Subiendo la apuesta (Ben y Alma)

Ultimamente las cosas con Ben no iban bien y empezaba a sentir que todo estaba yéndose de mis manos. Cada vez lo notaba más distante, como si cualquier cosa que hiciera le diera igual, como si no le alcanzara en ningún sentido. Para colmo de males, no podía ser por Alma, sabía ella estaba de viaje hacía unos días, ni siquiera venía a la universidad... Así que esta vez no podía echarle la culpa. Algo entre Ben y yo no funcionaba y sentía que tenía que hacer algo pronto si no quería perderlo.

Decidí que era tiempo de subir la apuesta, nunca había mostrado ser un chico con problemas para el compromiso (claro que fiel tampoco era, pero bueno) de hecho por algo se había casado con Alma siendo tan jóven. Ella sí que tenía problemas con el compromiso, nomás verla y salían a la luz las pegas que le ponía a todo, era demasiado egoista. Pero Ben no. Así que a riesgo de parecer invasiva decidí juntar alguna ropa (mía, de verdad) e ir a su casa con intenciones de quedarme a dormir algún día (quizá algunos días, si lograba que me invitara), después de todo habíamos vivido juntos antes o al menos esa era la historia que le había inventado.

Spoiler:

Llegué a su casa y llamé a la puerta esperándolo con una enorme sonrisa.

Las cosas con Martha no iban nada bien y me estaba replanteando seriamente el dejarla. Cada vez parecía que teníamos menos cosas en común y todavía había sido incapaz de recordar todo lo que la había querido y demás. Era raro y no conseguía conectar del todo con ella. O esta cambiaba o no me quedaría otra que dejarla, porque estar con alguien por estar lo veía tontería cuando podría encontrar a alguien mejor por ahí... O por lo menos con más chicas para algunos polvos.

Estaba mirando tonterías por internet cuando llamaron al timbre. Dejé el portatil a un lado en la mesa y me puse en pie para ir a abrir. Cuando abrí me encontré a Martha con... ¿Una maleta?- ¿Te vas de viaje o algo?- dije de broma con una sonrisa mientras la miraba

-Sí eso es lo que tengo que hacer para que las cosas vuelvan a funcionar, pues lo haré.- respondí sonriendo cuando preguntó eso de broma. Lo miré a los ojos con una pequeña sonrisa mientras ya entraba en su casa y le dí un beso profundo en los labios soltando mi maleta en la entrada. -Sé que las cosas no han sido lo que eran y me da mucha pena porque de verdad te quiero, así que he pensado que quizá si paso otra vez más tiempo contigo entonces no sé... podamos recordar porqué nos gustaba tanto pasar el tiempo juntos.- dije mirándolo esperanzada. Era muy buena mintiendo, de verdad que casi que me lo creía yo... bueno aunque eso de que me gustaba mucho pasar el tiempo con él sí que era cierto. -¿Qué dices? ¿Te parece que estoy loca por aparecerme así? ¿O crees que podría funcionar? Dime la verdad.- le pedí sonriendo.

La miré cuando dijo eso de que si era lo que tenía que hacer para que lo nuestro funcionase lo haría. Al menos era un consuelo que no fuera el único que notara que las cosas no iban genial entre nosotros. Empezó a hablar y la miré, de verdad que cada que soltaba algo de esto no podía evitar darme algo de ternura y ya la idea de dejarla pasaba a un segundo o incluso tercer plano, lo menos que podía hacer era luchar yo también por la relación, ¿no?- A lo mejor un poco...-murmuré medio de broma por eso de estar loca y por aliviar la tensión- No sé muy bien que quieres decir, es decir... ¿Quieres mudarte aquí? ¿o... A que viene la maleta?- dije porque de verdad no terminaba de entender su tiempo de pasar mas tiempo juntos y que se presentara con una maleta. - Y no sé... También quiero que las cosas vuelvan a ser como antes-dije mirandola.

