Reencuentro después del viaje en el tiempo (Ben, Arlette, Gus) +18

El el hechizo se rompió y apenas me había levantado que allí estaba Arlette echándome una mano. -Joder! Era eso al final... No puedo creer que lo haya hecho... Donde le ponga una mano encima a Pauline no contará el cuento... dije enseguida con bronca, estaba harta de que jugará así con nosotros y nuestros sentimientos. -Vamos a casa! Ben y Gus deben estar ahí... Joder Arlette...- dije todavía conmocionada antes de abrazarla en un arranque de sentimentalismo, pero es que no acababa de procesar lo que nos había pasado. Ya me aparté y la mire un instante, al final podían darme ganas de matarla pero lo más parecido a una hermana que había tenido y ahora mismo no me imaginaba estar enfada con ella por tonterías.

-Venga, vamos... No nos demoremos más.- dije ya cogiendola del brazo para empezar a caminar. Estábamos con las pintas de ropa interior más barones raros que se usaban en el siglo XVIII con lo cual el cuadro era un poco gracioso.

Gus y yo habíamos acabábamos como quien dice de llegar a casa- ¿Arlette? ¿Alma?-fue diciendo Gus según entrabamos- Joder no están- dijo algo alterado. Era raro verle en ese estado porque Gus siempre era el más controlado del grupo pero la posibilidad de perder a Arlette le volvía un poco loco.
No dije nada porque no es que yo estuviese mucho más tranquilo. Caminé hasta el teléfono para ver si el padre de Alma había dejado algún mensaje en el buzón de voz cuando Gus pasó por mi lado enseguida hacía la puerta- Está aquí- enarqué una ceja cuando dijo eso sin que yo entendiera nada, aunque ahora que lo decía puede que sintiera a Alma por fin un poco... Apenas me dio tiempo a girarme justo para ver como abría la puerta y estrechaba enseguida a Arlette entre sus brazos sin haberla dado tiempo a llamar al timbre ni nada. Eran de esas parejas que no demostraban demasiado su afecto en público (tal vez era cosa de llevar siglos juntos, que no necesitaban tanto eso, quien sabe) pero ahora mismo se veía que les daba lo mismo porque enseguida se fundieron en un largo beso un tanto desesperado allí mismo.

Estábamos todavía en el umbral de casa cuando Gus abrió la puerta y abrazóa Arlette, parcial mentira que las cosas habían estado tan tirantes entre ellos hacia apenas un día. No pensé en lado solo busque a Ben esquivándolos y apenas lo vi lo abrace sin cortarme, besándolo también enseguida sin poder ni siquiera hablar, necesitaba saber que todo estaba bien y a juzgar por cómo me estaba besando también habían pasado cosas para ellos. -Joder, joder! Acabo de... He estado contigo, cuando eras humano... joder suspiré apoyando mi frente en la suya mirándolo apenas. -Pensé que no podría volver, pensé que... Joder Ben, es lo más raro que me ha pasado en la vida... fui soltando pero es que no me daba tiempo a decir todo lo que quería decirle, acababa de asesinarlo mientras me besaba, lo último que recordaba era los latidos acelerados de su corazón humano.

Alma se acercó enseguida y suspiré ni bien me besó-Joder- murmuré estrechándola contra mí en ese beso, de hecho la abracé con tanto impetú que incluso la levanté unos centímetros del suelo por unos instantes.- Joder...-volví a decir ni bien separamos nuestros labios e iba diciendo todo eso. Estaba visto que ambos nos habíamos visto metido en ese condenado hechizo. Era totalmente raro de pensar que me había visto de humano- Yo también he estado contigo, eras humanas, estabas con Zack y... Dios ha sido una locura- dije suspirando y tomándola de la cintura para que no se alejara, casi necesitando sentir que realmente estaba allí conmigo y bien después de haberla tenido que matar yo mismo...

Ben bien me besó también y me abrazo como si hubieran pasado mil siglos... Lo mire mientras escuchaba lo que me contaba sobre Zack. Evidentemente también había viajado al pasado. -Mira las pintas que tengo, ha sido muy extraño... Baile contigo en una sociedad de recepción que armaste porque se te metió en la cabeza que tenía que casarme con tu hermano... Ey! Conocí a Sebastián, puedes creerlo? No sabía que era posible viajar así en el tiempo o a lo mejor ha sido todo una ficción, pero estaba Arlette también, a ella no le pareció ficción... Tengo tanto que contarte... Ven, pasemos, sentémonos... No sé ni por dónde empezar... fui diciendo verborragia de un tirón, pero me es que se me trababan las cosas que quería contarle con lo que quería preguntarle. Lo tironie para que me siguiera al sofá. -No sabes lo mucho que me alegra que estés vivo y bien, es decir... Tuve... he tenido que quebrarte el cuello, no puedo creerlo parece que hubieran pasado mil años y fue hace minutos.- fui soltándole apenas me detuve a mitad de camino para abrazarlo otra vez.

