Hola de nuevo? +18 (Damon)

Recuerdo del primer mensaje :

Caminé en silencio, era imposible que mi víctima me detectara, no había forma que un humano captara la presencia de un vampiro y eso era lo divertido. Salté sobre él y mordí su cuello sin darle la oportunidad a quejarse u objetar, tenía hambre y pues él estaba allí sin ningún rumbo fijo. Al inicio pensé en matarlo, no me servía de nadie tener a alguien por ahí corriendo el rumor, pero al final no pude, una presencia me distrajo de mi cometido, solté el cuerpo y lo busqué entre la oscuridad, no quería que me viera, no desde lo último que había pasado, no sabía que esperar, no sabía que haría, ni si quiera sabía lo que yo haría. Caminé en silencio escondiéndome de él, esperando no llamar su atención, pero claro, ahí estaba el acusete de mi alimento, gritando que una chica lo había atacado

Se la veía tan fragil que parecía que con tan solo tocarla podria romperse. Su tacto era tan suave como siempre lo había sido y su mirada se clavaba en mis ojos debilitandome por completo. Por un momento el daño había quedado en el olvido, allí estabamos ella y yo, solo ella y yo.- No te pasará nada.- Repetí, con una voz firme y sincera.- Vamonos.- Ni si quiera lo pense dos veces, ni si quiera pensaba en si esto sería una trampa, o si volvería a jugarmela. Puse las dos manos sobre ambos lados de su rostro, mirándola a los ojos.- Vamonos de aquí, los dos, abandonemos esto.

Tome sus manos y las aleje de mi rostro con cuidado-no puedo Damon lo siento pero no puedo- susurre miando sus ojosy esperando ver el entendimiento en ellos-si me voy y te llevo conmigo te matara-dije bajando la mirada.si lo llevaba conmigo pondria en riesgo su vida y la mia, ademas nada me aseguraba que su resentimiento apareciera y me entrgara a cambio de la vida de Elena. -Damon si tan solo entendieras esto...es un asunto mio y no te quiero en el-aquello podia sonar duro pero era verdad, era demasiado peligroso arriesgar a Damon asi-nos iremos cuando solucione todo ,cuando ya no tenga que huir. Lo matare o al menos eso intentare y luego de que lo haga podremos irnos

Retire con lentitud las manos de su rostro, los recuerdos volvian a mi mente.- Entonces arreglalo tú, es como mejor has estado siempre.- Me retire de su lado, lo había vuelto hacer, me había vuelto a entregar a ella sin mirar las consecuencias.- Sola.- Susurre en un fino hilo de voz, lo que mi garganta pudo permitirme.- Yo sé lo que tengo que hacer.- Finalice, encontraría la forma de matar a Klaus, de que todo se acabara, de que todos estuvieran a salvo y seguramente volver a vivir mi vida.

-Damon-objete cuando escuche au dura voz aparecer de nuevo. La historia se repetia asi habia sido antes asi era ahora-el no entendia que yo lo mantenia alejado de mi solo para que no le hicieran dañohDamon entiendes que no es que no te quiera a mi lado.... Es solo que no quiero que te haga daño siempre ha sido asi siempre hui de ti para que Klaus no pudiera usarme para hcerte daño- murmure mirando como su rostro habia cambiado por completo- si te digo que me ire contigo... Entenderias lo que eso significaria

- No, no te preocupa.- Negué con la cabeza de forma insistida.- Solo te diviertes jugando con los salvatore, siempre lo has hecho, después de tantos siglos, ¿Por qué cambiar eso?.- No pensaba permitirme flojear de nuevo, no, ese damon estaba muerto y enterrado.- Claro, Klaus te tiene que mantener cerca, y seguro que a ti no te importa tanto.- Mi tono había vuelto a su hostilidad y volví a dirigir mi mirada hacía sus ojos.- Y por eso, siempre protegemos a Elena, porque es totalmente lo opuesto a ti.- Esas palabras eran duras, ni si quiera lo pense, estaba cabreado y salieron solas.

