+18 En París, visitando a mi abuela (Ben)

Recuerdo del primer mensaje :

Pudimos conseguir billetes fácilmente. No era siempre sencillo pero tuvimos bastante suerte. -Voy por unos cigarros.- le dije a Ben mientras él despachaba la maleta y me alejé para ir hacia una tienda. Busqué cigarros y compré unas golosinas. Seguía automática, no quería hablar, no quería pensar en nada... ni siquiera entendía porque de pronto me afectaba tanto saber que mi abuela no estaba bien... "no te lo pienses demasiado", habían sido las palabras de Ben, seguía pensando en que era algo urgente y me sentía confundida a un punto increíble.

Ya volví a Ben con las cosas, había despachado las maletas y estaba en la fila para poder abordar.

Lo escuché decir eso y supe que en parte lo decía por lo de las muertes, había contado con eso desde el principio... sabía que parecía más sencillo de lo que era... En fin, había que aprender y estaba dispuesta a hacerlo. Cogió mi mano y me señaló dos puntos. Intenté memorizar el sitio... pero no sabía si realmente lo había hecho. -Vale. Parece complicado todo...- murmuré mirándolo con carita de pena. -Nunca me dijiste que fuera tanto lío!.- me quejé después en broma.

Sonreí cuando dijo eso- Nunca preguntaste...- dije como si fuera solo su culpa mientras me inclinaba un poco sobre su cuello y besaba enseguida un punto de los cuales la había dicho antes- ¿Donde te gusta más que te muerda? ¿Aquí... o aquí...?-susurré después mordiendo suavemente el otro punto, casi buscando que lo recordara de esa forma en vez de señalando en mi cuello. Ni sabía si los humanos sentían tanto las difencias de los sitios de mordidas pero suponía que un poco si, ¿no?.

-Fue muy sexy, pero muy sexy...- dije cogiendo su mano y bajándola hacia mi falda. -Cuando me mordiste aquí.- murmuré recordando el punto en la ingle en el que me había mordido... Había sido condenadamente excitante, nomás pensarlo me encendía. -Pero no noto tanto la diferencia en mi cuello... ya supongo que lo aprenderé a distinguir todo...- murmuré.

La escuché decir eso de que había sido muy sexy y me mordí un labio mientras veía como metía mi mano bajo su falda y me la colocaba en su ingle donde la mordí esa vez.- Lo sospechaba...-susurré por eso de que distinguía mientras desplazaba mi mano hacia su sexo bajo la falda, acariciandola ligeramente por encima de la ropa interior sin poder contenerme.

Sonreí cuando dijo eso de que lo sospechaba y ya no se contuvo comenzando a acariciar levemente mi sexo por encima de mi ropa interior... Quité mi mano de allí y subí por encima de su camisa con mis dos manos arrugando la tela hasta llegar a sus hombros y pasar por encima de ellos hacia su espalda al tiempo que lo acercaba más a mí. -¿Qué tienes ganas de hacer?...- susurré mirándolo con picardía.

- De todo...-susurré con picardía viendo como me acariciaba con sus manos acercandome algo más a ella mientras yo seguía acariciandola abriendo ligeramente un poco más sus piernas para tener mayor accesibilidad- ¿Tu qué tienes ganas de hacer?- pregunté también con picardía pero más que nada porque no sabía como estaba de animo después de lo de su abuela, lo mismo no tenía nada de ganas de esto y no quería presionarla.

-No quiero pensar en nada... sólo en tí, vale?.- murmuré suavemente cuando me preguntó. -Así que eso de "de todo" suena bien para mí...- susurré después acercándome a su oído. Había sido un día de demasiadas cosas juntas, pero no podía simplemente irme a dormir... siempre había encontrado en el sexo una condenada calma, como si no pudiéramos estar completamente bien hasta que no acabáramos de quitarnos las ganas. Quizá no fuera el sistema más sano del mundo, pero por alguna extraña razón nos funcionaba...

Asentí mirandola mientras la cogía de la cintura y la ayuda a sentarse sobre mi con las piernas abiertas a ambos lado quedando enfrentada cuando dijo todo eso. En parte me lo había visto venir porque la conocía ya bastante, sabía que necesitaría algo de sexo para desconcertar y no pensaba negarme, yo en parte también lo necesitaba. Suspiré mirandola a los ojos mientras subía su falda un poco para que no molestará y enseguida tomé su cintura con una de mis manos y con la otra su trasera para ayudarla a moverse un poco sobre mi, rondandose cada tanto con mi entrepierna para que nos fueramos calentando los dos. Me mordí un labio ante los primeros movimientos y enseguida acerqué mis labios a los suyos para besarla de una vez.