Alma se largó a hablar y la escuché sin poder quitar mi sonrisa. Siempre era muy de mezclar cosas y estaba visto que ahora no era la excepción.- ¿¡Qué!? ¿En serio?-recién ahora me daba cuenta de la ropa que llevaba puesta- Joder...-dije sonriendo levemente y teniendo una leve punzada de celos interiormente, hubiese sido taaan bonito volver a ver a mi hermano aunque fuese por un segundo... En fin. Enarqué una ceja bastante perplejo por eso de que la había intentado colar a mi hermano y ya cuando dijo eso último asentí, se veía que habían tenido que hacer lo mismo para volver.- Yo tuve que hacer lo mismo, fue tan difícil...- dije tras eso casi que para tranquilizarla, no había sido solo cosa suya.
Estaba por decir algo más cuando noté como Arlette se colgaba de mi espalda con un pequeño gritito- Ay dios Ben! ¿Estas bien verdad? Ha sido increíble, una locura, Sebastian estaba tan guapo! ¿ y te acuerdas de las hermanas Moulian?- se echó a reír- Ni me acordaba de ellas, que bichos más insoportables- fue diciendo entre risas también largándose a hablar un poco. Reí levemente y me giré hacía ella para darla también un pequeño beso en la mejilla para que se relajara mientras Gus se acercaba de paso un poco a Alma- Es tan raro verte así... Han pasado muchísimas cosas pero admiro tu sangre fría y lamento el pésimo gusto que has tenido siempre para los hombres- se burló un poco antes de darla un pequeño abrazo sin poderlo evitar, de verdad que se alegraba que estuviese también bien- Vamos a sentarnos y hablamos todos...-dije cuando me aparté de Arlette tomando enseguida a Alma de la mano para seguir el camino hacía el salón. No quería soltarla, ahora mismo necesitaba tenerla cerca tras todo lo ocurrido.

ABen aclaró que había tenido que hacer lo mismo y ya estaba por largar explicaciones de más cuando Arlette se le colgó un poco diciendo todo eso sobre Sebastián y las hermanas mandonas que habíamos tenido que escuchar regañarlos. Enseguida se me acercó Gus y lo mire asombrada cuando dijo todo eso de la sangre fría, pero luego ya entorne los ojos por lo del gusto para los hombres... -Ya, ya... Sé que Zack no era el mejor partido del planeta, bueno eso quedó demostrado varias veces. A su favor, me parecía tan guapo que me daba igual lo que pensara... dije en broma recordando eso. Estaba segura de haber mejorado mucho eligiendo hombres, o al menos ahora con Ben sí que lo pensaba. -Estoy convencida de haber mejorado mucho... Es más, te diré que a los románticos ojos el Ben del siglo XVIII nuestra actual relación es una historia de amor de libros, toda una ternura.- dije antes de escuchar lo que Ben decía y aprovechar a estamparle un beso a la pasada apenas me cogio de la mano. Mire a Gus enseguida... -Tendrás que explicarme más eso de la sangre fría...- dije ya porque no acaban de entender que podría haber pasado para que pensara eso de mi.

Nos sentamos en los sofás y me acurruqué mucho contra Ben, ahora mismo no quería sentirlo lejos, de hecho casi que me molestaba no estar a solas con el, pero mejor que habláramos todo esto entre todos, al fin y al cabo aunque hubiera sido para jodrnos a nosotros el hechizo nos había afectado a los cuatro.

-Pobre chico, a saber que mentiras le contaste- contesté yo con una sonrisa porque me había dado tiempo a captar ese último comentario de Alma sobre el "amor de libro". Nuestro amor podía ser muchas cosas pero desde luego que no había sido uno ideal de libro. Ya fuimos todos a sentarnos y ellos se pusieron en un sofá y nosotros en otro. Sentí a Alma contra mí y sonreí dándola un pequeño beso en la frente según pasaba uno de mis brazos por su hombro sin poder evitarlo para abrazarla un poco allí.- Bueno pues nosotros estuvimos en Berlín- empecé a contar yo porque apenas me había dado tiempo a contarla nada a Alma- Zack había montado una especie de fiesta con más vampiros así que fue fácil "integrarse" y que no se preguntarán que hacíamos por allí... Bebimos y jugamos a alguna cosa- fui contando- ¿A sí?- murmuró entre picara y curiosa Arlette mirando a Gus con una ceja levantada.- No es tan bonito como parece, allí la gente estaba muy loca- dijo medio bromeando, pero claro que lo estaban. Vi como Gus y Arlette murmuraban alguna cosa entre ellos y aproveché para centrarme por un segundo en Alma-Incluso siendo tan cría conseguiste encenderme como nadie, ¿sabes?- susurré despacito contra su oído solo para ella antes de ya mirar de nuevo hacía Gus que ya seguía con la historia.- Todo iba bien hasta que a Ben se le cruzaron los cables-- acotó- No se me cruzaron los cables...-me quejé entornado los ojos mientras estrechaba algo más a Alma contra mí casi que sin poderme contener.

