Tomando algo de ventaja (Alma)

Acababa de salir de casa de Ben y estaba para irme hacía casa aunque en el último momento cambié de dirección y conduje hacía casa de Alma. No estábamos en nuestro mejor momento tras esa pelea en el desfile pero tenía que aprovechar esta oportunidad, como pasara mas tiempo y hablara más con Ben todo se podía poner más complicado. Así al menos podría tomar algo de ventaja.

Dejé las maletas en el coche y llamé a la puerta enseguida que llegue a su casa. Esperaba que estuviese en casa.

Ben me había dejado en mi casa y luego de bañarme me había puesto a ordenar, ahora mismo estaba en el piso de arriba intentando guardar las cosas en mi vestidor, pero sobre todo pensando y pensando. Se suponía que en un rato había quedado con Erik, pero ahora no me parecía la mejor idea del mundo.

Es que nada de lo que había ocurrido en NY tenía sentido... la apuesta, el cuasi secuestro, que Ben se apareciera a rescatarme, ese polvo increíble y luego... ese conversación tan íntima, tan sincera... y ese beso. Quería reconstruir los pedacitos de los datos que me había dado y a la vez luchaba por negar lo que cada vez me parecía más claro... Ben sentía algo por mí que no era lo que se siente por una chica cualquiera a la que te tiras. ¿Y yo? No lo sabía, pero estaba claro que no era un tío cualquiera, por algo lo había llamado, por algo me había animado a soltarle todas esas cosas... ahora mismo si había un ser en el planeta en el que confiaba, ese era Ben y ni siquiera entendía porqué.

¿En qué momento se había metido así en mi vida? Suspiré. No podía hacer nada, estaría ahora con Martha, probablemente contándole lo que había recordado y luego festejarían juntos que todo estaba en su sitio ¿Y yo? Joder Alma, es que nunca hay condenados finales felices para tí!? Pensé. Me encendí un cigarro y volví a colgar los vestidos en el armario cuando llamaron a la puerta.

Spoiler:

La abrí sin siquiera preguntar, algo dentro mío me impulsó a hacerlo, quizá... hasta la secretísima esperanza de que fuera Ben, pero no... ¡Eera Martha! Disimulé la estúpida sonrisa que se me dibujó al pensar que al menos Ben no se la estaba tirando ahora mismo.
-Hola ¿Estás bien?.- le pregunté un poco por cortesía y otro poco porque se notaba que había llorado y podía sentir lo agitado que iba su corazón.

Alma me abrió la puerta y negué con la cabeza cuando escuché la pregunta- La verdad es que no, Ben y yo lo acabamos de dejar y necesito una amiga con la que poder hablar... ¿Puedo pasar?- pregunté con mi mejor cara de pena. No era difícil de fingir, había estado llorando por un buen rato y se notaba. Y me apenaba tanto haber perdido a Ben que estaba de verdad triste.

Dijo que acababan de dejarlo con Ben y tuve que hacer grandes esfuerzos para que no se notara lo contenta que me ponía eso. ¿Porqué me ponía contenta? No, no podía tener que ver conmigo, era más bien por ellos ¿No? Es que esa relación iba destinada al fracaso... quise pensar, quise creer.
-No sé, estaba ocupada, es decir... Vale, sí, pasa.- fui diciendo sin estar segura. Desconfiaba de Martha y eso de que viniera justo a visitarme a mí no era buena señal, no sabía qué traía ahora... pero qué podía hacer, estaba mal y me daba pena en un punto.
Le abrí la puerta y fui hacia la cocina. -Quieres un té?.- le pregunté.

Había visto una sonrisa en su rostro cuando la había dicho que lo habíamos dejado?? No podía ser, tenía que quitarmela de en medio como fuese.- Gracias-dije cuando tras dudar me dejo pasar- Y si, algo de té me vendrá bien- dije siguiendola enseguida a la cocina- Es que no me lo puedo creer todavía- dije con lágrimas en los ojos, era buena para esas cosas- No sé que le pasa, acaba de venir de viaje, ¿sabes?- dije como si no supiese que había estado con ella- Se fue a ayudar a su prima con unas cosas y es que ha vuelto rarisimo, no es él... Dice... Dice cosas muy raras- dije sin ser clara buscando llamar su atención mientras la veía moverse por la cocina buscando todo lo necesario para el té.

