Vacaciones en Suiza (Ben) +18

Recuerdo del primer mensaje :

Me costó despertarme un poco, pero al final no había tiempo que perder así que me incorporé todavía algo dormida. Busqué la ropa que había separado para cambiarme y fui vistiéndome mientras Ben también se preparaba y acababa de organizar todo. Cuando acabé bajé finalmente de la habitación.

Look de Alma!:

-Lista!.- le dije dando una vueltita como solía hacer cuando ya estaba preparada para ir a algún sitio. Salimos enseguida. Ben había aprovechado mientras yo dormía para cargar las maletas en el coche así que no perdimos nada de tiempo.

Al poco rato ya estábamos en el aeropuerto a punto de abordar rumbo a Suiza. Lo miré de reojo revisar los billetes de los vuelos y sonreí de lado. -Lo pasaremos genial. No sabes las ganas que tengo de ganarte mil carreras de esquí..- dije mordiéndome el labio mientras ya abordábamos.

Dijo eso primero para "justificarse" y entorné los ojos en broma... nah, si podía ir a mentirle a otro pero no a mí! Ya dijo lo demás y asentí. -Vale, no me parece mal la idea... además ha sido un poco intrigante el modo en que se apareció sin dejar demasiado a la imaginación y tan directo ¿No?.- dije mirando un instante hacia el grupito que nos había señalado. Allí estaban bebiendo algo y riendo. Parecían amigables.

- Si, la verdad es que si, si quería ser misterioso para dejarte con la intriga y que fueras lo ha conseguido- dije sonriendo mientras les miraba, es que era raro, ni si quiera era un tío super guapo como para tener esa confianza- ¿y en que plan iremos? ¿Cómo amigos? ¿Cómo novios? ¿Cómo... amantes?- dije lo último en plan pícaro de broma por como sonaba.

Lo miré cuando me preguntó todo eso. -Te da morbo eso, no?.- dije sonriendo y un poco metiéndome con él por la manera en la que había dicho eso de "amantes". -Pues, como quieras... No tengo problemas, si quieres algo "informal" por mi va bien... si quieres ser mi amante, tampoco me opongo a eso.- dije con una sonrisa pícara mirándolo a los ojos.

-No, no me da morbo...-dije casi enseguida, aunque medite un instante- O sí, no lo sé...-dije sin estar muy seguro. Si lo pensaba fríamente las veces que había tenido amantes me había sentido culpable la mayor parte del tiempo pero... Si también tenía su morbo, no lo podía negar- Iremos como lo que somos y ya, así no habrá líos...-dije tras pensarlo y mirándola para ver que pensaba. Lo de ir en plan informal sonaba tentador pero... A saber.

Sonreí cuando rechazó mi argumento pero acabó dándome un poco la razón. Al final dijo que mejor ir como lo que somos y sonreí negando con la cabeza. -Eres tan modocito a veces que me dan ganas de comerte a besos.- murmuré con una sonrisa picándolo un poco pero aceptando su idea. Es que ya nos conocía, ir de amigos o en plan informal significaba que otros acabaran acercándose más de la cuenta y esas situaciones siempre nos ponían en lugares raros con los que se hacía dificil lidear. No hacía mucho habíamos acabado metidos en una orgía con compañeros de trabajo tras disimular todo el día que nos conocíamos de antes y que ¡estábamos casados! -Pero tienes toda la razón, mejor ser sinceros y evitar líos.- murmuré. Ya había terminado mi segundo whisky. -Quieres quedarte un rato más o volvemos al hotel?.- le pregunté porque no sabía si pedirme algo más o qué.

La miré mal- No me piques que podemos acabar mal...-me conocía, al final la diría de ir como amigos por no quedar como "modosito" y acabaríamos mal. Me terminé mi copa y saqué la cartera para pagar- Mejor vámonos, creo que es demasiado temprano para que empieces con tu tercer whisky-la piqué un poco, pero era verdad, era temprano todavía.

Iba a decir algo sobre lo mucho que me gustaba cuando se ponía cabrón, pero de verdad creía que íbamos a acabar mal y mejor no tentar la suerte... que llevábamos casi 24 horas sin pelear y eso a estas alturas era casi un record.
Dijo eso del whisky y me hizo reir. -Ya, es cierto... parezco una vieja borracha y eso no tiene ni un poco de clase.- dije sonriendo en broma con un gesto pijo. Ya pidió la cuenta y tras pagar nos levantamos y salirmos de ese local comenzando a caminar por los senderos entre la nieve, yendo otra vez al hotel donde estaba nuestra habitación.

Fuimos hasta el hotel y pasamos el resto del día sin hacer gran cosa, descansando y disfrutando de las vacaciones, comimos de un botones del hotel, nos tiramos en la cama a no hacer nada, dimos una pequeña vuelta por los alrededores y finalmente nos duchamos y demás cuando fue anocheciendo para prepararnos e ir a la fiesta esa.