Acabé de hablar y me cogió de la cintura ayudándome a sentarme sobre él con las piernas abiertas. Solté un suspiro enseguida y lo miré con una sonrisa mientras iba subiendo mi falda para que no estorbara y me acomodaba aún más sobre su entrepierna moviéndose lentamente para que lo sintiera. Ya me había encendido, no me costaba nada, era demasiado irresistible para mí. Se acercó a mis labios y lo tomé del cuello mirándolo antes de besarnos. Ni siquiera sé como acabé devorándome su boca por completo, abrí sus labios y jugué con mi lengua, lo mordí cada vez con más intensidad mientras iba moviéndome en círculos sobre su entrepierna sintiendo ya su erección en mi sexo lo que me excitaba todavía más.

Me tomó del cuello y no sé cortó para nada, besandome con intensidad devorandome la boca y moviendose sobre mi sin descanso. Joder, ya estaba más que excitado a estas alturas. Baje mi otra mano también hacia su trasero y se lo acaricié y la estreché más contra por momentos ayudándola un poco a seguir moviendose contra mi erección mientras seguía besandola sin descanso, devorando su boca por completo, dejando que nuestras lenguas jugaran a placer una y otra vez..

Continuó ayudándome a moverme ya con sus dos manos acaiciando mi trasero y seguimos acompañando los movimientos mientras no dejábamos de besarnos, me sentía frenética e intensa, no podía estar deseándolo más... Me encantaba sentirlo así contra mi sexo y todo me alteraba. Pensé en Gus, estábamos en el sofá de su casa... pero luego lo descarté, supuse que Ben se daría cuenta a tiempo frente a una posible interrupción.

- Joder...-murmuré contra sus labios en uno de los tantos movimientos del sacudon de placer que me dio. Suspiré- No pares...-murmuré casi pidiendoselo apartando las manos de su trasero y Cogiendo su camiseta por los bordes quitandosela enseguida dejandola ya en sujetador. Besé sus pechos un poco por encima del sujetador mientras con mis manos abría mis propios pantalones. Estaba por bajarmelos un poco más pero era jodida cuando quería y ante la subida de intensidad de cada rocé solo pude suspirar y bajar de nuevo mis manos hacia su trasera para ayudarla a pegarse más a mi y sentirla cada vez más gracias también a que tenía los pantalones desabrochados.

Escuché lo que me pidió y sonreí con malicia porque me encantaba sentir que estaba tan excitado, claro que le dí el gusto y no me detuve, por el contrario aumenté la intensidad mientras sentía sus besos y me separaba de sus labios sólo con el fin de permitir que se deshiciera de mi camiseta. Enseguida pasó a abrir sus propios pantalones pero abandonó tomándome otra vez del trasero. Lo sentía cara vez más al tener ahora abierto el cierre así que bajé mis manos quitándome un poco y tironié para ayudarlo a quitarse los pantalones de una vez y que ya no nos molestaran. Me senté enseguida otra vez sobre su erección y me moví sin detenerme volviendo a la vez a sus labios.

Me ayudó a quitarme los pantalones y enseguida volvió a tomar posición moviendose todavía con más intensidad, me iba a volver loco. Suspiré metiendo las manos de nuevo bajo su falda, metiendo las manos por dentro de su ropa interior, estrujando su trasero con deseo antes de comenzar a quitarserla, con algo de su ayuda consiguiendo que se apartara un poco para poder sacarserla y permitiendola después de nuevo colocarse sobre mi .

Ya colósus manos por debajo de mi falda cogiendo mi trasero y apretándolo con fuerza mientras mordía sus labios en mi boca, era condenádamente sexy todo lo que hacía. Ya comenzó a deshacerse de mi ropa interior y lo ayudé a quitármela del todo. Volví a posicionarme al tiempo que me desquitaba abriendo ya de un tirón su camisa y quitándosela también de una vez entre caricias que eran cada vez más intensas. No sabía si la conversión me haría de él o qué era lo que pasaría... pero ahora mismo me sentía completamente suya, cada centímetro de mi cuerpo le pertenecía y era completamente consciente de ello.

Me quitó la camisa entre tirones y por un momento pensé que se abría cargado el botón como tantas otras veces, pero esta vez no fue el caso. Solté su sujetador enseguida también antes de atraerla hacia mi, sintiendo como apoyaba sus pechos contra mi pechos, me encantaba sentirla con nuestras pieles tocandose. La miré con total deseo un instante antes de volver a bearla, recorriendo con mis manos ya casi todo su cuerpo, estaba completamente desnuda y no podía ser más guapa.

