Grabando un anuncio (Alma)

Me habían llamado para hacer un anuncio de ropa, así que fuí al sitio del rodaje.
Estuve allí todo el tiempo conversando con la gente y en la sesión de maquillaje hasta que me dijeron que por fin había llegado al chica que se encargaba del vestuario.
Salíd el camerino con la bata puesta y enseguida me encontré con Alma ¿Qué hacía ella aquí?

No era de meterme a hacer muchas cosas, pero desde que había llegado de Francia que lo de la universidad me empezaba a gustar un poco más. Me enteré de un anuncio que se grababa y me presenté para colaborar con lo del vestuario, se interesaron en mi experiencia como asesora de imágen y por primera vez en la vida me dieron la chance de hacer algo que no fuera ser modelo. Nunca había estado detrás de escena así que me daba mucha curiosidad.
Me reuní con las marcas, seleccioné las prendas y ya enseguida me fui para el sitio en que se grabarían con todo preparado.

Spoiler:

Enseguida una chica me cogió del brazo y me llevó hacía ella. Por el camino me preguntó si estaba nerviosa y le dije que un poco, pero lo que realmente me había puesto nerviosa era la presencia de Alma.
-Alma te presento a la modelo, se llama Miriam- dijo la chica con una sonrisa mientras yo miraba a Alma en silencio esperando su reacción.

Ví que me traían a la "modelo" y casi me da algo cuando me dí cuenta que se trataba de Miriam! Joder... No podía ser cierto, venir a cruzarmela también aquí... en "mi" mundo.
-Ya nos conocemos, gracias.- le dije con una sonrisa a la chica y le hice un gesto para que se retirara y nos dejara a solas. No era que tuviese demasiado poder allí en el set, pero siempre había tenido esos modos... me había criado escuchando a mi madre dar órdenes en el backstage de los desfiles más importantes, eso de decirle a cada uno lo que tenía que hacer me salía perfectamente...

Esperé que la chica se fuera y ya me quedé con Miriam a solas. -Traje tres modelos... Haremos unos cambios y luego ya quedarás liberada. Venga pruébate el primero a ver qué tal te va.- le dije sin expresión en la voz como si de verdad se tratase de una desconocida.

Vi como despachó enseguida a la chica y nos quedamos a solas estuvéa punto de decirla un simple "Hola! ¿Qué tal?" pero al ver que me hablaba con indiferencia como sino me conociera o como si fuera una completa desconocida referí callarme.
-Vale- dije sin más mientras iba hacía el camerino para cambiarme, odiaba esa situación tan tensa pero sabía que si abría la boca para disculparme o algo la cosa acabaría mal y no era plan.

Miriam entró al camarino ahí mismo y al instante en que desapareció de mi vista, ya suspiré procurando que no me escuchara ya que estábamos en el mismo ambiente y me eché en el sofá que había allí... ¿Podía ser que tuviese tanta mala suerte?... No iba a ceder ni un poco, no se merecía que le sonriera siquiera y tampoco iba a echar a perder el anuncio porque era profesional y no me iba eso de mezclar las cosas, así que tomé aire y me incorporé.

Caminé hacia el estante en que había dejado mi cartera y saqué un cigarro.
Al rato volvió la chica.
-Oye Alma, creo que no se puede fumar aquí.- me dijo con mucha amabilidad.
-¿Segura?.- le dije con algo de sarcasmo pero sin dejar de sonreir. -Yo creo que sí se puede...- continué sin inmutarme mientras ya le daba una calada...
-Vale, no hay problema... será que me a parecido.- murmuró. -Cuando la chica esté lista me avisas, vale?.-
-Claro.- respondí aún fumando y luego se retiró.

Estaba cambiandome de ropa cuando noté el olor del tabaco y escuché la conversación de Alma con la chica.
Cuando ésta se fué salí con la ropa puesta y antes de decir nada cogí un pequeño recipiente donde guardaban las horquillas y se lo dí a modo de cenicero.
-¿Qué tal?- dije mirandola ya que después de todo ella era la que tenía la última palabra.

Miriam salió y me acercó a modo de cenicero ese recipiente que agradecí con una sonrisa. Ya luego me preguntó como estaba. -Guapísima.- le dije con una leve sonrisa porque se veía bien. Ya llamé a la chica y le dije que estábamos listas para la primera parte. Salimos de allí y fuimos a un sitio en que ya estaban montadas las cámaras para el set. Me llevé el recipiente-cenicero y no dejé el cigarro ni un momento. La situación era tensa, pero tenía que poder superar esto... no era la primera persona que "quitaba" de mi vida luego de haber tomado la decisión y ya.

-Gracias- dije con una sonrisa cuando dijo eso de que estaba muy guapa ya que parecía sincera y viniendo de ella y tal y como estaban las cosas entre nosotras lo agradecí mucho.
Salimos del camerino y fuímos al set para que me retocaran una vez más el maquillaje y tras darme el visto bueno comenzara el anuncio.