Ben dijo eso y sonreí, pero sabía que por el modo en que me estaba mirando que no estaba incómodo con la situación, al contrario... por alguna extraña razón eso le había gustado. Es que yo era una idiota, pasar tiempo con Alma se suponía que tenía que ayudarme a entender cómo era ella y ahora empezaba a verlo claro... con toda seguridad, ella no era una chica de las que preguntaban antes de hacer lo que realmente querían, si siendo de esa forma había logrado conquistar a Ben entonces yo tendría que empezar a plantearme dejar de ser una insegura (o al menos de mostrarme como tal). -No sé si mudarme... quizá si lo haga luego, si tú quieres. Pero al menos quisiera dejar aquí algunas cosas y no sé, levantarme contigo por la mañana... que almorcemos juntos, que dejemos de andar solamente visitándonos todo el tiempo. Si tú piensas quedarte en Fell's entonces yo haré lo que sea por pasar más tiempo contigo, no quiero estar viajando cada tarde de mi vida y tampoco que tú lo hagas ¿Estás de acuerdo?.- dije con una pequeña sonrisa dejando ya mi maleta en el suelo casi en señal de que efectivamente me quedaba.

La vi dejar la maleta en el suelo según decia todo eso y la miré, obviamente me parecia demasiado lo de mudarse pero según lo planteaba no era el caso y de verdad podía ser que nos viniese mejor eso de pasar más tiempo juntos, sin andar tanto volviendo a nuestras casas todos los días- Vale, de acuerdo- murmuré al final con una pequeña sonrisa cuando me preguntó si estaba de acuerdo. Sonreí y cogí su maleta del suelo para entrarla- Venga, entra- dije sonriendo y haciendola un pequeño gesto para que no se quedara en la puerta- Esperemos que todo vaya mejor con esto- dije mientras cerraba la puerta tras ella y dejaba su maleta a un lado en el suelo.

Ben estuvo de acuerdo y cogio mi maleta tras decirme que entrara. -También espero que estemos mejor.- murmuré enseguida. -¿Qué estabas haciendo antes de que llegara?.- le dije luego de entar ya en la sala y mirando un poco alrededor, había llegado sin previo aviso y no sabía si interrumpiría o algo.

Sonreí por eso y entré más en el salón mientras me preguntaba eso- Nada, estaba un rato con el portatil pero no hacía nada en particular- comenté, había estado viendo cosas sin importante y lo había dejado sobre la mesita el comedor cuando Martha había llamado a la puerta y yo me había levantado para abrir.

Dijo eso del ordenador y lo primero que se me pasó por la cabeza era que así precisamente habíamos comenzado a coquetear. Recordaba perfectamente como me había dejado aquella noche apenas llegar Alma... la muy jodida además de zorra era inoportuna. Quité ese pensamiento de mi mente porque nomás imaginarme que pudiera estar coqueteando con otra y ya me moría de los celos. -Ah! Claro... Y averiguabas algo en especial?.- indagué acercándome al portatil un poco disimuladamente mientras sonreía.

- Nada, ya te dije que no hacía nada en especial, estaba mirando tonterías sobre coches- dije abriendo un segundo el portátil y enseñandola la página que tenía abierta porque ya me la iba conociendo de memoria y sabía que solo se quedaría así tranquila. Volví a cerrar el portátil cuando lo vio y la miré- ¿Quieres que te ayude a deshacer la maleta o algo?- pregunté después al ver que habíamos dejado allí la maleta un poco por en medio.

Me sentí algo avergonzada cuando dijo eso de los coches y abrió la tapa de su portatil para enseñarme y "probar" que efectivamente estaba en eso. Es que ya a estas alturas me conocería y sabría que no iba a quedarme tranquila hasta no comprobar que no estaba en otro tipo de websites. -Ya, ya... tampoco tenías que mostrarme.- le dije con una sonrisa como si de verdad no lo necesitara. Me acerqué a él y asentí a lo de las maletas. -Sí, si no es problema... Tampoco traje tantas cosas, que no quería que te asustaras.- dije sonriendo y ayudándolo a subir ya por las escaleras la maleta.

