Reencuentro después del viaje en el tiempo (Ben, Arlette, Gus) +18

Recuerdo del primer mensaje :

El el hechizo se rompió y apenas me había levantado que allí estaba Arlette echándome una mano. -Joder! Era eso al final... No puedo creer que lo haya hecho... Donde le ponga una mano encima a Pauline no contará el cuento... dije enseguida con bronca, estaba harta de que jugará así con nosotros y nuestros sentimientos. -Vamos a casa! Ben y Gus deben estar ahí... Joder Arlette...- dije todavía conmocionada antes de abrazarla en un arranque de sentimentalismo, pero es que no acababa de procesar lo que nos había pasado. Ya me aparté y la mire un instante, al final podían darme ganas de matarla pero lo más parecido a una hermana que había tenido y ahora mismo no me imaginaba estar enfada con ella por tonterías.

-Venga, vamos... No nos demoremos más.- dije ya cogiendola del brazo para empezar a caminar. Estábamos con las pintas de ropa interior más barones raros que se usaban en el siglo XVIII con lo cual el cuadro era un poco gracioso.

Entorné los ojos- No te lo podía poner fácil, te hubieses aburrido enseguida- la piqué con una pequeña sonrisa. Era gracioso de pensar ahora desde la distancia, habíamos pasado por mil cosas antes de estar juntos... Parecía mentira que al hubiésemos conseguido estar tan "bien" juntos. 
-Bueno, creo que tras tanto tiempo juntos ya me deberías haber ido conociendo un poquito así que deberías saber que a pesar de las circunstancias soy un tío que evalúa las cosas antes de tomar una decisión- dijo sonriendo levemente, pero mientras que puede que Arlette o yo mismo en situaciones de tensión fuéramos muy impulsivo él era mucho más sensato y seguramente les hubiese dado al menos una oportunidad para explicarse- Aunque supongo que es muy fácil decir eso ahora aquí sentado- dijo admitiendo también eso, así visto parecía que era lo lógico, que no la atacaría de buenas a primera peero, nunca se sabía.

Reí cuando Ben dijo eso sobre mi posible/probable aburrimiento. -Nah, tampoco así... Ahoa de tanto quejarme del siglo XVIII parezco la persona menos conformable del mundo y no es así, que tampoco pretendo vivir de desafío en desafío... Así, la paz, que se yo... No sienta tan mal, podría acostumbrarme incluso a cierta cotidianeidad.- dije riendo un poco. Pero es que tras todo eso de Berlín ya acabarían pensando que de verdad me la quería pasar de fiesta y no era tan así... por raro que pareciera había pasado buena parte de la vida intentando llevar un vida simplemente normal.
Gus habló y lo miré sonriendo. -Vale, puede ser... No sé, de todos modos me das un poco de miedo... Tan así silencioso que no sé que te pasa por la mente.- dije enarcando las cejas exagerando un poco y mirándolo con una sonrisa. Por un segundo recordé lo que había dicho de admirar mi sangre fría y tuve que mordeerme la lengua para no volver a preguntar, me intrigaba eso, sobre todo viniendo de él. -Nada, no me pasa nada. Eres tú que vives dándole las vueltas a las cosas. Te digo que habríamos dialogado de lo más civilizadamente.- dijo riéndose un poco Gus.
-Vale, ya está, lo pillo. Cuéntennos más de Berlín... Porque tantas broncas con Zack, cómo estaba él? qué hacía?.- dije con curiosidad, no me acordaba exactamente de qué estaría haciendo en esa época en realidad.

