+18 Por fin en Francia (Alma)

Recuerdo del primer mensaje :

Habían sido muuchas horas de avión así que cuando llegamos y debido al cambio horario ya era bastante bien entrada la mañana, casi era ya la hora de la comida. Ya solo caminar por el aeropuerto y escuchar a la gente hablar francés mientras caminabamos hacia la salida me encantaba la verdad, para que negarlo.

Sonreí- Esta bien, mejor dejemos el tema de los piropos...-dije medio bromeando pero en parte en serio porque entre el baile y eso se me estaba volviendo cada vez más dificil el no besarla cuando me diera la gana.

-De véras? Una lástima que me había hecho una lista de cosas bonitas para decirte durante todo el baile...- le dije en broma sonriendo cuando dijo eso y en parte entendiéndolo, porque ya nos pasaríamos de la raya en breve, que me conocía y lo conocía.
Continuamos bailando ya en silencio sin dejar de mirarnos, eso tenía su punto y me gustaba realmente.

- ¿A sí? Pues empieza con la lista...-dije enarcando una ceja y retandola porque sabía que solo lo decia por bromear mientras seguiamos bailando un poco más ya volviendo a separarnos sin tocarnos.

Sonreí cuando dijo que comenzara porque era obvio que lo había dicho solo por molestarle. Seguimos bailando ya sin tocarnos otra vez... -Lo haría, chèr...- murmuré suavemente volviendo a mirarlo a los ojos. -Pero no quiero cargar con las consecuencias cuando ya no puedas continuar con las reglas de la cita.- le dije con picdardía mordiéndome el labio y continuando como si tal cosa.

- En ese caso tal vez deberíamos ir dando por concluida por la cita...- dije sonriendo como si solo lo dijera por escuchar las cosas "bonitas" y sonriendo también al ver como se mordía el labio porque de verdad que me volvía loco.

-Podría hacerlo.- dije por eso de dar por concluída la cita porque además ya me estaba empezando a enloquecer yo misma con todo eso de no poder tan siquiera besarlo. -En ese caso... debo decir que eres perfecto, estás completamente guapo ahora mismo, pero podrías estar mil veces menos guapo y lo mismo te querría, no sé qué tienes... no sé qué te traes... pero no he podido sacarte nunca de mi mente desde el instante en que te conocí, te me has metido bajo la piel... Eres mi capricho, mi perdición, mi salvación, mi amor... mi único amor.- murmuré sin cortarme ni un segundo y sin bajar ya la mirada. No tenía una lista, pero tampoco la necesitaba... porque era exactamente lo que sentía en ese instante y si no era capáz de decirlo en Francia luego de bailar aquel baile, vestidos como en el siglo XVIII y con la luna todavía mirándonos... no sería capáz de decirlo nunca.

Sonreí cuando dijo que podría hacerlo. No había esperado realmente que dijera nada así que me quedé un poco sin palabras cuando comenzó a decir todo eso mientras la miraba ya casi dejando de bailar sin casi darme ni cuenta. No dije nada, tampoco sabía que decir ahora mismo. Acorté la distancia tomando su rostro y besandola, ni sabía si había dado ya por concluida o no la cita pero no podía quedarme parado sin besarla después de todo eso que había dicho, saber que pensaba todo eso era fantastico y no podía evitar sentirme feliz por ello. Así que la besé, abriendo su boca con la mia sin cortarme para nada y disfrutando de ella y de ese beso.

Ben no dijo nada, no era esperable que no respondiera considerando que "siempre sabía qué decir"... pero me hizo gracia eso y me hizo sentir bien. Igualmente no se quedó solo congelado sino que al acto ya se acercó a mí comenzando a besarme y olvidándose definitivamente de las "reglas" de esa cita. Abrió mi boca con la suya y le correspondí también jugando con mi lengua, pasando a sostenerlo por los hombros mientras cada vez profundizábamos más aquel beso.

Continuó mi beso y sonreí ligeramente besándola por unos instantes sin decir nada, simplemente disfrutando de todo eso- Es una de las cosas más bonitas que me han dicho nunca...-murmuré tras unos instantes contra sus labios- Y teniendo en cuenta que tengo más de 200 años eso es todo un halago- dije ya medio bromeando contra sus labios porque de verdad era casi para sentirse orgullosa.

Sonreí cuando dijo todo eso contra mis labios y enseguida volví a ruborizarme porque acababa de tomar conciencia de lo sincera que había sido y era para esconderse de la vergüenza. Igual me quedé allí, lo hecho hecho estaba... -Será que no has tenido amantes con imaginación...- le dije un poco en broma y también para quitarme el peso de las palabras que acababa de decir.

- Eres de lo más adorable cuando te ruborizas...-dije sonriendo porque en parte podía sentir que estaba avergonzada, pero la verdad es que me daba completamente igual, me había gustado lo que había dicho para que negarlo.

-Ya...- dije restándole importancia más porque quería "componerme" de una vez después de ese exhabrupto que porque realmente le restara importancia a lo que decía... en el fondo me gustaba que me dijera esas cosas, pero que va... no me había esperado cargarme un "sincericidio" tan pronto...

