¿Nos conocemos? (Arianne)

Otro día pasaba en Fell's Church, y yo seguía sin encontrar algo que me hiciera despejar de todo lo que estaba sucediendo. Era un día en donde las nubes cubrían todo el cielo, y de vez en cuando, el sol aparecía entre los pocos espacios que podía.
Salí a caminar, pero, luego de unos minutos en el pueblo, tuve que alejarme a un lugar mas desierto... La sangre estaba empezando a volverme loca, y al parecer el "autocontrol" que había tenido desde mi conversión, estaba desapareciendo de a poco. Mi propia personalidad y ansias de matar, me estaba derrumbando, y no creía ser capaz de soportarlo.
Sabía que tenía dos opciones, apagar mis sentimientos y dejar todo atrás, o intentar seguir adelante, luchando día a día... Por ahora conocía la respuesta, esperaba seguir así y no darme por vencida.
Caminé sin rumbo hacia el bosque, en donde sabía que casi nadie paseaba por allí, para aprovechar respirar aire fresco, sin ningún peligro de dañar a alguien en estos momentos de crisis.

Desde que los cazadores estaban rondando Fell's había comenzado a entrenar nuevamente para fortalecerme y defenderme de ellos. Si Ben o mi madre se enteraban no estarían de acuerdo, pero como lo hacia en el bosque era difícil que lo supieran...o al menos mi madre.
Con mis auriculares en mis oídos al ritmo de Nickelback practique con mis dagas, las cuales hacia mucho que no utilizaba, mas no había olvidado como hacerlo. Nunca lo había hecho. Como olvidar cinco años de entrenamiento de un clan de cazadores. Un fuerte dolor de cabeza me obligo a sentarme al pie de un árbol inmenso a descansar.-Genial!. Sera momento de utilizar esto?.-murmure sacudiendo mi daga de plata...pero cuando mi a aquella chica rubia acercarse supuse que me había equivocado...-Que raro...-musite. Sabia quien era ella porque la había visto en la secundaria pero no estaba segura de que me conociera...Espere a que se acercara mas para saludarle...y preguntarle que hacia alli sola...

Caminaba por el bosque, tratando de despejarme y sacar ciertas conclusiones que me serían de suma utilidad a medida de que todo pasara, hasta que pude percibir que a lo lejos se encontraba un humano.
No sabía si sería el mejor momento de acercarme, ya que no estaba en mi total control, después de todo.
Lo mejor sería dar media vuelta y marcharme, pero antes de que pudiera hacerlo, la chica me miraba, por lo que sería algo rudo de mi parte alejarme sin siquiera saludarla cortésmente.
Caminé unos pasos hasta ella, tratando de conservar la distancia para evitar malos entendidos, y así tener un control mas cercano hacia lo que podía llegar a suceder si me salía de mis cabales, como últimamente estaba pasando..
-Hola..- le dije esbozando una leve sonrisa. Me parecía conocerla de algún lado, seguramente del Instituto..

-Hola...- respondí en un tono cálido. Era increíble que aun lograra hablar con tanta calma y calidez cuando el dolor que me abatía era inmenso. Seguramente había vampiros cercas por lo que comencé a inquietarme, pero debía permanecer tranquila o levantaría las sospechas de la muchacha. Me acerque a ella lentamente y la observe unos minutos.
-Tu debes ser Caroline, verdad?. Recuerdo que te he visto en el instituto. Mi nombre es Arianne...Soy nueva aqui.-Me presente cordialmente ante la rubia, inspeccionándola para detectar alguna "anormalidad", según decía Zane. Pero la chica aparentaba ser tan normal...como yo. Y los dolores de cabeza aumentaron a tal punto que me arroje al suelo sujetando mi cabeza con ambas manos.
-Aaaah!.-alcanece a decir...-Malditos Vampiros!.-añadi luego. No me importaba que estuviera Caroline, sino que algún chupasangre se encontraba cerca.