-¿Y si son cazavampiros?-dije de golpe de broma mientras salía de la ducha e iba a por ropa a mi maleta que ponerme.

Pasamos el resto del día relajándonos, paseando un poco, descansando... Al final tocó empezar a arreglarse para ir a esa "fiesta" a la que nos habían invitado.
Ben salió de la ducha diciendo eso, yo estaba ya cambiada mirándome en el espejo y maquillándome un poco. Alcé la mirada enarcando una ceja sin tomármelo tan en broma. -No me parece tan gracioso... Jodde Ben, no lo había pensado. Nunca he tenido que lidear con cazavampiros, cómo nos damos cuenta?.- dije mirándolo a través del espejo.

Spoiler:

-No te preocupes que cuando sientas la estaca en tu espalda te darás cuenta...-dije de broma, pero había poco más que decirla, los cazavampiros solían ser simples humanos que se dedicaban a ello, como mucho había algún brujo pero era raro. Me acerqué a ella y la tomé por la espalda mientras se maquillaba- ¿Cómo puedes estar tan guapa? ¿Pasaría algo si te quitara ese vestido y te llevara a la cama?- murmuré con picardía por si colaba y pasando un poco del tema de los vampiros mientras besaba un poco su cuello. Se había puesto realmente guapa para la fiesta.

Dijo eso primero de la estaca y me recorrió una sensación de temor. -¿Bromeas, no? Una vez dijiste que podías darte cuenta de los cazavampiros, que solían dejar en evidencia el desprecio que sentían por los vampiros...- dije recordándolo y tratando de que eso sirviera de algo. No me hacía gracia enterarme por recibir una estaca en la espalda la verdad.
Se acercó y me abrazó dándome un beso en el cuello y murmurando todo eso. Sonreí y me mordí un labio. -Ajá, podrías...- dije sin negarme. -Se nos haría algo tarde, pero podrías...- murmuré sin cortarme mirándolo todavía a través del espejo. -Cuéntame ¿Qué me harías? A lo mejor, me dejo convencer...- susurré dejando sobre la mesa el lapiz delineador con el que había estado hasta hacía un instante.

Entorné los ojos- Si Alma, obviamente si te tratan mal y se nota su desprecio es un gran indicador, más si va acompañado de verbena...-dije porque eran las cosas más características, que un humano llevara verbena y odiara a los vampiros ya era algo, a lo mejor no todos eran cazavampiros pero desde ya que te debía poner en alerta.
Pensaba que me cortaría enseguida así que cuando me siguió el juego con lo del vestido no pude menos que sonreír- Si, es verdad llegaríamos tarde, pero lo disfrutarías mucho- susurré medio de broma. Me preguntó lo que la haría y mordí su cuello juguetonamente- Te masturbaría, como tanto te gusta gusta... Con mi boca-susurré en su oído con mucha picardía mientras mis manos recorrían su cintura.

Dijo eso primero y entorné los ojos porque me trataba como a una niña. Pero ya comenzó a decir lo demás con lo que desvió por completo mi atención. Escuché sus palabras sintiendo como me encendía y al tiempo que iba acariciándome un poco la cintura. -Joder... No nos demoraríamos tampoco tanto ¿No?.- susurré con picardía enarcando una ceja y deseándolo ahora de verdad.

Sonreí- Seremos rápidos, prometido- murmuré de broma mientras la giraba entre mis manos. La di un pequeño beso y enseguida la empujé hacia la cama- Venga, quítatelo rápido, no tenemos mucho tiempo- dije casi como en plan juego.

Prometió que seríamos rápidos y sonreí mordiéndome un labio. Me empujó algo hacia la cama y me giré para que ayudara con la cremallera quitándome luego el vestido y dejándolo allí prolijamente sobre la mesa frente al espejo. Estaba todavía descalza y llevaba ropa interior a juego como solía hacer cuando iba con vestidos de fiesta. Me giré luego a mirarlo, esperando. -Soy toda tuya.- dije mordiéndome el labio con picardía. Es que de verdad que ahora mismo esa tontería me había excitado sobre manera.

Me hizo gracia como se quitó el vestido y lo dejó colocadito sobre la mesa. Era taaan pija algunas veces... La obligué a tumbarse sobre la cama y fui un poco sobre ella- Lo sé, jamás serás de nadie más- susurré un poco creído antes de ir con intensidad a sus labios, besándola y desquitándome un poco contra sus labios por lo guapa que me había parecido antes. La había prometido ir rápido así que enseguida bajé con mis labios por su cuello y besé sus pechos por encima de su sujetador mientras llevaba mis manos hacía su ropa interior y se la comenzaba a quitar, rozando en cuanto podía su sexo sin cortarme demasiado.