Sonreí al ver que estaba medio avergonzada por todo eso. A mi nunca me había costado demasiado decir lo que sentía así que tomé su rostro sonriendo para que me mirara- Puse en riesgo mi matrimonio por ti...-comencé a decir en parte como si la contestará a lo que ella me había dicho, era más o menos lo que la hubiera dicho si no me hubiera quedado medio congelado- Me conseguiste... Conseguiste que me enamorara de ti como un imbécil, y aquí estoy...-dije sonriendo levemente- Te seguiré a donde vayas... Tu marcas el ritmo, iremos rápido o lento, lo que quieras...- dije simplemente, en cierta manera siempre la había dejado ir eligiendo como iba la relación- Porque te quiero más que nada...-dije ya finalizando mi "discurso" y sin dejar de mirarla a los ojos.

Se acercó y tomó mi rostro antes de decir todo eso... me había dejado ahora congelada a mí porque no me esperaba que me largara un "discurso" como eso... a la vez me había conmovido profundamente así que los ojos se me llenaron al instante de lágrimas, nadie en la vida me había dicho cosas así.
-Vaya...- suspiré porque no sabía qué decir, pero enseguida cogí su rostro con mis manos y ya me avalancé para besarlo en un beso profundo y corto a la vez. Me separé mirándolo a los ojos antes de volver a pegarme a sus labios... me había dejado sin palabras y no era algo que me ocurriera muy seguido... Nunca me había imaginado que Ben, justamente Ben, fuera a decirme algo así.

[off: voy a cenar, vuelvo en 20. Si estás, seguimos ]

Observé como sus ojos se llenaban de lágrimas y enseguida me besó sin decir gran cosa. Continué su beso cuando me volvió a besar por segunda vez, siguiente su ritmo y profundizándolo un poco más. De verdad que sentía todo lo que había dicho y que me besara con tanto sentimiento me encantaba.

[off: Ok, sospecho que hoy si estaré ]

Me separé de sus labios luego de seguir todavía un rato. -No es bueno eso de que hayas puesto en riesgo tu matrimonio... debería sentirme culpable.- dije porque ahora que pensaba en las cosas que había dicho me hacía ruido esa frase, la verdad es que nunca había sentido ni la más mínima culpa por eso, no me daba pena Aitana ni me daba pena nada... siempre lo había querido y me había dolido perderlo, había sufrido mucho y tenerlo de nuevo en aquella despedido era algo que en el fondo sentía que me "merecía" de tanto desearlo de verdad.

Sonreí ligeramente tras besarnos- Nunca lo has hecho así que no creo que debas empezar a sentirte culpable ahora... Fuiste mala, pero ya son cosas del pasado- dije lo último bromeando como si el divorcio fuera solo su culpa y yo no tuviera nada que ver.

Sonreí levemente volviendo a morderme el labio cuando dijo eso que de nunca me había sentido culpable porque tenía razón. -Ya... puede que sea un poco mala la verdad.- le dij ya pasando mis brazos por encima de sus hombros y con mucha picardía ya yéndome del todo de tema... la verdad es que había dicho cosas que no me olvidaría y me sentía perfectamente feliz ahora mismo.

- Es parte de tu encanto...-dije también con cierta picardia cuando paso sus brazos por encima de mis hombros. La cogí de la cintura enseguida y la acerqué algo más a mi para poder besarla una vez mas.

Sonreí cuando dijo eso sobre que era parte de mi encanto y me cogió por la cintura... Era extraña la sensación porque con tremendo vestido aún cuando me pegara a él continuaba estando bastante "lejos".
Continuamos besándonos sin cortarnos, ya lo de las reglas de la cita había pasado a cualquier parte y a ninguno de los dos le importaba realmente eso de mantenerlas.

Continué besandola por unos instantes sin cortarme para nada. Habíamos tenido un momento de sinceridad no muy propio en nosotros y aunque sabía que parte de culpa la tenía la cita y el ambiente medio romántico que habíamos montado, no me importaba para nada. Nunca me había importado demasiado decirla lo que sentia.

Sonreí levemente contra sus labios antes de separarme ya... -Definitivamente eres un jodido vampiro francés.- murmuré. -No había tenido una cita tan romántica en toda la vida.- le dije sonriendo, la verdad es que me gustaba todo eso. Nunca había dejado de decirle a Ben lo que sentía, siempre había tenido en claro que lo quería y todo eso... y aunque él siempre me lo decía me costaba a veces creerle, por eso que fuera tan franco en sus sentimientos me había conmovido tanto de verdad. -Sábes que te seguiría hasta el fin del mundo...- murmuré antes de besarlo, porque era algo que alguna vez había dicho y que tenía muy claro.

Sonreí ligeramente- Lo sé...-dije más que nada por lo de que me seguiría al fin del mundo, aunque lo de la cita ya me lo había dicho antes- Yo también te seguiría hasta el fin del mundo... Lo sabes...-dije sonriendo sin dejar de mirarla porque me era imposible y soltando ya un poco su cintura para darla algo de respiro con el vestido y todo el rollo.

Lo miré una vez más cuando dijo eso de que también me seguiría y apenas podía creer que realmente lo había "conseguido"... así... tal y como él mismo lo había dicho... era "mío". Me costaba acostumbrarme a la idea de que realmente me quisiera de ese modo... y a la vez, era demasiado especial, era lo más especial que había tenido en la vida.
-Te adoro.- murmuré antes de ya besarlo y volverme a separar.

Sonreí y suspiré ligeramente por eso, podría pasarme la vida escuchándola decir ese tipo de cosas- Sabes que hoy me vas a volver loco con tanta palabra bonita, ¿no?- dije sonriendo sin poder evitar cogerla de la cintura pero esta vez simplemente abrazandola sin besarla ni nada, simplemente sintiendola contra mi.