Sus palabras dolieron, dolieron mucho, pero alli estaba el Damon que queria ahora, el que pondria mi vida en juego para salvar a la de Elena- parece que ahora nos entendemos, no me ire con nadie que sea capaz dponer en juego mi vida- dije, no entendia como todo habia cambiado tan rapido- tu la quieres a ella y acabas dedecirlo, Damon que pasaria si Klaus te hace elegir-dije fijando mis ojos frios en los suyos-no necesito a alguien que dude y tu lo harias- dije resoplando y acomodando mis cabellos- eres debil Damon Y eso no sirve frente a Klaue

Escuche con atención cada una de sus palabras, me enfadaba aquella situación, me enfadaba el tema de Klaus y sobretodo me enfadaba, que ambas, ella y Elena pudieran hacerme tan débil.- Pase una eternidad buscando la forma de sacarte de una tumba, enamorado de tí, y solo salí mal parado, y luego se repitió con Elena la historia, así que, no elegiría a ninguna.- Aparte la mirada de ella.- No estoy enamorado de Elena, no estoy enamorado de nadie.- Mis palabras transmitian una gran ira.- Y si soy débil, pero solo cuando tu estás a mi lado.

Cada una de sus palabras removio mis fibras humanas mas internas-Damon....-susurre acercandome a el intentando arreglar todo lo que habia dicho- vamonos-dije dudando de queesas fuesen en realidad mis palabras-vamonos a donde quieras solo si prometes que nada te pasara-dije alzando la mano para intentar acariciar su mejilla pero me desanime- solo quiero demostrate que todo ete tiempo he huido de ti para que no te puedan hacer daño-dije mientras retrocedia esperando su respuesta o algun gesto que m dijera que era lo que estaba pensando n ese momento

Cada vez era más dificil mantenerme en mi sitio. Sus palabras suaves removian mi interior, y el contacto de su cálida mano contra mi piel me hacía dudar. Pero tenía que acabar con Klaus, tenía que encontrar a su familia y sacarles de sus ataudes. No le dejaría ganar. La mire nuevamente a los ojos, quería irme pero ningún musculo de mi cuerpo respondía, quería hablar, pero no conseguía articular las palabras. Me acerque a sus labios, sin poder evitarlo, como si me llamaran y no pudiera resistirme. Pase mi lengua por ellos deslineando su contorno, el sabor de sus labios era mejor que la sangre de cualquier humano. Luego la bese con una pasión desenfrenada, como si del último se tratara.

Su tacto me volvia loca muy loca-vamonos ya no hagas nada.. Vamonos lejos pase lo que pase dejemos todo-dije acariciando su mejilla y tomando su mano-me canse de huir, me anse de estar lejos de .... Lejos deesto-dije acariiando sus labios para luego volverlos a besar con una pasion desenfrenada unica sintiendo como todo mi cuerpo reaccionab El a sus labios a sus caricias- siempre siempre siempre te quiero siempre a mi lado

- Nos iremos, pero hay algo que tengo que hacer primero.- Dije esto sin separarme demasiado de sus labios, unos pocos milimetros, de tal forma que todavía podía sentir su respiración. Cogí su cabeza con mis manos, entrelazando mis dedos en su suave y oscuro cabello.- Me tienes aquí.- Susurre con los labios apoyados en los suyos. Volví a besarla, presionando mis labios sobre los suyos para luego volver a la pasión de hace unos instantes, mientras mis manos se deslizaban hasta sus caderas, sujetando estas.