- Ya...-dije mirandola con una sonrisa sin creerla ni un poco. Dijo después lo de la maleta y sonreí- Vale, mejor que no quisieras asustarme y esas cosas- dije sonriendo porque seguramente me hubiese asustado de verdad si la veo con una maleta grande o algo del estilo según estaban las cosas. Subimos a mi habitación y puse su maleta sobre la cama para que la pudiese abrir.

Supe que no me creía para nada cuando dijo ese "ya", con suerte notaría por lo menos las buenas intenciones que estaba mostrándole.
-¿En serio te hubieras asustado? Qué decepción... yo pensaba que estarías encantado de la vida de tenerme por aquí más tiempo.- dije coqueta en broma mientraas subíamos las escaleras. De alguna manera tenía que recomponer esa relación, me costara lo que me costara.
Ya fuimos a la habitación y abrí la maleta. Tenía cosas mías, aunque alguna que otra cosa de Alma o que había sido de ella mejor dicho. Sobre todo alguna minifalda bien corta, no era mi estilo pero si a ella le funcionaba quizá habría que empezar a probar. -Mira esto.- dije mostrándole alguna de las faldas. -¿Y si me visto así?¿Estás seguro de que tampoco en ese caso estarás encantado de que esté por aquí más tiempo?.- le dije con picardía.

Sonreí cuando dijo lo primero de forma coqueta pero no dije nada, nuestra relación no estaba precisamente genial como para que me hubiese encantado tenerla mucho más por aquí, esto que hacía ahora ya era un gran paso por así decirlo para intentar arregla todo así que era suficiente. Subimos a la habitación y me tumbé en la cama bocabajo y apoyado un poco sobre mis hombros sin la menor intención de ayudarla a deshacer la maleta- Mmm... No sé, no sé- dije solo por picarla un poco cuando me enseñó la falda y dijo eso- Pontela y veremos- dije con un poco de picardia como ella mirandola.

Me dijo eso y lo miré sonriendo. Dejé la falda en la cama y comencé a bajarme el cierre del pantalón mientras lo miraba. -Decías que lo hiciera ahora mismo no?.- susurré con picardía sin cortarme mientras seguía con eso.
De pronto sonó su móvil y lo miré con pesar... No quería que atendiera por nada del mundo, por una vez estaba logrando que centrara realmente en mí su atención. Podía hacerlo, por algo me había embarcado en un lío tan grande al separarlo de Alma, tenía que tener coraje y ganármelo de verdad. -No respondas... ¿Vale?.- le pedí con tono de niña y jugando un poco ahora con mi cabello.

Estaba en New York. Había ido por trabajo, una campaña que ya se había terminado... pero adoraba esa ciudad y apenas tuve una chance decidí salir de fiesta. Luego tocaba volver a Fell's Church así que había que aprovechar. Salí con algunos de los modelos y nos fuimos de copas.

Spoiler:

Las horas habían ido pasado y ni sabía cómo había terminado en ese sitio, apenas había luz. Una mesa y yo sentada en una silla, amarrada con sogas de verbena... Joder, apenas podía recordar cómo había llegado. Sabía que algunas horas antes había llegado a uno de los bares de vampiros más fabulosos que había conocido. Había desfasado mucho y en algún punto me había puesto a apostar, era evidente que había perdido. Pero no podía recordar mucho más. -Tranquila guapa. Nadie quiere aquí que te hagas daño.- dijo un vampiro acercándose a mirarme. -Joder... Déjame ir... ¿Qué quieren de mí?- dije intentando recordarlo. -Tenemos grandes planes para tí, ya te contaremos. Ahora tendrás que disculparme, espero que no me extrañes.- dijo saliendo del cuartito y dejándome a solas.

