Conociendo el pueblo

Queria conocer el pueblo, asi que salí a la calle y me dispuse a caminar por las calles. Sin saber como acabe en un parque y decidí sentarme un rato en el banco viendo como los niños jugaban a la pelota.

Saqué a pasear a Yaki por el parque cuando derepente comenzó a ladrarle a una chica que estaba sentada en un banco. Otra vampira más en el pueblo. ¿No sería peligroso que hubiesen tantos? Mandé a callar a la perrita y me obedeció a regañadientes. Me acerqué a la mujer, arrastrando a le perrita, que no para de gruñir.
-Hola-la saludé.

Un perro me empezo a ladrar, que mosca le habia picado? Una chica se acercó y sonreí.

- Hola, tienes un perro muy bonito- dije mirandolo pero sin atreverme a tocarlo, seguro queme ladraria mas.

-Gracias-dije mirándo a Yaki un momento. Luego volví a mirar a la chica-Tranquila, suele ladrarle a muchos de este pueblo...-porque muchos eran vampiros...-¿Puedo snetarme?

- Claro, es un sitio publico- dije dejandola sentarse en el banco- Me llamo Arlette, y tu?

Cuando me dió permiso cogí a Yaki y me senté. La coloqué en mi regazo y la acaricié un poco para ver si se relajaba. La chica se presentó. Asentí muy levemente la cabeza cuando dijo su nombre. La miré a los ojos y con una sonrisa amable le dije-Encantada Arlette. Yo soy Wanda.

- Nunca habia escuchado un nombre asi- reconocí sonriendo- eres de aqui?

Sonreí cuando hizo aquel comentario sobre mi nombre. No era la primera vez que me lo decían-No. No soy de aquí
La miré unos segundos-Supongo que tu tampoco serás de aquí. ¿Francia tal vez?-su acentó me sonaba de aquel lugar.

- Si, vengo de Francia- seguramente se me notara el acento no me sorprendia para nada.

Asentí con la cabeza. Miré a Yaki, estaba más tranquila. La acaricié un poco. Volví la vista nuevamente hacia Arlette-¿Y porqué has venido de Francia a este pueblecito tan apartado?-aquello me tenía bien intrigada.

Me coloqué un mechon de pelo tras la oreja y carraspeé un poco, todavia estaba un poco dolida- Mi novio y yo hemos cortado, y la unica familia que me queda es mi primo, asi que decidi venir con el.

Cuando dijo que vino a vivir con su primo pensé en quién podría ser. Aver, un chico francés... ¿Benjamin?-Por casualidad... ¿tu primo es Benjamin?

- Si! Benjamin Lebeau- dije algo soprendida antes de mirarla- Le conoces?

-Sí. Claro que le conozco.-la miré-¿tu qué opinas sobre eso de que se va a casar?

- Es raro, no le pega nada...-dije siendo sincera- pero no sé, la verdad...-dije sin querer parecer muy mala prima.

-Lo mismo pienso-dije sonrieno-Es más. Creo que le dará plantón.

- Y eso? tanto le conoces?- dije con una sonrisa, me extrañaba que pensara eso.

-Aver, siempre ha sido de los que no duran mucho con una chica. Lleva cientos de años siendo igual. Si las personas mayores de 40 años ya no pueden cambiar... ¿porqué el sí?

La miré sorprendida- Cientos de años? Supongo que eso quiere decir que lo sabes- dije sin decir claramente la palabra vampiro por si acaso.

De repente caí en lo que había dicho. Solté un risa-Sí. Lo sé-dije sonriendo mientras la miraba.

- Ok, en ese caso entiendo que pienses asi, yo creo mas o menos lo mismo- dije sincerandome, me caia bien.

Sonreí agradecida. Por fin alguien lo entendía-Y qué..¿te cae bien Aitana?

- No estoy segura- admití- pero la primera impresión que me dio no fue buena- dije sonriendo.

-A mí igual. primero bien pero luego al final se puso como una loca pensando que le quería robar el novio o algo.-me encogí de hombros.

- Si, no me estraña- dije sonriendo- pero bueno cuentame algo de ti- dije mirandola