Breathe and don't think (scarlett)

Estaba en mi mansion mirando el techo de mi pared desde mi cama, me habia levantado hace unos minutos aunque el tiempo no me importaba ahora, despues de regresar de mi largo viaje me di cuenta del porque me fui en primera pero se supone que estaba mejor y no podria pasarme nada malo aqui, ademas extrañana a mis amigos y eso me ayudaria. Cerré mis ojos y senti como si pasaran un alcohol bastante fuerte por mi garganta raspandola en el trayecto y todos mis sentidos se magnificaron enseguida y escuche que alguien tocaba mi puerta.

-Señora fells deberia irse-dije lo bastante alto para que me entendiera, ella venia a revisar si casa de vez en vez y sabia lo que eramos tanto mi hermano como yo asi que escuche sus pasos por las escaleras a lo que decidi levantarme. Me puse una playera y baje al sótano abriendo la nevera donde solia guardar Damon y yo la sangre. "Vacia" eso decia toda la maldita nevera y mi garganta raspo mas.

Tome el auto y me dirigi hacia el hospital del pueblo aparcandolo y bajando para entrar.

Note que tenia frio en sus brazos y sin pensarlo me quite la chaqueta que llevaba puesta y se la pase por los hombros para taparla un poco, yo no la necesitaria. Rei cuando dijo que si no habia un bar o algo parecido. - No te gustan muchos los parques-dije aunque no era pregunta lo podia intuir porque teniamos menos de 10 mminutos que habiamos llegado aqui y ya queria irse. Asenti y mire el grill al otro lado de la calle y lo señale. - Es el mejor lugar-le dije sincero y movi la cabeza para que caminaramos hasta este. -Acerca de tu hermana, no es bueno que se lleven mal, en verdad te lo digo por experiencia-le dije sincero porque eran la misma sangre practicamente

Escuche lo que decia sobre su hermana y en verdad pude notar una rivalidad entre ellas, como yo con mi hermano, tal vez teniamos mas en comun de lo que yo podria imaginar. Llegamos al lugar y abri la puerta para que pasara dando unos pasos pero ella se quedo viendo todo. -Vamos no matan aqui-le dije con una sonrisa tomando su manos para caminar con ella hasta una de las mesas que eran exclusivamente para dos personas. Jale si silla para que se sentara y despues hice lo mismo cuando un chico se nos acerco. - Como te eh dicho antes...dale una oportunidad, se que este lugar no es lo que acostumbras pero...dale una oportunidad-repeti con una sonrisa saludando al chico que conocia del instituto. -Puedes traerme un americano y un emparedado-le pedi con una sonrisa esperando a Scar

Rei al escuchar su descripcion del lugar y asenti con una sonrisa burlona en mi rostro. -Una cabaña-repetí sus mismas palabras observando el lugar, tal vez se referia a que no era tan ruidoso y era bastante acogedor y tranquilo estar aqui. -Supongo que vienes de un lugar increíblemente grande y con clubs por todas partes...New York tal vez-deduje aunque no estaba muy seguro de ello. Después me pregunto si podia llamarme Steff y asentí con una pequeña sonrisa mirando como olía mi chaqueta cuando el chico se acerco con nuestras cosas y le agradecí. -Apuesto a que tu tambien hueles bien-le dije levantandome un poco de mi silla para acercarme a donde estaba y olerla, claro que podia oler su aroma a kilometros pero esto lo haria verse mas normal. - Hueles en verdad increible-le dije exagerando un poco y tome su mano acariciandola suavemente. -Anda come algo-le pedi soltandola para tomar mi taza de café

Escuche su pregunta cuando le di un mordisco a mi emparedado y asentí limpiándome la comisura de mis labios. -Alguna vez llegue a ir pero, no creo que fuera lo mio. Ya sabes muchas personas a tu alrededor y es la ciudad que nunca duerme-me encogí de hombros, no era bueno para un vampiro andar en calles llenas de gente cuando estabas sediento. Cuando dijo que encajaria muy bien en ese lugar no sabia muy bien a que se refería, la mire con los ojos ligeramente cerrados y negué enseguida. - Nací en un pueblo pequeño de Italia, parecido a este. Me gusta viajar pero pertenezco aqui-dije sincero, me gustaba hacer viajes de vez en cuando a las grandes cuidades pero siempre y cuando no tuviera algun problema con la sangre y estuviera mas que estable.