- Yo también podría acostumbrarme, eh- se metió un poco Arlette pero sonriendo- Una buena temporada sin maridos que mueren asesinados y sin ex locas de mi primo que nos meten en mil líos... No sé, llamadme loca pero algo de paz para variar tampoco vendría mal- se burló un poco con una sonrisa. Era verdad que nos había pasado de todo últimamente- Vete a otro con ese cuento que a ti te gusta también muy poco la normalidad...-la piqué por las idas de cabeza que tenía a veces proponiendo cosas. Me sacó la lengua y reí levemente.
- Ese chico era bipolar, ¿no?- murmuró Gus sonriendo obviamente de broma- Me daba la impresión de que a veces pasaba bastante de ti y otras estaba totalmente pendiente... Podría decirte que Julia iba mucho tras él y cuando notó el interés que tenías por nosotros intentó joderte con eso-dijo recordando cierto desafió- Y parecía que no dejaba de marcar el territorio contigo- le fue contando y por un momento recordé como él no paraba de tocarla y de tenerla sobre él todo el rato, ni ahora que incluso nosotros estábamos medio abrazados por todo lo que había pasado dábamos esa sensación de "control". De verdad que menudo tío...

Arlette dijo todo eso y asentí completamente de acuerdo. Ya Ben la picó un poco y no pude evitar reirme porque tenía razón... tampoco es que fuéramos todos taaaan normales como para pedir normalidad, pero bueno.
Gus empezó a hablar de Zack y reí enseguida que preguntó si era bipolar. -No sé, probablemente.- dije encogiéndome de hombros. Empezó a contarme más un poco todo y sonaba muuuy a Zack. -Siempre fue así, ahora que lo díces... Es interesante ver la sensación que da desde afuera, pero siempre fue muy así, de dobles morales.- dije entornando los ojos. -Creo que lo que le jodía era que a mí me diera un poco igual que tonteara con otras... No sé si era el caso de Julia, porque ella sí alguna vez me llegó a joder, pero no me molestaba realmente que pudiera mirar a otra tía o incluso que pasara algo. No sé, a vosotros se los puedo decir porque ya me conocen y no me vana juzgar mal... creo... pero en aquel entonces no podía explicárselo sin que acabáramos mal. Nos enfadábamos muco, todo el tiempo, lo pasábamos discutiendo por esas cosas.- dije recordando un poco. Parecía que habían pasado mil años. -Bueno, ahora que lo dices no sé si te molestó más Julia o que nosotros fuéramos "gays".- dijo Gus riéndose. -No, hablando en serio, de verdad que no disimulabas para nada que te interesábamos... En un punto no es tan raro que marcara el territorio, aunque era un poco excesivo.- dijo mirando a Ben a ver qué pensaba.

Asentí levemente a lo que comentaba Gus- Si, es cierto que eras bastante descarada...- dije aceptando eso, si me paraba a pensarlo ni si quiera era tan raro que Zack se mosquease por eso- No lo sé, no me quiero poner de su parte porque sabes que Zack no es mi persona favorita del planeta pero si hicieses eso delante mía de esa manera seguiramente también acabaríamos discutiendo- dije medio sonriendo. Una cosa era hacerlo cuando los dos estabamos por ahí en plan fiesta y jugando a eso (que mil veces habíamos coqueteado con otros y seguramente lo seguiríamos haciendo). Eso era sexy en un punto cuando ambos sabíamos que estábamos en el juego pero en ese caso no había parecido ser que los dos estuviesen en ese punto, al contrario, se notaba que a Zack le jodía y ella seguía- Eras un poco mala ahora que me paro a pensarlo... Aunque bah, no te lo puedo echar en cara que es difícil resistirse a mi- dije en todo creído de broma antes de estamparla un rápido beso en los labios.- Creo que para él lo peor fue cuando hicimos el desafio de los colmillos... Cuando vio que te arañaba con mis colmillos y que eso te excitaba... ahí casi colapsa- dijo Gus sonriendo y negando con la cabeza casi que un poco orgulloso de haber conseguido eso.- Si ya era territorial imagínate tras eso- dije sonriendo y recordando eso- Joder, luego decís que si me meto en cosas raras  y demás pero como no paréis de hablar de esa escenita al final la voy a querer ver y se va a liar- nos avisó Arlette señalándonos con un dedo a modo de aviso, cosa que me hizo reír un poco.