-Las mínimas indispensables.- le respondí a Ben cuando me dijo sobre las mentiras que le habría contando a ese pobre chico, que venía a ser el mismo pero años atrás. Ya nos sentamos y comenzó a contar algo más Ben... Así que era Berlin, intente recordar algo de aquel momento mientras escuchaba lo que decir de la fiesta. -Eso lo recuerdo bien...- dije entornando los ojos. -Zack se la pasaba haciendo fiestas a lasa que invitaba gente que yo ni conocía y siempre terminaba todo echo un lío... No sé cómo hacía para que aceptara esas cosas, al final acababa siempre cediendo pero me jodia bastante que se la pasara metiendo vampiros en mi casa como si tal cosa.- dije pensando en eso.
Gus dijo algo a Arlette y sonreí enseguida que Ben me dijo eso al oído. -¿En serio? Sabes que voy a querer detalles... Por aquel tiempo siento que no me enteraba de nada.- dije mirándolo a los ojos y con mucha curiosidad, a saber qué habría hecho, seguramente me había pasado con algo... Es que quizá en eso sí que no había cambiado tanto.
Gus siguió con eso de los cables y sonreí con curiosidad. -Bueno, pero quiero mas detalles... Quienes estaban en la fiesta? A que jugaron? Y que es eso de los cables...?? dije preguntando más cosas.

Sonreí por eso de las "mínimas indispensables" y la miré cuando dijo todo lo demás- No me he sabido el nombre casi de ninguno, había una vampira llamada Julia y... alguno más amigo de Zack pero es que si te digo la verdad ni se presentaron- no era raro en realidad cuando los vampiros se juntaban solo para una fiesta... En fin. -Si, esa tía tenía algo contigo, o bueno más bien con Zack- acotó Gus para ver si de esa forma Alma sabía de que Julia estábamos hablando. Comentó el alguna más sobre los rasgos fisicos del resto de vampiros y demás- ... También había algun humano, aunque pocos- acabó de decir. Aunque ahora mismo parecía el que tenía más ganas de seguir hablando, así que lo hizo -No sé por donde empezar, Zack estaba un poco paranoico así que me inventé que Ben era mi marido- Arlette soltó un pequeño gritito que se mezcló después con su risa ante eso último y entorné los ojos, que tía- Si, ya... Bueno la cuestión es que tuve la estúpida idea de que tal vez el hechizo se acabaría con un beso vuestro- dijo señalandome a mi y a Alma- Así que jugamos a la botella, pero fue totalmente decepcionante y obviamente no funcionó y cambiamos el juego- aclaró. Recordaba esa mierda de beso y todavía me daba algo, recordaba lo molesto que me había sentido en su momento-Después jugamos a los desafíos- dije esta vez  yo- Hubo de todo tipo: besar, beber, excitar a alguien...En fin, alguno estuvo divertido, habría que hacerlo algún día- dije lo último con algo de picardia mirando a Alma de reojo- Vaya, se ve que acabamos en el pasado equivocado- se burló Arlette mirando también a Alma en busca de complicidad como si por esos juegos nuestro "viaje" hubiese sido mucho mejor.

Fui escuchando todo lo que decían y la verdad es que se notaba que había sido, cuanto menos, entretenido. -Sí, a Julia la recuerdo... no la ví nunca más pero solía seguirnos a todas partes, siempre se aparecía en mi casa, viviera donde viviera, la dejé de ver cuando vinimos a NY y eso... creo que se cansó de que Zack la dejara colgada.- dije porque recordaba como se burlaba un poco de ella. Alguna vez me había contado algún beso pero hasta donde sabía no habían ido más allá. Ya tomó Gus la palabra y aclaró eso del a pareja gay y tal. -Así que no funcionó lo del beso, tan poco feeling tuvimos? No me lo creo...- dije un poco de broma, pero porque no me había pasado desapercibida la mirada que me había hecho Ben y además recordaba sus palabras de antes sobre que lo había puesto como nadie incluso siendo tan cría.
Ya soltó eso Arlette y asentí. -Absolutamente. Vuestra época es un aburrimiento, bailecitos y paseos solo por un rato... al menos hubiera sido excitante una carrera a caballos pero el maldito vampirismo hizo que nos tuvieran miedo, así que...- me quejé de broma. -Nada que decir de Sebastián, era totalmente apuesto... todo un caballero, tú... mmm... creo que enseguida desconfiaste de mí.... aunque acabaste hecho un romántico.- dije al final un poco en broma por lo que había dicho antes y le dí un besito en el hombro enseguida al pasar. -¿Qué hicieron esos desafíos? Algo interesante qeu contar? Hiciste algo conmigo?.- le dije después a Ben interesada en eso.

