+18 Molestando a Aitana

Recuerdo del primer mensaje :

Estaba siendo una tarde realmente aburrida, Aitana estaba en su habitación y yo estaba leyendo en el salón, pero ya me habia cansado, cerré el libro y subí las escaleras en dirección a la habitación de Aitana.

-Aitana... me aburro...- entré diciendo como un niño pequeño antes de lanzarme sobre su cama y quedarme tumbado boca abajo a su lado.

- Eres mala...-dije suspirando desde el otro lado de la cortina.

Seguro que quieres entrar?- dije abriendo a penas la cortina- ya sabes qeu yo no tengo ningun problema

La miré a los ojos durante unos instantes, era demasiado arriesgado, pero la tentación era demasiado fuerte.

- ¿Me creerias si te digo que no sé si entrar?- dije sin poder evitar una sonrisa.

Que raro, Yo que creia que tenias las cosas claras- dije riendo- te doy 1 minuto para uqe te decidas- sonreí picaramente

- Si entro no me responsabilizo de mis actos- dije alzando una ceja para ver si se hechaba para atrás.

Bueno, tu sabras- dije riendome- pero se te acaba el tiempo

- Vale entro, pero la gente de aqui fuera se va a pensar que nos vamos a liar ahi dentro- dije con una sonrisa.

que piensen loq ue quieran- dije mientras seguía mirandome- eso si cierra la cortina

Sonreí y entré dentro cerrando la cortina tras de mi. Me giré para mirarla y me quedé boquiabierto, estaba realmente increible.

-Estas... perfecta, impresionante- dije apoyandome en la pared más lejana del probador para poner distancia, pero era dificil en un probador tan pequeño.

Cuando menos me esperaba uqe iba a entrar, entró, me asusté un poco- Ya pensaba que no ibas a entrar- dije mientras me giraba hacia él

- No podia desaprovechar esta oporturnidad...- dije con una ligera sonrisa- estas perfecta...-volví a repetir.

Gracias- dije sonriendo. Cuando me giré me resbalé y casi me caí

Ví como resbalaba y la sujete rápidamente por la cintura antes de que cayera al suelo- ¿Te pongo nerviosa?- susurré picaramente en su oido mientras ella seguia de espaldas a mi.

Quieres uqe te diga como me pones?- dije, luego em di cuenta que eso se podía interpretar ma por lo que no dije nada

- Depende... ¿quieres que te diga cuanto me pones tu?- dije mientras permaneciamos en la posición, casi se podia notar la tensión en el ambiente.

[off: ya sabes, avisa cuando te vayas!! xD]

si, quiero saberlo....- dije mientras me incorporaba

Intenté controlarme, de verdad que lo intenté, pero aquello ya era demasiado. Aprovechando que la tenía todavía sujeta por la cintura la di la vuelta y antes de poder darme cuenta ya la estaba estampando contra la pared y besándola.

No me esperaba para nada este beso, yo no pude controlarme tampoco y seguí el beso, luego paré- Ben, que estamos haciendo- dije mientras seguiamos el uno junto a el otro

- Una locura...-murmuré todavia sin separarme de ella, me moria por volver a besarla, pero ella no queria esto y no me iba a arriesgar a que terminaramos a mal.

Ben....- no pude terminar la frase, me moria de ganas por volver a besarle, por lo que lo hice. Se que esto no estaba bien ni por Shey ni por mi, pero no podia evitarlo. por lo que lo acerqué más a mí, pasando mis brazos por su cuello

Me sorprendió que me besara, pero no me iba a quejar, y yo no estaba como apra desperdiciar este tipo de oportunidades. Me ápreté más contra ella, aprisionandola entre mi cuerpo y la pared, y profundizé el beso.

Le empecé a desabrochar la camisa, y empecé a besarle el cuello. Le quité del todo la camisa y subi mis piernas, poniendolas en cuz en su espalda

Sonreí mientras Aitana me quitaba la camisa, esto era mucho mejor de lo que me habia imaginaado. Comencé a acariciarla lentamente mientras la besaba antes de separarla un poco de la pared para poder desabrochar su sujetador.

Deje que me desabrochara el sujetador, mientras yo le desabroche su cinturón y le quitaba los pantalones

Me deshicé rapidamente de su sujetador, en otro momento hubiera sido más delicado, pero estabamos en un lugar publico y no teniamos mucho tiempo, asi que la cogí por la cintura para que dejara de rodear mi cintura con sus piernas y asi poder quitarnos lo poco que nos quedaba de ropa.