+18 Relajándonos en Río de Janeiro (Ben, Arlette, Gus)

Recuerdo del primer mensaje :

Arlette dijo eso y asentí, era cierto que a pesar de las miles de complicaciones, las ideas y venidas, y todo los rollos en los que nos veíamos inmersos... no nos estaba yendo tan mal. Seguíamos queriéndonos y eso ya era mucho decir.
El viaje se pasó entre una charla y otra, por primera vez lograba conversar con Arlette como si de verdad fuese una amiga, sin las presiones de la locura de las muertes de Gus y Ben, sin andarnos con indirectas ni nada así... demasiado habíamos pasado como para seguir buscando problemas, quizá era tiempo de aceptar que no estaba tan sola en el mundo... pero tampoco quería dejarme llevar demasiado por esa sensación.

Finalmente Gus y Ben se despertaron con las maniobras del aterrizaje en Río. Bajamos del avión y escuchar el brasilero ya era una sensación bonita. Una sola vez había estado en Río, había sido un viaje muy rápido con Zack y apenas había podido disfrutar de todo eso que decían de la gente de allí... y de las playas! Esperamos las maletas y me acerqué a Ben. -Morir cansa, no? Es que se han echado todo el viaje durmiendo...- murmuré de broma mirándolo y un poco también a Gus.

-No, ni por un instante.- respondí sonriendo a eso de si lo ponía en duda. Propuso ir cerca del mar y asentí. -Claro, vamos...- dije y lo cogí de la mano metiéndonos un poco entre la gente para acercarnos a la parte más baja de la playa. -Ven, por aquí está bien...- murmuré y me senté en el suelo sin hacerme mucho problema por el vestido. En realidad no me gustaba tanto eso de ensuciarlo, pero al fin y al cabo era un vestido playero y me lo había puesto pensando en la posibilidad de tener que ensuciarlo con arena... así que. Me acomodé en la arena flexionando un poco mis dos rodillas y dejé mis sandalias a un lado mientras con una de mis manos sostenía el vaso con la caipirinha.

Me dejé guiar por ella y cuando eligió un sitio dejé también mis zapatos en el suelo y me senté a su lado. Bebí un poco de mi vaso y... Por un momento sonreí para mi mismo porque me resultaba muy graciosa la situación. Después de todo lo que nos había pasado en los últimos meses parecía una broma eso de estar sentados en la arena de la playa como dos simples chicos de 18/19 años disfrutando de unas vacaciones. Vistos desde fuera pareciéramos unos jóvenes normales sin preocupaciones y sin nada y... Era raro, pero también era genial poder estar así para variar.- Te quiero mucho Alma, ¿lo sabes, verdad?-murmuré casi sin pensar mientras dejaba mi vaso en la arena entre mis piernas y me dedicaba a mirar el mar, disfrutando de brisa y demás.

Nos quedamos en silencio un buen rato, sonreí mirando el mar y sintiendo la brisa... se escuchaba el ruido de la música bien fuerte y también el murmullo y los gritos de todo el mundo que estaba en esa fiesta, pero me daba un poco igual. Iba anocheciendo, tener de fondo las luces de los morros y a lo lejos el Pan de Azúcar era una delicia. Ben soltó eso sorprendiéndome un poco y me giré a mirarlo mientras el viento me despeinaba un poco el cabello y me lo acomodaba otra vez. -Lo sé, y yo a tí... mucho.- dije enseguida mirándolo a los ojos. -No sé que habría hecho si no podía recuperarte... Joder, prefiero ni pensarlo...- murmuré con una pequeña sonrisa antes de beber un poco más del vaso y volver la vista al mar.

