Investigando (Ben)

Ben estuvo de acuerdo y no tardé nada en ponerme de pié para volver a salir. Ni me había quitado la chaqueta así que bastó coger un bolso para poner allí algunas cosas y salir otra vez de la casa rumbo a la Casa de Huéspedes. Si había algo allí tenía que saberlo.

Spoiler:

Nos subimos al coche y volvimos a la Casa de Huéspedes. No tenía idea de lo que iba a encontrarme pero tampoco iba a estar escondiéndome esta vez.

Salimos de casa y nos montamos de nuevo en mi coche para volver a la Casa de Huéspedes. Ni sabía con que nos encontraríamos pero después de todo lo que había pasado tampoco nos podíamos quedar de brazos cruzados. Fui conduciendo a toda velocidad como siempre y llegamos en menos de 5 minutos.

Aparcó y nos bajamos del coche. Entramos nuevamente y esta vez nos atendió la Sra. Flowers sin demasiado interés. -Buen día.- saludé. Se suponía que me conocía, pero nunca recordaba nada (o hacía como que no recordaba, vaya a saber). -Buen día.- respondió. -En qué puedo ayudaros?.- dijo sin mirarnos demasiado. -Buscamos al hombre que se aloja en la habitación 05.- murmuré recordando la puerta. -Tenemos algo suyo y queremos devolvérselo.- murmuré sin un atisbo de duda en la voz, aunque por dentro empezaba a sentir el temor de toda la situación.

No me gustó nada que la señora Flowers estuviera, no me fiaba demasiado de ella, pero bueno... Nos preguntó y tras las palabras de Alma sin mirarnos solo nos señaló las escaleras con la cabeza- Justo acaba de llegar, la 05 esta arriba a la derecha- nos dijo antes de volver a lo suyo.

Nos indicó por donde ir sin demasiados preámbulos y por suerte no nos acompañó. Aunque eso de que "acabara de llegar" no me daba buena espina, de hecho empezaba a sentirme mucho más nerviosa, no podía creer que Zack tuviera algo que ver... y me moría de solo pensar en que podría encontrármelo o algo. Al fin subimos las escaleras comenzando a andar sin decir una palabra hasta que estuvimos frente a la puerta de esa habitación.

Llegamos ante la puerta y miré a Alma. No hizo ni dijo nada así que suspirando y entornando los ojos me decidí yo a llamar la puerta, dando un par de golpes. A saber con que nos encontrariamos y ahora mismo tenía mucha curiosad en saber como sería el tal Zack, y sobre todo saber que hacía allí.

Ben llamó a la puerta y contuve la respiración. Adentró se sentía con claridad que alguien había. -¿Quién es?.- dijo la voz indubitable de Zachary. -Joder, cómo si no lo supieras...- murmuré por lo bajo. -Alma.- dije ya de una vez y enseguida un chico que no conocía abrió la puerta y se fue a sentar a la cama, juraba que era el agresor. Enfrente nuestro, sentado en el escritorio, sonriendo y mirándonos, estaba Zack.

Spoiler:

-Hola princesa.- me dijo Zack como si fuera lo más normal del mundo. -Creo que tienes algo que me pertenece.- murmuró sin siquiera ponerse de pié. -Quién es el tío? Preséntanos, venga, no estén tan seria que no te queda bonito.- dijo con su sonrisa de siempre y ni siquiera terminaba de entender si era cinismo o se había vuelto loco o yo era la que no entendía nada de nada.

Sin si quiera abrir la puerta se confirmó que era Zack, no por nada, sino por lo que murmuró Alma, habría reconocido la voz. Nos abrieron y lo que me sorprendió sobre todo fue ver también a otro chico, me había esperado solo al vampiro. Zack fue hablando sin levantarse de la silla si quiera y como Alma se había quedado medio congelada cerré la puerta y me presenté yo mismo- Soy Benjamin...- dije simplemente- ¿Quién es?- dije señalando al otro chico y como si fuera su turno de presentar.

Ben se presentó y le pidió explicaciones del otro tío. -Es Josef, un buen amigo pero ya se va.- dijo al final dirigiéndose al chico que enseguida se puso de pié. Era evidente que lo estaba controlando y daba miedo a qué punto. -No, no se va. Joder Zack, este tío intentó asesinarme... ¿Qué demonios tiene que ver contigo?¿Qué haces en Fell's?¿Qué son estos condenados horarios??.- le pregunté ya mostrándole la carpeta totalmente alterada y acercándome a él, me estaba haciendo perder del todo la paciencia. Me cogió de la cintura poniéndose de pié en un movimiento y a velocidad vampírica. -Siempre te pones guapa cuando pierdes el juicio.- murmuró sonriendo y manteniéndome así cerca suyo. -Y tú eres un idiota, quiero respuestas.- murmuré sin cortarme. -Vamos Alma, no hubiera podido matarte eres vampira... ¿Acaso has perdido todo el sentido del humor?.- murmuró sonriendo de lado antes de soltarme y mirar a Ben. -Tú eres el que le ha hecho perder el sentido del humor? Tú...- dijo analizando ahora a Ben.