Era normal que Julia se hubiese cansado, a nadie le gustaba sentir que se iba arrastrando tras alguien... De hecho me sorprendía que no lo hubiese pillado ya en Berlín. -Ya... Pues te garantizo que fue patético, cortaste el beso a los segundos, estabas un poco picada pero aún así fue triste- dije medio bromeando, pero si que había sido un mal beso, de los peores que habíamos tenido nunca. 
Escuché después con atención lo que decía de mi época. Podían decir que esa época había sido aburrida pero me daban un poco de envidia, sobre todo por el tema de mi hermano... Hubiese dado lo que fuera por verle un rato, su voz era de las cosas que más había olvidado con el paso de los años y bueno, que hubiese bonito-Ya me imagino- dije aún así sin poner en palabras lo que pasaba por mi mente, no era del tipo de cosas que yo fuese diciendo en voz alta- No es ninguna sorpresa en realidad, ¿no?- dije sonriendo por eso último, incluso en nuestro tiempo nada más conocerla había desconfiado de ella y romántico... bueno, supongo que siempre lo había sido algo más que ella. Dudé un instante después- No hicimos demasiados desafios juntos...-dije recordando eso- Apenas algún beso más y bueno, a ti te tocó uno en el que te vendaban los ojos y tenías que dejar que el resto de la sala hiciese lo que quisiese contigo...-murmuré acariciando levemente su mano, a ese me había referido antes con lo de "hacerlo algún día"- Eso decididamente fue sexy- dije sonriendo pero mirando nuestras manos para no tener que mirarla. De haber estado solos seguramente la hubiese hecho el amor lo primero de todo y después ya hubiese pasado a las explicaciones peor obviamente no era el caso así que... Contra menos la mirase al comentar cosas sexys mejor. Arlette silbó en plan sexy de broma y miró mientras tanto a Gus de reojo intentando sacarle lo que había hecho él y demás.

Me quedé pensando en Julia. No me acordaba mucho de ella, no éramos amigas ni nada, pero seguramente no fuera muy intuitiva, Zack solía ser bastante obvio buscando siempre lo que él quería sin tener en cuenta los sentimientos de nadie.
Respondió sobre el beso y lo miré con una pequeña sonrisa. -Wow, ¿patético? Igual, estando picada todo es posible... Seguramente tenía mis razones para tomármela contigo.- dije entornando los ojos de broma y defendiendo un poco a la Alma del pasado mientras iba mirándolo. Ya fui escuchando lo demás que decía sobre los desafíos y no me pasó desapercibido el tono con el que me contó eso de que me habían vendado los ojos y demás. -Vaya, suena entretenido.- dije sin evitar sentirme un poco intrigada por saber más sobre todo eso. Dijo que había sido sexy y me mordí un labio viendo como tocaba mi mano, definitivamente ahora mismo habría sido otra la historia de estar solos los dos. Lo había echado de menos y todo lo que decía solo conseguía que me dieran ganas de indagar más y más. -Ya me contarás los detalles en otro momento, me tienes intrigada.- susurré a su oído. Mientras vía que Arlette indagaba algo por el lado de Gus. De hecho él tomó la palabra, algo que venía haciendo más de lo normal. -Qué quieres que diga?.- le dijo riéndose a Arlette. -Pues sí, fue sexy. Y yo sí tuve más desafíos contigo... Primero querían que te besara pero me negué porque tú habías hecho eso con Ben y no sé, por defender su honor que se suponía que era mi marido, no?.- me dijo después mirándome con una sonrisa. -Pero luego ya sí tuve que hacer más cosas contigo.- dijo sin ocultar una sonrisa maliciosa. -¿Qué cosas?.- dijo Arlette abriendo los ojos y sonriendo con toda esa historia. -Pues, querían que te muerda y tú no quisiste, ni Zack... Entonces me pidieron que te razguñara con mis colmillos un poco por el cuello y eso, bueno sí lo hice.- dijo mirándome un segundo como ¿avergonzado?. -No podía volver a negarme y tampoco fue fácil porque no habíamos bebido nada de sangre y bueno... tú eras humana.- dijo encogiéndose de hombros. -Y no me negué? Dejé que lo hicieras? Tan entregada estaba... Vaya tía...- dije pensando en que era raro, en aquella época prefería no dejar que se acercaran a mi sangre ni un poco, era muy excéptica y miedosa con eso, seguro que a esas alturas estaba interesada en ellos por algo o no los habría dejado.

-Nah, sabes que siempre soy un pan de Dios- dije con mi mejor cara de inocente antes de que dijese todo lo demás. - Lo haré... Tenemos mucho de lo que hablar- la prometí con una pequeña sonrisa para cuando estuviésemos solos principalmente pensando "su magia". Gus ya lo sabía y Arlette se acabaría enterando pero me parecía que era algo que la debía en privado, sabía que todo lo de las brujas siempre habían sido tooodo un tema para ella y no me parecía justo soltarla delante de los demás: "Hey, eres una bruja! Por cierto, qué buen día hace, ¿no?". Nah, decididamente eso no iba a pasar, ya tendríamos tiempo de hablar más calmados y solos.