Esta chica me estaba desconcertando y yo ya tenía una mezcla de pensamientos importante como para que encima me complicara las cosas.
-Ajá.- dije a lo primero sin darle importancia. Vamos que Ben era un cabrón, eso lo sabía yo y también a estas alturas lo sabía ella. -¿Cosas raras?.- dije después para que me contara un poco más, quizá a ella Ben sí que le había dicho lo que había recordado, a lo mejor podía aprovecharla para enterarme de algo.

Capté su atención e intenté no sonreír. Tenía que hacer que desconfiara de él como fuese- Si, cosas raras... Es que no sé que le pasa, dice que a recordado cosas que antes no recordaba- dije como si eso ya fuese de locos- Pero es que ni si quiera son ciertos, no son sus recuerdos, las cosas que me ha contado no son ciertas-dije mirandola y dando mi golpe maestro- Parece cosa de magia o algo así- dije casi riendo como si eso no existiera- Pero me asusta mucho, se puso hasta violento conmigo por llevarle la contraria pero es que me duele muchísimo que piense cosas que no han pasado, parece que no se acuerde de todos nuestros buenos momentos-dije sacando un pañuelo del bolsillo para enjuagarme las lágrimas.

No podía estarme sucediendo esto, pero sí. Serví el té mientras la escuchaba decirme eso. Es decir que al final los recuerdos de Ben no eran verdaderos? No, no podía ser... él estaba seguro de eso, yo misma se lo había preguntado. Le pasé el té y me serví una taza antes de que fuéramos a la sala. -No entiendo, quieres decir que está loco o algo así? Cómo si tuviera doble personalidad o algo de eso....- dije pensando en que yo misma le había soltado algo de eso en el Hotel. -¿Qué te ha dicho?¿Cómo sábes que esas cosas no son ciertas?.- le pregunté sin poder disimular el interés que tenía ahora en todo eso... es que era una idiota, Martha me generaba desconfianza, pero bueno que esa angustia que sentía era verdadera, podía escuchar su corazón acelerado, quizá... no, no podía ser ¿o sí? Joder, a este ritmo acabaría volviéndome loca yo...

Asentí al ver que estaba hecha un lío, era lo que estaba buscando- Si, debe ser eso, esta loco o no sé que le pasa, pero de verdad que me esta asustando mucho, primero dice que no recuerda cosas y ahora se inventa nuevos recuerdos? -dije negando con la cabeza porque normal no era eso para nada- Pues lo sé porque soy su novia, dice que no saliamos juntos antes, que estaba saliendo con otra-dije como si fuese el colmo- Con otra? Llevamos meses juntos, estuvimos viviendo juntos y ahora estabamos de nuevo juntos en casa de Ben...-me inventé como me daba la gana- Pero me ha dejado y me echado y no tengo ni donde ir porque vendí mi casa- mentí como me dio la gana mientras la miraba ahora si que si con muuucha pena- Puedo quedarme aquí unos días? Te prometo que solo hasta que encuentre algo, el sofá me vale- dije casi suplicandoselo. Genial! Por que no había pensado en ello? Si estaba en su casa estaría al tanto de todo y me sería mas fácil vigilarlos y manipularnos... Necesitaba quedarme en Fell´s y envesta casa como fuese. Desde Virginia no podría hacer nada de nada.