Pasaron varios minutos antes de que lograra quitarme las sogas. Tenía las muñecas doloridas pero estaba libre... cuando no sentí ruidos cerca me moví rápidamente para coger el móvil que tenía en mi bolso y volví enseguida a la silla por si alguno decidía volver a entrar. Joder, a quién podía llamar? Erik no sería de ayuda en un bar de vampiros... Y estaba en NY! Zack estaba en Europa... sólo quedaba Ben. Marqué su número... hacía semanas que no nos veíamos, yo había estado de viaje casi todo el tiempo así que ni siquiera nos habíamos cruzado.

"Ben! Eres tú? Puedes hablar? Estoy en problemas, me tienen prisionera... Joder, necesito tu ayuda.... pronto." susurré tratando de no llamar la atención.

Enarqué una ceja con picardia. No esperaba que se empezara a cambiar ya mismo. La miré quitarse el pantalón sin cortarme nada y sin dejar de mirarla. Estaba buena... Me atraía bastante. Teníamos que conseguir que esto funcionara de verdad, ya habíamos pasado por mucho. Sonó justo mi móvil y suspiré, sobre todo cuando Martha dijo eso- Vale- dije dispuesto a no contestar y a prestarle toda la atención siguiendo con ese juego. Pero el móvil siguió sonando una y otra vez y al final me di un poco por vencido- Respondo solo un momento, ¿Vale? Mientras te pones la falda- "negocié" con ella antes de coger el móvil de bolsillo y contestar sin mirar si quiera quien era y sin apartar la mirada demasiado de Martha- ¿Si?-Escuché enseguida atropelladamente los susurros de Alma y me sorprendió por varios motivos, lo primero porque hacía mucho que no sabía de ella y lo segundo porque por un momento me pareció que me estaba vacilando- No, no puedo- dije antes que nada ante su pregunta de que si podía hablar. No podía, no era el mejor de los momentos para nada. Fui escuchando todo y menos sentido me parecía que tenía todo- ¿Qué?- dije unicamente como un estúpido intentando que se explicara mejor e intentando no cambiar mi cara demasiado para que Martha no me viera nada raro.

Aceptó enseguida mi trato de no contestar, pero el móvil siguió sonando y cuando me dijo eso ya me dí por vencida. Atendió y su cara reflejó problemas... pero intenté distraerlo mientras iba encargándome de mis pantalones. -¿Qué ocurré?.- susurré despacito yendo a por la falda.

Ben no podía hablar, estaría con Martha o... a saber, el punto es que ahora me sentía una idiota por haber recurrido a él en una situación tan rara. "Estoy en New York, en un bar de vampiros... Lo siento, no sabía a quien llamar... Yo, no sé dónde me he metido...." sentí ruidos en la puerta. "Tengo que dejarte, ya vienen" dije y corté sin despedirme, escondí el móvil entre mi ropa y volví a poner mis manos juntas. Como si siguieran atadas. -Guapa, ¿Nos extrañabas?.- dijo el mismo tío de antes al entrar por la puerta junto con otro vampiro, más viejo y más desagradable. -No mucho.- respondí con sarcasmo... Apenas podía hacer mucho más ahora mismo, era idiota... meter a Ben en esto cuando ni siquiera sabía con exactitud en qué parte de NY estaba.

Escuché la pregunta de Martha pero no contesté porque Alma hablaba muy deprisa y me costaba hasta seguirla. Ni me dejo decir nada más antes de colgar. ¿Pero qué...? Estaba loca de verdad... No me podía pedir ayuda... ¿por qué era lo que había hecho, no?. Hacía demasiado que no la veía como para que me viniera con estas y encima... ¿Estaba en NY? Habría decenas de bares de vampiros allí y no me había dado ni una estúpida dirección. Sería imposible.... Suspiré pensando en todo eso a toda velocidad. Maldita Alma...- Nada, era... mi prima- le respondí a Martha sin pensar cuando dejé el móvil a un lado sin saber muy bien ni como reaccionar todavía.