Se libró enseguida de mi sujetador y me estrechó contra él, pude sentir su torso desnudo rozándome y me estremecí, estaba completamente desnuda y no podía desearlo más. Bajé mis manos casi a tientas mientras no quería dejar de besarlo, bajando a su barbilla y mordiendo, a su cuello y mordiéndolo levemente para subir otra vez y devorar su boca con pasión. Llegué al fin a sus boxers y colé mis manos dentro, rozándo su sexo con mis dedos mientras me ayudaba a corrérselo para desnudarlo de una vez.

No dejo de besarme en ningún momento incluso mordiendo por momentos. Suspiré cuando bajo hasta mi cuello y me lo mordió porque después de todo el tema de las mordidas eso era jodidamente sexy. Se libró de mis boxers con algo de mi ayuda y suspiré sintiendo su mano rozarme y suspiré todavía más al sentir nuestros sexos rozarse acontinuación. Me mordí el labio y baje autómaticamente mis manos así cintura, esperando que me ayudara de una vez a hundirme en ella.

Continuamos besándonos y ya cuando estuvimos desnudos sentí sus manos en mi cintura, siempre me había dado mucho placer sentir sus manos cogiéndome por la cintura con frénesi en momentos como estos. Enseguida lo ayudé a hundirse en mí, estábamos demasiado excitados como para estarnos ahora con vueltas, lo sentí dentro mío y suspiré mientras comenzaba a moverme yendo hacia él cada vez, en círculos y luego otra vez acercándome mientras sentía que todo me desbordaba. Estaba completamente desquiciada, él me desquiciaba.

Habíamos calentado muchisimo con tantos roces así que cuando me ayudó a hundirme en ella ya estaba complemente excitado. Se comenzó a mover enseguida y suspiré mirandola, bajando la mirada por todo su cuerpo, viendo como sus pechos se movían con cada movimiento y viendo como movía la cintura de una manera que me hacia perder el jodido control, era complemente sexy y siempre me había gustado como se movía marcando el ritmo. Me afirmé mejor a sus caderas alzando la vista para ver sus caras de placer según se movía sobre mi e iba marcando ese ritmo que me desbordaba y me encantaba por igual.

[off: Me voy, bye!]

Sentí que me miraba y no podía desearlo más, siempre me había encendido sentirme así de deseada y hoy no era una excepción. A medida que las embestidas iban sucediéndose me dejé ya llevar por completo moviéndome a mi antojo y buscando cada vez el mayor placer mientras ya me alejaba de sus labios porque me era imposible mantener todos los movimientos a la par. Suspiré y gemí una y otra vez, sintiéndome explotar sobre él, sus manos hacían que ardiera cada parte de mi piel que tocaban y adoraba la forma en la que me cubría con sus yemas, recorriéndome y afirmándome aún más sobre él, buscando penetrarme lo más posible, era completamente genial.

[off: Ok! Bye ]

Se apartó de mis labios y me mordí el labio sintiendo como iba perdiendo el control encima mio, moviendose a su antojo y haciendome delirar de placer al mismo tiempo, era condenadamente sexy. Comenzó a gemir sin cortarse con cada una de mis penetraciones y suspiré en el acto acariciandola, subiendo por su abdomen hasta sus pechos y bajando después de nuevo hasta su trasero mientras ella seguía con el ritmo, moviendose como ella sabía, rozandose nuestros cuerpos una y otra vez y haciendo que perdiera el control como cada con ella. Iba a convertirse, me lo había dicho y no podía ni creermelo todavía, Alma era lo mejor que me había pasado en la vida.

Continué moviéndome al tiempo que sentía sus caricias envolviéndome, subiendo por mi abdomen, llegando a mis pechos y volviendo a bajar, estrujándome contra él, haciéndome suspirar una y otra vez. Sus estocadas eran perfectas y no podía estar disfrutándolo más, a medida que pasaban los segundos me sentía mucho más intensa, más desbordad, lo quería con locura, lo amaba... como nunca había podido amar a nadie, y sabía que realmente era capáz de hacer cualquier cosa por él, me tenía en sus manos y era genial.

Alma suspiraba y gemía cada poco y eso me encantaba, era jodidamente sexy. Todo estaba siendo fantástico. La ayudé tomándola mejor de la cintura a aumentar algo más el ritmo según iba sintiéndonos más cerca del orgasmo, cada vez estábamos por al límite y eso se notaba, nuestros cuerpos ya casi se dejaban llevar ellos solos en busca de placer. La adoraba.

Fuimos aumentando la intensidad y el ritmo casi instintivamente a medida que lo necesitábamos e íbamos sintiéndonos más cerca del orgasmo. Me cogió por la cintura ayudándome y continuó con las embestidas haciéndome suspirar cada vez, nos movimos sin control hasta que llegamos al climax explotando de placer. Ya gemía sin cortarme así que ni me importó subir el volumen al final, lo necesitaba, había sido completamente perfecto.