Le sonreí al escuchar su saludo. Suspiré suavemente sin que ella lo notara. Eran momentos como este, los únicos en donde no disfrutaba plenamente socializar con personas que no conocía bien. Temía perder el control, pero no debía pensar en eso.. Mientras menos lo hiciera, podría sobrellevar mejor la situación.
Me centré en mantener mi actitud calma, y agradable..
-Si... Un gusto, Arianne..- le dije con la misma expresión que había demostrado desde que me acerqué..- Me parece que te he visto varias veces en el Instituto... Pero hasta ahora no había tenido la oportunidad para conocerte..- comenté alzándome levemente de hombros, para luego notar que algo demasiado raro le sucedía..
Me acerqué a su lado sin dudarlo, dejando todos mis pensamientos de lado, para intentar ayudarla.. pero al escuchar cada palabra que decía, cada vez entendía menos..
-¿Que te sucede?- pregunté desorientada.. ¿Como era que la cercanía con vampiros le hiciera eso? Hasta ahora nunca había visto algo así.. Tenía que alejarme, ya que le estaba haciendo daño sin siquiera quererlo, pero si me iba ahora, sería muy obvio..

Los dolores eran cada ves mas fuertes y estaba asustando a Caroline prácticamente, pero ella se acercaba a mi para ayudarme y no había posibilidad alguna de que lo hiciera.
Levante mi vista hacia donde se encontraba ella; mi rostro se estaba enrojeiendo y las lagrimas brotaban de mis ojos como si estuviese llorando, una consecuencia del maldito hechizo que había realizado dos años atrás y aun hoy continuaba molestándome...-Lo siento mucho Caroline. Es un pequeño problema que tengo cuando hay...-.Hice una pausa, pues aunque ya había mencionado la palabra vampiro no estaba segura de que la Barbie supiera quienes eran...o que eran. Me senté en el suelo una ves que el dolor comenzó a disminuir, y eso tampoco era bueno ya que indicaba que había permanecido cerca del chupasangre unos cuantos minutos...-Cuando hay vampiros cerca. Sabes que son, verdad?.- tendría que hacerlo, pues era dificil que alguien no supiera...

Me quedé parada a su lado sin saber que hacer.. Seguramente debía irme para que ella se sintiera mejor, pero dejarla sola tampoco sería bueno..
Al ver que su rostro había enrojecido de una manera notable y las lágrimas brotaban de sus ojos, me hice a un lado, como intento de buscar alguna solución al problema que estaba causando.
Pero al parecer ya estaba mejorando un poco.. Al menos ahora podía hablar mejor, aunque no sabía si eso era demasiado bueno. Ella parecía estar alerta, ante algún vampiro que la atacara, pero lo que no sabía era que tenía en frente a uno, y que no estaba en sus mejores momentos de autocontrol.
Asentí, pretendiendo ser solamente una humana enterada del tema..
-Si, lo sé.. Soy la hija de la Sheriff del pueblo, asi que tengo que estar atenta a eso.- dije alzándome de hombros..-¿Sabes donde se encuentra ese vampiro que te causa ese dolor?- pregunté algo inquieta..

Como buena cazadora había aprendido a estar alerta de todo lo que me rodeaba. Un instinto casi animal se había activado en mi, y lo utilizaba aun sin involucrar mi magia. Observaba todo a mi alrededor mientras ella me explicaba que era la hija de la sheriff del pueblo y estaba al tanto de todo. Desvié mi mirada nuevamente hacia ella, pues mi madre intentaba ingresar al consejo y por lo poco que sabia la sheriff estaba involucrada en los temas de vampiros de este pueblo.
-No sabia que la señora Elisabeth era tu madre. Pero bueno, al menos no desconoces el tema como la mayoría aquí...-dije a modo de felicitación. Negué con la cabeza cuando pregunto si sabia donde estaba el vampiro. Fruncí el ceño porque aun me dolía la cabeza y me cruce de brazos intentando oír algo. No quería utilizar la magia delante de ella...al menos no en ese momento...
-Sinceramente no lo se, pero no debe estar muy lejos. Es un hechizo que se activa en presencia de algún vampiro o incluso licantropos...-.La mire fijamente a los ojos sin apartar un instante mi mirada de la de ella; había dicho demasiado o cosas que posiblemente le causarían mas inquietudes de las que ya aparentaba tener.
Cada paso que daba era igual. Los dolores continuaban y no había rastro alguno de los chupa sangres...-Sera mejor que nos alejemos de aquí, estamos en una zona peligrosa...-Era verdad, estábamos alejadas de todas las salidas posibles...-Si estas de acuerdo podemos recorrer el bosque...al menos acercarnos a la salida o al puente Wickery. Tengo el presentimiento de que aquí nos meteremos en problemas, y ya tuve bastantes problemas como para añadir otro, si?.-musite, con la intención de que me siguiera. Yo no me quedaría un segundo mas...aunque los dolores continuaban a cada paso que daba y se intensificaran mucho mas con ella a mi lado y me obligaba a entrecerrar los ojos de ves en cuando...

