Sorprendiendo a Ben

Recuerdo del primer mensaje :

Apenas llegar a casa me había puesto a leer las cartas que Ben le había dedicado a Alma. No podía creer que un tío como él hubiera escrito esas cosas, se le daba bien el romanticismo y por un momento me sentí hasta culpable por joderles esa historia de amor. Es que jamás me había dicho a mí cosas como las que le escribía a ella... ni siquiera sabía si algún día me las podría decir.
Saqué ese pensamiento frustrante de mi mente, el plan estaba saliendo a la perfección sólo necesitaba evitar que se vieran. Cuanto menos se encontraran más posibilidades tenía de que todo continuara así. Y mientras lo tenía conmigo, tenía que lograr conquistar a Ben como fuera, esas cartas y la cantidad de lencería que tenía Alma me daban una idea de las cosas que le gustaban... así que me fuí a una tienda de corsetería que había en Fell's (o al menos parecía que era una de las tiendas en las que compraba Alma) para comprarme algún conjunto. Y cuando ya acabé las compras decidí telefonear a Ben a ver si quería que nos encontráramos en la cafetería del centro comercial.

Spoiler:

De golpe se lo tuvo tan creído que me dejo alucinando- ¿Por qué crees eso?- la pregunté intentando sonar casual pero también con algo de curiosidad. Después de todo Alma era la chica a la que me estaba tirando de vez en cuando, ¿Algo en común tendríamos no?- Es decir... A ver, claro que no va a pasar nada nunca, pero de ahí a que pienses que no podríamos ser ni amigos...-dije intentando explicarme un poco para que no pensara mal de mi pregunta.

Lo último que esperaba era que Ben se pusiera de su lado, joder... ¿porqué no se largaba con el tal Erik de una vez y nos dejaba tranquilos? -No digo que no podais ser amigos, pero ella.. tiene esa relación abierta con Erik y es una tía a la que no le importan los demás, me ha dicho que le da igual si él se tira a otras y que también ella hace eso, que no cree en la monogamía... Ben, sé que si la ves puede parecer hasta encantadora, pero es una cualquiera. Se ha tirado a toda la universidad y le da lo mismo, esa tía no tiene sentimientos.- dije desquitándome y exagerando bastante. -Yo quedo con ella para estudiar porque me da pena que nunca entienda nada.- mentí ya descaradamente. -Tú en cambio eres un sol, ella no tiene nada que ver contigo.- le dije mirándolo con una pequeña sonrisa fingida. -Siento estar siempre desconfiando de ti... sé que no perderías el tiempo con una tía como esa.- dije de paso intentando tocarle el condenado orgullo. Es que ya me estaba volviendo loca, no podía creer que se habían visto a mis espaldas... tenía que cambiar la estrategia o acabaría perdiéndolo.

Fue hablando y la fui escuchando pero poco me importaba su relación con Erik y poco me importaba su falta de monogamia, no la buscaba precisamente para una relación, eran unos polvos y ya. Pero fue diciendo que no tenía sentimientos y tampoco me parecía taaan así, no me había dado esa impresión. Igualmente sería de tontos negar que un poco me estaba haciendo dudar con todo lo que decía.- Supongo que no...-dije pensando en que en otras circunstancias seguramente no hubiese perdido el tiempo con una tía así pero con ella sentía tal atracción... Suspiré, tal vez fuera cierto todo lo que decía Martha. Tal vez fuera hora de ponerle punto y final e intentar algo sincero con Martha, ,sería cosa de pensarlo- No me la imaginaba así- dije después sonreindo levemente y mirandola siguiendo mi papel de que solo eramos "conocidos".

Sonreí de placer cuando Ben dijo eso, definitivamente estaba logrando mi punto. -No es tu culpa, tú eres diferente... tu entiendes lo que significa una relación. Pero no la culpes, quizá nadie se ha enamorado realmente de ella, a lo mejor no sabe lo que es el amor.- dije terminando mi cuadro prefecto. Era genial, cada vez me consideraba más experta en el arte de manipular.

La miré y me sentí totalmente culpable, tenía que empezar a tomarme esa relación en serio de una vez, sabía que me quería y que tuviese esa fe en mi conseguía que me sintiera fatal- Eso es triste- dije sonriendo levemente cuando comentó que tal vez nadie se había enamorado de ella- ¿Tu estas enamorada de mi?- pregunté casi necesitando su respuesta, es que yo de ella no lo estaba... Y me sentía fatal cuando lo pasaba mal por mi culpa.