Del otro chico ni me preocupé porque enseguida nos dimos cuenta que estaba siendo controlado. Joder... Presencie todo lo demás y ni supe como pude controlarme cuando la cogió así del la cintura. Se centró al final algo mas en mi y enarqué una ceja- Si y también seré el que te haga perder la mano como no la sueltes- dije totalmente borde sin andarme por las ramas- Deja de jugar de una vez y contesta a sus preguntas...-dije acercandome mas a ellos porque al final dando tantas vueltas Zack se estaba librando y no estaba diciendo nada de nada

Ben respondió y Zack sonrió de lado. -Tiene actitud, me gusta.- dijo por lo de Ben pero sin hacerle caso a lo de la mano pero soltándome del todo de todas maneras. Odiaba los aires de superioridad con los que hablaba Zack, se lo tenía tan creído que hacía que me dieran más ganas de matarlo. -Mira, no quise hacerte daño... Necesitaba algo tuyo y no iba a poder pedírtelo. Tu novio anda todo el día contigo y no quería enfrentarlos. Ya esta tengo lo que quiero, dame mi carpeta, me voy y todos contentos.- dijo enseguida. -No entiendo, joder Zack, quiero respuestas... ¿Qué es lo que quieres conmigo?¿Porqué no vienes y me lo pides?.- le pregunté escudriñándolo con la mirada. -Acepta mi respuesta y déjame ir, es lo mejor para los dos.- dijo después ya sin mirarme y comenzando a juntar sus cosas.

Enarqué una ceja ante eso de la actitud, ese tío era totalmente creído... por no decir otra cosa más fuerte. La soltó y fueron hablando, aunque no me convencía del todo- ¿Qué querías? ¿Sus pendientes?-dije por eso que decía de que ya tenía lo que quería y me parecía que era lo único que la había quitado- ¿Qué ganas con ello? ¿Para que los quieres?- insistí sin hacer ni caso a eso que le decía a Alma de que le dejara ir y que respetara la respuesta.

Zack prestó ahora más atención a Ben acercándose un poco. -Sí, quería los pendientes... Pero las razones son asunto mío.- murmuró antes de mirarme. -Por él te convertiste princesa? Qué pena que me mintieras de esa forma... Creía que querías tu humanidad y ahora... podríamos pasarlo tan bien...- dijo mirándome de vuelta. -Eres un imbécil Zack, claro que me convertí por él... Plantéate porque no quise hacerlo por tí.- dije con rabia porque seguía sin dar explicaciones y encima se metía con Ben. -¿Para qué quieres los pendientes? No te irás de esta habitación sin dármelos y sin decirme.- le amenacé. -Es tarde, ya no están aquí... y no podrás sacarme información, lo mejor es que me marche.- dijo comenzando a andar hacia la puerta.

Este tio era de lo que no había... Y encima se iba a ir sin dar ni una respuesta clara...- ¿Cómo que ya no estan aquí los pendientes? ¿Donde los has mandado? Joder hablara de una vez...- dije suspirando y empezando a perder la paciencia. Me interpuse entre la puerta y su camino, no se iba a largar mientras no nos diera alguna condenada respuesta.

Ben dijo eso y se interpuso entre Zack y la puerta. -Los tiene tu familia Alma, esos pendientes no te corresponden todavía, lo sabes.- dijo girándose a mirarme. -Qué sabes tú de esto Zack??! Joder, ni siquiera estuviste ahí...- dije alterada acercándome y amenazándolo de verdad. -Ella me los dejó, eran de mi abuela... ¿Qué te importa a tí? Porqué no sales de mi vida de una condenada vez?!.- le dije ya gritándolo totalmente borde. Se sonrió de costado sosteniendo mis manos en el aire. -No es conmigo con quien tienes que enojarte, vamos Alma... No seas tonta, piensa un poco.- dijo mirándome y luego a Ben. -Ahora tengo que irme, pero puedo encontrarlos por la noche en Baby-Black, responderé tus preguntas, lo prometo.- dijo sonriendo como si nada de esto estuviera pasando. -No esperaré a la noche.- dije quitando sus manos de las mías en un movimiento vampírico y quedándome junto a Ben entre Zack y la puerta. -Con quién contactas de mi familia?¿Porqué dices que no me pertenecen?¿Qué tienen de especial esos pendientes?.- pregunté sin cortarme una pregunta detrás de la otra.