Me sentía realmente mal, al saber que era yo la que le causaba tanto dolor. Al parecer ella estaba entrenada o algo por el estilo para presentir el acercamiento de la raza depredadora, y se había instalado en ella un sistema de alerta bastante raro.
Asentí levemente, volviendo a la conversación que teníamos, intentando dejar de lado mis pensamientos y dejar fluir la situación, lo más posible, parecer natural y sobre todo conservar un comportamiento de humana.
-Si, ella es mi madre. Asi que estoy enterada de todo ese tema...- dije alzándome de hombros, pensando en lo difícil que se hacía para mi madre cubrir mi verdadera naturaleza frente a los miembros del Consejo.
-Supongo que lo mejor será alejarnos de aquí, no será bueno encontrarnos con algún vampiro o licántropo..- comenté mirándola, y caminando a su lado. Sabía que mi mentira no duraría mucho tiempo, solo hasta salir del bosque, ya que en el pueblo ya no tendría excusa de que seres sobrenaturales andaban rondado el lugar.
-Claro, vamos..- dije intentando mantener una distancia prudente de ella, para evitar traerle mas dolores de cabeza, pero también para no volver a sentir sed de beber su sangre.

Comenzamos a caminar directo a la salida del bosque. Fui todo el camino callada intentando parar con algún hechizo los dolores de cabeza, pero si no lo había logrado en dos años mucho menos lo haría ahora.
-Linda manera de conocernos, no?. Lo siento en verdad, pero es algo con lo que vivo dia a dia...-comente, luego de un rato, explicándole que estaba apenada de que tuviéramos que hablar de esos temas de vampiros y licantropos...aunque en verdad sentía vergüenza del maldito hechizo fallido
-Antes de mudarme aquí, viví en Salem , en donde me entrenaron para ser cazadora...de vampiros. Solía odiarlos, y aun en partes lo hago, pero hice un amigo...o dos aquí, que son vampiros justamente. Aunque no todos son tan buenos...-dije, pensando en el mayor de los Salvatore.

Luego de tanto caminar llegamos a la salida del bosque que daba justamente al Puente Wickery. No había nadie allí, pero mis dolores de cabeza continuaban. Sabia que Caroline estaba tras de mi, pero cuando note que solo estábamos nosotras y esos dolores de cabeza no paraban me di cuenta de que el vampiro quizás no estaba tan lejos. Era hora de utilizar el plan B. Un hechizo para localizarlos y otro para debilitaros. Mis ojos de pusieron negros y espere a que el hechizo surtiera efecto en los vampiros que nos rodeaban...si ella lo era seguramente sentiría fuertes dolores en su cabeza...
-Como dije, lo siento...-susurre, en un tono burlon.