Gus fue contando sus desafíos y sonreí al ver como Arlette abría los ojos.- No, no te negaste, al contrario- dijo Gus con una leve sonrisa algo satisfecha. Yo mismo recordaba como Alma se había incluso excitado un poco con eso, y bueno, yo también para que mentir- Si, vaya tía... Anda que dejar que le hiciese eso mi marido...  Y a Zack casi le da algo-dije recordando eso tomándomelo un poco a broma, a partir de ahí había estado mucho más alerta con nosotros.  Gus rió un poco y Arlette bufó-Y luego os escandalizáis todos aquí a la mínima, de verdad que no hay quien os entienda- se burló por la que se había armado ayer mismo cuando ella había "propuesto" cosas. - Y hablando de sangre... Me muero de sed, voy a servirme un poco si no os importa, ¿alguien más quiere?- yo asentí enseguida y Gus también antes de que ella desapareciese por la puerta de la cocina para servir unas tazas de sangre. Sentía que hacía mil años que ninguno bebía nada de sangre... Empezaba a hacer falta.

Ben respondió que ya hablaríamos y sonreí, realmente quería tener un momento a solas con él. Gus ya fue aclarando lo demás y sonreí negando con la cabeza, era un poco de locos. -Es que jamás dejé que Zack hiciera algo así, no sé, le tenía mucho miedo a todo el rollo de los colmillos y la sangre...- aclaré porque era la idea que tenía, pero se ve que no era taaan así, al menos no bajo determinadas circunstancias.
Escuché el comentario de Arlette y entorné los ojos. -Ey! Tú no te aproveches que estoy buena y tal... que ya te tengo muy vista y aquí todos sabemos que cuando cualquiera baja la guardia das el zarpaso.- le avisé de broma riendo antes de que dijera eso de la sangre, la verdad era buena idea. -Es raro, deben haber influenciado en serio...- dije mirándolos. -Quiero decir, a mí. No recuerdo haber llegado tan lejos en fiestas cuando estaba con Zack... dije pensando en eso. -Tampoco es que llegaste tan lejos, pero te aseguro que te gustó ese rollo de mis colmillos en tu cuello.- dijo sonriendo. -Ya, me puedo imaginar... además si de algún modo quería algo con vosotros... No sé, siempre he sido de encapricharme.- dije encogiéndome de hombros con cara de niña buena. -En realidad estabas un poco encaprichada con Ben... Bueno, eso sumado a que él tampoco ayudaba demasiado a que los demás se creyeran la historia de que era mi marido.- dijo mirando a Ben y entornando los ojos como reprochándoselo. -Y Zack no nos dejaba un segundo tranquilos, imagínate que no me fue fácil convencerlo si Ben nos jugaba en contra.- dijo riendo un poco.

-Menudo concepto tenéis de mi- se lamentó de broma Arlette desde la cocina ante el comentario de Alma. Ya siguieron hablando Gus y ella, y yo me quedé escuchando la mayor parte del tiempo mientras iba acariciando un poco su mano y la miraba cada tanto. Estaba un poco tonto con ella necesitando tocarla a cada instante pero que habíamos pasado por tanto en tan poco tiempo... -Ey! Estas exagerando, no fue para tanto- dije ahora quejandome yo. -Yo no jugaba en contra, si soy irresistible no es mi culpa-murmuré de broma- Nah, no sé, es verdad que desde el principio tuviste algo conmigo y yo... Supongo que no me podía quedar tan al margen a pesar de Zack y de que eras más jóven- reconocí, la había seguido el juego y había coqueteado en muchas ocasiones para que mentir- Lo que yo decía- dijo Gus sonriendo. Entorné los ojos y ya volvió Arlette con una bandeja y todas nuestras tazas.- ¿Entonces se creyeron la historia de que eraís maridos, o no?- dijo ella un poco perdida mientras yo cogía una de las tazas y le daba un trago enseguida- Debían de estar alucinando si realmente estuvisteis a los besos y "jugando a morder" a Alma- dijo riendo imaginándose la escena mientras también cogía ella otra traza tras dejar la bandeja sobre la mesita.- Aunque... Si os miro bien si pegáis, hacéis buena pareja- se siguió burlando a nuestra costa mientras Gus la daba un golpecito para que se dejara de meter con nosotros.

Al principio Ben no se hizo mucho cargo, como para variar... pero ya al final terminó reconociendo que tan al margen no se había quedado. -Ya, ya... irresistible tú o irresistible yo?.- dije riendo mientras lo miraba un poco de reojo. En realidad no me llamaba tanto la atención eso, es que siempre había tenido algo que me intrigaba y no era tan raro que yo misma, incluso en el pasado, lo hubiera notado y me hubiera sentido atraída por él. -Y además te conozco y seguro que un poco lo querías joder al pobrecito de Zack... que en aquel tiempo no sería el mejor partido del mundo, pero todavía no se había convertido en un asesino serial.- dije ya riendo un poco por eso, es que bien me lo podía imaginar. Ben odiaba a Zack desde siempre, claro que después de que lo matara había tenido más razones, pero no me llamaba tanto la atención si un poco le había gustado dejarlo en evidencia.