-eso esta bien,me gusta la idea-dije respirando sobre sus labios y acariciando sus mejillas y sin pode ocultar la sonrisa de mis labios,lo queria a leguas , siempre li habia querido para mi-no hagas nada que ponga en juego tu vida, por favor-susurre o bueno casi implore,no queria que nada le pasara no me lo perdonaria.Bese sus labios sintiendo cada no de mis muaculos tensarse,habia deseado tanto eso que ahora que lo tenia alli no podia controlarme para nada. mordi sus labios y tirede ellos con cuidado saboreando el delicioso sabor que tenian

Correspondí a su sonrisa.- No haré nada.- Mentí, sabía que era la única forma de que ella se quedara tranquila y mis planes no se estropearan. Acaricié su cintura con la yema de mis dedos, y rapidamente la acorrale contra uno de los arboles que había en aquel cementerio. No podía ni quería dejar de besarla, la pasión invadía el ambiente. Mis dedos jugaban con su piel, y mi lengua con la suya, saboreando el dulce sabor que desprendía su boca. Presione los dedos contra su cintura para atraerla más hacía a mi.

Estaba sumergida en sus caricias, en sus besos en sus labios pero mi mente sabia que el mentia asi que como pude me separe ligeramente de el sintiendo aun su respiracion-mientes pero sabes que me encargare de eso-suurre clavando mi mirada en la suya sintiendo como mi piel pedia la suya con locura.su cuerpo pegado al mio solo pedian mas, acaricie la piel descubierta de sus brazos mientras mis labios se despegaban de los suyos para comenzar a besar su cuello sintiendo su sangre correr bajo su fina piel

Sentí como se separaba, ella era astuta.- Sabes que no te dejaré.- Mis dedos volvieron a tirar de ella hacía mí, tenía sed de ella. Mis dedos empezaron a acariciar su piel hasta que llegaron al filo de su camiseta. Tiré de ella hacía arriba con el fin de deshacerme de ella. Me estremecí por el tacto de sus labios sobre mi cuello, cerrando los ojos, mientras notaba como mi pulso iba acelerándose. Termine de quitar su camiseta, y observe su cuerpo mordiendo mi labio inferior, y pase mis dedos por sus costados.

Unabsonrisa astuta se formo en mis labios luego que el pudo quitrme la camiseta- sabes que no dejare que participes de ese juego- le dije atrayendolo de nuevo a mi para besarlo desenfrenadamente mientras mis manos se metian bajo su camisa acariciando la piel de su espalda-no dejare que te toque-suaurre con la respiracion un tanto acelerada,alguna forma encontraria de mantwnerlo alejado de todo,lo primero era qu Klaus no se enterase de esto. Tire de su camisa atrayendolo a mi para luego en un movimiento rapido desgarrarar los botones. Delinee las lineas de su pecho y sonrei para luego volver a beaarlo

- Sabes que no voy ha hacerte ningún caso, ¿Verdad?.- Pregunte con un tono divertido, era demasiado cabezón para que pudiera quitarme la idea de la cabeza, y más una como esta.- Haré lo que tengo en mente.- Seguí su beso con intensidad y rapidez mientras sentía sus dedos rozando mi piel.Sentí como todos los botones de mi camisa caian al suelo, otra parte de ella que me volvía completamente loco. Baje a su suave cuello, besando este de forma suave y cálida pero sin perder la intensidad de la pasión.

-Vamos cariño sabes que puedo controlarte- dije mordiendo su labio y fijando mi mirada en la suya de forma suplicante- déjame matarlo si?- le pedí para luego regresar a sus labios y besarlos con la misma locura que antes, dando mordidas cada vez más intensas en su piel delineando su silueta con mis manos que se morían por cubrir toda su piel con caricias. Mis labios bajaron por su cuello repartiendo besos y mordidas por donde pasaban, sintiendo como mi cuerpo y el suyo respondían a eso, bajé mis manos y la deposité sobre el botón de su pantalón jugueteando con él y manteniendo su cuerpo pegado al mio

- No puedes pedirme esto en esta situación.- Susurre mordiendo mi labio.- ¿Por qué no dejamos ese tema y disfrutamos de esto? .- Agarré su trasero para acercarla otra vez a mi, volviendo a besarla de nuevo, fundiendonos en aquel beso como si no existiera el mañana. Lleve mis manos hasta sus pantalones también mientras sonreía de forma pícara sobre sus labios. Desabroche los botones de su pantalón y lo cogí del filo, bajándolo dejando al descubierto sus firmes piernas.