Caminé a su lado en silencio, ya que no sabía que decir. Estaba metida en un gran lío, y sería demasiado difícil salir, con Arianne a mi lado, y mas sabiendo de que podía detectar a vampiros con su raro dolor de cabeza.
-Esta bien, no pasa nada. Supongo que fue casualidad encontrarnos de este modo.- dije alzándome de hombros, manteniendo la distancia, tal como lo había hecho desde que habíamos emprendido camino lejos del bosque.
Sonreí asintiendo al escuchar lo que decía. Había demasiados vampiros en el pueblo, buenos, malos, neutrales, de todas clases.
-Fell's Church esta lleno de vampiros. Conozco a algunos, y no parecen tan despiadados como todos dicen..- comenté mirándola, incluyéndome sin que se diera cuenta en mis palabras. Me consideraba una de las "buenas" que al menos intentaban luchar contra el deseo de matar.
Cuando salimos del Bosque, toda la mentira empezó a desmoronarse, tal como lo había previsto.
Un gran dolor de cabeza empezaba a aparecer, y no pude evitar soltar un leve alarido, tomando entre mis manos mi cabeza.
-Por favor! No te haré nada..- dije volviendo mi mirada hacia ella, arrodillándome ya que no soportaba ese incesable dolor.

-Si tu lo dices...- respondí en un tono irónico luego de que comentara de que había vampiros que no eran tan despiadados. No estaba del todo segura, pero si sabia que era posible por Ben...
Minutos mas tardes oi un grito de dolor...Tal como lo habia previsto el hechizo comenzo a atrapar a los vampiros que rondaban el bosque, y tal como lo pense, la primera en caer fue Caroline.
La mire burlonamente; una sonrisa de satisfacción se dibujo en mis labios al verla de rodillas revolcarse por el dolor que le producía mi hechizo...
-Debo decir que me engañaste. A pesar del dolor de cabeza no paso por mi mente la idea de que fueras una vampiresa hasta que los dolores continuaron aun estando fuera del bosque....Comente algo sorprendida, pues honestamente no me pareció nunca un vampiro. Y fue eso justamente lo que me hizo sentir culpable de infligirle el dolor...no se lo merecía. Pare el hechizo y me fui acercando lentamente para ayudarla. Debía oírla hablar y explicarse antes de matarla realmente como... solía hacer.
-Ven... levántate.-dije, tomándola por debajo de los brazos para ayudarla. En pocos minutos se recuperaría...y quizás vendrían mis problemas...

Escuché lo que ella dijo, en un tono algo irónico, pero seguramente sabiendo de que eso era realmente posible. La mayoría de mis amigos eran vampiros, por lo que era un hecho de que no todos los vampiros eran despiadados.
Pero antes de que pudiera agregar algo mas a mi comentario, un terrible dolor de cabeza empezó a crecer en mi. Se sentía como que infinitas cosas se estuvieran clavando en mi cabeza, haciéndolo realmente insoportable.
Sabía que todo esto podía salir mal, y hasta ahora así estaba sucediendo. Me había equivocado al acercarme a Arianne, ya que parecía ser una bruja muy poderosa.
-Te aseguro de que no tenía intención alguna de hacerte daño...- dije algo desesperada ya que de a poco los dolores iban aumentando.
Hasta que empezó a cesar... Levanté mi mirada hacia ella, que me contemplaba parada a mi lado. Me ayudó a levantar, y caminé como pude hasta una de las rocas al lado del camino para sentarme.
-Gracias..- le dije esbozando una leve sonrisa.

La observe mientras intentaba sentarse sobre la roca al costado del camino.-Lo siento...- respondí cuando me agradeció por ayudarle a levantarse. La mire seriamente, agite mi cabello en señal de que me estaba poniendo nerviosa...yo...nerviosa?. Si, pues no sabia que esperar.
-En verdad lo siento Caroline, es que...ya te conté. Soy cazadora y me han entrenado para cazar vampiros, y tu...no parecías uno.-.Era verdad, no lucia como un vampiro, pero el maldito hechizo fallido me indicaba siempre quienes lo eran y quienes no. Suspire un tanto inquieta y me fui acercando lentamente a ella...
-Oye Caroline...Como es que tu...ya sabes...eres vampira?.-Asi dicha sonaba estúpida la pregunta, pero era una duda que me estaba matando...