Sonreí cuando me contestó eso y como noté como se giró a mirarme pues giré también un poco la cabeza y entrelacé mis dedos con los suyos necesitando tocarla y tenerla cerca. Después de estar tanto separados era casi una necesidad- Pues hubieses seguido adelante...-murmuré sonriendo levemente y también un poco por no ponernos tristes- Puede que hubieras apagado tu humanidad por un tiempo pero todo se supera... Poco a poco habrías vuelto a la normalidad, hubiese conocido a gente nueva, te hubieses vuelto a enamorar...-suspiré levemente y besé un segundo su mano antes de volver a coger mi copa y beber un poco- Son cosas que pasan- dije medio de broma, pero bueno, había vivido mucho y había visto que la vida seguía siempre... -¿Te has acostado con alguien durante este tiempo?- la pregunté de sopeton casi sin pararme a meditar demasiado la pregunta mientras dejaba de nuevo el vaso en la arena. Yo seguramente lo hubiese hecho... ¿o no?. Tal vez si lo pensaba no.. O yo qué sé... A saber, en esas situaciones nunca se sabía.

[off: Ya me voy, bye! ]

Me miró y dijo que habría seguido adelante. Teníamos los dedos entrelazados y sonreí acariciando levemente su mano mientras iba escuchando lo que me decía, que habría vuelto a enamorarme, que lo habría superado. -Supongo, no sé... Me alegra no haber pasado por eso.- dije con una pequeña sonrisa mirándolo a los ojos antes de que me soltara esa pregunta así sin más. Sonreí un poco mirándolo. -No, no me he acostado con nadie.- dije mirándolo enseguida. -No acabé de creerme que estuvieras muerto hasta que otra vez estuviste vivo.- dije sin dejar de mirarlo. No había perdido nunca fe en que volvería, desde que a Arlette se le había ocurrido mencionar que existía la mínima chance de recuperarlos a él y a Gus, desde ese instante había sentido que me dejaría la vida buscando la manera. -Estuve en lugares muy oscuros, hice cosas que no me enorgullecen, para nada....- dije mirando la arena. -Pero no me acosté con nadie, quizá hubiese sido mejor que lo hiciera... Hasta más sano.- dije pensando en que de verdad que me había pasado mucho de mis límites.

Asentí. No me sentí aliviado ni nada, hubiese entendido que se acostara con otro, pero bueno, que obviamente mejor si no lo había hecho.- Seguramente- dije sonriendo por eso de que tal vez hubiese sido más sano- Y esa es la gran diferencia entre vampiros y humanos- murmuré- Tal vez hace un par de años, cuando eras humanas, lo primero que hubieras hecho es tirarte a cualquier desconocido pero ahora...Ahora la sangre esta por encima de todo y esa es la única verdad-murmuré más pensando para mi mismo que otra cosa- Pueden pasar mil cosas pero lo único que consuela y que te hace sentir bien es la sangre- dije porque era una hecho, la sangre estaba por encima de todo, incluso por delante del sexo, del alcohol, del amor.... Y bien demostrado había quedado que nosotros eramos personas muy sexuales y que alcohol ayudaba a olvidar las penas, pero al ser vampiros si alguna vez nos dieran a elegir el ansia de sangre nos podría. Era lo primordial para los vampiros.

Fue diciendo eso sobre la diferencia entre el sentir de los humanos y el de los vampiros y asentí. Estaba claro que antes podría haber dudado, pero no ahora... Ben tenía toda la razón del mundo. La sangre lo era todo. -Seguramente tienes razón, si hubiera sido humana las cosas habrían sido distintas...- dije pensando en que hubiera acabado acostándome con cualquiera. Era más o menos lo que había hecho cada vez que nos habíamos peleado o separado o lo que fuera. -Pero ahora el deseo de sangre ocupaba todo, no me interesaba nada más... Fue raro, ni recién convertida sentí tan claro que era lo único que importaba... Es más...- dije e hice una pausa bebiendo un poco de mi vaso. -El matar, todavía me cuesta controlarme.- murmuré con algo de vergüenza bajando la mirada. Eso no me gustaba nada de nada, jamás había sido tan "buena" como Stefan... por ejemplo, pero desde ya no estaba entre los vampiros que despreciaban la vida humana y estos días no había grandes diferencias entre ellos y yo.

