Despidiéndome (Ben) +18

Recuerdo del primer mensaje :

Luego de pensarlo un poco decidí que me iría a Europa. Al menos por unas semanas... así que decidí pasar por casa de Ben a despedirme de él.
No habíamos vuelto a hablar desde la vuelta de su boda... y yo había estado demasiada llena de trabajo y llenando solicitudes porque pensaba comenzar de una vez la Universidad.

Llamé a la puerta y me quedé apoyada en el marco esperando que abriese.

- ¿Y qué esperabas?- dije mirandola por lo que habia dicho- Si dices que vas a volver no tiene sentido nada mas...- dije por lo que la habia dicho de "bueno pues suerte"

Cogí la taza de café y le dí un sorbo. -Para no sentirle el gusto... reconozco que estás aprendiendo a hacerlo.- le dije volviendo a mirarlo con una sonrisa.
-Supongo que tienes razón... si digo que voy a volver no tiene sentido...- repetí lo que había dicho. La verdad es que no sabía si volvería... pero me era más fácil pensar que sí.

- Ya... el problema es que los dos sabemos que es poco probable que vuelvas- dije en parte porque lo pensaba y en parte porque podia leerlo en ella- Si de verdad quieres que te recuerde necesito mi libro...-dije ya que una vez habiamos hecho ese trato de que me regalaria un libro con una dedicatoria.

Sonreí cuando dijo eso... -Pues en parte vine a traerte eso.- dije señalándole el sofá en el que había dejado mi bolso.

-Pero te habías puesto tan cerrado que no me daban ganas de dártelo...- dije lo último en broma para picarlo.

- Espero que por lo menos sea un libro bueno...-murmuré mientras iba hacia el salón donde habia señalado su bolso.

-Lo és.- le dije dejando que pasara hacia la sala. Había averiguado y era un libro de la época en la que estaba aún con vida... sabía que no lo tenía y que le gustaría tenerlo.

Adentro, en la primera hoja, estaba mi dedicatoria:
Ben,
Probablemente acabes siendo para mí el tío más cabrón de todos,
pero no cambiaría uno sólo de los instantes que pasé contigo.
Por esos momentos juntos,
los buenos y los malos,
por un puente, por un árbol, por unas copas de más...

Siempre te querré.
Alma.
(una niña pija, caprichosa y rebelde... que adora el café)

Me entregó el libro y solo con leer el titulo ya me llevé una sorpresa, podia recordame leyendolo cuando todavia era humano junto a mi hermano... Fue un recuerdo que me impactó pero para no seguir pensando en eso lo abrí rápidamente para mirar la primera hoja.

Alli estaba su dedicotoria, con esa letra tan moderna y tan diferente de la mia de hacia siglos... Lo cerré en cuanto acabé de leer la ultima palabra. Por un momento habia conseguido que me quedará sin palabras.

Lo seguí con la vista hacia el sofá sin moverme del marco de la puerta y ví como abrió mi bolso para coger el libro.
Se quedó mirándolo un instante sin decir ninguna palabra... no sabía si le había gustado, pero esperaba que sí.
No me atreví a acercarme, había pensando en mandársela por correo para evitar pasar precisamente por este momento... pero al final era mejor dárselo y ya.
Alcé la vista hacia él esperando que dijese algo pero sin moverme de mi sitio.

Permanecí en silencio durante un minuto entero, solo roto por su respiración y rápido sonido de su corazón, nervisosa como estaba esperando mi reacción. No pude evitar sonreir ligeramente.

- Gracias- dije al fin- Si no fuera un cabrón vampiro insesible se me habria saltado alguna lágirma- dije sin pizca de ironia por esta vez ya que en cierta manera me habia emocionado de verdad.

-Ya... agradezcamos eso, que te pongas melancólico sería de verdad demasiado para un sólo día.- le dije intentando restarle importancia a todo lo que había dicho en esa dedicatoria como siempre hacía que las conversaciones se ponían complicadas... Pero la verdad es que todo lo que había dicho, de verdad lo sentía.

- No podria olvidarte ni aunque quisiera...-murmuré como si no la escuchara antes de ponerme en marcha y guardar el libro en una de las estanterias- Pero la idea del libro me gustaba demasiado como para decirte que lo dejaras- dije con una pequeña sonrisa. Siempre la habia dicho que no la recordaria, que apenas recordaba a un par de personas de estos 200 años que tenia de vida, pero era mentira, la cuestión es que era algo doloroso y preferia no tocar el tema y no admitirlo.

-Qué?¿Te has estado burlando todo este tiempo de mi?.- le dije mirándolo y yendo hacia la sala con una sensación entre enojada y contenta. Cabreada porque me había tomado el pelo y contenta porque, con o sin libro, al fin y al cabo no me olvidaría tan fácil.

- Si quieres mirarlo de ese modo... si.- murmuré sin cortarme mientras me giraba quedando de espaldas a la estanteria para ver como entraba en el salón.

Me acerqué a él peligrosamente como siempre hacía... -Pues me gusta más la idea de mirarlo como... no sé... una historia, una chica conoce un chico y las cosas no salen perfectas, pero en el fondo siempre se sentirán especiales... porque se conocen aunque no se conozcan... algo así.- le dije con una sonrisa mirándolo a los ojos.

- Porque se conocen aunque no se conozcan...-repetí sus palabras- sabes que eso no tiene ningún sentido, ¿verdad?- dije con una pequeña sonrisa mirandola.

-Si lo tiene, búscaselo un poco y verás que lo tiene.- le dije mirándolo a los ojos con una sonrisa.

-¿Nunca has sentido que puedes vincularte con alguien aún sin llegar a conocerlo nunca del todo? Sentir que lo puedes entender, que puedes saber lo que siente, desear para él lo mejor... y aún así saber que eso es imposible, que ni siquiera lo conoces. Qué la distancia sigue siendo enorme.-

- Si, creo que puedo llegar a entenderlo- murmuré mirandola tras escuchar lo que dijo y sin tardar mucho en contestar.

Sonreí cuando dijo eso... -De véras me alegra que te haya gustado el libro, me costó encontrarlo y luego decidir la dedicatoria me llevó un par de semanas.- dije exagerando todo con gestos. -Pero al final decidí poner simplemente la verdad... y creo que se hizo más fácil.-

- Si sobre todo por lol de cabrón, ese es un elogio muy halagador- dije con una pequeña sonrisa antes de contestar mas en serio- Has acertado con el titulo...y ese libro... me ha traido algunos recuerdos del pasado... y la dedicatoria también- murmuré con una pequeña sonrisa.

Sonreí cuando dijo lo de cabrón... -Pues me alegra de verdad.- le dije siendo sincera y cogí mi taza para beber una vez más mientras me iba hacia el sofá para tumbarme en él y tomar más tranquilamente.

Asentí con la cabeza y no dije nada mas respeto al libro, volví yo también hacia el sofá y me senté a su lado.

-Iré con Stefan.- dije bebiendo un sorbo de café. -A Europa, le pedí que me acompañara...- le comenté.

- Lógico...- dije sin más mientras ponia los pies sobre la mesita para estar más cómodo, eso me soprendia algo más pero era verdad lo que habia dicho, era lógico.

-Sí?.- pregunté. -De véras crees que es lógico?.- continué, ya que en verdad lo había hecho más en un arrebato que luego de meditarlo demasiado.

- Claro, cuando se quiere a alguien es dificil estar separado de él por mucho tiempo- dije enarcando una ceja, ya que eso era lo lógico.