- dije mientras andaba un poco alrededor del coche para ver si encontraba alguna pista o algo.

-No, pero no puede estar lejos... No era vampiro y andaba a pié, tiene que estar en el pueblo. Pero ni siquiera sé cómo buscar... Joder... Ben, ¿para qué sirve ser vampira cuando lo necesito?.- dije casi quejándome como una niña. -Podríamos ir primero a la Casa de Huéspedes, si no es de aquí es probable que haya rentado una habitación o algo.- dije pensando en alguna cosa, pero es que no se me caía una idea.

No dije nada cuando se quejó como un niña, iba a soltarla cualquier cosa y tampoco era plan después de todo lo que la había pasado- Vale, vayamos... Empecemos por allí y sino, ya buscaremos un plan b- dije mirandola- Vamos...-dije haciendola una señal para que viniera conmigo a mi coche y poder volver al pueblo

Asentí cuando me dijo todo eso, siguiéndolo un poco automáticamente. Era algo que solía sucederme cuando me pasaban cosas que me descolocaban un poco, me ponía automática y es que no podía pensar en nada con claridad. Lo seguí hasta que llegamos a su coche y apenas sentarme allí le eché otra mirada a mi propio coche al lado de la carretera, daba mucha pena de verdad. Cogí el móvil y llamé a la aseguradora, con suerte me darían algo de dinero... Luego saqué los cigarros y me encendí uno, poco importaba que no les sintiera gran gusto, necesitaba ocupar mis manos y mi mente en alguna cosa.

Alma fue llamando por teléfono y fumando pero no dije nada... La notaba mal pero tampoco sabría que decir para animarla. Por lo menos estaba bien que era lo importante, esa llamada me había asustado bastante.Conduje a toda velocidad por la carretera y en menos de 5 minutos ya estabamos entrando de nuevo en el pueblo.

Ben fue deprisa, bueno es que ninguno de los dos era muy calmadito para manejar, ya entramos al pueblo y fue directamente hacia la Casa de Huéspedes. Apenas entrar no pude evitar pensar un segundo en Stefan, no tenía ganas de cruzármelo ahora y tampoco a Hannibal... esa casa tenía demasiadas historias para mí y cuanto más rápido averiguara todo y menos llamara la atención mejor.

La señora Flowers (la encargada de la casa de Huéspedes) no estaba, así que fue un poco una decepción, nos tocaría ir mirando por las habitaciones... En fin. Yo apenas había estado por allí alguna vez en la planta baja y no me conocía demasiado la casa, así que me dejé guiar un poco por Alma para ir hacía las escaleras y subir a donde estaban las habitaciones y demás.

-Sígueme.- murmuré suavemente ya subiendo por las escaleras. No era bonito estar ahí la verdad, tenía demasiados recuerdos por allí y Ben cerca no era lo mejor ahora mismo. Pasamos por la puerta de la habitación de Stefan, o la que era su habitación, pero seguí de largo. -Venga por aquí.- le dije ya abriendo una de las puertas luego de escuchar y comprobar que no había nadie. La puerta estaba con llave, pero no fué dificil falsearla un poco con fuerza vampírica.

Podía notar por el vinculo ese como Alma andaba algo incomoda caminando por allí pero no dije nada, en fin, que mejor ni pensar. Abrimos una de las puertas y entramos. No había nadie, pero eso no quería decir que no fuera la habitación de quien estábamos buscando, así que entramos para buscar entre las cosas que había por allí alguna prueba que le relacionara con el accidente de Alma. Si no encontrábamos nada ya iríamos a otra habitación.

Entramos a la habitación y era un poco complicado de pensar porque realmente no tenía muy claro a quién estaba buscando o qué cosa. La habitación era sencilla (como todas las de esa casa), las cortinas pesadas y cubriendo las ventanas por completo. Varias revistas viejas amontonadas y la ropa dispuesta en el armario. Quien fuera que se alojaba allí hacía rato que lo hacía. -Vigila la entrada, que nadie nos oiga.- murmuré por lo bajo yendo al armario. -Joder...- dije protestando un poco pero en voz baja. -¿Puede alguien tener tan mal gusto?.- murmuré con una media sonrisa mostrándole a Ben un sweater "agujereado" a propósito en algunos sitios, nunca había entendido esa manía de andar con la ropa echa añicos como si fuera moda.

Me iba quedar vigilando como me había dicho pero me aburrí enseguida así que andes de darme cuenta ya estaba sentado sobre la cama ojeando las resvistas que tenía por allí abriendolas y viendo si había algún papel suelto entre ellas. Me enseñó el sweater y me encogí de hombros- No esta tan mal...-dije con una pequeña sonrisa, pero vamos, que era claro que el sentido de la moda de Alma y el mio no era precisamente el mismo...

Ben me hizo caso durante unos segundos apenas se aburrió lo tuve sentado en la cama ojeando las revistas sin la menor intención de guardar silencio. Dijo eso del sweater y entorné los ojos. -Como te encuentre algo así, lo tiro.- le advertí en broma con una sonrisa. Seguí revisando un poco pero es que no había señales de que quien fuera que vivía allí, estuviera de paso. -Vamos mejor a otra parte.- le dije por cambiar de habitación antes de cerrar cuidadosamente el armario como lo había encontrado.