Asentí imaginandome la sensación, había pasado yo mismo varias veces... Pero la miré cuando me fijé en que bajaba la mirada con algo de ¿vergüenza?.-Hey, no tienes porque avergonzarte conmigo-murmuré mientras pasaba un brazo por sus hombros para abrazarla un poco y acercarla algo más a mi- No pasa nada, ¿vale? Te ayudaré si quieres... Sé que es duro, pero lo superarás- murmuré dándola un pequeño beso en la frente según era la posición que teníamos. Sabía que jamás la había gustado la idea de ir matando a gente por ahí y la ayudaría a dejar de hacerlo si era lo que quería. Esperaba que ahora que estábamos juntos de nuevo todo fuera más fácil.

Asentí cuando Ben me dijo que no tenía que avergonzarme con él. Enseguida me abrazó y dejé que lo hiciera, quizá hasta ese momento preciso no había tenido conciencia de lo mucho que necesitaba simplemente eso. -Ya, supongo que sí... Es cosa de tiempo ¿No? Y ya llegamos a la parte en la que reconozco que es lo único que nos sobra.- murmuré con una pequeña sonrisa pensando en todo eso de estar hasta "el fin de los tiempos". -Estamos a salvo aquí, verdad? Es decir... ese tal Luca y toda su locura de andar encerrando vampiros ya pasó?.- le pregunté luego de que me diera un pequeño beso y mirándolo un poco al girar. -¿Y si descubriera que no estás muerto?.- le dije mirándolo a los ojos a final.

Sonreí- Ajá, mucho tiempo- dije sonriendo levemente porque si que sería cosa del tiempo y que teníamos mucho. La di otro pequeño beso y ya me aparté un poco mientras iba preguntando lo demás- No lo sé, aquí creo que si estamos seguros, estamos como quien dice en la otra punta del mundo y no sabe que estamos vivos- dije pensando- Pero no sé que puede pasar si se entera que estamos vivos, supongo que no le hará nada de gracia, se tomó muchas molestias para deshacerse de nosotros- murmuré bebiendo de mi vaso por no tener que mirarla porque era de esperarse eso de que no estuviese contento al saber que estábamos vivos después de todo lo que había planeado para matarnos a Gus y a mi.

Escuché lo que iba diciendo y bebí un poco más de mi vaso hasta terminar con la caipirinha. -Joder...- suspiré pensando en eso, en realidad lo imaginaba. Estaba claro que Luca no estaría contento sabiendo que habían vuelto de la muerte así sin más. -Y cómo haremos para volver a Fell's? Volveremos?.- murmuré pensando en eso. Es que me sentía bastante segura en Río de Janeiro, de verdad era la otra punta del mundo. Pero ¿Y después? -No pensemos mejor en esto por ahora, disfrutemos mientras dure... Otro tema tabú.- dije sonriendo un poco. -Ya van tres... como sigamos así perderé la cuenta!.- susurré con una sonrisa de broma girándome a mirarlo.

- No lo sé...-murmuré porque realmente no me había detenido ni a pensar en lo que haríamos tras esta especie de "vacaciones" en Río. - Supongo que ya no me ata nada allí- dije porque al final es que siempre si había vuelto era por "mis asuntos en Fell´s"- Podemos hacer lo que nos de la gana... ¿quieres volver?- la pregunté sin tener en claro que quería ella, después de todo allí estaba "oficialmente" nuestra casa, y ella iba allí a la universidad y tenía su trabajo... Cierto es que hace meses que ni pasábamos por allí, pero bueno. Fue diciendo lo del tema tabú y sonreí- No en serio, no quiero que dejemos el tema para nada- dije sonriendo levemente- Necesitamos hablar de estas cosas...-dije porque en parte por eso había decido salir del hotel, porque necesitábamos hablar- Que luego nos preguntan sobre nuestros planes y no sabemos ni que decir- dije medio de broma recordando como antes de ir a Río ante las preguntas de Gus y Arlette no habíamos sabido ni que decir porque no habíamos hablado.

