Tomando algo de aire (Ben)

Estaba comenzando a anochecer y decidí ir al parque a caminar un poco, no tenía ahora mucho sentido para mí correr en plan entrenamiento como hacía antes, pero al menos podría tomar algo de aire, conversar con algún vecino... no sé, salir de esa locura de "casa-trabajo / trabajo-casa" que me tenía un poco aburrida últimamente. Comencé a andar un buen rato, parando en diferentes sitios y luego me detuve en un árbol, tumbándome sobre el césped y poniéndome a leer un libro mientras duraba la luz de la tarde.

Look de Alma:

Alma se había ido de casa diciendo que se iba a caminar y asentí sin hacerla mucho caso mientras yo seguía a lo mío mirando unas fotos del trabajo que habían salido defectuosas sin entender por qué. ¿Habría calibrado mal la cámara? Era casi imposible, se me daba genial todo eso... Lo mismo es que se me había jodido la cámara. Chasqueé la lengua ante ese pensamiento, me encantaba esa cámara, sería una putada tener que comprarse otra...

La cuestión es que el tiempo pasó y cuando fui a buscar a Alma por casa no estaba. Cierto... Me había dicho que se iba. Últimamente no coincidíamos mucho por casa y nos habíamos metido en una rutina sin sentido que no entendía ni como habíamos llegado a eso... Tal vez fuese hora de volver a prestarla algo más de atención.

Salí de casa tras coger la chaqueta y me dejé llevar un poco por el vinculo de sangre hasta el parque. La encontré bajó un árbol leyendo y sonreí como un tonto, esa imagen me recordaba mucho a cuando la había conocido- Hey, ¿molesto?- la saludé con una pequeña sonrisa

Estaba leyendo sentada de lo más entretenida cuando me interrumpió Ben diciendo eso. Levanté la mirada y lo observé con una sonrisa. -No, nunca molestas.- dije complaciente de broma porque sí que a vecea podía llegar a molestar, sobre todo cuando se empeñaba en molestar precisamente. Le hice un gesto a mi lado para que se  tumbara en el césped junto a mí. -Siento que hace mil millones de años que no me tomo una tarde libre para tumbarme y hacer algo tan tonto como leer un libro...- dije con una pequeña sonrisa esperando que ya se sentara y marcando el libro en la página que iba antes de cerrarlo un segundo.

- Ahora si que me siento mal- dije sonriendo levemente porque de verdad parecía que la había cortado en algo que hacía mucho que no hacía. Me senté a su lado y miré el libro que estaba leyendo- ¿No podías leertelo en casa? Al final va a resultar que si que molesto y solo me estas mintiendo- dije entornado los ojos de broma.

Me hizo reir que dijera eso. -Nah, ya he leído bastante... en cualquier caso tampoco hubiera seguido mucho mas.- dije por eso de que ahora sí me había molestado. Murmuró eso de que podía leerlo en casa apenas acabó de tumbarse. -No es lo mismo, siempre me ha gustado eso de leer al aire libre y además antes aproveché para caminar un poco... No sé, últimamente parece que he estado todo el tiempo en el trabajo o en casa pero sin ni un minuto para mí, extrañaba el ocio.- dije sonriendo y mirándolo después.

-¿Tan malo es estar en casa conmigo?-murmuré mirándola mal de broma, pero bueno era cierto que nos habíamos metido un poco en la rutina y era normal que quisiese tiempo para ella sola. Cada vez estaba más convencido de que no debería haber venido a buscarla, pero bueno ya era tarde. -Creo que yo también extraño un poco eso- dije pesando en sus últimas palabras.

Lo miré entornando los ojos cuando dijo eso de que era malo estar con él en casa. -Claro que no es así! Además no sé porqué sales con eso, yo no te he reprochado nada, tú has preguntado.- murmuré con una pequeña sonrisa. -Sólo, supongo que he trabajado demasiado este último tiempo... ya te había dicho que estoy cansada de viajar todo el rato, si no estoy en el trabajo estoy dentro del coche y a veces pienso que no tiene sentido. Joder, somos vampiros ¿Porqué me lo paso trabajando? Tendría que ser más fácil conseguir dinero...- dije sin poder evitar algo de malicia.

-Claro que hay formas de ganar dinero más fáciles, pero no son legales o te meten en muchos líos- dije con burla, por algo yo le debía dinero a tanta gente...-Si tan cansada estas dejalo por un tiempo, ya no necesitamos tanto el dinero- ahora yo también trabaja y estaba claro que trabajando los dos íbamos más "sobrados" de dinero que si solo lo hiciera uno pero igual nos la podríamos arreglar, ya lo habíamos hecho antes cuando ella trabajaba y yo no.

