Buscando tortugas (Ben & Alma)

Había quedado con Ben en que me acompañaría a elegir la tortuga. Me puse un jean pitillo y botas planas de caña alta. Llevaba un sweater rojo y ajustado y una cartera bandolera en color suela como las botas.
Llegué en horario y me crucé a un kiosko a comprarme unos cigarros para hacer tiempo hasta que Ben llegara...

Llegaba tarde, como siempre. Por más años que viviera jamás aprendería a ir puntual a los sitios. La vi a lo lejos oor su sweater rojo y sonreí cuando me acerqué ya a ella.

- Siento el retraso chèrie- dije sonriendo y dandola un beso.

-Pas de problème.- respondí sonriendo por lo de su tardanza luego de que me besara. Abrí la cajita de cigarros y enseguida me encendí uno.

Sonreí y ni bien rompimos el beso la vi sacar un cigarro.- ¿Dejaras de fumar algún día?- dije sonriendo mientras empezabamos a andar.

-Mmm... puede que sí.- dije, si llegaba a convertirme alguna vez probablemente no me darían ya ganas de fumar...
-¿Cómo eran los nombres que te habias pensado para las tortugas?.- le pregunté después.

- Lo dudo mucho- dije sonriendo por lo primero que dijo antes de escuchar su pregunta- Woody y Molly- dije por los nombres que había pensado.

-Vale. Que con mi memoria de pez ya ni me los acordaba...- dije sonriendo porque ahora que los repetía ya los recordaba y me habían parecido realmente simpáticos.
-Cuéntame qué has estado haciendo...- le dije por sacar un tema de conversación mientras comenzábamos a andar y yo seguía con el cigarro.

- Pues nada en especial...-dije sin saber que contarla mientras caminabamos- Bueno, mi prima me llamó, por fin ha dado señales de vida- dije sonriendo.

-Vaya... eso sí es una novedad.- le dije por lo de su prima con una sonrisa. -Y porqué ahora te ha llamado? Ya están mejor las cosas entonces entre ustedes?.- le pregunté porque sabía que habían acabado bastante mal y era una pena ya que se querían mucho.

- Si, creo que estamos mejor, me ha llamo porque volvía a París y quería saber donde andaba... Se ha alegrado bastante al saber que me he separado- dije entornando los ojos- Pero por lo demás bien- dije sonriendo porque me había hecho ilusción que me llamara de nuevo y eso.

Lo escuché atenta. -Me alegro que estén mejor las cosas...- le dije con una sonrisa porque de verdad que sabía que era importante para Ben. -Y le has contado algo de mí?.- le pregunté porque sabía que no le hacía gracia todo eso y justo era una humana... ni siquiera sabía si me recordaría de la única vez en la que habíamos hablado.

- Aja...-dije sonriendo cuando me preguntó eso porque me hacía cierta gracia, ya me preguntó algo así con Gus- Sus palabras textuales han sido las de siempre: "Pobre chica"-contesté. Siempre me decia lo mismo, habían pasado muchas chicas por mi vida en estos doscientos años y ya no me tenía demasiado fe la verdad...

Sonreí cuando dijo eso. -Me cae bien.- dije sonriendo por la respuesta que le había dado. -Y tiene razón, que soportarte a tí no es algo sencillo ni nada... hay que tener mucho coraje.- dije en broma y con cara de drama como si de verdad fuese una ardua tarea.

- También me ha dicho después algo así- reconocí con una sonrisa porque le había contado a grandes rasgos todo lo que había pasado entre nosotros y que no sabía.

Volví a sonreir cuando dijo eso. -Ya... que vas a acabar dándome pena de la poca fe que parece que te tiene...- dije con una sonrisa mirándolo y acercándome para estamparle un beso así nomás en medio de la calle antes de seguir caminando como si nada.

Sonreí pero ya ante su beso no dije nada más- ¿Y tu qué has andado haciendo?- dije por dejar de hablar de mi.

-Nada la verdad...- dije pensando en eso. -He salido a correr a la mañana, antes lo hacía con Lucas cada día y ya luego perdí constancia... pero ahora quiero ponerme un poco al día, luego me fuí al Ipswich a tomar un café y después ya volví a casa y estudié un rato... La verdad nada emocionante...- le dije con una sonrisa encogiéndome de hombros.

- Que aburrida es tu vida sin mi...-dije bromeando y entornando los ojos por meterme un poco con ella, aunque me había causado gracia eso de que antes salia a correr con Lucas... Lucas aparentando debía haber sido gracioso de ver.

-Ya... pues podrías acompañarme a correr al menos, Lucas lo hacía...- dije quejándome por eso de que mi vida era aburrida sin él. -Que así sóla claro que me aburro...- dije mirándolo con carita de buena, aunque estaba bastante segura de que no le haría mucha gracia acompañarme... pero no perdía nada intentando.

- Ya... pero yo no soy Lucas y no pienso perder el tiempo en eso... Ya bastante tengo con ir contigo a la universidad- dije entornando los ojos.

Sonreí negando con la cabeza porque ya me esperaba esa respuesta. -Hay Ben !! Si no fueras tan lindo cuando te ponés cabrón...- dije sonriendo y tomándomelo a gracia para variar mientras lo miraba de reojo. -Y claro que no eres Lucas, aunque no sábes cómo lo echo de menos...- dije después pensando en eso. La verdad es que había acabado siend un buen amigo, una lástima que se fuera sin despedirse...

- Tenia una novia muy rara- dije para toda respuesta como si fuera suficiente motivo para irse. La verdad es que había pasado tanto en Europa antes de volver a Fell´s que no sabía cuando se había ido ni nada, era raro.

-Angelique.- dije. -Llegué a conocerla y sí era rara... creo que estaba algo celosa, no sé.- dije porque un poco esa idea me había dado alguna vez Sheila pero ya ni sabía. -O quizá fuese desconfiada por naturaleza... Como sea, Lucas era un buen tío, me preparaba el mejor café del mundo, corría conmigo y hasta me hizo el vestidor que tengo en casa...- dije recordando eso. -Además, él fue quien me dió tu dirección... así conocí a Aitana.- dije recordando eso...

La escuché y sonreí ligeramente porque recordaba eso de la dirección- Pues yo le conocí en el bosque y fue... raro- dije sin saber como definirlo- Pero él me caia bien, aunque su novia no tanto...-dije porque habíamos tenido más de una movida.

-Ya... quizá algún día vuelva a verlo, quien sabe...- dije con una leve sonrisa encogiéndome de hombros. -De momento, y considerando que mi novio no tiene ni un poco de ganas, tendré que buscarme otro compañero para ir a correr...- dije con carita de pena en broma. Ya llegamos a la puerta de la tienda de mascotas así que miré la vidriera en la que estaban las tortugas. -Entramos?.- le dije, sabía que no sería su luagr favorito en el mundo.