Pensé un segundo cuando me preguntó si quería volver, pero luego ya fue diciendo lo demás y acabó haciéndome reir un poco por eso de que nos preguntaban y no sabíamos ni qué responder. Era totalmente cierto. -Ya, ya... si ellos no saben aprovechar su tiempo de mejor manera, es un problema de ellos.- dije riéndome un poco. -Pero vale, pensémoslo... Yo creo que allí está nuestra casa y que tendríamos que volver.- dije antes que nada. -Todavía no acabé la universidad y además tengo trabajo por ahora... Luego ya podríamos irnos a otra parte si quieres, pero no enseguida.- dije pensando un poco en todo lo que nos había costado asentarnos en un sitio. -Luca nunca supo de Fell's, no? Es decir ¿Qué tan peligroso puede ser aparecernos por allí?.- le pregunté antes de acabar mi caipirinha de una vez.

Sonreí ante lo primero pero ya me quedé pensando más en eso último que otra cosa- No, nunca supo que estaba en Fell´s, supongo que podríamos volver sin problemas y bueno como dices allí esta nuestra casa, tal vez lo mejor sea volver por ahora, desde luego que creo que estaremos más seguros allí que en París o que en cualquier gran ciudad- dije porque me parecía ahora mismo más seguro cualquier pueblecito perdido de cualquier país.

Ben fue diciendo eso y asentí. -Si estamos siendo sinceros del todo, tengo que confesar que mi preocupación ahora es un poco el hecho de que Zachary se pueda aparecer.- dije sincerándome un instante. -No acabo de ver qué tanto trabaja para Luca y que tanto huye de él como lo hacían tú y Gus... Pero está clarísimo que no confío en él tras todo lo de Ámsterdan y él sí sabe de Fell's, no sé...- dije pensando en que era un lío. -Por otra parte si hubiera querido delatarte con Luca antes, lo habría podido hacer y no lo hizo. A lo mejor está escapándose y nada más.- murmuré porque al final era lo más probable.
Me quedé un segundo en silencio mirando el mar, había acabado de anochecer del todo. -No me acuerdo bien, entre la confusión estaba todo muy mezclado, pero recuerdo que dijo algo de que tú entenderías... que habrías hecho lo mismo que él en su luagr.- murmuré pensando en ello.

Sonreí levemente cuando me fue diciendo por donde iba su preocupación- ¿Te preocupa Zack? A mi en ese sentido me da el doble de miedo Pauline- dije mirando hacía el mar. Tenía de su parte a su sobrina bruja, la cual podía hacer en cualquier momento un hechizo de localización y entregarle la dirección a Luca como venganza. Zack casi que me parecía el menor de nuestros problemas. 
La miré un segundo cuando dijo eso último-Alma tienes que entender que yo fui a por él, mi trabajo era llevarlo ante Luca- murmuré porque la pelea como quien dice había empezado por mi- Así que si, si hubiese sido al revés claro que le hubiese matado- dije porque yo tampoco habría querido que me llevara ante Luca, cualquier en nuestra situación hubiese hecho algo parecido- Quiero odiarle, ¿sabes? Pero ni si quiera me sale...-dije sinceramente porque por más que mi lógica me lo decía al final no podía sentir odio hacía Zack, tal vez le pudiese odiar por su forma de ser o por cualquier otra tontería, pero ahora mismo era incapaz de sentir odio hacía él por el hecho de que me matara

Dijo eso de Pauline y casi que la había olvidado así que entorné los ojos. Era evidente que teníamos muchas más razones para temer de ella considerando que su sobrina era una bruja insoportable y con demasiados aires... en fin. Me enfadaba solo pensar en ellas.
Ben dijo eso de Zack y asentí, seguramente tuviera razón en realidad. -Vale, entiendo lo de Zack... Me enceguecí pensando modos de matarlo durante demasiados días, pero supongo que tienes razón....- al final se había defendido tal y como Ben lo hubiera hecho, estaba claro. -¿Qué tanto te odia Pauline?.- murmuré retomando el tema. -No quiero preocuparme pero está claro que a los problemas que ya te traías con ella hay que agregarle que a su sobrina le caigo pésimo, si no fuera porque parece tener un vínculo con mi padre, no sé cómo habría acabado todo... creo que ni siquiera tenía intenciones de traerte otra vez a la vida de verdad.- dije porque esa sensación me había dado. Que una vez que Pauline estuviera otra vez entre nosotros, tanto ella como su sobrina nos habrían dejado a medio camino con el condenado hechizo.

