+18 Contando cosas nuevas (Alma)

Recuerdo del primer mensaje :

Esa mañana había quedado con Gus. Me había ido sin despertar a Alma ni nada como de costumbre pero al final todos los planes cambiaron cuando me encontré con Miriam y pasaron todas esas cosas. Llamé a Gus para cancelar el vernos porque se me había quitado las ganas de todo de lo cabreado y asombrado que me había quedado.

Llegué a casa y subí a la habitación, con tanto forcejeo cuando me mordió me había manchado el cuello de la camisa. Me la quité poniendome otra, y me giré hacia Alma. Seguía durmiendo, seguramente no se hubiera enterado ni que me había ido. Me tumbé a su lado antes de darme cuenta y la cogí de la cintura estrechandola más contra mí antes de darla algún que otro beso por el cuello para irla despertando. Ya era tarde y no era mala hora para despertarse, aparte también la tenía que contar cosas...

La escuché y sonreí ligeramente mientras la quitaba de nuevo la botella y bebía un poco- ¿No crees que sea más fácil? Tienes que entenderlo, no hay tantos problemas...-dije sonriendo ya que había dicho que también andaba sin pareja y eso.

-Mmm... no sé, yo creo que le vería el lado positivo a tener siempre a alguien esperando en mi casa.- le dije con una sonrisa. -Vale, no voy a negarte que tener sexo con diferentes personas y demás tiene su punto... Pero será que soy una romántica.- le dije con una sonrisa mirándolo de reojo y a ver qué decía.

- Para eso puedes comprarte un perro que te dará menos problemas...-murmuré enseguida sonriendo cuando dijo que le veía el lado positivo a tener a alguien esperando en cas. Dijo lo otro y sonreí porque claro que no la creía ni un pelo pero nah, era su forma de ligar así que tenía que seguir el juego- Será entonces eso, que eres una romántica...- dije mirandola y sonriendo ladeadamente- En ese caso ya espero que te haya conquistado al haberte traido hasta aquí- dije sonriendo y mirandola como si hubiera sido un gran gesto que pudiera gustar a cualquier romántica.

-Te he dicho que ahora ya me gustas mucho, no?.- le dije con una sonrisa mirándolo cuando dijo eso de que por ser romántica seguramente me habría conquistado al llevarme a la Torre Eiffel. Le quité la botella y bebí un buen trago de tequila antes de mirar un poco las vistas, que va... no sé que tan romántica era, pero ese sitio era precioso y me encantaba, era un hecho.

Sonreí por eso viendo que pasaba por alto lo otro.- Esta bien saberlo- dije viendo como me quitaba la botella y bebía bastante. Me apoyé un poco en la barandilla quedando a su lado- París es precioso...-murmuré simplemente mientras miraba también las vistas porque eran impresionantes.

-Sí, lo es.- dije sonriendo antes de beber un poco más y pensando en eso yéndoma algo de del "papel" y más concentrada en las luces de la ciudad que en otra cosa. -Y siempre haces cosas como estás?.- le pregunté luego de un momento en silencio. -Cuando sales con chicas y eso las traes a la Torre Eiffel?.- le pregunté alzando una ceja como si se tratara de un msimo plan que tenía armado o algo por el estilo.

La escuché y sonreí un poco- No a todas... Solo a las más interesantes...-dije mirandola de reojo y volviendo al tono coqueto por no salirme del papel y seguir ligando con ella.

Lo miré alzando una ceja cuando respondió eso. -Y qué tengo yo de interesante?.- le pregunté coqueteando un poco con él y por seguirle el juego, sobre todo porque antes le había dicho eso de que era "del montón". Me giré apoyándome en la barandilla y quedando en sentido contrario a él.

- No todo el mudno se deja llevar por un desconocido con los ojos vendados, eso ya te vuelve automaticamente en interesante...-murmuré con una pequeña sonrisa viendo como se apoyaba en la barandilla.

Reí negando con la cabeza cuando dijo eso de que "automáticamente" me volvía interesante... -Yo creo que me vuelve más que nada temeraria... pero algo es algo...- dije sonriendo y mirándolo.

- Puede que si, pero eso te hace todavía más sexy así que no voy a quejarme...-dije sonriendo cuando se describrió como temeraria. La quité la botella para beber ahora yo, apenas quedaba ya alcohol, debíamos haber traido más.

Sonreí cuando dijo eso de que no iba a quejarse. -Al final te has acabado todo el alcohol... Lástima, ahora no podrás engañarme fácil...- murmuré sonriendo como si fuera toda su culpa y como si fuera a decirme una cosa por otro nomás que por ligar.

- Siempre podemos acabar la fiesta en tu casa...- dije enarcando una ceja y con algo de doble sentido cuando dijo eso del alcohol el engaño y demás- ¿Vives sola o con tus padres?- pregunté después como si no la conociera de verdad y como si buscara saber si su casa estaria libre o no.