Gus y Ben fueron hablando un poco más sobre cómo se habían dado las cosas entre Zack y yo, en realidad nunca había podido dar más detalles sobre mi relación con él porque justamente Ben me lo impedía, siempre que llegábamos al punto acababa diciendo que no le interesaba saber tanto sobre mis relaciones anteriores, etc, etc...
Gus dijo eso de los razguños y cómo me había excitado, me dió algo pensar todo eso. --No me extraña que me excitara, nunca había sentido algo así... Joder, tiene morbo incluso ahora y eso que soy vampira.- dije mordiéndome el labio con una sonrisa. Arlette soltó eso y la miré entornando los ojos. -¿En serio no te importaría que Gus me hiciera eso? Es que te quejas pero no tienes cara.- dije riéndome y mirándola. Desde ya que a mi no me haría ni un poco de gracia que Ben le hiciera eso a ella, o a nadie!

Luego me quedé pensando en lo de Zack y es que hablaban tan tranquilos ya me dieron ganas de aclarar.-Volviendo a Zack, estoy quedando como la mala de la película y no era tan así... No sé esa noche en particular, pero te aseguro que tanto Zack como yo teníamos nuestras historias y los dos lo sabíamos perfectamente.- dije pensando en eso y excusándome un poco sin poder evitarlo. -Siendo honestos, la verdad es que nunca me dejaste entrar en mucho detalle.- le dije a Ben con una sonrisa. -Pero no es lo que piensan... No era una relación abierta, en aquel momento ni sabía que eso era posible, pero nunca nos pedimos demasiada exclusividad y Zack solía irse algunos días así que, nada... teníamos nuestras licencias.- dije encogiéndome de hombros. -Supongo que lo malo de la cosa es que aunque decía que todo estaba bien a Zack eso no le gustaba realmente y al final siempre había problemas...- dije recordando cómo había acabado estropeando todo. -Y tú no te dabas cuenta de eso?.- me preguntó Arlette sin disimular un poco de sarcasmo pero interesada en la historia. -No, no seas mala... no sé, a lo mejor es que no me importaba... un poco me daría cuenta, pero prefería hacer como que no, no sé.- dije encogiéndome de hombros. -Por eso se separaron al final?.- preguntó Gus -Ya estás haciendo que me de pena Zack.- continuó riéndose. -No, no fue eso. Casi que fue justo lo contrario. Un día un amigo de él me confió que varias de las supuestas historias con otras que me contaba a la vuelta de los viajes, eran mentira. Que lo hacía nomás que porque yo no me sintiera mal... Entonces me pareció tan bien de su parte, no sé, decidí decirle que tuviéramos una relación más exclusiva y por meses cumplí mi palabra, hasta que él decidió que no le alcanzaba y apareció con el rollo de que nos casemos y que me convirtiera y que era el amor de su vida... Pero esa parte ya la sabían, no?.- dije suspirando y encogiéndome de hombros. Era una de las primeras cosas que le había contado a Ben sobre Zack.

- No digo que te muerda, solo arañar un poco...-dijo entornando los ojos como si fuera una locura. En realidad lo era.- O tal vez si a los mordiscos... Bah, nunca lo sabréis- dijo ya vacilandonos del todo intentando darle un toque de misterio a sus pensamientos. Entorné ahora yo los ojos y le tiré un cojín que tenía a mano para que se callase. Demasiado lío era lo de la sangre como para ir teniendo esos lazos con cualquiera... y obviamente a nadie le gustaría que esos lazos los tuviera tu pareja con otro.