Sonreí levemente- Hubiese sido gracioso verte- murmuré medio de broma por eso que decía de Zack, pero bueno que claro que habría sido de todo menos gracioso- ¿Sabes que te vi en la fiesta?-murmuré porque recordaba como la había visto y como había hecho que Arlette se la llevara de allí- No sé, ahora me parece una tontería pero... Sentí algo de celos al verte con él- reconocí mientras me terminaba la caipirinha de un trago. 
Fue diciendo lo demás y dudé mientras dejaba el vaso sobre la tierra- ¿Tu cuanto odiarías a alguien que te ha matado dos veces y que casi no te deja volver a la vida?-murmuré enarcando una ceja pero sonriendo levemente porque eso le había hecho yo a ella, es que me parecía que su odio sería enorme y que estaba bastante justificado- Ya... no me sorprende- dije cuando reconoció que la sobrina no tenía intenciones de traerme... De verdad que habíamos tenido mucha suerte.

Enarqué una ceja cuando me dijo que me había visto en la fiesta y luego eso de los celos. -¿Celos?.- dije mirándolo con una leve sonrisa, es que me parecía imposible que en medio de todo el drama que tenía el hecho de que tenía que matar a Zack (o morir primero) hubiera tenido tiempo de sentir celos. Ya dijo lo de Pauline y asentí. -Entiendo, tiene muchas razones para odiarte... Espero que tenga otros planes que ir persiguiendo venganzas.- murmuré porque eso sí que no sonaba nada bien. -No sé, esto de los ex no es tan bonito la verdad.- murmuré pensando en Zack y Pauline. -Ni siquiera entiendo porqué acabé en ese apartamento... bueno, sí... la verdad es que no teníamos a dónde ir y se me ocurrió que Zachary podía echarme una mano, una estupidéz.- dije negando un poco. -Y bueno, Arlette me siguió... tampoco tenía en claro a dónde ir.- dije asintiendo y recordando sin poder evitar una pequeña sonrisa el modo en que Zack la había intimidado, insinuándose sin cortarse.

Me encogí de hombros- No es que estuviéramos pasando por nuestro mejor momento...-dije, prácticamente nos habíamos visto solo un par de veces en casi dos meses y de pronto la veía de fiesta con él, ¿tan raro era?. Ante lo de la venganza de Pauline no dije nada, al despedirse practicamente me había amenazado así que no esperaba que se quedase de brazos cruzados, pero tampoco tenía caso preocuparse ahora, ya habría tiempo. - Ya veo... Me sorprendió veros allí, de hecho bueno, en realidad yo ni sabía de quien era la fiesta hasta que Arlette me lo dijo- comenté- A mi solo me habían dicho que consiguiera al dueño de la casa, así que imagínate la sorpresa al descubrir que era Zack- dije porque realmente había sido un shock.

Lo miré con pena cuando dijo lo primero. -No creo que eso fuera así. Apenas nos habíamos visto pero tenía en claro que no tenía que ver conmigo... aunque no sé, ahora mismo me cuesta entender un poco.- dije recordando ese última día antes de que Zack lo asesinara. -Porqué te arriesgaste de esa forma? No sabías que podía acabar mal? Incluso sabiendo que yo estaba allí...- dije mirándolo un segundo porque eso sí no acababa de entenderlo. -Zachary no preguntó demasiado, le conté una historia más o menos lógica sobre el porqué de nuestra estadía en Ámsterdam y tampoco hizo falta más... Eramos dos tías disponibles en su apartamento para cuando diera su fiesta, incluso me pareció notar que quería probarle a sus amigos (algunos que conocía de antes) que efectivamente era una vampira. Es odioso a veces, pero también es infantil... en el fondo creo que estaba contento de que estuviera allí.- dije porque era lo que pensaba.