Negué levemente al escuchar lo que decía..- No tienes porque sentirlo, creo que en un principio no tendría que haberte mentido, aunque seguramente terminaría como ahora, o peor..- dije intentando bromear, aunque a pesar de que los dolores iban disminuyendo, todavía mi cabeza quedaba sentida.
-Al parecer muchas veces las apariencias engañan.. Pero no te preocupes, puedo controlarme, te aseguro que no corres peligro estando cerca de mi..- comenté ya recuperándome un poco, pero todavía tomando mi cabeza entre mis manos.
Podía notar que estaba nerviosa, y no la culpaba, ya que siendo cazadora, no sería muy agradable tenerme a su lado.
-Supongo que mi "creadora" solo buscaba algo con que advertir de lo que era capaz a sus enemigos, y bueno... Tuvo la oportunidad, y aquí estoy..- dije alzándome de hombros, algo resignada ya que no podía cambiar lo que era.

-Descuida. Puedo ver que no eres peligrosa, y no eres la primera vampira que se cruza en mi camino en Fell's.-musite.
Estaba casi segura que después de lo que había hecho Caroline no era realmente un peligro para mi o para otros. Poco a poco mis nervios fueron disminuyendo, al tiempo que ella hacia broma...aun después de haber jugado su mente a mi antojo.
La escuchaba atenta y sonreía. No sabia ya que responder para no meter la pata y decir algo inapropiado...o propio de la cazadora que era.
Cuando menciono lo de su creadora recordé la noche en el lago en la cual quizás hubiera corrido con la misma suerte o aun peor...-Un chupa sangre que a diferencia de ti... debería estar muerto.-.Lance. La cazadora afloraba nuevamente después de casi seis meses en Fell's.
Camine unos pasos y me sente al costado del camino, a pocos metros de ella...-Mi situación es distinta...A veces desearía ser... vampiresa. Ser vampiresa o estar muerta era lo que tenia que haber dicho...

Escuché lo que decía y asentí, suponiendo que eso era verdad, al ser una cazadora durante varios años, ya podría reconocer cuando un vampiro tenía intenciones buenas o malas. Además, si hubiera querido, podría haberla herido apenas nos encontramos, pero eso no era para nada mi comportamiento habitual, y no cambiaría.
Sonreí al escuchar lo que había dicho, notando perfectamente su instinto de cazadora en sus palabras.
-Creo que nunca deberias desear se vampiresa. Es lo peor que a alguien le puede suceder, te lo aseguro...- dije volviendo mi mirada hacia ella.
No había tenido la elección de decidir si convertirme o no en esto, y con pensar de que ni siquiera sabía de la existencia de los vampiros, todo se volvía peor, odiando cada vez mas a Katherine.

Convertirme en vampiresa no era algo que tenia pensado hacer, sino una opción en la cual había pensado una ves para escapar de la vida que me había tocado.
Mire a Caroline a los ojos y sonreí ante su comentario de que era una mala idea hacerlo. No lo negué, pero tampoco deseche esa opción.
-Por mucho tiempo eso pensé. Que los vampiros eran todos monstruos. Me entrenaron para que pensara eso, y lo que fue peor...para que los matara. Lo hice, pero varios vampiros se cruzaron en mi camino y comencé a creer que no era tan malo después de todo.Me alce de hombros...-No se, a veces pienso que estuve equivocada todo este tiempo...que debo abrir mi mente a otras cosas, o que debo concentrarme en las complicaciones que tengo ahora como humana...y como bruja...-. Me levante del suelo y sacudí mi ropa. Tenia polvo y algunas que otras hojas...
-Que te parece si continuamos caminando,..y olvidamos este pequeño desastre...si?-pregunte algo inocente dispuesta a dejar de lado las diferencias que nos separaban...No parecía peligrosa y yo tenia ánimos de serlo tampoco.

