Siguiendo con la investigación (Alma) +18

Recuerdo del primer mensaje :

Entramos al local y la miré, todavía no había llegado, o eso parecía... Lo mismo estaba en el baño bebiendo de alguien, a saber.- Bueno... Pues espero que no nos haya tomado el pelo...-dije enarcando una ceja esperando que no nos hubiera vacilado y encima no fuera ni a ir.

Sonreí cuando respondió eso y luego se ofreció a "ayudarme", pero ni hizo falta que respondiera que ya me estaba comenzando a quitar la camisa por mi cabeza luego de cogerla por los bordes. Sentí el contacto de sus manos con mi piel húmeda del agua que aún tenía y suspiré con una sonrisa, pasando enseguida a colar mis propias manos por debajo de su camiseta y ahora yo quitársela de un tirón bajando enseguida a su cintura y buscando el cierre de su pantalón. Lo miré a los ojos sin acercarme a besarlo por jugar un poco con él, pero muriéndome de ganas de hacerlo. Ya fui moviendo mis manos con suavidad, repartiendo alguna caricia por su cintura y su vientre, bajando hasta acariciar su miembro por encima de sus boxers y ya decidirme a bajarle los pantalones de una vez.

Pensé que me besaría cuando me quitó la camiseta pero nada más lejos de la realidad, estaba en plan juguetón y sonreí porque no sería yo de momento quien la besara tan fácil. Sentí su mano acariciando mi entrepierna por encima de los boxers cuando empezó a quitarme los pantalones y me mordí un labio por no quejarme. No estabamos precisamente solos en esa sala pero no me iba a quejar. Enseguida bajé mis manos también a su cintura y mirandola con picardía desabroché los botones de sus vaqueros. Se los fui deslizando poco a poco por sus piernas con suaves caricias sin poder evitar acariciar el interior de sus muslos por momentos.

Tampoco me besó y mientras continuaba acariciándolo un poco subiendo mis manos por su abdomen y luego pasando a su espalda, volviendo a descender hasta sus boxers, sentí como se encargaba ahora de mis jeans. Desabrochando el cierre y ayudándome a quitármelo entre caricias. Los bajó del todo y no se cortó, pasando su mano por mi entrepierna y acariciándome por allí con suavidad. Sonreí mirándolo con deseo. Estábamos ahora mismo en ropa interior en medio de otras personas, pero daba bastante igual considerando que en ese sitio pasaba cualquier cosa. -Sígueme.- susurré acercándome a su oído antes de cogerlo por la mano y llevarlo hasta uno de los jacuzzis comenzando a sumergirme allí mirándolo mientras iba bajando la escalerilla y el agua con sangre me iba embriagando una vez más.

Suspiré cuando me susurró de esa manera tan sexy al oído y la seguí como me había pedido al jacuzzi. Daba lo mismo estar rodeados de gente, algunos montandoselo, otros simplemente riendo y bebiendo copas que había por alli, pero poco importaba, cosas más raras habíamos hecho y lo cierto que es que la visión de ver como se metía en ese jacuzzi de "agua roja" me encantó por completo, los olores de la sangre no dejaban casi ni pensar y ella ahora mismo así metida en el jacuzzi estaba más guapa que nunca. Me acerqué y no perdí el tiempo entrando también por las escalerillas al jacuzzi. Mojandome poco a poco mientras la tomaba de la cintura acercandola un poco más a mi así cerca del jacuzzi.

Ben me miró durante un instante y ya después se metió también en el jacuzzi lentamente, tomándome de la cintura enseguida y acercándome a él. Lo miré con una amplia sonrisa y ya no me pude resistir mucho más. -Vas a besarme? O tendré que hacerlo yo misma?.- susurré con sensualidad aprovechando para dejarlo contra una de los bordes del jacuzzi y quedar un poco aprisionándolo allí.

Me arrinconó contra uno de los bordes del jacuzzi y suspiré enseguida, no podía ponerme más ahora mismo toda la situación- Vas a tener que hacerlo, por supuesto...-susurré con picardía bajando mis manos desde su cintura hasta su trasero para pegarla algo más a mi. Sentir el agua así embriagadora y su cuerpo junto al mío era ahora miso de lo mejor del mundo.

Lo escuché decir eso y sonreí mientras sentía como ya acariciaba mi trasero y me acercaba más hacia él. -Vale.- susurré acercándome de su oído cuando dijo eso. -Si no me queda más remedio...- susurré antes de morder el lóbulo de su oreja y ya pasar a besar su cuello primero levemente y luego ya usando mi lengua y yendo con mayor intensidad hasta llegar a su barbilla y subir un segundo antes de hundirme por fin en sus labios con pasión. Lo devoré con ese beso, lamiendo su boca y abriéndola con la mía descarádamente. Dejándome llevar por ese clima y el olor a la sangre que me encendía más de lo debido.