Sonreí cuando dijo eso negando con la cabeza. -Pues, tengo mi expediente de antecedentes criminales super limpio... así que.- dije haciéndole un guiño como si tuviera que ir a hacer algo ilegal nomás que por estrenarlo. Ya dijo lo demás y lo pensé realmente. -Podría... Quedarme solamente con algunas cosas o no sé, retomar el negocio de Aitana aquí. Es que lo que más cansada me tiene es eso de viajar. Podría intentar guardarme para las mejores campañas, es cierto que ahora no nos falta el dinero.- dije porque él estaba empezando a trabajar como fotógrafo y entonces teníamos mejor posición. De todos modos no iba a ser fácil, aunque lo negara en el fondo sí que era una niña pija, rica y caprichosa, estaba acostumbrada a comprarme ropa de diseño, pagar entradas a los sitios que me daba la gana y (sobre todo) viajar a cualquier parte del mundo sin andarme con vueltas. No iba a alcanzarme con que sobreviviéramos, era un hecho.

-Anda, cállate- dije riendo y dándole un golpecito en el brazo cuando insistió con eso de hacer algo ilegal.- ¿El negocio de Aitana? Lleva años cerrado-dije entornando los ojos con una sonrisa- Pero ya esta, si no quieres viajar tanto pues coge menos campañas y ya esta, sabes que te apoyaré elijas lo que elijas- dije sonriendo mientras me tumbaba un poco sobre el césped.

Sonreí cuando me dijo eso antes que nada y puse cara de niña buena de broma enseguida. Luego ya dijo lo demás. -Sí, supongo que menos campañas estará bien... No sé, no quiero tampoco dejar de darme algunos gustos.- reconocí mirándolo de reojo, sabía que se metería conmigo pero es que era la verdad! -Así que lo de haceer algo ilegal lo seguiré considerando... al fin y al cabo ser vampiros tiene que tener alguna ventaja.- dije con una pequeña sonrisa maliciosa.

Entorné los ojos enseguida- Mira que eres pija... Deberías haberte buscado otro marido, en serio- dije de broma porque desde ha que estaba visto que a mi eso del dinero no era algo que me sobrara- Vale genial, me encantara ir a verte a la cárcel, debe ser sexy- susurré de broma mirándola de reojo con picardía.

Dijo eso y me encogí de hombros, ya no podía renegar de eso así que... -Es que no lo pensé, dí por hecho que si eras hijo de un marqués y vivías en esa casona en Fell's Church no estarías tan tirado, mi error.- dije de broma mirándolo de reojo. Ya dijo eso de la cárcel y me mordí un labio mirándolo, era increíble como daba vuelta las cosas como se le antojaba. -Nah, pero  hablando en serio... No se puede hacer una estafa, algo así? No digo meterme en un bar de mala muerte a hacer apuestas, que ya he tenido sufiientes experiencias en ese sentido y no han sido bonitas.- dije entornando los ojos y recordando primero lo de Taylor Lautner y luego lo de New York, cuando había acabado llamándole y pidiéndole auxilio.

- Un terrible error teniendo en cuenta que no te daré el divorcio tan fácil- dije sonriendo levemente hasta que siguió con el tema de lo ilegal. Entorné los ojos, cuando se la metía algo en la cabeza algo era complicado sacárselo- Alma para estafar a alguien no hace falta que seas una vampira, buscar algún negocio con que estafarlos y listo- dije como si hablara con una niña.

Entorné los ojos en broma cuando dijo que no me daría tan fácil el divorcio y luego ya dijo lo demás. -Perdón, señor experimentado, es que no me he dedicado todavía a la ilegalidad... soy muy cría e inocente como es obvio.- le dije sonriendo en broma por el tono que había usado como si fuese cosa de todos los días eso de estafar. -Y no sé, no me he puesto a ello... pero aprovechar el ser vampira será mejor, puedo obligar a alguien a que quite dinero de su cuenta y me lo dé. Y listo, nada de rollos.- dije como si fuera algo realmente tan fácil.

- Aja, sobre todo inocente- susurré enarcando una ceja mientras la miraba. Fue diciendo todo lo demás y sonreí, de verdad que ya ni sabía si me estaba vacilando o no- ¿Me lo estas diciendo en serio? ¿Quién eres tu y que has hecho con mi esposa?- dije porque jamás me hubiese esperado que me soltara algo así.