Llego Arlette diciendo todo eso y reí cuando acabó soltando que no hacían mala pareja. -Puede ser ahora que lo dices.- dije riendo un poco siguiendo la corriente. -No sé si se lo creyeron en realidad.- respondió Gus como si se tratara de algo serio. -Ya te digo que Ben no ayudó y además el único desafío que nos pusieron juntos, que por cierto lo pusiste tú, al final no pudimos cumplirlo.- dijo señalándome un poco. -Qué les pedí?.- le pregunté intrigada. -Que intercambiáramos sangre.- me respondió y me dejó bastante alucinada porque tenía en claro que todo eso del "intercambio de sangre" lo habia conocido mucho después gracias a Ben. -Sólo diré que me alegra que no pudieran alterar el futuro porque habrían hecho desastres!.- dije riendo un poco, pero más hablaban, más me parecía que habían modificado muchísimo la idea que tenía de mi propio pasado.

-No en serio, no fue tan así...-no había querido joderle, bueno, tampoco había intentado controlarme como es obvio pero las cosas que había hecho no habían sido por joder a Zack, simplemente me había dejado llevar, como solía hacer. 
Gus siguió hablando y negué con la cabeza- No, no lo pidió ella, fue uno de los vampiros- le recordé. De hecho Alma había estado bastante perdida con eso de la sangre preguntando cada dos por tres a Zack- Supongo que ya iban sospechando a lo mejor... Y obviamente a todos les sorprendió cuando nos negamos- Y solo diré que yo también me alegro- dije por eso último de Alma medio sonriendo, pero después de todo el rollo que le habíamos dado al tema de la sangre si hubiese repercutido en el pasado a saber que hubiese pasado... Alma al final se había quedado con bastante curiosidad, algo me decía que antes o después hubiese probado algo con Zack y arg... Solo pensarlo y me daba algo la verdad. Si no recordaba mal yo era con el único que había intercambiado sangre y... me gustaba eso. 
- Tendríamos que haber jugado a algo de eso en nuestro "viaje", ¿te imaginas las caras de ese Ben y de Sebastian?- le dijo Arlette a Alma ya vacilando del todo mientras yo iba bebiendo de mi taza de sangre- Pero ya en serio, tendríamos que hacer algo mañana con Pauline, esto no puede seguir así- dijo enarcando una ceja, no podía estar jugando con nuestras mentes cuando le diese la gana.- Yo casi que prefiero no salir de casa en un mes- dije de broma como si el simple hecho de salir ya nos expusiera a ella y sus locuras.

Ben se defendió de mi "acusación" y cuando le aclaró a Gus asentí. -Vale, ya me parecía muy raro... es decir... No sé, les digo que tenía bastante miedo con todo lo de la sangre y por aquel tiempo ni sabía nada de intercambios y esas cosas.- dije aclarando un poco el porqué de que mejor que no hubieran podido modificar el futuro.
Arlette dijo eso primero y sonreí. -Hubiera sido interesante... Bueno, sabiendo que no podiamos joder e futuro podríamos haber aprovechado para probar un poco más el gusto del siglo XVIII.- dije sonriendo y acaricié un poco al pasar la rodilla de Ben con mi mano libre. En realidad, ese beso que me había dado al final me habia dejado con ganas de saber más cosas sobre él, cómo realmente pensaba y hasta dónde hubiera llegado... siempre él había sido el "mayor" el más experto y demás... Pero en su pasado había tenido la chance de ser yo quien lo hiciera descubrir una cantidad de cosas. Sonreí en mis pensamientos y acaricié algo su mano. -Pero tú estabas enfermo y... nos dió miedo no poder salir nunca más... Los vestidos son exquisitos pero pasarse la vida cepillándose el pelo y dando paseítos por las tierras no es para mí.- dije riendo un poco al final por eso del pelo y porque efectivamente me había pasado eso de quedarme como hipnotizada en esos "ritos" de cortesanos que a la vez me resultaban tan extraños.
Arlette dijo lo de Pauline y escuché después a Ben. -Yo tampoco tengo apuro por salir de aquí, de hecho preferiría que nos quedarámos todos un tiempo calmaditos y sin hacer revuelo. Al menos hasta que pueda contactar a mi padre y... no sé, no nos apuremos.- dije. Por fin estábamos en casa a salvo todos reunidos, mejor no jugar con la suerte. -Estoy de acuerdo.- dijo Gus y cogió de la mano a Arlette. -Así contado parece que estuvimos de fiesta, pero no fue así.- dijo mirándonos a las dos. -Vale, mañana no.- dijo Arlette sonriéndole aceptando eso, seguramente ahora estaría más tranquila. Nos habíamos ido de casa todos cuasi peleados, probablemente ninguno quería joder ahora este buen clima. -¿Porqué dijiste antes que admirabas mi sangre fría? Es decir, si le preguntas a Arlette casi muero de un ataque de nervios cuando al Ben del pasado se le ocurrió hacer una tonta recepción y caí en la cuenta que ni sabía bailar decentemente.- dije con una sonrisa mirando a Gus.

