+18 Contando cosas nuevas (Alma)

Recuerdo del primer mensaje :

Esa mañana había quedado con Gus. Me había ido sin despertar a Alma ni nada como de costumbre pero al final todos los planes cambiaron cuando me encontré con Miriam y pasaron todas esas cosas. Llamé a Gus para cancelar el vernos porque se me había quitado las ganas de todo de lo cabreado y asombrado que me había quedado.

Llegué a casa y subí a la habitación, con tanto forcejeo cuando me mordió me había manchado el cuello de la camisa. Me la quité poniendome otra, y me giré hacia Alma. Seguía durmiendo, seguramente no se hubiera enterado ni que me había ido. Me tumbé a su lado antes de darme cuenta y la cogí de la cintura estrechandola más contra mí antes de darla algún que otro beso por el cuello para irla despertando. Ya era tarde y no era mala hora para despertarse, aparte también la tenía que contar cosas...

Ya fue hacia el salón y fui a su lado caminando también mientras me recogía el cabello. Encontré mi ropa interior, me la puse y luego busqué mi vestido. -Déjame también tu número...- le dije mirándolo con una sonrisa luego de ya colocarme el vestido. Eso era lo que habría hecho con un chico con el que el sexo había sido realmente bueno y me interesaba volver a llamar para otra noche.

Me estaba abrochando la camisa cuando la escuché.- ¿No te fías de que vaya a llamar?-murmuré con una sonrisa ladeada mientras cogía los zapatos y me los ponía ya también.

Sonreí cuando dijo eso porque no era que no me fiara... -No es eso, es que puede que me den a mí ganas de llamarte y no me gustaría estar dependiendo de tí... Siempre puedes negarte a venir si no te da la gana, no?.- sonreí mirándolo porque tampoco es que fuera a acosarlo. Pero nunca me había gustado eso de que el chico se quedara con el número (y por ende del control sobre llamar o no hacerlo), si la había pasado bien y a los dos nos gustaba eso no había razones para que no tuviéramos el mismo derecho a llamarnos.

Sonreí por su respuesta pero no me hice de rogar. Cogí un blog de notas y un bolí que tenía por allí y la apunté mi número antes de pasarselo- Ten, por si algún día te da por querer llamar...-dije sonriendo mientras la miraba con una sonrisa picara.

-Vale.- murmuré sonriendo al ver que apuntaba el número en una hoja de papel. Le dí alguna calada más al cigarro ya que lo tenía todavía por allí y busqué mi vaso antes de beber un poco, realmente iba algo borracha y esa situación era por lo menos rara. De hecho no tenía en claro si se largaría o qué... Era extraño estar en mi piso como si de verdad fuese mi casa actual.

La vi beber algo mas y me hizo cierta gracia comprobar que ya iba algo borracha aunque yo solo iba con el puntillo. Me despedí con un simple gesto de cabeza sin decir demasiado como con cualquier rollo y ya comencé a caminar hacia la puerta.

Lo acompañé a la puerta y me recargué contra la pared meintras ya salía de mi casa, más porque me costaba estar así en pié que por otra cosa. No sabía si se iría o qué... era totalmente extraño eso. Tomé su mano cuando pasó a mi lado y tironéandolo un poco lo atraje hasta mí para estamparle un último beso antes de liberarlo para que ya se fuera a tomar el ascensor.

Me acompañó hasta la puerta y me mordí un labio al ver como se recargaba en la pared, siempre había sido en cierta manera adoraba borracha. Me cogió de la mano estampandome un último beso y sonreí cuando apenas nos apartamos- ¿Nos vemos mañana?-murmuré todavía cerca de ella saliendome un poco del papel pero mas que nada para saber si quería aprovechar ese juego para cada uno pasar la noche por su lado o por el contrario preferia que me quedara.

Sonreí cuando preguntó eso y lo pensé un segundo... -Vale.- murmuré sonriendo por seguir el juego, aunque no quedaban muchas horas hasta la mañana. Ya nos despedimos y se subió el ascensor.

No debía haber llegado a la planta baja todavía cuando no me resistí y le mandé un mensaje de texto. "Ven, no quiero dormir sola" escribí. No sabía si me respondería en plan Ben o seguiría como un rollo al que probablemente no le caería bien que le mandaran ese mensaje apenas irse... Pero luego de Miriam recorriendo París como vampira, mi borrachera y mi mente yendo a mil kilómetros por hora... Lo cierto es que necesitaba escucharlo decirme algo fuera del personaje o enloquecería.

Asentí ante ese vale y nos despedimos antes de subir al ascensor. Apenas había bajado un par de plantas cuando escuché el sonido de mi móvil. Lo miré y sonreí negando con la cabeza al leerlo porque iba a matarla por esos cambios de decisión tan característicos de ella. Pensé en responderla al mensaje pero tras pensar un poco no lo hice porque no me iba a negar a eso y no tenía sentido escribirla. Esperé a llegar abajo y después volví a darle a la planta de Alma. Suspiré un segundo por ese viaje tan tonto y llamé a su puerta cuando llegué mientras me apoyaba un poco en el marco de la puerta esperando a que abriera.

No me respondió enseguida... Así que supuse que seguiría a lo suyo. Ni me molesté en juntar y ya estaba por quitarme el vestido para tumbarme en la cama cuando sentí que llamaban a la puerta. Sonreí enseguida mordiéndome un labio y fui a la puerta casi de un tirón. La abrí con una sonrisa, y lo miré tan contenta que de verdad parecía que lo había extrañado durante ese rato.

Me abrió la puerta enseguida con una sonrisa y sonreí yo también un poco sin poder evitarlo. Me incorporé del marco de la puerta y la tomé enseguida de la cintura acercandola a mi para poder besarla, abriendo sus labios con los míos sin cortarme para nada.

