Dando una vuelta (Miriam)

Estaba cansado y aburrido de estar en casi así que tras pensarlo un poco en vez de llamar de Alma para hacer algo decidí tener un rato para mi y largarme al parque a pesear o a hacer algo, siempre me había gustado eso. Tras un rato andando ya me senté a la sombra de mi árbol favorito como hacia casi siempre.

Desde que había vuelto de mi viaje con Klaus decidí ir a salir a ponerme en forma ahora tenía que cuidarme más por mi nuevo trabajo y desde que ya tomaba verbena estaba mucho más tranquila en todos los aspectos.
Comencé a correr por el parque escuchando música como de costumbre.

Spoiler:

Tras un rato así vi a Miriam corriendo por uno de los multiples caminos del parque. Sonreí un poco al verla así en chandal porque no era algo muy habitual en ella pero no dije nada, ni me acerqué a hablarla. Simplemente mirandola y examinandola un poco.

Llevaba un rato corriendo cuando pisé mal y me torcí un poco el tobillo, joder ya era mala suerte, no me había hehco mucho o eso esperaba pero era lo suficiente para que me fastidiara y no pudiera correr en un buen rato. Comencé a caminar hasta que vi a Ben bajo la sombra de un árbol y me acequé a él.
-¡Hola! ¿Ya ni saludas?- dije medio bromeando antes de sentarme a su lado.

Spoiler:

Vi como se torció el tobillo y sonreí ligeramente. Se fijo en mi y cuando se acerco intenté poner mi mejor cara de póquer para que no viera que me había estado riendo un poco de su torcedura.- Yo siempre espero a que me saludes tu primero- dije bromeando y sonriendo ya cuando se sentó a mi lado.

-Que malo, eres- dije mirandole mal en broma.
-¿Qué tal? ¿Qué has hecho estos días?- dije mirandole.

- Echarte de menos- dije bromeando mientras me apoyaba mejor en el árbol-Pues lo de siempre, alguna fiesta, la universidad, etc...-dije ya más en serio.

-Gracias, ya lo sabía, si es que en el fondo no puedes vivir sin mi- dije bromeando.
-Yo nada, lo normal... irme de viaje, tomar verbena, trabajar...- dije sonriendo.

- Sigues de modelo?- pregunté pro eso de trabajar, porque no sabía si era eso o ya había encontrado un trabajo nuevo.

-Si, en realidad ahora soy modelo modelo me han contratado para ser una de las modelos de una diseñadora famosa- dije con una sonrisa, la verdad es que había tenido mucha suerte.

- Vaya... Me alegro- dije simplemente con una pequeña sonrisa- ¿Y ahora que eres modelo profesional no tienes pensado largarte de Fell´s?- pregunté enarcando una ceja porque no pegaba demasiado con el pueblo.

-¿Qué? ¿Pero por qué? ¿Qué tiene que ver una cosa con la otra?- dije mirandole sin comprenderle muy bien.

- Es muy poco glamuroso este pueblo para una modelo- dije entornando los ojos.

-Pues Alma vive aquí- dije mirandole ya que ella era modelo.

- Pero ella esta aquí por mi...-dije enarcando una ceja porque había sido yo el que había insistido en volver por un tiempo...

-¿Pero que más te da si vivo aquí o no? ¿Es que quieres que me vaya?- dije mirandole ya que no le entendía.

- Solo era una pregunta Miriam, no le busques tres pies al gato- dije entornando los ojos porque no lo había dicho con dobles intenciones.

-Lo siento, perdoname- dije disculpandome no sé porque me había puesto así tal vez me jodía pensar que Ben quisiera que me fuera.

[Off: Me voy, bye]

- Ya, vale, no pasa nada...-dije porque ya me estaba acostumbrando a todas estas cosas de Miriam- ¿Qué tal con Klaus?- dije enarcando una ceja porque podía sentir claramente que tomaba verbena.

[off: Ok, bye!]

-Bien, bastante bien, ahora no me muerde hemos llegado a una especie de acuerdo por mi carrera y por guardar las apriencias aparte que no es algo que me guste especialmente, no soy un trozo de carne..- dije encogiendome de hombros.

- Ya... Me alegra que hayas sabido ponerle ciertos limites....-dije enarcando una ceja mientras miraba hacia donde había un par de niños jugando con un balón.

-Si, no es que le disgustara precisamente no poder hacerlo me ha manifestado que tenía miedo de que se le fuera la mano conmigo- dije mirandole.

-Ya...-dije sin saber realmente que decir a eso porque no parecia que hubiera tenido precisamente miedo cuando la había dejado como un colador. Yo tenía claro que nunca llegaría a tanto con Alma, y sabía también que ella no me lo permitiría.

-¿Ahora te ha entrado la vena paterna?- dije bromeando al ver como miraba a los niños jugar con el balón.

-No, pero si me ha entrado la vena futbolera- dije sonriendo y medio bromeando porque me estaba fijando más en el balón que en otra cosa.