Alcé una ceja cuando dijo eso y se me ocurrió que no era mal momento para mostrarle mi apartamento de París y de paso ver si aún funcionaban mis llaves... No había ido allí desde que nos habíamos separado. -Me ves cara de vivir con mis padres?.- le pregunté con una sonrisa pícara mordiéndome los labios provocativamente.

- ¿Por qué no? Hay muchas chicas de tu edad que lo hacen...-dije sonriendo ladeadamente al ver como se mordía los labios, decididamente no podía ser más sexy- ¿Entonces seguimos la fiesta en tu casa?-murmuré picaramente ya y acercandome algo más a ella invadiendo su espacio personal.

-Ya... pues no es mi caso.- dije mirándolo y evaluándolo un poco, se acercó mucho más y tuve que contenerme. Dijo eso y volví a mirarlo. -Mmm... vale.- dije tras pensarlo y sin dejar de mirarlo. -No queda lejos de aquí.- murmuré sabiendo que lo desconcertaría al tener un rumbo fijo.

- Me alegra saberlo...-dije sonriendo todavía cerca de ella cuando dijo que era su caso. Dijo lo otro y tuve que controlarme para no enarcar una ceja porque no lo esperaba- Pues cuando quieras...-dije sonriendo un poco y apartandome de ella para ir si quería hacia el ascensor.

-Ahora es cuando...- dije con una sonrisa sin cortarme y lo cogí de la mano para guiarlo ahora yo hasta el ascensor. Nos metimos en el ascensor y recorrí mentalmente el contenido de mi bolso intentando recordar si tendría allí las llaves del apartamento, igual tenía las de repuesto así que no sería tan complicado.

No sabía que se proponia ni donde iriamos pero aún así no me metí en su mente por seguir el juego bien y no adelanteme a las cosas que sino quitaría la gracia. Cogió mi mano para ir hacia el ascensor y sonreí, subiendo mi mano por su brazo lentamente mientras el ascensor bajaba hacia la planta baja.

No se cortó en acariciar un poco mi brazo mientras bajábamos... Tampoco lo retiré esta vez porque sería una completa hipocresía cuando acababa de decirle que lo invitaba a mi casa.
Ya salimos del ascensor y ni siquiera detuve un taxi porque mi casa no estaba demasiado lejos. -Miedo?.- le pregunté con una sonrisa pícara porque ahora era él quien iba un poco "con los ojos vendados" aunque no era el caso.

- Tendrías que hacer muchas mas cosas para que me dieras verdaderamente miedo...-murmuré con una sonrisa picara cuando dijo eso. Claro que tenía curiosidad pero igual no era miedo lo que sentía. No paramos un taxi ni nada así que me deje llevar por ella hacia donde feura que ibamos.

Sonreí cuando dijo eso porque lo tenía más que claro... -Tú procura no dejar de ser original y andaremos bien.- dije con picardía haciéndole un guiño al tiempo que lo miraba de reojo, en parte por la conversación que habiamos tenido al principio de todo.

Luego de andar un rato llegamos a un edificio bastante antiguo pero bien conservado en el que se había remodelado pisos que ahora eran muy cómodos. Entramos y nos montamos en un ascensor de metal que parecía del siglo XV pero funcionaba... Ya paramos en el segundo piso y recorrimos un pasillo hasta dar con mi puerta... Busqué sobre el marco la llave de repuesto y efectivamente estaba.
Sonreí y la abrí entrando enseguida...

Spoiler:

Caminamos diciendo apenas un par de cosas en plan coqueteos y no sabía ni a donde ibamos cuando entramos al edificil. La vi coger la llave y enarqué una ceja pensnado por un momento que ese podía ser su famoso piso de París del que la había escuchado hablar pero que nunca me había enseñado...

Entró dejandome plantado en la puerta y miré un segundo el dintel de la puerta antes de apoyarme un poco en el marco- ¿Estas segura que quieres que entre? Ya sabes... No quiero que luego te de miedo...-murmuré con algo de picardía por lo de antes pero buscando de una manera sutil que me invitara a pasar como hubiera hecho con cualquier rollo de una noche, aunque me imaginaba que para Alma sería más que obvio.

Sonreí cuando dijo todo eso quedándose en el dintel porque tenía más que claro que no podría pasar si no lo invitaba y me hizo mucha gracia ver como se las arreglaba para ser sutil. Me giré a mirarlo... -Venga, entra...- le dije con una sonrisa mientras iba a buscar algo de beber, no tenía idea de si tendría algo... pero suponía que sí.

Entré de una vez cerrando la puerta tras de mi y recorrí la entrada con la mirada. Decididamente echaba de menos todo eso de ir a nueva casa, de una "desconocida", para luego no volver a pisarla jamás tras una noche de sexo. En fin. Me hubiera quedado mas viendo el resto de su casa pero se suponia que ni nos conociamos y no era plan, así que me guardé las ganas para mas tardé y la seguí hasta donde estaba buscando las bebidas.