Despidiéndome (Ben) +18

Recuerdo del primer mensaje :

Luego de pensarlo un poco decidí que me iría a Europa. Al menos por unas semanas... así que decidí pasar por casa de Ben a despedirme de él.
No habíamos vuelto a hablar desde la vuelta de su boda... y yo había estado demasiada llena de trabajo y llenando solicitudes porque pensaba comenzar de una vez la Universidad.

Llamé a la puerta y me quedé apoyada en el marco esperando que abriese.

No sabía cómo lo habíamos logrado pero después de todo ahí estaba, con Ben dentro mío, sintiéndo cada movimiento, ahogando en su hombros los gemidos que me producían cada una de sus estocadas.
Era una sensación deliciosa, y por más que lo pensara no podía sentirme culpable, disfrutarnos así era lo menos que nos merecíamos... ya bastante nos habíamos contenido.

Cada vez se estaba volviendo mas dificil el pensar a causa del placer. Fui aumentando el ritmo mientras intentabamos controlar los gemidos, ya que aunque parecia que se nos habia olvidado seguiamos en la discoteca. Continuamos asi un rato antes de acercarme a su cuello y darla algún que otro beso, dandola a entender lo que pasaria para que no la pillara por sorpresa.

Las embestidas continuaron por un rato, el placer que sentía hacía que no pudiese pensar en nada.
Sólo deliraba de sentirlo entrando dentro de mí, de pronto se acercó a mi cuello y me dió algunos besos... entendí que ya estaba por llegar el momento y traté de relajarme dedicándome sólo a disfrutar aunque en parte esta espectante porque no tenía idea de cómo sería.

No deje de marcar el ritmo de mis embestidas mientras intentaba concentrarme ya que no queria tener ningún despiste pero de verdad que con el placer que sentia se hacia un poco dificil. La dí un par de besos más por el cuello antes de desenfundar mis colmillos y morderla por fin, aquel lazo extraño e intimo de sangre se comenzó a formar enseguida.

Continuó marcando el ritmo mientras me daba algunos besos todavía en el cuello.
Sabía que llegaría ese momento y efectivamente cerré los ojos y al instante sentí sus colmillos en mi cuello. Quizá me dolió, pero de pronto era tal la mezcla de sensaciones que el dolor era algo que no importaba en lo más mínimo.
Sentí un placer indescriptible, diferente no lo había sentido nunca... me sentía extraña y a la vez excitada, embriagada por lo que estaba ocurriendo.

Habia olvidado lo intimo que era el intercambio de sangre... ultimamente no bebia de humanos y a Aitana no la gustaba mucho el intercambio de sangre asi que la sensación me pilló por sorpresa y sobre todo por la intensidad ya que intercambiar sangre mientras se mantenia sexo era indescriptible.

Noté como Alma se aferraba a mi mientras yo bebia las ultimas gotas de sangre, habia llegado a su limite, asi que lentamente me separé de su cuello apenas unos segundos antes de que estallaramos llegando al climax.

[off: pon el +18 ]

Me aferré a él cuando me sentí al límite... me sentía explotar, Ben acabó de beber mi sangre y se apartó un instante antes de llegar al clímax.
Había sido totalmente increíble, no podía poner en palabras la mezcla de sensaciones que me invadía.
El espasmo de su última estocada fue seguido de un suspiro que no podía disimular, me daba igual todo, sólo quería sentirlo cerca mío hasta el final.

Salí de su interior y me acosté a su lado por un momento tras un beso mientras esperaba a que recuperara la respiración. Me apoyé en ella rodeando su cintura con un brazo escuchando como poco a poco su corazón iba mas lento, me parecia el sonido mas bonito del mundo en este momento... Habia sido increible.

Me quedé allí quieta al lado suyo, buscando que mi respiración se normalizara... había sido el momento más íntimo que recordaba haber tenido, y que estuviésemos en el sofá de los reservados de un club perdido, no cambiaba en nada el hecho de que había estado increíble.

No me daban ganar de irme, seria volver a la realidad después de todo...Pero no podiamos estar asi mucho rato desnudos en aquel sofá, cualquiera podria llegar a entrar.-¿Te ha dolido?...-la pregunté mirandola rompiendo el silencio mientras acariciaba inconscientemente su cintura. En un principio tenia pensado decirla que nos vistieramos pero me habia salido lo otro sin pensarlo.

-Algo... pero fue... no sé... agradable.- susurré mirándolo a los ojos. -No sé como explicarlo... sentí muchas cosas, pero estuvo increíble.- le dije siendo sincera.
-Y a tí? Qué sentiste?.- pregunté, tanto habíamos hablado de eso de que bebiera de mí que ahora quería saber si había colmado sus expectativas.

- Te dije que seria increible...-susurré mientras la apartaba un mechon de pelo de la cara, estaba preciosa y saber que para ella también habia sido increible era importante para mi.- Sentí... todo... ha sido mejor de lo que me habia esperado-murmuré mirandola a los ojos, me habia sentido mas unido que nunca a ella.