- Que miedo-murmuré de broma por la que hubiesen podido liar de hacer realmente algo de eso. Alma comentó que no se veía en una vida de pasear y me encogí de hombros, no me sorprendía en realidad, Alma siempre había necesitaba otro tipo de vida, incluso en este tiempo- ¿Ya estaba enfermo? Vaya... pero bueno, estaba claro que jamás te gustaría en mi momento humano- dije sonriendo levemente porque era algo que siempre la había dicho, es que era una persona totalmente distinta por aquel entonces, en cambio ella me había conseguido llamar la atención de cualquier forma. Estaba claro que era mi perdición.
Aceptaron todos lo de dejar a Pauline de momento tranquila e intercambié una mirada con Gus enseguida por eso de la "sangre fría", mira que era bocazas cuando quería.- Pues... no sé, una manera de hablar supongo- dijo algo cortado por mi mirada sin saber que decir exactamente. Arlette enarcó una ceja porque nos conocía y no le había pasado inadvertido nada de eso pero por una vez en su vida decidió mantener la boca callada (al menos de momento)- Bueno no, una manera de hablar no, es decir... -dudó pero al final siguió hablando, tenía claro lo que no quería que dijese- Al final llegamos a la conclusión de que para salir del hechizo había que matarme, todo eso lo hablamos en voz alta entre nosotros y lo aceptaste en muy poco tiempo, en serio, es digo de admirar- dijo al final con una pequeña sonrisa, cualquier otra persona hubiese intentado como mínimo huir o algo así.

Escuché lo que Ben decía sobre la enfermedad. -Sí, eso ayudó un poco al final a que... bueno, las cosas ocurrieran.- dije pensando en su muerte y demás. -Y luego sobre que jamás me gustarías en tu "momento humano"... No es tan así.- murmuré. -Varias de las cosas que todavía tienes ya las tenías siendo humano.- dije con una leve sonrisa pensando en eso y en que durante el hechizo en varias ocasiones había advertido eso. Bueno, ya se lo contaría cuando estuviéramos solos pero incluso al final, cuando se había atrevido a estamparme un beso sin dudarlo demasiado, lo había notado. En ese diálogo lo había ganado la emoción del momento y era raro de pensar que incluso entonces fuera tan impulsivo. -Digo que a lo mejor tras todos estos años tienes una idea de tí muy estereotipada, quizá no haya sido tan así... Yo que no te conocí entonces, no sé, ví mucho de tí en ese tío cabezotas que quería emparejarme con su hermano como fuera.- dije riendo un poco. -El pobre Sebastián estaba resignado... Tuvo que aguantarme un poco a la fuerza para darte el gusto.- dije con una sonrisa. Me hubiera gustado hablar más con su hermano, había sido consciente de que luego cuando volvier a nuestro tiempo iba a tener ganas de contarle más cosas sobre él... pero tampoco habíamos tenido demasiadas conversaciones, ni demasiado tiempo.

Gus explicó un poco a qué iba con lo de la sangre fría, pero no me pasó inadvertido que cruzaron algunas miradas, estaba claro que había partes de las historia que todos nos estábamos reservando para hablar más "en privado". -Ya, pues... supongo que siempre he sido un poco temeraria, de otro modo no se explica cómo acabé en ese departamento de Berlín a los 16 años viviendo con un vampiro engreído y todo su séquito de extraños aduladores... Es claro que nunca he sido muy normal.- dije pensando en eso. Siempre lo había pensado en realidad. Ya le preguntaría a Ben más detalles sobre eso que había dicho Gus, era evidente que no estaba contándome todo el cuento.

La escuché con atención y sonreí un poco cuando dijo que había visto mucho de mi en ese tío cabezota...-Bueno, puede ser, como ya sabes no recuerdo demasiado de mi vida humana- dije aceptando eso de que tal vez tenía una idea un poco equivocada de mi "yo humano". Con el paso de las décadas mis recuerdos humanos se habían ido diluyendo así que puede que no fuera muy objetivo. Aún así estaba convencido de que había cambiado mucho con los años, las libertades que ahora tenía y las experiencias que había tenido irremediablemente me habían cambiado de una manera o de otra. - Pobre Sebastian... ¿Seguro que simplemente estaba resignado? A lo mejor le gustabas, no todo el rato teníamos visitas "exóticas"- dije medio bromeando pero suponiendo que la llegada de Alma habría llamado la atención como mínimo por su acento y por sus maneras.

Gus rió un poco por el comentario de Alma y asintió- Si reconozco que no debías estar muy bien de la cabeza- desde tan joven con vampiros y con amistades tan extrañas era cuanto menos peculiar.