Comenzaron a hacerle las fotos y a filmar luego de retocarle un poco el maquillaje y mientras se encargaban de todo eso yo ya me puse a hablar con el director y programé lo de los otros cambios. Me sentía bien allí, todo el mundo respetaba mi punto de vista y además elogiaban el estilo que tenía incluso para vestirme yo misma... la verdad me empezaba a gustar todo ese rollo.

Mientras me maquillaban y entre toma y toma de la primera parte del anuncio observaba a Alma, se movía realmente bien en ese ambiente, como pez en el agua y además parecía que todo el mundo respetaba su opinión.
Cuando acabé de rodar la primera parte del anuncio volví junto a Alma y nos dirigimos de nuevo al camerino, para seguir probandome ropa.

-Y? Cómo ha estado?.- le pregunté un poco para sacar conversación y porque la veía allí sola en medio de tanto desconocido... en el fondo sabía que era un mundo nuevo para ella así que me daba algo de pena ser tan dura.

-Bien, ha estado bien o eso creo he tenido que repetir alguna escena como has visto pero es normal- dije con una pequeña sonrisa -La verdad es que estoy un poco nerviosa y creo que es culpa tuya que me intimidas- dije medio bromeando aunque un poco era cierto.
-Se te ve muy cómoda en este mundo- dije mirandola.

Alcé una ceja cuando dijo eso de que yo la intimidaba. -¿Te intimido?.- le pregunté ya mirándola un segundo y luego volviendo a mirar al frente porque ya entrábamos en el camerino. -Pues no deberías dejar que te intimide... ni yo, ni nadie. Si quieres ser modelo empieza por creértelo tú misma y pensar menos en lo que los demás esperan de tí.- le dije un poco neutra y casi a modo de consejo mientras le pasaba la ropa para el siguiente cambio.

Asentí a lo de que me intimidaba y luego escuché lo que me dijo -¿Es un consejo de antigua amiga o es un consejo de asesora de imagen o de actual modelo?- dije con una pequeña sonrisa ya que parecía que podíamos mantener una conversación "civilizada". Cogí la ropa que me daba y fuí a cambiarme de nuevo.

-Es sólo un consejo Miriam, no le des vueltas...- le dije ya sin más mientras le pasaba la ropa y esperaba que se metiera en el camerino. Encendí otro cigarro y mientras esperaba me llamó el director, me pidió otras opiniones y le dije lo que pensaba, no había dado ahí más que por casualidad pero al final iba a terminar creyendo que de verdad servía para esas cosas...

-Vale- dije mientras me quitaba el anterior vestido y me ponía el siguiente.
Cuando salí Alma estaba hablando con el director y esperé a que terminaran para que me diera el visto bueno.

-Perfecta.- dije ni bien Miriam salió mirando al director que también asintió. -Venga, vamos.- le dije para que ya me siguiera y el director se fue a lo suyo. -Ahí estás bien.- le indiqué y ya la dejé con la gente de las cámaras...

Sonreí cuando me dijo eso y en seguida salimos del camerino y fuímos de nuevo al set para seguir rodando el resto de las escenas.

Comenzaron a sacarle las fotos y me quedé allí mirando un rato mientras ya pasaban a filmar un poco. La verdad es que estaban quedando muy bien y me sentía a gusto en ese set, más allá del mal momento de cruzarme otra vez con Miriam.

Poco a poco y tras la conversación con Alma me fui relajando y ya no cometía tantos errores y las poses me salían más naturales.

Acabó esa parte y ya volvimos al camerino, le pasé la última ropa para que se hiciera el cambio y me encendí otro cigarro mientras hacía algo de tiempo y revrisaba el móvil

Volvimos al camerino y cogí la tercera prenda que me pasaba hoy con la que acabaría el anuncio.
Salí cambiada y la miré -¿Es tu primer trabajo como asesora de imagen en un anuncio o algo similar?- pregunté con curiosidad porque sabía que antes había trabajado como asesora de imagen junto a Aitana.

-No, trabajé con Aitana un buen tiempo... y aprendí muchas cosas con ella.- le dije a modo de respuesta. -Era perfecta en esto, la mejor.- le dije pensando en todo eso, la verdad es que en un punto la echaba de menos, por esquizofrénico que pareciera ya que seguramente ella querría asesinarme o algo. -Y pues también con mi madre, ella es empresaria y tenía a varias diseñadoras alrededor todo el tiempo así que crecí en backstage de desfiles y esas cosas, este es un mundo en el que siempre me he sabido moverme.- le dije con una leve sonrisa dándole una calada al cigarro.

-Ya, se nota te noto muy cómoda en él- dije con una peuqeña sonrisa -Bueno último vestido- dije girandome para que me diera su opinión.

[Off: Sorry, no lo había visto ]