Tomando algo de aire fresco

Recuerdo del primer mensaje :

Volvía de vuelta de mi paseo por el cementerio y decidí descansar un poco en el puente.
Cuándo me encontraba a la mitad de este me subí al muro del puente y me senté en el dejando descansar mis piernas colgando del puente.
Me entretenía con observar como el agua realizaba su recorrido y de vez en cuando observaba algún pez saltando a por insectos que pasaban por allí.

-vaya, nunca pensé que echaría de menos a mi familia... -Susurré.

-Puede que tengas razón...

Susurré.

-La tengo, 450 años aquí me han enseñado mucho - dije riendo y acariciando su mejilla con delicadeza

-Eres una pederasta. -Dije bromeando.

Me denunciaras? - pregunté con sonrisa pícara- puede que termine matando al juez, al policía y a todos los demas eh!

-Mmm... vale, entonces prefiero que te quedes aquí y no mates a nadie.

Dije bromeándo.

-Lamento decirte que ... estoy en contra de la muerte animal, así que no me alimento de ellos si no de los humanos - dije con una sonrisa torcida - por lo tanto tengo que matarlos muchas veces, sobretodo cuando no cooperan

Levanté las manos cómo si tuviera un arma, y dije:

-Cooperaré cooperaré!,

-Así me gusta, cuando son buenos y nos dan su sangre uno no tiene porque hacerles daño- dije fingiendo morderlo de nuevo al otro lado de su cuello

-Aunque ya sabes lo que me gusta que también me hagan daño...

Dije lanzándole mi sonrisa pícara.

-eres un humano raro, pero encantador! - le susurré acercándome a sus labios apenas rozándolos- ojalá y todos fueron así, sería más divertido todo

-¿Verdad que sí?

Dije pasando mi lengua por sus labios.

-Sí -susurré deteniendo su lengua con mis dientes y dándole una suave mordida para sentir un poco más de sangre sobre mis labios

La besé rapidamente y luego dije:

-Cuéntame algo de vampiros.

-Algo de vampiros? -dije mientras me pegaba de nuevo a la tumba- pues en realidad es sencillo, nos alimentamos e sangre, el sol nos mata, claro solo en caso de que no tengas esto - dije enseñando mi anillo lapizazuli - le tenemos miedo al agua que corre y pues solo morimos con una estaca clavada en el corazón

-Oh... ¿a sí que las leyendas son ciertas? fascinante...

Dije feliz.

-Pues tampoco es que todas sean ciertas! - dije riendo por la ocurrencia- por ejemplo, el ajo no me hace daño! y no hay forma de que duerma en tumbas o cosas así! - reí - mi cama es de las mejores y definitivamente no la cambiaría por una de esas de Drácula

Empecé a reírme con ella. Y le pregunté:

-¿Y los reflejos, os veis en los espejos?

-Crees que si no pudiera verme en ellos estaría así de maquillada? - le pregunté- sería casi imposible poder pintarme los labios si quiera! - reí

-Eso era precisamente lo que estaba pensando.

Dije riéndome con ella.

Me reí con él y miré el cielo - en realidad somos muy fáciles de comprender, pero suele ser complicado cuando estas adentro- sonreí - y tú, cuéntame algo sobre los humanos

-Pues siguen tan aburridos cómo recuerdas...

Le respondí aún riendo.

-A que sí? - dije curiosa - pensé que la modernidad y todo los haría mas divertidos- reí sintiendo un suave y dulce aroma en el aire , automáticamente sentí mis colmillos prolongarse, alguien estaba cerca y sangraba, intenté concentrarme y mantenerme pero mi garganta quemaba

Vi la reacción de Katherine y le pregunté inmediatamente.

-¿Qué ocurre?

-Sangre- susurré y desaparecí, había un pordiosero tumbado en la grama ebrio, se había golpeado la cabeza, mis dientes automáticamente se prolongaron y me lancé sobre él para matarlo

Cuándo vi hacia dónde iba sentí un mareo, una cosa era dar tu sangre voluntariamente dónde todo se veía mucho más bonito, pero observar cómo aquella criatura de la noche comenzaba a succionar la sangre de otra persona que no quería hasta matarlo era algo totalmente diferente... entonces dije:

-No le mates..., si quieres más toma de la mía...

Dije apoyándome sobre una lápida cómo horas antes hacía con Ben.