Fue diciendo todo eso y aunque luchaba por no creerle nada la verdad es que me parecía posible (incluso probable) todo lo que me estaba contando.
Aunque no era una mentira que no recordaba cosas... vamos, si yo misma no recordaba cosas! Al menos eso pensaba, pero ahora... sí, era obvio que había cosas que no recordaba, cosas obvias como dónde dejaba las cosas en esta casa. Ahora era fácil pensar que había sido una locura, pero recordaba bien lo extraña que me había sentido al principio al entrar en mi casa, esa sensación de no haber estado por un buen tiempo... Suspiré.
Ni sabía qué pensar. Aún no lograba hacerme a la idea de lo que le pasaba a Ben cuando Martha me pidió quedarse en mi casa. -No, joder Martha! Es que, no me olvido las cosas que has dicho de mí... Si te he abierto la puerta ahora es porque te he visto hecha un desastre, pero no soy tu amiga, no puedes quedarte aquí. Vete con tu padre, no sé... No es mi problema.- le dije lo más firme que podía. Es que me daba de verdad pena, pero a la vez... No quería tenerla cerca, me hacía sentir pésimo cada cosa que me decía me angustiaba más que la anterior.

Se negó en rotundo y seguí mirando con ojos suplicantes- Por favor Alma, por favor no tengo donde ir, mi padre me mataría si supiese que he vendido la casa por un chico, y no tengo a quien acudir, me quedaré en la calle... Por favor- dije mientras se me escaban las lágrimas, aunque era mas de rabia que de pena, pero igualmente me podían servir dado el caso- Por favor, solo seran unos días, tengo el dinero de la casa, es cuestión de días que encuentre algo- dije sin poder dejar de llorar. Pensar que podía volver a manipular a Ben y que volviesen juntos me ponía enferma. Era muy mala, tenía que estar aquí para vigilarla!

Martha no se detuvo en su súplica y ya me daban ganas de matarla. -No, he dicho que no... Puedes rentarte una habitación en la Casa de Huéspedes, no sé... puedo prestarte dinero. Pero no te quiero en mi casa.- murmuré sintiéndome un poco mala con ella. Pero qué esperaba? Después de todo lo que había dicho sobre mí y de la situación actual que tenía con Ben ¿Cómo iba a dejarla quedarse? Suspiré. Realmente estaba llorando tan angustiada que me sentía fatal... Si era cierto lo de Ben y se había puesto rudo con ella pues... eso era demasiado triste. -¿Qué esperabas? Joder, tú rollo con Ben es tuyo. Escucha es cierto que me lo he tirado, más de una vez... Pero su locura es tu problema y no el mío, tú eres su novia, no puedo... joder no quiero tener nada que ver con ninguno de vosotros.- dije más para mí que para ella. Es que a este ritmo prefería largarme de Fell's de una condenada vez. O instalarme con Erik o... no sé, pero es que no me gustaban estos dramas. Bebí el té intentando pensar. -Dame un segundo.- murmuré ya dejándolo sobre la mesilla y yendo a las escaleras y al baño de arriba, necesitaba lavarme la cara, no sé... estar sola.

No dejé de llorar en ningún instante, tenía mucha facilidad y ahora tenía tanta rabia que era mas fácil todavía. ¿Cómo podía ser tan mala? Siempre había sabido que no tenía corazón pero esto era pasarse de verdad. Nunca había podido querer a Ben y ahora no era capaz de mostrar ni un poco de empatia por mi. No sabía de que me extrañaba si con el embarazo la había pasado igual. Me soltó tan tranquila que se lo había tirado varias veces y casi me da algo aunque intenté controlarme- No te estoy pidiendo ayuda con Ben, sé que es cosa nuestra, solo te lo he contado para desahogarme, y ahora solo necesito algún lugar para quedarme, no te hablaré de Ben si no quieres pero... Por favor- dije limpiándome las lagrimas con el pañuelo. Mejor si no quería tener nada que ver con nosotros. Eso es que había surtido mi plan y esperaba de verdad que dejara de meterse en medio- Vale- dije a lo último viendo como se iba de la cocina.

