Un mal día (Alma)

Recuerdo del primer mensaje :

El cementerio no solía ser mi lugar favorito pero estaba tan ofuscado que lo que menos me apetecía ahora mismo era largarme a casa o a cualquier otra parte, allí por lo menos había silencio y no habría ningún humano molesto cerca. Suspiré tras andar un rato más y me senté como si nada con las piernas cruzadas sobre una de las lápidas antes de abrir el periódico que llevaba en la mano y empezar a tachar y rodear cosas que me iban más o menos. Ese desde luego no era mí día

- Mmm... ¿De verdad esperas que me acuerde?- murmuré medio de broma ante eso de los sitios donde debía dinero. Llegamos a Fell´s y al cabo de unos minutos estábamos a casa. Vi subir a Alma las escaleras, supuse que para tomar una ducha o algo, y yo fui hacía la cocina. Serví algo de sangre en dos tazas y tras calentarlas subí con ella hacia la habitación. Deje las tazas en una de las mesillas y me cambie de ropa poniéndome el pantalón y una camiseta que a veces usaba de pijama antes de tumbarme a la cama y coger una de las tazas para ir bebiendo ya un poco. Sentaba de maravilla.

Negué con la cabeza mientras sonreía cuando soltó eso de que si esperaba de verdad que él se acordase ¿Serían tantas? Joder... Llegamos a casa y subí a darme una ducha enseguida, mis huesos se habían arreglado pero esa sensación de los olores del sitio horrible en el que habíamos estado no se me iba del cuerpo. Encendí el agua para llenar la bañera y darme un baño de inmersión. Me desnudé y me metí dentro, sintiendo el agua en todo el cuerpo y relajándome un poco mientras iba disfrutando ahora los perfumes de las sales de baño. Cerré los ojos un instante intentando pensar en lo que había ocurrido y procesarlo, recordé el juego de poker, cada una de las cartas, cada jugada... tendría que esmerarme más la próxima vez.

Fui bebiendo de la taza hasta acabármela y suspiré, Alma tardaba en salir, supuse entonces que se estaría bañando o algo. Tenía muchas ganas de que saliera y poder tumbarme con ella, tenerla entre mis brazos después de todo lo que había pasado sería la mejor manera de acabar el día. Pero estaba demasiado cansado, las estacas por tanto tiempo en mi cuerpo me habían dejado reventado y el proceso de curación también me había cansado mucho... Sin darme cuenta me fui tumbando más en la cama y me quedé dormido por primera vez antes que ella.

Salí de la bañera al fin después de unos cuántos minutos, me sequé, me vestí... me coloqué un minivestido de raso que usaba de camisón y salí del baño secándome el cabello. Llegué a la habitación y Ben estaba dormido... olí la taza de sangre caliente que aún estaba allí y lo primero que hice fue beberla de un saque pero luego, antes de tumbarme, me detuve mirándolo unos instantes... nunca había logrado verlo dormir y era una de las cosas que más ganas tenía de hacer pero nunca lo lograba tan poco era lo que él dormía. Al final ya me tumbé en la cama sigilósamente sin dejar de mirarlo, sonriendo por esa "licencia" que su cansancio me había dado y me fui acurrucando contra él.