Dijo que era triste y no dije nada hasta que me preguntó lo otro. -Claro que estoy enamorada de tí.- le dije sonriendo y sin dudarlo, esa era la verdad.

- ¿Si? ¿Por qué? Porque yo creo que no estoy enamorado de ti- dije mirándola y siendo completamente franco con ella, es que no se merecía las putadas que la estaba haciendo- Es que... El tema de la memoria, no me deja recordar ciertas cosas nuestras y yo...-me corté- Tal vez deberíamos dejarlo, no es justo para ti- dije tras pensar unos instantes.

Estaba tan feliz hasta hacía cinco segundos que las palabras de Ben me cayeron como un baldazo de agua fría. Claro que sabía que no estaba enamorado de mí... joder, nunca lo había estado... pero tenía esperanzas de que con el tiempo acabara conquistándolo. Definitivamente no quería que me dejara, haría cualquier cosa para evitar eso. -No digas eso... yo, no quiero que acabemos, ya me recordarás Ben, no sé a qué te refieres... pero es que yo soy feliz así contigo, no necesito más.- dije sin pensar nada, estaba siendo un desastre. Tenía que pensar seriamente. -No dejaré que nadie se interponga entre nosotros, aunque te borren la memoria... sé que me quieres en algún lugar de tu corazón, te ayudaré a encontrar ese sitio.- dije desesperándome. joder... no sabía ni cómo hablar con él.

Noté como se desesperaba y quisé morirarme, no sentía más que cariño por ella y ella era taaan buena conmigo. Dijo todo eso y por un momento lo deseé de verdad, deseé que me ayudara a encontrar ese sitio suyo en mi corazón, deseaba quererla. Era tan compresiva y yo era taaan capullo... Que no se lo merecía para nada, necesitaba dejarla libre y no seguir en esta relación tan falsa- Me he acostado con Alma- solté con la mirada clavada en el volante. Ya estaba, que me dejara, me lo merecía por cabrón, pero es que no odía empezar a intentar quererla de verdad si empezábamos con mentiras.

Escuché las palabras de Ben y no quería creerlo, pero vamos... que una parte de mí ya lo sabía. Siempre lo había sabido. Él no iba a dejar pasar a Alma tan fácilmente, era obvio... desde que la había visto sabía que iba a buscarla y ella, en fin... si ya sabía yo que era una zorra. No solo se había encontrado, joder.... se habían acostado! Pensé y pensé, me daban ganas de llorar, yo que creía que estaba siendo tan creíble y que todo me estaba saliendo tan bien... Pero no podía dejarlo, sabía que apenas nos separáramos iría a los brazos de Alma otra vez y ya no tendría forma de traerlo conmigo otra vez. Si había logrado tenerlo era por el condenado hechizo y el engaño perfecto que había montado... tenía que seguir con eso, fuera como fuera.
-Joder Ben! Y me lo dices tan... tranquilo.- dije mirándolo. Pena, joder... tenía que poner cara de pena. Yo era la víctima, pero no tanto como para que me dejara. -Cuándo fué? No mira... no me digas nada.- dije mirando hacia delante. -Ya sé cómo es ella... Por eso me preocupaba por tí.- dije. Eso, eso... Ben también era la víctima, no había podido resistirse, a cualquiera podía pasarle. -Es que... te quiero y siento que podría perdonarte, pero tú tendrías que jurarme que no la verás nunca más, entiendes?.- dije mirándolo.

Pensé que me dejaría enseguida pero para mi sorpresa se lo tomó bien, no totalmente bien como era obvio pero mucho mejor de lo que había esperado después de los celos que parecía tener con ella. La miré con atención mientras decía todo eso. ¿Tan fácil? También era cierto que apenas llevábamos 3 meses. ¿En ese poco tiempo de relación se podían considerar cuernos? Tal vez no, lo que en parte era un alivio- Vale, no lo haré-dije mirándola. Si es que era tan condenadmente buena. Me odiaba a mi mismo de verdad por hacerla esas cosas- Se acabo, ya esta, solo fue un polvo, lo siento- dije totalmente con la idea en mente de acabar lo que fuera que había con Alma. Había estado bien pero ella podía seguir divirtiendose por ahí, yo en cambio tenía una relación que cuidar.