Dijo eso sonando totalmente territorial y haciendo que me estremeciera al tiempo que lo veía tumbarme de una vez en la cama y venirse sobre mí con total determinación. Lo sentí besarme y continué sus besos hasta que ya se dedicó a mi cuello y fue bajando por mis pechos acariciando de paso mi sexo con sus manos, haciéndome estremecer lentamente. -Joder Ben, no te cortes...- dije como si hiciera falta mientras cerraba los ojos y los puños sobre las sábanas dejándome hacer totalmente en sus manos.

Sonreí cuando se abandonó esa manera en la cama para mi, siempre me había parecido muy sexy que se dejara hacer por mi de tal manera. Rodeé su ombligo con mi lengua y seguí bajando hasta llegar a su sexo. Abrí sus piernas más con mis manos y comencé a darla placer con mi boca, primero despacito, recorriéndola entera con mi lengua, presionando en los sitios oportunos antes de ir con algo más te intensidad, succionando y jugando con ella sin cortarme.

Comenzó a bajar con besos, lamiendo mi ombligo y llegando finalmente a mi sexo. Abrió con sus manos mis piernas y ya dedicó a darme placer, lamiendo mi sexo y haciendo que la respiración se me entrecortara. Encorvé la espalda de placer cuando ya se dedicó a succionar, presionando y dando pequeños besos, alternando su lengua y sus labios con una destreza que solamente Ben tenía. Estaba llevándome al condenado cielo y ni siquiera habían pasado más que un par de segundos. Lo adoraba, adoraba todo de él.

Era un poco de locos, íbamos a llegar tarde y todo había empezado por mi parte sin muchas expectativas de que me fuera a seguir el juego... Pero lo había hecho y ahora la tenía allí encorvando la espalda de placer como tanto me gustaba. Si es que estaba claro que siempre habíamos tenido una relación muy sexual... Fui acariciando un poco de pasada sus muslos sin tomarla de la cintura para dejarla cierta libertad y seguí a lo mío, lamiendo y succionando del modo que sabía que la gustaba, aumentando la intensidad según notaba que se iba retorciendo bajo mi lengua cada vez más.

Ben sabía cómo moverse y me estaba haciendo desquiciar con cada uno de los roces. -Joder... Ben... Joder.- fui soltando sin poderme controlar entre gemidos, me tenía totalmente al límite y ya no podía más. De pronto se me cruzó por la mente una idea y no podía ya apartarla así que no me corté. -Muérdeme, eso quiero... joder, muérdeme y no dejes de darme placer... Lo quiero todo Ben, por favor...- le ordené, le pedí, le rogué. Estaba loca por él y ahora mismo quería que me hiciera ver las estrellas de verdad.

Sonreí internamente por sus gemidos y después sonreí algo más al escuchar esa mezclas de ordenes y de suplicas que me hizo- Joder Alma- susurré totalmente a mil por sus palabras. Por supuesto que la hice caso. Desenfundé mis colmillos y la mordí en la ingle comenzando a beber de ella mientras ahora eran mis manos la que la daban placer. Penetrándola con mis dedos con descaro y con intensidad sin cortarme para nada mientras bebía de ella una y otra vez.

Dijo eso y suspiré sintiendo como se disponía a cumplirme el deseo haciendo exactamente lo que esperaba. Apenas me mordió en la ingle gemi otra vez de placer, adoraba la forma en la que hacía cada cosa y sentirlo tan alterado me estaba desquiciando. Sus dedos invadiéndome con descaro, haciéndome ver las estrellas mientras sus colmillos se hundían en mi carne... era una delicia, no podía sentirme más al borde. Suspiré, gemí una vez más, intentando controlarme mientras apretaba con mis puños las sábanas e intentaba no moverme, disfrutando a tope de lo que hacía.

Bebí de ella todo lo posible sin estarme cortando demasiado y cuando noté que era suficiente volví a su sexo con mi lengua, ayudando a mis dedos en esa tarea de darla placer sin descanso. Todavía podía sentir su sangra en mi garganta y era una sensación totalmente asombrosa. La sentí gemir cada vez más y más fuerte y no paré hasta que estalló llegando al orgasmo.

Ben siguió bebiendo y cuando dejó de hacerlo sentí otra vez su boca en mi sexo. Con su lengua y sus dedos no dejó de darme placer haciendo que ya no me cortara, gimiendo más fuerte y dejándome llevar hasta que estallé llegando al orgasmo entre suspiros. -Joder, Ben.... joder...- dije sin cortarme, revolviéndome en las sábanas mientras sentía como todo el cuerpo me latía. No podía ser más excitante todo eso.