No pude evitar controlar mis poderes y pude percibir uno de sus pensamientos que bloquee de inmediato mirando mi emparedado. -Créeme que ahora mismo no la extraño-le dije sincero porque después de haber visitado mi pueblo hace unos meses y haber sido torturado no quería saber mas de ese lugar, no por un tiempo. -Estas a dieta o algo por el estilo?-le pregunte llamando al camarero de nuevo, habia bebido de ella y necesitaba alimentarse, tal vez no se sentía mal ahora pero mas tarde lo haría. -Puedes regalarme un pastelillo-le pedí y después de unos minutos lo trajo así que se lo puse a Scar. - Si quieres preguntarme otra cosa tendras que darle una mordida a eso-le dije como si fuera una especia de juego

Mire la pequeña mordida que le dio apenas al pastelillo y puse cara de enojado aunque estaba exagerando todo. -Hay niños en muchas partes del mundo que desearían un poco de eso y tu no lo quieres?-le pregunte como si fuera el peor crimen del mundo y despues rei. -Eso es hacer trampa pero esta bien...puedes peguntar-le dije con una sonrisa terminando yo con mi emparedado y tomando su pastelillo. yo no solia llenarme tan rápido y menos ahora que tenia sed por lo que tapaba esa necesidad con comida de humanos.

-Solo no preguntes mi edad-dije bromeando aunque creo que eso ya lo habia hecho o supongo ya lo sabia, mi edad aparente

Cuando dijo que no sabia hice una mueca y deje a un lado mi taco, recargandolo sobre la pared para acercarme a donde estaba recargada y poner ambos brazos a sus costados acercándome a ella. -Tienes suerte de que sea buen maestro-le dije con una sonrisa tomando el acomodador de las bolas que estaba detrás de ella y alejarme caminando hasta el punto de inicio donde las deje bien alineadas. -Primero te enseñare a tirar-dije quitándome la chaqueta y botándola acercandome de nuevo a ella para indicarle que tomara el taco y se girara a la mesa.

Me cruze de brazos para ver cuando se giraba en intentaba tomar el taco aunque se le iba de repente de las manos, me reí acercándome a ella acomodándome detras alargando una de mis manos para tomar la que esta sujetando el taco por la parte de enfrente. -Asi-le indique acomodando sus dedos y pasando mi otra mano hasta el final de este tomando la suya. -Con esta mano das la fuerza para que golpees las bolas, con la que tienes enfrente es la direccion-le explique un poco meciendo su mano con la mia al tiempo que el taco se movia de adelante atras. -Podras hacerlo sola?-le pregunte curioso

Me aleje de ella para ver como hacia su tiro un poco débil por lo que la bola blanca golpeo de manera suave las demás apenas moviendolas de su lugar, me acerque a la mesa para volver a acomodarlas y sonrei asintiendo. -eres buena, pero si juego contigo te ganaría fácilmente-le dije con una sonrisa un poco sincero tomando su cintura con ambas manos para hacerla girar de nuevo a la mesa esperando a que tomara su taco una vez mas. Esta vez no la deje hacer el tiro sola y movi su mano con la mia unas veces fijando el tiro. -Respira-le susurre en su oido al sentir su pecho presionado y sin moverse o por lo menos escucharlo.

Sonreí al escucharla sintiendo su mano acariciar mi cabello, la mire una vez mas directo a sus ojos y subí una de mis manos que estaban en su cintura hacia su mejilla la cual acaricie con la parte de atrás de mi mano apenas rozando su piel. Me acerque a sus labios tomándome mi tiempo sintiéndolos rozar aunque me contuve y mordí mi labio desviándome para besar su mejilla. -Necesito decirte algo-dije sobre su oido recordando que había hecho que olvidara cuando la mordí hace unas horas y como tenia un sentimiento de compasion que me había dejado mi amiga Lexi sentí la necesidad de decirle antes de engañarla pensando que era un chico normal