-No, no es verdad- me quejé un poco, no recordaba haberla impedido hablar jamás de Zack. Lo que siempre había evitado querer saber era lo de sus líos cuando llevábamos la relación abierta pero lo demás- Eras tú la que no quería hablar demasiado de él, al principio porque seguías colada por él... No lo niegues- dije antes de que me fuese a llevar la contraría. Al llegar al pueblo me había hablado de él, no con detalle pero si de algunas cosas de su relación, y después tras una breve visita de él al pueblo habían acabado en la cama de nuevo... Me acordaba perfectamente porque justo tras eso habíamos coincidido en el Ipswich; ella estaba "triste" por esa historia y yo porque había cortado con Aitana, y... acabamos acostándonos por primera vez juntos. Era curioso si se pensaba ahora... Aunque ni si quisiera era el único motivo, tenía claro que nos habíamos tenido ganas desde mucho antes.- Y después... No sé, creo que empezaste a "odiarle" demasiado como para hablar realmente de él- dije encogiendome de hombros, después habíamos descubierto que había mantenido contacto con sus padres y bueno también me había "matado"... Era obvio que nada de eso había ayudado a que ninguno le recordase con demasiado cariño. - No voy a decir que sea mi tío favorito del planeta peero...-tenía claro que era de los tíos más importantes que habían pasado por la vida de Alma y no me agradaba pero de ahí a impedirla hablar de él había un trecho.
Ya nos fue contando más cosas de su relación y algunas de las cosas me recordaba un poco a nosotros pero no dije nada porque no era tan bonito de pensar.- ¿Y por qué no aceptaste? Tiene pinta de que le querías...-dijo Arlette por intentar seguir su razonamiento. Ella misma se había convertido por amor y Alma lo había acabado haciendo también, no entendía que le había llevado a aceptarme a mi y no a Zack- Y no es que no aprecie a Ben pero según cuentas son igual de desastres- dijo medio bromeando por las cosas que contaba de que se habían liado con otros y que ligaba con otras y demás.

Ben fue diciendo todo eso y asentí. -Vale, sí... No sé, puede que no quisiera contar demasiado tampoco yo, no sé.- dije encogié ndome de hombros. Seguía con la idea de que en algún punto a Ben no le hacía gracia, pero tampoco iba a llevarle la contraria ahora porque no estaba segura... -A ver, no es eso, es que siempre has subestimado mis "historias", decías que eran tonterías de niña pija que se hace la rebelde... Quizá tuvieras igual algo de razón, no sé.- dije al final con una sonrisa. Escuché lo que iba diciendo sobre colada por Zack y suspiré... pero no contesté hasta que ya habló Arlette y preguntó un poco eso haciéndome reir con lo de que eran igual de desastres. -Que se yo! No sé, tampoco acepté enseguida la propuesta de Ben... Supongo que fundamentalmente no quería ser vampira y luego tampoco me hacía gracia tener un lazo tan fuerte con nadie, me daría miedo creo.- dije pensando en eso. -Tampoco sé si estaba tan enamorada de Zack...- dije ya apuntándole con el dedo a Ben por eso que decía que seguía colada por él. -Me gustaba mucho, eso sí... Me parecía guapísimo y al dia de hoy no dejo de reconocerle cierto encanto, pero de ahí a estar enamorada. No lo creo. Nunca fuimos realmente un equipo, entiendes?.- le dije a Arlette. -Yo era una cría cuando lo conocí y nunca pude correrme de ese sitio... Decía que me amaba pero no era muy capáz de hacer realmente nada por mí.- dije encogiéndome de hombros. -Pero sí, puede que fuera un poco desastre como Ben... eso no lo niego.- me reí después mirando a Ben de reojo. -No dije yo que tienes un pésimo gusto para los hombres...- dijo Gus riéndose un poco.

- Bueno... Eso no lo voy a negar- dije porque es cierto que siempre la había picado con eso de tener historias típicas de adolescente pija, puede que eso no motivara demasiado a que me contara más cosas... Ahora me sentía un poco hasta culpable la verdad. Era más por picarla que otra cosa, no es que menospreciara su pasado por ser más "simple" que el mío ni nada así.- Fue todo un reto- dije sonriendo y bromeando un poco, pero era cierto que me había costado mucho que se convirtiera, aunque no tanto como que se casara conmigo...- Es una chica difícil aunque no lo parezca- dije ya bromeando del todo mientras dejaba la taza sobre la mesita y volvía a estrecharla un poco hacía mí- ¿Eso quiere decir que somos un equipo?-murmuré mirandola así cerca con una pequeña sonrisa por las explicaciones que daba por no haberse convertido con Zack. Sonaba bonito en un punto, me gustaba haber sido lo suficiente especial para ella para que aceptara al final todo eso.