Sonreí asintiendo, daría el tema por muerto solo porque realmente no quería arruinar el momento, además su respuesta no sería seria ni consciente. Pegué su rostro más al mio cuando sentí sus manos en mi trasero, sus carcas me daban un placer único y aquella sonrisa suya incrementaba y alteraba a todos mis sentidos. Lo dejé quitarme el pantalón y luego en un movimiento rápido cambie las posiciones siendo yo esta vez quien lo acorralaba y descendía por su pecho desnudo hacia el botón de su pantalón para quitarselo, desabroché de forma rápida el botón y bajé el zipper luego subí de nuevo a sus labios mientras mi cuerpo se frotaba sutilmente sobre el suyo

Mi respiración comenzaba a agitarse y mi cuerpo perdía todo el control. El tacto de su piel era algo que no podía describirse, y lo que me hacía sentir mucho menos. Los besos cada vez eran más intensos, los necesitaba como si de una droga se tratara. Sonreí cuando me deshice de los pantalones por completo.
Me quede acorralado por ella, y mi sonrisa pícara aumento.- Siempre te ha gustado llevar el mando.- Susurre sobre sus labios, mientras me estremecía por el roce. Cogí del medio su sujetador, justo por donde se juntaban sus pechos y tire de forma brusca rompiendolo.

-Ya vez que me va bien ese rol- susurré sonriendo mientras sentía mi piel estremecerse bajo el roce de su mano, lo había extrañado y mucho, aunque siempre estuve allí, eso de poder verlo y no tocarlo era complicado. Con un rápido movimiento se deshizo de mi sujetador y yo solo pude pegarlo más a mi clavando mis uñas en su piel, giré y lo apoyó sobre otro árbol besándolo de forma descontrolada, tenía sed de él, tenía necesidad de su cuerpo, de su piel, de sus labios y de su respiración -Damon...- susurré de forma entrecortada intentando tomar un poco de aire, lo cual era casi imposible- te extrañé- dije para luego comenzar a frotar su miembro con una de mis manos sin despegarme de su cuerpo , de sus labios

Sonreí por sus palabras, la verdad me encantaba que tomara el mando. Volviamos a estar ella y yo, fundiendonos entre besos, como en 1684, como cuando solo quería convertirme para pasar toda la eternidad a su lado, pero esta vez sin stefan. Sus arañazos, su piel, sus besos, sus labios, lograban estremecerme por completo. Mis dedos se deslizaban por cada rincón de su piel, hasta que llegue a sus pechos, los que rodee con la yemas de mis dedos.- Estoy aquí.- Susurré sobre sus labios.- Es lo que importa ahora.- Justo después la bese desenfrenadamente, mientras mi respiración se aceleraba aún más.

Moví mi cabeza de forma afirmativa, eso era cierto, lo tenía allí y para mi, sólo para mi. Sentir sus manos sobre mis pechos hicieron que me estremeciera incrementando mi necesidad de tenerlo de sentirlo mio - hagamos esto de una vez- susurré sobre su oreja para luego darle una suave mordida y bajar por su cuello besando cada parte de su cuerpo desnudo. Mis manos trabajaron rápido deshaciendose de sus boxers y luego sonriendo de forma pícara para besar sus labios de nuevo sintiendo el dulce sabor del placer

- Y nunca has tenido paciencia para esto.- Susurre de nuevo, otra cosa que me encantaba, siempre tan deseosa de tener lo que quería y no pensaba negarselo. Volví a besarla, ya con mis boxer fuera de mi piel, y aproveche para quitar lo que la quedaba de ropa. Volví a tomar el mando, cogiendola de su trasero, elevandola asi del suelo y apoyandola sobre la pared. No podía parar de besarla, con intensidad y pasión y más tarde roce su clitoris con mi miembro, haciendo que asi ambos nos excitaramos más.