+18 Comenzando un nuevo día (Alma)

Recuerdo del primer mensaje :

Me costó horrores quedarme dormido esa noche como casi siempre y por mañana cuando abrí los ojos ya era algo tarde. Suspiré porque ni habíamos puesto el despertador para ir a la universidad ni nada, pero ni me molesté en despertarla, por un día que no fueramos no pasaría nada. Me libré de sus brazos intentando no despertarla ya que seguía acurrucada contra mi y ya me levanté y tras ponerme unos boxers y unos simples vaqueros fui hacia la planta de abajo sin molestarme ni en ponerme una camiseta y hacer algo mientras ella se levantaba.

No pude evitar sonreir cuando dijo eso de que sonaba amenazador porque no había sido la intención pero entendía que lo sintiera de ese modo. Ya dijo lo demás y me mordí el labio levemente. -Está bien... está bien.- dije tomando su mejilla con una de mis manos. -Sólo, sé siempre sincero conmigo, vale? Si sientes otra cosa, si te atrae otra chica, si te está carcomiendo la culpa por una tontería... sólo dímelo. Nada me da más confianza que saber que me vienes con la verdad.- le dije siendo enteramente sincera con él, me acerqué a sus labios sin dejar de mirar sus ojos y lo besé suavemente antes de separarme y mirarlo una vez más. Lo intentaría, tenía que funcionar... lo quería demasiado, eso tenía que servir de algo.

- Lo sé, lo sé...-murmuré suspirando porque siempre había sido una de las principales "normas" eso de contarnos todo eso, aunque era cierto que a mi a veces me costaba algo más y no terminaba siendo sincero hasta pasado un tiempo cuando ya carcomía la culpa- Tu igual, ¿vale?- Se acercó a besarme y suspiré siguiendo un poco hasta que se apartó y apoyé un poco mi frente contra la suya cogiendola de la cintura. No podía ser que no tuvieramos un poco de paz y siempre estuvieramos así entre dudas y demás, estaba cansado... Solo quería ser feliz con ella y ya.

-Vale.- asentí cuando apoyó su frente contra la mía. -Tendrás que arreglártelas para cambiarme el humor, que sepas que me había levantado estupendamente y ahora me siento agotada otra vez.- le dije con picardía cuando me cogió por la cintura. -Además siempre el sexo fue un punto a tu favor.- dije ya picándolo un poco por eso que había soltado al pasar sobre que estaba con él solo por el sexo.

Sonreí ligeramente cuando dijo eso porque era cierto que cada conversación de esas era como si agotara. Suspiré sin apartarme todavía de ello- Creo que te dejaré una semana sin sexo apartir de ahora... Para que empieces a valorarme por otras cosas- dije picandola un poco y sabiendo que lo decía solo por picarme por lo que había dicho antes yo mismo.

Sonreí de lado cuando dijo eso de que me dejaría sin sexo una semana. -¿Lo harías?.- le pregunté mirándolo a los ojos con una sonrisa y un poco por picarlo más que por otra cosa. -Es que si al menos supieras cocinar, no sé... pero no me das opciones.- dije picándolo con una sonrisa y sin apartarme de él por eso de que lo valorara por otras cosas.

No sabía si realmente sería capaz si me provocaba pero si no lo hacía tenía bastante claro que no seria taaan dificil- Claro que sería capaz... ¿No me crees?-murmuré sonriendo y aprovechando que la tenia sujeta de la cintura la estreché más contra mi haciendo que se arrugara un poco la camisa bajo mis manos- Y lo siento, no sé cocinar pero soy muy bueno escuchando, cosa que tu no haces...-dije picandola y mordiendo su labio inferior.

Sonreí cuando dijo eso de que sería capáz porque sabía que podía hacerlo, pero también sabía que podía ponérselo bastante complicado. Ya me estrechó más y sonreí cerca de sus labios cuando dijo eso de que me escuchaba. -Ya... puede ser, ¿me reprocharás mucho eso?.- dije después por lo de que yo no lo escuchaba, en verdad no era que no lo escuchase si no que me olvidaba lo que me decía...

- Te lo reprocharé siempre, no hay dudas...-murmuré mirandola con una pequeña sonrisa. No sabía como saliamos siempre bien parados, la conversación de antes no había sido precisamente fácil y ya la volvía a tener pegada a mi hablando de "tonterías". Al final iba a ser cierto eso de que eramos inevitables...

-Rencoroso.- murmuré en broma entrecerrando los ojos mientras lo sentía aún tomándome de la cintura y no dejaba de mirarlo. No sé qué diablos había allí entre nosotros, pero era claro que por más que nos esmeráramos en complicarnos la vida, de una forma o de la otra acabábamos juntos y como si nada hubiera pasado.

- No sabes tu cuanto....-murmuré suspirando acorté la distancia y en vez de besarla mordí su labio inferior reteniendolo por unos instantes y succionandolo con una sonrisa picara.