Sonreí contenta cuando me dijo eso. Definitivamente había acabado bien, al menos ahora parecia que se esmeraría de verdad en nuestra relación... quizá había sido una desgracia con suerte, quizá hasta había sido mejor que ocurriera esto para que él pudiera sincerarse y ahora sí que lo tenía en la palma de mi mano. -Vale.- dije lo más digna que pude. -Está bien.- musité con una pequeña sonrisa. Había que hacer sacrificios pero al final lo conseguiría.

- Vale- repetí como ella cuando dijo eso. Tomé su rostro y acerqué mi rostro un poco más al suyo- Lo siento, nos irá mejor ahora, ya verás-murmuré intentándolo creer de verás, en algún punto me había enamorado de ella chica y habíamos empezado a salir. Solo tenía que recordar eso e iría bien. Acorté la distancia y la di un pequeño beso, apenas podía creer que mi confesión hubiese salido al final tan bien.

Ben dijo que "vale" y yo suspiré cuando se acercó a besarme. No tenía muchas ganas de ir ahora al parque, sobre todo porque me recordaba que Alma también disfrutaba de esos "paseos" y en este instante no quería saber nada de ella. Tenía que hacer algo con mi enfado, porque de otra forma me alejaría de ella y necesitaba tenerla cerca... tendría que ser más fría y calculadora, al final sería mi amiga y sacaría toda la información que precisaba para que Ben se enamorara de una vez de mí. Suspiré satisfecha con mi plan. -Creo que me iré a casa, si no te molesta... Podemos dejar el paseo por el parque para otro día.- le dije sabiendo que se sentiría algo culpable y que eso era mi ganancia. -Te importa llevarme hasta allá?.- le pregunté sabiendo que ahora mismo haría exactamente cada una de las cosas que le pidiera. Era el plan más perfecto del mundo.

Asentí cuando dijo eso de irse a casa, lo entendía... No me imaginaba que se quisiera quedar conmigo ahora mismo, después de todo suponía que tendría que superar algunas cosas. - Claro, te llevo, tranquila- dije apartandome de ella y volviendo a arrancar el coche. Suspiré y me puse en marcha a toda velocidad como siempre para ir hacía su ciudad y dejarla en casa.

Como lo había imaginado, Ben estuvo de acuerdo con mi plan. Enseguida aceptó y comenzó a andar hacia mi casa a toda velocidad. No dije nada, no abría qué decir y a la vez tenía que pensar un poco más tranquila cuáles eran los pasos a seguir. ¡Se habían acostado! Cada vez que lo pensaba me hervía la sangre. Hubiera querido saber más cosas, dónde había sido... si en su casa o en la de Alma, cuándo había sido... si antes de mi "visita" a Alma o después. Joder, me la había puesto en contra y era una estrategia pésima, necesitaba ser su amiga, que se retorciera de culpa antes que joderme a mi propio novio... suspiré agotada por mis propios pensamientos y me dediqué a mirar la carretera con la vista perdida en el horizonte. Cuanto antes llegáramos, mejor.

Puse la radio casi enseguida, me daría algo con ese silencio tan tenso, no me gustaba nada eso pero estaba claro que esta situación no animaba mucho a la conversación. Pensé en todo lo que había pasado hoy y dudé en si había hecho bien en contarselo, pero ya estaba hecho y en parte no me arrepentía, esperaba que todo fuera mejor. Tras un rato fuimos llegando a su ciudad y aparqué en frente de su casa- Llámame mañana si tienes ganas...-dije mirandola un segundo sin querer obligarla a nada ni nada del estilo.

Fuimos en silencio todo el viaje y por suerte prendió la radio, al menos no se sentía tanto la tensión del ambiente. -Claro que te llamaré.- le dije con una pequeña sonrisa cuando se acercó a decirme eso apenas llegar a mi casa. Me acerqué a darle un pequeño beso antes de ya bajarme del coche. No quería que se quedara tampoco con la sensación de que las cosas estaban tan mal entre nosotros.

Asentí con una pequeña sonrisa y la vi bajar del coche. No me puse en marcha hasta que la vi entrar en casa. De verdad que parecía que la cosa no estaban taaan mal, con un poco de suerte conseguiríamos sacar la relación adelante. Me puse en marcha y puse rumbo a mi casa enseguida.