Sonreí cuando dijo lo primero sin darme ni un poco de crédito con eso de ser inocente y ya dijo lo demás haciéndome reir. -Ya, ya... parece que no hay manera. Tendré que dedicarme a trabajar como todo el mundo... es así.- dije sonriendo de broma como si eso fuera un problema realmente. Siempre me había gustado trabajar, pero es que últimamente de verdad que no había parado casi nunca. -Creo que nos podríamos igual tomar unas vacaciones un día de estos... Hace rato que no viajamos.- murmuré con una pequeña sonrisa pensando en eso.

- Nah, sabes que si quieres hacer alguna estafa te apoyaré- dije medio bromeando pero diciéndolo en serio, la ayudaría en lo que fuera. Después dijo lo de las vacaciones y asentí- No estaría mal la verdad... ¿Dónde te gustaría ir?- la pregunté para ver en que pensaba.

Sonreí cuando dijo eso de que me apoyaría si quería hacer una estafa. -Eso es un verdadero esposo, en las buenas y en las malas.- dije riendo porque no era mi idea terminar convirtiéndome en estafadora, aunque... tenía que reconocer que ahora eso de la estafa ya me daba vueltas en la cabeza así que a saber si no encontraba el modo de convertirme en una especie de Robin Hood pero para mis propios intereses... había que pensarlo. 
-Una playa... Ya sé que no es tu lugar favorito del mundo, pero la verdad es que sí que me gusta el sol... y andar en bikini, el mar... es una pena que no pueda disfrutarlo como antes, pero no deja de gustarme.- dije sabiendo que no era para nada un lugar que a él pudiera gustarle.

- Tu sigue burlándote que al final no te haré nada de caso- dije mirándola mal de broma. Ya mencionó lo de la playa y entorné los ojos- ¿En serio?- dije sin poder evitar sonar algo decepcionado, ella sabía de sobra que el sol no me iba para nada y estar en la playa significaba aguantar mucho sol-No te apetece algo más...En plan nieve, donde poder estar a la noche calentitos y acurrucados frente a una chimenea?- susurré en plan picaro y un poco romántico como si realmente el calor o el frío nos fuera a afectar.

Negué con la cabeza sonriendo cuando dijo lo primero y ya escuché su tono decepcionado y al final su propuesta. -Vale, no suena mal si me lo vendes de esa forma.- dije con una sonrisa pícara por cómo me había hecho la propuesta de ir a algún lugar con nieve. -De hecho, creo que seria bonito y todo el rollo de acurrucarse siempre me gusta... así que.- dije casi que aceptando su propuesta. -Pero a dónde te gustaría ir... ¿Suiza?¿Andorra?.- dije proponiéndole alguno de los lugares que tenían complejos que me gustaban.

Sonreí cuando dijo eso- Soy genial convencido a la gente, tienes que reconocerlo- dije de broma mientras la miraba.-Mmm...A una chica pija como tu le pega más Suiza, esta claro-la piqué con una pequeña sonrisa mientras la cogía del rostro y la daba un pequeño beso.

-Dímelo a mí!.- dije cuando dijo eso de que era genial convenciendo gente. -No quería ser vampira y aquí me tienes... no creía en el matrimonio y me he casado. Si es que me tienes a tu merced.- dije con una sonrisa mirándolo a los ojos. -Vale, Suiza entonces.- murmuré sin quejarme esta vez por eso de que era una chica pija, tanto que me lo decía lo estaba empezando a asumir. Me dió un beso y sonreí en sus labios contenta con ese plan, de verdad que tenía ganas de frenar un poco. -¿Y cuándo podemos ir? Tienes algun compromiso?.- le pregunté para ir haciéndome a la idea.

-Porque no podemos tener hijos que si no hubiésemos tenido... Cinco, -dije diciendo un número al azar- Si hubiese querido te hubiese convencido- la piqué un poco sonriendo de broma, pero es que según decía todo eso si que era cierto que la había convencido de muchas cosas- Es sexy-susurré sin dejar de mirarla a los ojos por eso de estar a mi merced. Nos separamos tras el beso y sonreí- La verdad es que no, así que cuando quieras... Mañana, o el fin de semana, o el mes que viene... Cuando quieras-dije sin más.

Dijo lo primero y entorné los ojos. -Eres tan creído...- murmuré con una sonrisa por eso de los hijos, pero no dejaba de ser gracioso la verdad. Nos besamos y me mordí un labio cuando dijo que era sexy. -Nah, a tí todo te parece sexy... no es mérito.- dije enseguida antes de que respondiera lo del viaje. -Mañana estaría bien... no quiero que se nos pase el momento de inspiración... que nos conozco y nuestros momentos de equilibrio hay que aprovecharlos al máximo o estamos listos.- dije riendo pero era un poco cierto. Si cada día nos picábamos y nos reconciliábamos mil veces... estaba claro que la nuestra no era una relación apta para gente con problemas de nervios ni nada así.