Ben empezó a decir que había sido un reto y que (aunque no lo parecía) era una chica dificil. Negué sonriendo por eso porque ni sabía cómo tomármelo la verdad... -Ya, no aclares, no aclares... que ya nos conocemos todos.- dije con una sonrisa antes de que dijera lo demás mirándome así un poco de lado y sonriendo. Sabía que le había encantado esa tontería que acababa de soltar. -Sí, sí... Somos un equipo. No sé si eso sea bueno... pero es una realidad.- dije con una pequeña sonrisa. No iba a ponerme romántica allí mismo, pero tenía en claro que esa tontería era de las cosas que más me importaban en la vida, demasiado tiempo había pasado sintiéndome sola, formar parte de "algo" era la razón de mi vida en un punto y con Ben, por raro que pudiera ser, sentía que lo había conseguido. -Awww... me van a daar ganas de llorar de la emoción.- se burló Arlette y entrecerré los ojos. -Tú no te pongas celosa, que también te quiero y por muchas ganas que me den de asesinarte, eres importante para mí.- dije al final y se calló la boca con una pequeña sonrisita. -Llámenme conservador pero a mí no me parece que tus historias fueran las comunes y corrientes de una niña de tu edad... Es decir, acabo de volver de Berlín y tu vida era de todo menos normal. Sábes? Acabo de encontrar otra coincidencia. Es raro pero cuando llegamos estabas intentando explicarle a Zack que tenías que trabajar y que no se la podía pasar de fiesta porque tú necesitabas dormir. Ahora me acuerdo de eso y pienso que es otra constante en tu vida... Te rodeas de vagos!.- dijo Gus riéndose.

- Suena raro, pero vale- dije medio sonriendo por eso de que no sabía si eso era precisamente bueno o no... Ya siguieron hablando y entorné los ojos enseguida por Gus, estaba hoy muy peleador.- Vete a la mierda Gus- dije usando esa expresión tan mía mientras le tiraba otro de los cojines. A este paso nos quedaríamos sin ellos en nuestro sillón.- Además fue a hablar el más indicado, ¿cuánto haces que no trabajas?- se burló Arlette metiéndose de paso ahora ella un poco con Gus. No era el más apropiado para hablar, ninguno de los tres en realidad, hacía bastante tiempo que ninguno tenía un trabajo decente.-No lo necesito tengo ahorros, no como otros- siguió lanzándome de vuelta el cojín- Que te jodan- le dije sonriendo mientras ya acomodaba el cojín de nuevo en mi espalda tras tomarlo al vuelo- Encontraré un trabajo bueno antes de que acabe el mes, ya veréis- dije casi como si fuera un reto personal o simplemente por puro orgullo.

Empezaron a arrojarse cojines entre ellos picándose por lo de ser vagos y me hicieron reir porque ninguno allí se salvaba en realidad... -Así que tienes ahorros?.- le dije a Gus sonriendo. -Y se puede saber porqué estamos nosotros haciendo números como unos pobretones si tú tienes todo tan bajo control?...- le dije riéndome. -Haberlo dicho.- dijo Gus poniendo tanta cara de superado que me hizo reir otra vez. Me daba un poco igual el dinero, de hecho seguía teniendo el famoso fideicommiso que nunca había usado, pero la verdad es que en términos de realidad real, la única que traía dinero a esa casa era yo. -Por suerte somos vampiros, que se tuviéramos que cocinar yo creo que ya habríamos muerto de hambre...- dije riendo. Al final Ben dijo eso y me hizo reir otra vez. -Me gusta, te tomo la palabra!.- le dije a Ben cuando aseguró que en menos de un mes tenía un trabajo decente. -Pero no es tanto conseguirlo, a ver si consigues man-te-ner-lo.- dije riendo porque desde que estaba con él había pasado por algún trabajo y otro, pero ya eso de mantenerlo le costaba un pelín. -Sí, sí... Mantenerlo! Y además podríamos elegir nosotros el rubro, no?.- dijo Arlette ya sumándose a la cosa. -No, no... que elija él, que luego nos va a echar en cara que es culpa nuestra.- dijo Gus riéndose. -En serio que aquí uno tiene la cara más de piedra que el otro, así no se puede...- dije enseguida yo. -Eso es por juntarme con niños bien de la aristocracia... las clases acomodadas son así, no pierden la práctica, así está el mundo.- murmuré antes de beber algo más de sangre riéndome un poco.