Me fui al baño tras escuchar sus últimas súplicas, odiaba el drama ¿Cómo es que siempre acababa metida en estos líos? Suspiré un poco de bronca y me lavé la cara intentando mantener la cordura.
Estaba siendo mala con Martha al dejarla así en la calle y yo no era así, había dejado que se quedaran en mi casa otras personas sin pedirles más explicaciones ¿Pero Martha? En el fondo el punto era que quería seguir viendo a Ben... claro que quería! Y con ella allí no tendría un sitio en el condenado mundo ¿Tan egoísta podía ser? Me sequé la cara, no podía negarle aunque sea una noche o dos... no más.
Bajé las escaleras y volví a la cocina. -Sólo esta noche.- dije mirándola. -Mañana por la mañana te vas.- murmuré sin cortarme en absoluto. Cogí la taza de té y bebí el final. No sabía si quería preguntarle algo, no sabía si quería saber realmente más nada.

Bebí el té mientras esperaba a Alma. No podia dejar de darle vuelas a lo mala que era. Nunca sabría que veía Ben en ella para enamorarse de ella una y otra vez. Cuando bajó al cabo de un rato y dijo eso sonreí agradecida- Muchas gracias, gracias- pensé en abrazarla pero seguramente me mandaría a la mierda así que me contuve. Cogí mi taza y volví a beber otro poco feliz de poder quedarme allí. Sería divertido y productivo.

Se emocionó cuando le dije eso y negué con la cabeza. Me quedé callada unos instantes antes de seguir hablando con ella. -¿Y qué piensas hacer?.- le pregunté un poco por cortesía, pero también porque al final me importaba saber qué planes traía con Ben, por mucho que intentara evitar indagar lo cierto es que Ben le había contado a ella sus "nuevos" recuerdos y seguramente Martha tenía ahora mismo mucha más información que yo.

Insistió con el tema de Ben y la miré, lo decia por curiosidad o por algo más?- No lo sé, quiero ayudarlo pero me da miedo- dije tocando el brazo donde antes me había hecho daño y bajando la mirada para verlo. Tenía un pequeño moraton. Le tenía miedo pero porque había sentido su furia y no sabía que me podria hacer, y era obvio que no podría arreglar las cosas faciles despues de todo lo que había hecho, pero eso a Alma no se lo podia decir- No lo sé, intentaré hablar con él primero por teléfono, después si esta receptivo intentaré ir a verle- comenté- Quiero ayudarle, de verdad que si, no se que pasa por su mente pero le ayudare a esclarecerse, le quiero mucho.-dije con una leve sonrisa.

No me dijo nada en concreto, es decir... poco me importaba lo que Martha lo quisiera ahora mismo, lo que quería era saber ¡qué había recordado! Pero eso Martha no tenía ganas de contármelo o quizá fuera cierto que eran fabulaciones... joder, no quería pensar en eso.
-Entiendo.- dije simplemente. -Oye, yo he quedado con Erik para dentro de un rato, puedes darte un baño... No sé, me cambio y me iré para su casa.- dije sin darle más datos. -Cualquier cosa que precises me avisas.- murmuré ya yendo hacia las escaleras para ir a ponerme algo más decente.

Asentí acabándome el té, mejor si se iba con Erik, estaría alejada de Ben y yo podría cotillear su casa decentemente.-Vale, creo que si me daré un baño, gracias- dije pensando en todo. Alma subió a cambiarse y yo salí al coche para coger una de las maletas que había cogido de casa de Ben con mi ropa. Entré de nuevo, abrí la maleta y cogí algo de ropa limpia antes de ir hacía el baño. Era tiempo de relajarme un todo. Estaba teniendo un día muy movido!

Martha asintió y subí a cambiarme antes de volver a bajar, estaba ya en la sala con las maletas, acomodando la ropa. "Espero que no se acomode demasiado" pensé.

Spoiler:

-Oye, estaré fuera un rato cualquier cosa que necesites me mandas un mensaje.- dije mirándola y ya saliendo de allí. Me sentía tremendamente invadida y no me gustaba nada, hacía años que tenía mis propios espacios y no se me daba bien eso de compartir el sitio con quien no me apetecía.

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