Alcé una ceja cuando me respondió eso de que no sabía cuán rencoroso era. Enseguida me mordió el labio y se quedó sujetándolo y succionándolo mientras no dejaba de mirarme. -De véras eres tan rencoroso?.- le pregunté cuando me soltó y pasé mis manos por detrás de su cuello.

- Claro que lo soy...-dije cuando separé mis labios de los suyos y sentí sus manos a mi cuello- ¿De verdad te sorprende tanto?- dije enarcando una ceja porque no era tan raro teniendo en cuenta que incluso cuando me picaba un poco por cualquier tonteria me costaba salir de ese estado...

-Será que también he olvidado eso de tí.- le dije picándolo con una sonrisa por eso de que no me acordaba las cosas. Claro que era de picarse fácil pero lo de rencoroso sonaba bastante peor. -No sé, siempre me has gustado cuando te pones hecho un cabrón. Pero el rencor me suena más a vengativo... no sé, es feo.- dije mirándolo y entrecerrando los ojos como si lo escudriñara mientras continuaba tomándolo del cuello.

- A veces parece que olvidas que hablas con un vampiro...-dije entrecerrando los ojos de broma porque por lo general eramos mucho más vengativos que los humanos- Y deja de picarme que al final lo vas a conseguirlo...-dije cuando dijo que habría olvidado también eso de mi- Pero da igual, ya esta decidido, te quedas sin sexo una semana... Espero que lo de ayer te sirviera...-dije soltando su cintura.

Escuché lo que decía de que olvidaba que era vampiro y en parte tenía razón, que era obvio que era más vengativo... precisamente él ya me había contado alguna de sus andanzas con ese rollo.
-Noo...- le dije con carita de buena cuando me soltó de la cintura y aún teniéndolo por el cuello. -Ahora que estamos bien y reconciliados... ¿no te han dicho que el de reconciliación es uno de los mejores?.- le dije con picardía a ver si colaba por eso de que me quedaba toda la semana sin sexo.

Sonreí por eso- Claro que me lo han dicho, y no solo eso, si que lo he podido comprobar por mi mismo- dije picaramente- Por eso me parece un buen "castigo" para ti por no hacerme caso...-dije picandola.

-¿Bromeas?.- le dije mirándolo. -Que no te hago caso? Me parece que el que no tiene buena memoria eres tú...- le dije mirándolo y entrecerrando los ojos, no quería volver al tema de discusión, pero la verdad era que esta vez el que se salía con su modo de hacer las cosas era él. -Piénsalo, yo creo que de tan buena que soy me merezco algo...- dije con carita de buena.

- Tendré mala memoria pero tu no me escuchas...-dije mirandola un poco mal de broma antes de escucharla decir lo otro- ¿Algo como qué?-murmuré haciendome el tonto con una sonrisa mientras la miraba.

No dije nada de lo primero y ya escuché lo demás. -No sé, sorpréndeme.- le dije con una sonrisa pícara mirándolo a los ojos.

Enarqué una ceja y sonreí- No te sorprenderé, recuerda que tienes que estar 7 días, una semana... Sin sexo- dije sin dejarme convencer taaan fácil.

-Vale... tú verás.- dije ya quitando mis manos de su cuello. Fui a la mesita y cogí la taza de café. Me giré a mirarlo y con la otra mano desabotoné lentamente mi camisa (la suya)... hasta que quedó abierta completamente. Lo miré un segundo antes de comenzar a andar hacia la cocina. Me dejé caer una manga y pasando la taza a la otra mano dejé caer la otra ya dejando la camisa por el suelo y quedando con el torso desnudo pero de espaldas mientras entraba a la cocina como si tal cosa, sólo con la parte de abajo de mi ropa interior.

Escuché lo que dijo y por un momento pensé que de verdad lo dejaría pasar hasta que fui viendo como se quitaba la camisa ella sola. Joder... Si es que sabía como volverme loco. La vi entrar y enseguida la seguí pero silenciosamente como buen vampiro. Dejo la taza y me acerqué poco a poco hasta llegar a ella, tomar su cintura desde su espalda y besar su cuello.

Entré en la cocina pensando en que iba a tirarme todo el día caminando desnuda si era necesario porque ya estaba encaprichada. Dejé la taza para lavarla y ni me había percatado de Ben hasta que me cogió por la cintura desde la espalda y comenzó a besar mi cuello sin contenerse. Respiré soltando el aire y subí una de mis manos para acariciar su cabeza al tiempo que inclinaba mi cuello en el sentido contrario para darle mayor acceso.

La sentí soltar el aire y suspiré mientras seguía besando su cuello ahora con mayor acceso mientras mis manos viajaban desde su cintura hasta su abdomenn y poco después hasta sus pechos acariciandola todavía desde su espalda.

Me besó sin detenerse mientras sus manos comenzaron a recorrer mi abdomen subiendo luego por mis pechos. Me encantaba cuando me abrazaba así por detrás, no poder tener acceso a él me desesperaba y me resultaba a la vez totalmente excitante. Sus besos se intensificaban.