Ya me cogió por la cintura y me besó haciendo que abriera mi boca con la suya. Continué el beso dejándome llevar y sin cortarme para nada, era raro... como si lo hubiese extrañado o algo. Tomé su rostro y luego ya pasé una de mis manos a enredarla en su cabello mientras lo estrechaba más hacia mí para profundizar el beso y cerraba la puerta con la otra mano detrás nuestro.

Cerró la puerta tras nosotros y la apoyé enseguida contra la puerta cerrada al sentir como seguía mi beso y enredaba sus manso en mi pelo- Te quiero... Te quiero mucho...-murmuré por fin contra sus labios y entre beso y beso porque llevaba un buen rato con ganas de decirlo y ya no podía ni contenerme ahora que habíamos dejado un poco el juego ese de lado.

-Y yo, mucho....- mrurmuré contra sus labios cuando ya quedé contra la puerta sintiéndolo besarme una y otra vez. Ya nos separamos y apoyé mi frente en la suya. -Te quiero Ben y hasta creo que te extrañé.- murmuré sonriendo en broma tomando su rostro con mis dos manos.

Sonreí sin poder evitarlo por su te quier porque ya lo iba extrañando. Apoyó su frente contra la mia antes de decir lo demás tomando mi rostro- ¿Si?-murmuré sin creerla ni un pelo mientras acariciaba su cintura contento de poder hacerlo ya a mi antojo y sin separarme ni un centimetro de ella.

-Sí, no... no sé... yo que sé.- dije sonriendo y sintiendo como me acariciaba la cintura. -Estoy un poco borracha tampoco me hagas tanto caso.- murmuré sonriendo y ya mirándolo. -Sábes? tengo que contarte algo...- susurré poniéndole misterio de broma. -Me he acostado con un chico que conocí en un club... No iba a hacerlo pero me llevó a la Torrre Eiffel.- murmuré sonriendo como si solo con eso ya fuera obvio que iba a acostarme con él.

- Que manera de romper el romanticismo...-murmuré sonriendo y entornando los ojos cuando dijo eso de que estaba borracha y ni le hiciera mucho caso. Escuché después lo otro y sonreí un poco- La Torrre Eiffel? Vaya es entendible entonces...-murmuré mirandola- Aparte... tengo que perdonarte porque yo tambien me acosté con una chica. Empezó a hablar mucho y tuve que cortarla pero no estuvo mal- dije picandola con una pequeña sonrisa mientras la apartaba ya un poco de la puerta pero sin apartarme yo demasiado de ella..

Sonreí cuando dijo eso de que estaba rompiendo el romanticismo, pero es que no le había dicho nada que no fuera cierto... Luego ya nos fuimos un poco hacia la sala y directamente lo conduje a la habitación para tumbarnos en la cama mientras lo escuchaba contarme eso. -Sí, es que la Torre Eiffel es irresistible...- murmuré sonriendo antes de que me dijera eso de que tenía que perdonarme porque había hecho lo mismo. -Bueno, eso es lo importate, que no haya estado mal...- murmuré entrecerrando los ojos porque sabía que lo hacía para picarme por eso de que era conversadora. -El chico este era bueno, es decir... reconozco que me gusto acostarme con él... Pero tengo que decirte que eres mucho mejor...- murmuré sonriendo y ya en la habitación me giré para que me quitara el vestido.

Sonreí según me iba guiando a la habitación e iba diciendo todo eso- Me alegra entonces que los dos lo pasaramos bien...-murmuré como si realmente cada uno hubiera estado con otra persona. La escuché decir eso mordiendome un labio y bajando la cremallera de su vestido cuando se dio la vuelta- Tu también eres mucho mejor... Que adoro que gimas mi nombre y murmuré algún que otro te quiero...-murmuré sin cortarme dejando caer su vestido al suelo. Realmente había echado todo eso de menos, aunque claro que igualmente los polvos esos me habían gustado.

Sonreí cuando dijo eso de que se alegraba de que lo pasáramos bien los dos. Luego ya se encargó de mi vestido y murmuró eso sobre que extrañaba que gimiera y dijera su nombre. Sonreí porque más de una vez había tenido que estármelo conteniendo. -Te quiero.- dije simplemente cuando ya me giré y quedé enfrente suyo con el torso descubierto y la parte de abajo de mi ropa interior. Me senté en la cama luego de acomodarla un poco y ya me metí dentro mientras esperaba que se desvistiera.

Sonreí por eso y cuando se fue ya a la cama aproveché para desnudarme yo también hasta quedar en boxers. Me tumbé a su lado y la abracé enseguida atrayendola un poco hacia mi- ¿Qué tal lo has pasado? ¿Te ha gustado?-murmuré dandola un pequeño en el cuello y mas que nada porque habíamos empezado con eso porque ella había tenido ganas hacia un tiempo.

Se tumbó a mi lado y me abrazó enseguida. -Sí, claro que me ha gustado... Fue... mmm... emocionante.- dije sonriendo y contra su cuello y manteniéndome allí tumbada. -Y a tí te ha gustado? O sigues sin verle mucho la gracia?...- murmuré sonriendo.

Sonreí cuando dijo eso contra mi cuello y asentí- Si, no ha estado mal... -murmuré porque claro qeu había tenido su punto después de todo. No había estado mal eso estaba claro.

-Vale. Y nomás para que lo sepas... de verdad que me jodía cuando algún rollo me hablaba después del sexo.- murmuré sonriendo acurrucándome contra él porque algo de eso le había dicho. En particular recordaba a Erik y a Hannibal que eran muuuy habladores y yo, que me la pasaba hablando en general, en esos momentos deseaba que se callaran...