-No sabía que tenías una prima.- dije enseguida confundida más que nada porque su cara daba la impresión de que algo malo había pasado y además nunca me había hablado de su familia. -¿Vive aquí en Fell's Church?¿Ha ocurrido algo?.- le dije mirándolo con la falda ya puesta pero sin seguir con eso de coquetear con él. SI algo había pasado en su familia quería saber de qué se trataba.

Dijo eso primero y enarqué una ceja. Por cosas así la relación hacía aguas por todas partes... ¿ Llevábamos bastante juntos desde antes de "peder" mi memoria y nunca la había hablado de ella? Yo por lo general hablaba bastante de mi prima, sobre todo con los humanos... Era el único parentesco real que podía mencionar. - Pues si, tengo una prima y no, no vive aquí- dije sin dar muchos detalles porque obviamente no había hablado con ella. ¿Debería preocuparme por lo de Alma? Era una simple tía a la que me tiraba (bueno, me tiraba, en pasado... Ya ni eso). y ni sabía realmente donde estaba. Demasiados líos por nada. - Creo que... Voy a volver a llamarla, solo para asegurarme de que todo va bien- la dije mientras me ponía en pie. Tal vez eso fuera lo mejor, intentar volver a hablar con ella. Al menos intentarlo, puede que me cogiera el móvil, ¿no? O tal vez ya estuviera muerta... Uf... Antes de darme cuenta ante ese pensamiento ya estaba dando al botón de rellamada, llevándome el móvil a la oreja y alejandome unos pasos de Martha.

-Mírate, tan preponte allí sentada... Si fueras más inteligente no darías problemas.- dijo el tío y lo miré entrecerrando los ojos. -Joder, qué demonios quieren conmigo? Es que no recuerdo nada....- dije mirándolo. -Claro que no recuerdas, nos hemos encargado de que olvides guapa, por la mañana estaremos embarcando... Así que te diría que descanses bien y te vayas preparando para un laaaargo viaje.- dijo con una sonrisa torcida. -No seria tan grave que me dieras unos minutos con ella.- dijo el vampiro más viejo. -Han dicho que no, vamos ahora... ya tendrás tiempo no te pongas ansioso....- dijo mirándome ahora a mí con malicia. Salieron otra vez ¿A dónde demonios me llevaban?

Apenas se largaron cogí otra vez el móvil justo para atender a Ben, por suerte lo tenía en silenciado. "Ben, lo siento... No quería molestarte pero te necesito... Estoy en un puerto, ¿Conoces algún bar de vampiros cerca del puerto?... Salimos por la mañana, eso dijeron" murmuré dándole tiempo a decir algo. Sabía que le estaba tirando un problema encima, pero no sabía qué hacer... a quién recurrir.

Ben dijo eso de su prima pero no entró en detalles, al contrario volvió a coger el móvil y se apartó dedicándole toda su atención y dejándome allí de pie como una idiota con la falda corta como si tal cosa. Me sentí una idiota, pero poco podía hacer. Me senté en la cama esperando a que acabara esa conversación, quizá luego fuera a darme más detalles.

Tuve suerte y Alma me cogió el móvil. Salí unos pasos de la habitación pero sabía que Martha estaría pendiente de todo así que tenía que tener cuidado. Escuché lo que dijo y suspiré. ¿Un bar cerca de un puerto? Puede ser... No sé, ahora mismo tendría que mirar un mapa o algo- "Joder, tardaré horas en llegar y lo sabes"- murmuré algo seco pensando en el avión y demás- "Y joder, no soy tu padre para solucionarte los problemas"- iba a decir mas bien que no era su novio pero se suponia que estaba hablando con mi prima así que eso pegaba mejor- "Joder... "-bufé un poco, no me podía creer que me estuviese metiendo Alma en estos líos cuando apenas nos conocíamos. Y lo peor es que no sabía porque no la colgaba y ya, que en cambio me estaba preocupando y todo!- "No te prometo nada"- dije nada más antes de colgar-