Sonreí cuando dijo eso casi como si fuera una obligación pero enseguida me deje hacer, cerrando los ojos por momentos y sintiendo como iba con sus labios por mi cuello y mi barbilla antes de besarme. Ni bien sus labios tocaron los míos me dejé hacer por completo. Se respiraba un clima totalmente intenso, unido a los vapores de los jacuzzi y a los gemidos que se escuchaban por diferentes puntos del baño tenía que reconocer que era de lo más excitante. Suspiré y devoré su boca por completo, recorriendo el interior de su boca con mi lengua sintiéndome cada vez más a gusto allí con ella.

Se dejó hacer, besándome enseguida y respondiéndome ese beso con pasión, buscándome con su lengua y devorando mi boca de la misma manera. Lo tomé por la cintura y me acerqué ya del todo apretándolo algo y sintiendo el roce de su cuerpo contra el mío. Ese sitio era de otro planeta, los aromas a sangre y los sonidos de los gemidos que se esparcían por allí eran impresionantes. Habíamos hecho ya cantidad de cosas extrañas, incluso habíamos acabado en medio de orgías, en bares de vampiros, perdiendo realmente el control... Pero ahora mismo no recordaba haber estado en un lugar que me gustara tanto. Continué besándolo con intensidad buscándolo con todo mi cuerpo deseándolo a cada segundo.

Se pegó por completo a mi y suspiré porque su cuerpo me encendía de una manera impresionante, la adoraba por completo. Suspiré contra sus labios y una de mis manos pasó desde su trasero hasta su sexo, rozándola por allí con mis dedos por encima de la ropa interior- ¿Qué quieres hacer Alma? Es tu noche y soy todo tuyo...-susurré contra sus labios entre besos, cada uno más intenso que el anterior- Pídeme lo que quieras...-susurré para encenderla mientras presionaba algo más su sexo.

Fue diciendo eso de que era mi noche y suspiré excitada en sus labios al tiempo que iba sintiendo como pasaba a presionar un poco mi sexo con sus dedos por encima de la ropa interior. -Joder... Ben...- gemí suavemente cuando volvió a tocarme así, presionando un poco y diciendo que haría lo que pidiera. No podía excitarme más. -Besame y acaríciame... joder Ben, hazme el amor.- suspiré volviendo a su oído y besándolo por allí. -Hazme el amor con tu lengua y con tu sexo y con tu piel... has que pierda el control.- susurré a su oído mientras jugaba también yo con su sexo ahora en mis manos a través de su ropa interior.

Me susurró todo eso haciendo que me encendiera enseguida y suspiré. Es que no podía ser tan sexy y más si encima me acariciaba de es manera por encima de los boxers- Joder Alma..-me quejé excitado mientras mis manos buscaban su ropa interior y se la empezaba a quitar desliazndola por sus piernas- Joder... Eso quiero, que pierdas el control por completo... Que me desees como nunca...-murmuré suspirando mientras la besaba de nuevo y la besaba sin cortarme, casi como si le hiciera el amor a su boca, jugando con mi lengua una y otra vez, mordiendo y jalando sus labios hasta hacerlos sangrar.

Dijo eso y comenzó a quitarme la ropa interior al tiempo que ya se hundía en mis labios "cumpliendo" lo que le había dicho antes... hundiéndose en mi boca con tal intensidad que me hizo gemir en sus labios, le seguí el beso y me dejé hacer, abriéndola y ofreciendo mi lengua sintiendo como entraba una y otra vez, buscándome, mordiendo, haciéndome sangrar, chupando y presionando. Hice lo mismo aprovechando que estaba arrinconado y lo obligué a apoyar su cabeza en la pared, aprisionándolo con mi boca y hundiéndome en ella una y otra vez. Lo adoraba por completo.

Alma se dejo hacer por completo y no me corté besando sus labios mojados de sangre por mis mordiscos ni en recorrer su boca con mi lengua una y otra vez. Sentí como me aprisionaba más contra el borde del jacuzzi y suspiré enseguida, estrechándola más contra mi, queriendo profundizar todavía más ese beso si es posible y queriendo sentir todo su cuerpo en contacto con el mío, de verdad que la adoraba, no había otra explicación para que me gustara tanto.

No podía ya detenerme y de verdad estaba disfrutando tanto de todo eso que no podía ni pensar. Nos devoramos la boca mutuamente, hundiéndonos con pasión y subí una de mis manos hasta mi propia espalda para desabrocharme yo misma el sujetador esperando que él me lo quitara y pasando por completo del hecho de estar en medio de toda esa gente. Cada uno estaba a lo suyo así que tampoco era como si se fueran a asombrar ni mucho menos. Podía sentir lo excitado que iba y ya colé una de mis manos dentro de sus boxers para seguir estimulándolo cada vez más.

Sentí como se desabrochaba el sujetados y suspiré cuando coló su mano por dentro de mis boxers excitandome todavía mas de inmediato... La ayudé a quitarse del todo el sujetador y enseguida volví a sus labios, degustando sus labios sin cortarme demasiado- Joder...-murmuré casi sin pensar. Bajé mis manos hasta mis boxers y me lo fui quitando como pude mientras seguía besándola cada poco y sentía como mi respiración se iba acelerando poco a poco por toda la situación.