Alma se alteró enseguida gritándole de una manera que pocas veces había visto, pero es que era normal, él no decía nada claro y encima estaba metiendo a su familia de por medio, sin contar lo de su abuela que era un tema delicado para ella. Alma se puso a mi lado entre la puerta y Zack- Joder suéltalo de una vez, ¿para qué esperar a esta noche? Contesta de una vez- dije cada vez mas impaciente, pero es que quería saber porque eran tan importantes los pendientes y también quería saber si era cierto que mantenía contacto con alguien de su familia o no.

-No son pendientes normales y corrientes.- dije antes que nada. -Han sido hechos por brujas, no sé más que eso... No me toca saber más que eso.- dijo respondiendo al fin algo y dejando de sonreir un poco ante el tono de Ben y notar que no sería tan sencillo irse de allí sin decir más nada. -Brujas?.- repregunté pero a esta altura pocas cosas me asombraban y además realmente parecía no saber más de eso. -A quien contactas de mi familia? Qué tienes que ver tú? Porqué dices que no me toca tenernos?... Mi abuelo me los dió Zack, joder, tú sábes lo que la quería...- dije ya algo más resignada y decepcionada y también triste. -Tranquila princesa, serán tuyos cuando sea el momento, pero tu madre los quería.- dijo mirándome. -Son de ella ahora.- me puse un fuego cuando nombró a mi madre ¿Qué tenía que ver él con ella? Si es que no se los merecía para nada, apostaba que mi abuela no se los quería dejar... A de haber visto mi cara de furia porque respondió sin que le preguntara. -Tu verdadera madre, Alma... Es ella quien los tiene ahora.- quedé muda al acto.

Eso de que los pendientes habían sido hechos por brujas me pilló totalmente por sorpresa... Aunque nis abía porque, a estas alturas ya tendría que estar totalmente acostumbrado a que estas cosas pasaran... Al final entre unas cosas y otras Zack terminó reconociendo que los pendientes eran para la verdadera madre de Alma y la miré enseguida sin saber ni como se lo tomaría- ¿Trabajas para ella?- dije casi dandolo por hecho y rompiendo el silencio que tenía Alma ahora mismo. Iba a preguntar que donde estaba pero eso no era cosa mía... Después de todo eran cosas familiares de Alma.

-No es posible...- dije solamente mirando a Zack ante la pregunta de Ben que ponía en evidencia todo eso y de pronto sentí que podía ser posible. -Me voy ya... Déjalo así.- dijo intentando pasar por entre medio de nosotros.

Alma apenas dijo nada y Zack ya estaba dispuesto a irse. Iba a retenerlo, ¿pero de que serviría a estas alturas? No parecía dispuesto a decir nada más. Así que un poco a regañadientes me aparté de la puerta para que saliera de una vez si le daba la gana.

Ben se apartó algo de la puerta y yo quedé más confundida que antes. -Adios Alma, ya nos veremos por ahí... Ahora tenemos toda la eternidad por delante, princesa.- murmuró cuando pasó a mi lado. -Suerte Benjamin. Si quieren verme estaré a la noche en Baby-Black, sino será hasta la próxima.- dijo casi como si fuera su amigo. Es que me daban ganas de matarlo. -No quiero verte ahora, ni luego.- dije aún confundida por todo. Se sonrió y negó con la cabeza pero no dijo más nada. Enseguida se perdió en el pasillo y ya no hubo rastro de él.

Escuché todo y no le mandé a la mierda de puro milagro, era increíble que me hablara como si fuese su "amigo" cuando encima no paraba de provocar y de molestar a Alma. Volvió a dejar en claro que estaría en el Baby-Black y ni bien salió de la habitación llevandose al otro chico con él, me giré hacía Alma.- ¿Estas bien?- pregunté por toda la información nueva que había recibido.

-No.- respondí enseguida. -Quiero matarlo, a él y a ese chico, a los dos.- dije sin dudar pero es que de verdad que ahora mismo quería destruirlo por haberse metido conmigo con tal impunidad. -Y es que no sé que pensar... Y si ha estado trabajando con mi madres desde antes?.- dije por todos los meses en los que, precisamente en compañía de Zack, había estado intentando seguirla.

- Venga, tranquila...-dije sin hacerla ni caso ante eso de que quería matarlos porque sabía que solo era un impulso. Dijo lo otro dudando y la miré- No lo sé Alma...-murmuré cogiendola de la cintura y atrayendola un poco hacia mi abrazandola para que se relajara después de todo lo que había pasado.

Me dijo que me tranquilizara pero sólo lo hice en parte cuando me abrazó un poco luego de cogerme de la cintura. -Joder ¿Has visto su cara? Parecía que estaba contento o algo...- dije recordando a Zack, era imposible, ni siquiera entendía como había estado con él tanto rato.