Sonreí cuando dijo eso y bajé la mirada... -Será más dificil ahora.- le dije pensando en ello, de verdad me sentía parte de él y sabía que lo que seguía eran días de sufrir por esto que sentía. Pero había valido la pena.

Me incorporé y comencé a ponerme la ropa interior sin volver a mirarlo... había cruzado todas las líneas y de pronto sentía que no había tierra firme para mí, nunca estaría en paz.

- Si...-murmuré únicamente porque yo también lo sentia. La observé y suspirando me incorporé yo también para vestirme, habiamos perdido todos los progesos en una noche... Seria muy dificil.

Lo miré con una sonrisa y una vez que me coloqué el vestido me recosté en el sofá, esperando que acabara de vestirse e hiciera lo mismo.
Instintivamente llevé mis manos al cuello para sentir si tenía una marca de su mordida... y sentí que tenía una pequeña herida, retiré los dedos con una pequeña gota de sangre y me quedé mirándola y pensando en todo.
Lo quería, claro que lo quería... siempre lo había querido, y al final él siempre querría a Aitana... ya todas las cartas estaban sobre la mesa.

Me terminé de vestir abrochandome los ultimos botones de la camisa y la miré. Me acerqué hasta ella y cogi su mano chupando con picardia su dedo en el que tenia la gota de sangre y después sin soltar su mano me pusé en cunclillas enfrente suya para quedar a su altura. No me gustaba verla tan mal, y aunque sabia que los arrepentimientos llegarian no queria que sufriera por mi culpa, me imporataba demasiado.

- Alma...-murmuré alzando la cabeza para mirarla- Sabes que puedo hacer que me olvides, ¿verdad?-dije con todo el dolor de mi corazón pero dandola las opciones.

Miré lo que hizo con mi dedo y luego escuché lo que dijo... sonreí y a la vez mis ojos volvieron a llenarse de lágrimas.
-Sé que sería lo más fácil.- le dije mirándolo... -Pero aunque me duela no quiero olvidarte.- le dije sinceramente.
-Ben... Me has costado demasiado trabajo.- le dije tratando de tomármelo con algo de humor, pero era poco creíble. -Todas esas provocaciones, cada palabra, cada sonrisa... no quiero tirar todo eso por la borda.- le dije tomando su rostro con la mano de la que había chupado la gota de sangre.

No sonreí porque no era nada gracioso, de verdad que estaba siendo muy dificil- Esta bien....-murmuré mientras la colocaba el pelo con una mano para que no se viera la marca de la mordedura cuando salieramos del reservado- Si cambias de idea, hazmelo saber- dije intentando sonar lo mas natural posible mientras la veia con los ojos llorosos.

-No voy a cambiar de idea.- le dije ya poniéndome de pie frente a él y dándole otro beso pero dulce y pausado. -No es tu culpa, ni la mía... hay cosas que simplemente no se pueden evitar. Y tú eres inevitable para mí, siempre lo has sido.- le dije mirándolo a los ojos.

- Es que eres un iman para los vampiros...-la recordé intenando bromear un poco mientras apoyaba mi frente contra la suya- Te voy a hechar de menos...-la aseguré con un susurró.

-Eso espero... al menos los primeros 200 o 300 ños.- le dije ya bromeando un poco yo y tomándolo de la cintura me decidí a descorrer la cortina para salir del reservado.
Pensé que podría, pero la sensación de descorrer esa cortina, fue como si descorriera lo que acababa de pasar... como si tuviera que dejarlo atrás para volver a esa discoteca... me detuve, no podía avanzar.

Sonreí ligeramente sin poder evitarlo, ya que no decia exactamente pocos años. Estabamos ya por salir cuando se detuvo. Me giré quedando enfrenté suya y mirandola- ¿Qué?- dije sin enternder porque se habia parado.

-Nada.- dije mirándolo con una sonrisa. -Una sensación, me cuesta irme de aquí...- dije refiriéndome al reservado. -Pero al final de eso se trata... de saber irse.- dije con una pequeña sonrisa y luego de tomar aire profundamente salí del reservado trayendo a Ben conmigo.

No sabia que contestarla a eso, salimos del reservado y la cogi de la mano para caminar entre la gente bailando hacia la salida. Todo era como volver a la vida real... se habia sentido todo tan fácil allí con sus labios junto a los mios...

Caminamos de la mano entre la gente bailando, volvimos a subir la escalera yendo hacia la salida y al cabo de un rato ya estaba sintiendo otra vez la brisa en mi cara.
El viento corría mi cabello y me movía mi vestido. Me giré hacia Ben y como si aún tuviese el derecho de hacerlo en la vía pública, volví a unir mis labios con los suyos... dejándome llevar en ese beso, confirmando que todo lo que había ocurrido estaba bien, que ambos lo habíamos querido, que no me me arrepentía de nada... aunque tuviera que cargar con las consecuencias.