Ben me quitó enseguida el sujetador y continuamos besándonos sin detenernos. Enseguida ya fue quitándose él mismo los boxers lo que me excitó mucho mas porque era evidente que ya no podia esperar y eso me encendía mucho. Lo fui ayudando un poco mientras no podíamos separar nuestras bocas, al final se lo quitó del todo y no dejé de acariciarlo estimulándolo sin cortarme, buscando que cada vez estuviera más excitado.

Me ayudó con mis boxers y es que cada vez estaba más excitado, no dejaba de acariciar mi miembro y toda la situación ya me estaba superando. Entre los besos, el roce continuo de su cuerpo, los aromas, los gemidos... Joder, si es que no podía estar más excitado.La tomé de la cintura ayudándola a venirse algo mas sobre mi y me fue ayudando a hundirme en su interior de una vez.

Ya estábamos totalmente desnudos y es que así con esa intensidad en los besos y en las caricias no podía ni pensar. Me sentía flotar de verdad, los aromas del sitio hacían que no pudiera hacer más que dejarme llevar por completo, perdiendo el control en sus labios. Ya me ayudó a hundirse en mí y lo sentí embestir con fuerza. Giré para quedar contra el borde del jacuzzi y lo cogí con intensidad por la espalda, casi clavando las yemas de mis dedos por su espalda y ciñiéndolo más contra mí, bajando hasta su trasero y ayudándolo a penetrarme con fuerza, suspirando en cada estocada. Me estaba desquiciando todo eso, no podía gustarme más.

Giró haciendo que quedara ahora ella contra el jacuzzi y suspiré aumentando poco a poco el ritmo de mis embestidas, sintiendo como me agarraba del trasero y como me ayudaba a penetrarla con fuerza. Mis labios abandonaron su boca y fueron hacía su cuello, estampando besos por allí, sintiendo su cuello húmedo bajo mis labios... Ese sitio era jodidamente perfecto y lo mismo me daba estar rodeado de gente bañándose o de gente que también se lo estaba montando, ahora mismo solo me podía centrar en ella y en hacerla disfrutar lo más posible.

No se detuvo ni un instante, buscándome en cada embestida y luego ya fue llevando lentamente su boca hasta mi cuello, comenzando a besarme por allí, obligándome a que estirara un poco la cabeza para dejarle mejor comodida. Lo sentí continuar moviéndose una y otra vez, cada vez más acelerado y fui soltando gemidos de placer que no tenía sentido estarse conteniendo. -Joder... Ben...- murmuré encantada, es que me estaba haciendo el amor de un modo que adoraba y todo ese sitio era tan perfecto que mis problemas ya no existían... era como si hubieran pasado siglos desde el encuentro con Zach y todo lo demás. Sólo podía pensar en Ben, en su miembro dándome placer como cada vez, en su piel, en su boca, devorándome poseída por el deseo y la ferocidad que ninguno de los dos se molestaba en ocultar.

Escuché como gemía eso y sonreí levemente contra su cuello, me encantaba cuando hacía eso, como si quisiera decir algo pero no la salieran mas palabras. Suspiré contra su cuello y terminé dejando allí mis labios sin poder ni besarla ni nada por la intensidad de cada embestida. Mi cuerpo parecía buscarla en cada movimiento y no podía dejar de penetrarla y de intentar profundizar lo más posible, sintiéndonos cada vez más excitado... No podía estar ahora mismo disfrutando más de todo esa situación. Decididamente adoraba ir con ella a esos bares de vampiros...

Continuó moviéndose y poco a poco fui sintiendo que íbamos más al límite. ya ni siquiera podía besarme. Simplementeiba soltando gemidos a medida que lo sentía y es que no podía hacer más nada que dejarme llevar, lo estaba disfrutando realmente mucho. No había nadie como Ben, podía ser que fuéramos bastante raros y todo eso, pero es que era de verdad inevitable, nadie en el mundo podía lograr hacerme sentir tan bien como él. Lo adoraba, mi cuerpo lo adoraba, cada fibra de mi ser lo adoraba... era suya desde el principio, así debía ser, lo sabía como sabía mi propio nombre.

No podía estar disfrutando mas de todo eso, el agua con color rojizo se movía a nuestro alrededor, chocando con nuestros cuerpos en cada embestida. Cada vez estabamos mas cerca del orgasmo y yo no podía ni controlarme. Fui aumentando el ritmo cada vez con más intensidad, jadeando ligeramente contra su cuello hasta que ya no pudimos más y al final terminamos estallando llegando al orgasmo entre suspiros.

Nos movimos sin poder salir de esa especie de "transe" en la que estábamos, estaba siendo realmente genial y el agua con sangre de ese jacuzzi de verdad que ayudaba a que todo fuera increíble. Llegamos al orgasmo tras un par de estocadas y me abracé a él sintiéndolo aún en mi interior, suspirando y jadeando al tiempo que escuchaba también como él había estado totalmente encendido hasta el final. -Joder, Ben... eres... te adoro.- murmuré besando su hombro y relajándome ya un poco antes de que saliera ya de mi interior. La sangre del agua hacía que todos nos "alteráramos" más, encendía el deseo por todas partes, ese olor era embriagador... no sé cómo haríamos para salir de allí, aunque de momento no parecía estar en nuestros planes para nada.