Me quedé atenta, escuchando sus palabras. El problema no era demasiado si cuando te convertías en vampiro te inclinabas para el lado bueno o malo, ya que al tranformarse solo se magnificaba la personalidad de cada uno, siendo realmente influyente en el tipo de vampiro que te convertirías..
-Si buscabas transformarte en vampiresa como salida a tus problemas, realmente no es algo útil, al menos no desde mi punto de vista. Todo cambia, y una vez que lo haz hecho, ya no ha vuelta atrás..- comenté mirándola.
Todavía en este momento, deseaba volver las cosas a como eran, sin demasiadas preocupaciones, o tal vez mucho mas insignificantes que las que ahora tenía que enfrentar.
-Igualmente, creo que sería mejor que intentaras solucionar las cosas de una manera mas.. no lo sé, razonable. Nada puede ser peor que luchar segundo a segundo para no convertirte en lo que mas puedes llegar a odiar. Y lo digo por conocimiento de causa..- agregué alzándome de hombros.
-Todo olvidado de mi parte. Un mal comienzo lo pueden tener todos..- dije sonando algo divertida y empezando a caminar

Una ves que me sacudí continué caminando al compaz de Caroline. No tenia muchos ánimos y lo que me estaba resultando raro, me sentía cansada, como si hubiese estado corriendo todo el día. Mi cabeza parecía una laguna y de ves en cuando una nube blanca cubría mis pensamientos. Intente tranquilizarme y hacer de cuenta que nada sucedía.
-Supongo que si. Creo que por eso a veces agradezco ser bruja. Cuando cometo algún error por hacer cosas que no debo puedo remediarlos... Hice una pausa recordando las veces que utilice la magia para deshacerme de algunos vampiros. -A veces. Hay situaciones que no tienen solucion ni aunque utilice la magia...Pero como dice mi madre, de los errores se aprende.-. Adelante el paso para salir mas rápido de allí. Estábamos sobre la carretera que llevaba directo al centro del pueblo
Mientras caminábamos una brisa me envolvió levante mi cabeza mirando a cielo observando el mismo y la cantidad de hojas que flotaban a nuestro alrededor.
-Me da la sensación de que el agua nos sorprenderá...-susurre, lo cual era extraño a esta altura del años todavía teníamos días cálidos. -Espero que no sea lo que creo...-susurre recordando los poderes de Zane y sus amigos idiotas.

Escuché atenta lo que Arianne decía, mientras que seguíamos caminando, alejándonos cada vez mas del bosque.
-Al menos a algunos puedes remediarlos. Tus poderes son una gran ventaja para ti. En cambio, siendo vampiro, solo puedes ocultarte o correr mas rápido, todo para huir, no para hacerle frente a los problemas..- dije pensativa.
Realmente, después de haber pasado un tiempo en estas condiciones, podía realmente determinar el daño que había producido mi transformación. Por un lado, lo único bueno que había cambiado en mi, era que me había ayudado a crecer, dejar de ser esa niña caprichosa para poder ver la vida de otro modo. Aunque, pensándolo bien, eran mas las desventajas que las ventajas en este caso.
Mire al cielo, tal como ella lo hacía, intentando comprobar lo que decía.
-¿Crees que esto puede ser algo mas?- pregunté algo confundida.

OFF:Disculpa la demora!

Al notar su tono de duda en su respuesta, me alerté un poco, ya que parecía tratarse de algo mas que una tormenta, o al menos eso parecía.
El cielo empezaba a tomar un color realmente muy oscuro, algo inusual, por lo que mis sospechas empezaban a volverse cada vez mas concretas.
Asentí levemente, sin mirarla, observando a mi alrededor. Acordaba con que debíamos encontrar algún buen lugar para refugiarnos, pero no me convencía del todo su excusa del miedo a las tormentas.
-Claro, será mejor salir de aquí..- dije mientras que empezaba a caminar a su lado, apresurando un poco el paso.
Pero antes de poder encontrar una salida del lugar, una voz se escuchó detrás de nosotras. Mi primera intención fue voltearme para ver de quién se trataba, pero las palabras de Arianne me alertaron de que era algo peligroso.
-¡No puedo dejarte sola!- dije mientras que empezaba a correr hacia el interior del bosque. Por unos momentos la había perdido, por lo que me paré. Seguramente había utilizado mi rapidez mas de lo necesario, y ahora ella podría estar en problemas.