- A ver ya sé que técnicamente no estábamos mal, pero la distancia a veces hace dudar y te acababa de contar el día anterior lo de "mis asuntos den Fell´s y estábamos algo paranoica con Arlette y conmigo...-la recordé y sonriendo porque ya me imaginaba que se quejaría enseguida- Vamos, que a lo mejor no estábamos mal pero si arrastrábamos unas cuantas cosas- dije más que nada porque en ese momento por todo eso supongo que no me había parecido taaan descabellado eso de tener celos.- Supongo que no pensé en el momento, básicamente era lo que llevaba haciendo todo el mes- dije porque me había tenido haciendo trabajitos de ese estilo- Pero reconozco que ese día fui muy impulsivo, iba muy nervioso porque me acaba de enterar que habían encontrado a Gus y no sabía que os había pasado... Luego si, os vi, pero encima te vi con él y esos celos supongo que me desquiciaron ya del todo y no me paré a pensar que podría tener amigos allí...Ni tuve en cuenta que Zack me tenía también muchas ganas...  Yo qué sé Alma, fue una idiotez, desde el momento en que me clavo la estaca supe que toda la culpa había sido mía- dije porque eso lo tenía bien claro practicamente desde el principio. Fui escuchando lo demás y asentí, ya me imaginaba que mucho no le habría importado tenerlas allí.

Recordó un poco todo lo que había pasado antes de su "muerte" y asentí. -Es cierto, puede que no estuviéramos en nuestro mejor momento... No sé, realmente lo único que queria era que acabara todo eso de tu "trabajo" y ni siquiera sabía cuánto podía dudar. Arlette no ayudaba tampoco, sembrándome dudas todo el tiempo... recién luego de esa noche las cosas cambiaron entre nosotras.- dije porque había sido realmente un antes y un después. Me contó lo demás, cómo había sido todo, lo que había sentido y de qué manera en parte el verme con Zachary le había hecho actuar más impulsivamente. -Vale, puede que no fueran celos tan injustificados... Yo misma me desquicié esa mañana cuando necesité saber del todo el rollo con Arlette.- dije pensando en que había acabado en el parque interrogándolo a causa de eso. -Y entiendo que te dejaras llevar, no sé... no soy quien para juzgarte por actuar de manera impulsiva la verdad.- dije porque por mucho que me pareciera mal lo que había decidido hacer, estaba claro que yo tampoco era precisamente el ejemplo de persona prudente.

-De verdad que me alegra- dije sonriendo levemente, me alegraba que Arlette y ella ya se llevaran mejor, claro que hubiese preferido que fuera por otras circunstancias, pero bueno ya que se había dado me alegraba que no se hubieran dejado solas ni nada así- Ajá, me acuerdo, creo que jamás me has hecho tanta gracia- dije por meterme un poco con ella porque jamás la había notado tan paranoica ni tan celosa como con Arlette. Tomé su rostro y la di un pequeño beso antes de que se fuera a quejar- Te quiero Alma- murmuré- Con celos, sin celos, con mil amenazas a nuestras espaldas... Me da lo mismo-suspiré- Solo quiero estar contigo. 

Dijo que le alegraba que nos lleváramos mejor Arlette y yo, y cuando dijo lo demás de la "gracia" que le había causado con mis celos me dieron ganas de matarlo. Enseguida me besó y dijo todo eso me evitando que me enojara realmente pero igual entorné los ojos después. -Vale, pero reconoce que mis celos eran justificados. Oye, me encuentro sola viviendo con tu prima y su esposo, con quienes has formado una curioso trío por años y por los que tengo en claro que tienes sentimientos más fuertes que respecto de nadie en la Tierra. Y encima viene ella a decirme que soy una más, que le has presentado mil tías y que al final siempre acabas cambiando.- dije mirándolo y entornando los ojos. -Tras eso me recuerda que ni siquiera tú confías en mí... No sé, ponte en mi lugar. Tú te has puesto bien celoso por mucho menos...- le acusé un poco en serio un poco en broma.