Ben siguió hablando y lo miré negando con la cabeza cuando dijo eso de Sebsatián y que a lo mejor le gustaba. -No sé, puede ser. Bailamos y alcanzó a decirme que estaba algo aburrido de la vida allí, bueno... no con esas palabras pero que le gustaría algo más de aventura o de acción a su vida. Me preguntó bastante sobre mi familia y me contó de la vuestra.- dije con una sonrisa mirándolo. -Fue todo un caballero, si realmente le hubiese interesado creo que no me habría dado cuenta hasta después de 20 o 25 bailes así.- dije exagerando con una sonrisa por eso del ritmo algo "lento" de aquella sociedad. -En cambio tú... Bueno, tú eres tú.- dije mirándolo a los ojos un segundo con algo de picardía. -Con un par de preguntas demasiado directas me pusiste contra las cuerdas en diferentes ocasiones y hasta me hiciste pisar el palillo... Algo te inquietaba, te dabas cuenta que no era una niña bien tan ingenua como me mostraba, discúlpame tú Arlette que no quiero meterme con vuestro compromiso y tal... pero creo que me dejas 48 horas más en ese castillo y no me habría costado nada seducirte.- dije después mirando a Ben con una sonrisa. -Eso lo dices porque fue en un momento de debilidad, pero no te pienses.- dijo Arlette como defendiéndose pero con una pequeña sonrisa. -A lo mejor en el fondo no estábamos pasando por el mejor momento... Y ya estabas enfermo, quizá tú también andabas algo harto de esa vida sólo que ni te lo planteabas.- murmuró y ya  no dijo mucho más porque no era plan ponerese a hablar de todo eso ahora mismo allí. Se hizo un silencio que no quería que se volviera incómodo. -Nah, no sé... Sólo digo, a lo mejor es mi imaginación romántica.- dije en broma sonriendo y bebí un buen trago de sangre.
Gus permanecía en silencio. Al final se decidió a hablar. -A mi no me vieron?.- preguntó como quien no quiere la cosa, probablemente estaría sacando cuentas de a qué momento exactamente había sido nuestro viaje. -No, a tí no te vimos... Me hubiera gustado conocerte en esa época, pero dudamos en buscarte para que nos ayudaras y al final preferimos intentar resolverlo solas.- le respondí.

Sonreí con algo de tristeza cuando fue comentando más cosas sobre Sebastían- Si, supongo que le gustaba la acción... Al poco de morir yo se alistó en el ejercito, creo que no llegó a superar del todo mi "muerte", ni la de Arlette -murmuré antes de seguir bebiendo un poco de mi taza de sangre- Murió en batalla poco tiempo después- le explicó Arlette a Alma en mi lugar mientras ella misma le daba un trago a su taza después, era triste para ella de pensar después de haber estado de "fiesta" con él hacía apenas un par de horas en esa recepción. Había sido un buen muchacho.
Alma siguió hablando de lo lento que era todo en aquella época y reí ya levemente- Que mala eres- dije sonriendo por eso de los "20 o 25 bailes" antes de que llegara lo demás. Arlette parecía un poco picada, cosa que me hizo gracia- No sé, si ya estaba enfermo creo que las cosas ya estaban algo mal entre nosotros- dije haciendo algo de memoria.- No lo sé, quien sabe- dije después con una sonrisa sin querer mojarme demasiado. No sabía realmente si Alma me hubiese llegado a seducir, seguramente si que estaba claro que era mucho más experimentada que el inocente Ben de esa época, pero también era cierto que estaba totalmente enamorado de Arlette así que... ¡A saber!- De todas formas no sería la primera vez que me fastidias un matrimonio- le dije a Alma de broma recordando a Aitana por un segundo.
Gus escuchó el resto y asintió- Seguramente me hubiese muerto de la impresión al ver a Arlette convertida en vampira, seguro que me hubiese pensado que eras la culpable- dijo sonriendo levemente- Uy, eso suena a pelea- dije de broma mirando a Alma de reojo, algo me decía que el Gus de esa época no se lo hubiese tomado demasiado bien, al menoss hasta conocer la verdad.

Ben y Arlette fueron recordando alguna cosa más sobre Sebastián y me dió algo de tristeza a mi también porque la verdad es que me había caído muy bien y era una pena que hubiera acabado muriendo de esa forma. No dije nada hasta que Ben ya dijo lo del matrimonio. -Ya, sí... Se me da bien eso de joderte el futuro.- dije riendo porque era gracioso de pensar. -Aunque con Aitana fue diferente... Volviste, me dijiste que te ibas a casar, te largaste... Bien merecido te lo tenías si todo se acabó, te pasa por haber sido malo conmigo y dejarme sosteniéndote la vela.- dije en broma antes de escuchar a Gus.
En realidad lo que planteaba en algún punto yo misma lo había pensado, quizá por eso tampoco me había resultado tan maravillosa la idea de buscarlo. -Sí, no sé, ahora que lo dices mejor que no nos encontráramos... Me da un poco de miedo que no me dejaras hablar o a Arlette... y tomaras represalias.- dije riendo un poco mirándolo ahora. De hecho era el más viejo de los tres, si llegábamos a pelearnos no tenía casi chance de salir bien de ahí.