Vale al final toda la conversación me estaba tocando bastante la moral, parecía que se habían puesto todos de acuerdo para meterse conmigo- Ya... perdona que no tod- -y Arlette me cortó enseguida enarcando una ceja- Venga no te piques- dijo en un intento de que no siguiera; aparté la mirada y suspiré, estaba claro que me conocía y que sabía que lo que venía era un comentario malintencionado hacía Alma para desquitarme. Al final tenía razón, no tenía sentido, mucho menos tomarmela con ella tras todo lo que habíamos pasado- Bueno pues ya conseguiré algo y lo mantendré- dije recalcando de todas formas eso. Igualmente Gus siguió un poco con eso, sobre todo porque se había quedado con ganas de contestar a Alma- Bueno lo de la aristocracia lo dirás por ellos porque por mi... Creo que esta claro porque soy al que le queda dinero, ¿no?- se medio burló. Pero no le faltaba tal vez algo de razón, mientras que Arlette y yo habíamos sido de la nobleza Gus en su momento no había sido más que un panadero como ya le había contado él mismo a Alma recientemente. Cada cosa que había conseguido había sido a base de sudor y lágrimas mientras era humano así que puede que le diese mucha más importancia a ese tipo de cosas que nosotros, que total jamás nos había faltado realmente de nada y siempre nos habían dado todo hecho.- Deberías volver a montar una panadería, ahora se lleva mucho eso de hacer tartas de fondant con toda clase de decoraciones y todas esas tonterías- me burlé un poco- Seguramente no se me diera mal- dijo sin dejarse picar. Bah...- Ya, iban a estar riquísimas...-dije con ironía pues él no podría entender si realmente estaban las cosas en su punto o no al ser vampiro.

Ya Ben se estaba picando y Arlette lo frenó. Era gracioso que le molestara eso cuando en realidad hacía más o menos lo que le daba la gana realmente. Me hizo reir un poco Gus con eso de que le quedaba dinero precisamente por no ser de la nobleza y ya no dije nada... Es que yo pertenecía (o había pertenecido) a una familia bastante acomodada de mi propia época sólo que nunca había aceptado abiertamente recibir cosas de ellos y menos aún cuando decidí largarme... ahora tras conocer a mi verdadero padre y saber algo más de mi historia tenía menos problemas en usar la pequeña fortuna que tenía guardada, pero sabiendo que tenía muchos años por delante prefería la verdad ahorrar un poco. Sería al final cierto lo que decía Gus, que teníamos dinero justo los que no esperábamos todo de arriba. Empezaron a decir eso de la panadería y me hicieron reir. -No les hagas caso, tienes suerte que la panadería no ha pasado de moda... imagínate si hubieras sido pretor romano o algo así? O no sé, hijo de un marqués, por ejemplo.- le dije a Gus metiéndome de paso un poco con Ben y Arlette sin poderme contener. Vï la cara de Ben y me atajé porque ya se me armaba otra vez... -Tranquilo tranquilo... es broma.- dije sonriendo y mirándolo. -Ya... Ahora lo dices, pero yo te ví la cara de emoción con el vestido ese... bien que te hubiera gustado ir por la vida así vestida dedicándote a cepillarte el pelo, niégalo todo lo que quieras, pero no te costó nada inventarte una vida parelela en la que eras la heredera rica de una familia "bien".- dijo Arlette defendiéndose justamente. -EY! Qué mala! quieres que haga? Si crecí leyendo cuentos sobre las princesitas y sus vestiditos rosas, no es mi culpa si me llenaron la cabeza de mentiras.- dije riéndome un poco por cómo se había desvirtuado la conversación.

- Ja, ja, me parto -le dije a Alma mirándola un poco mal. En realidad la broma era hasta graciosa pero no se paraba de meter conmigo, iba a matarla al final- ¿Por qué te metes conmigo todo el rato? He debido hacer algo realmente malo en ese pasado al que has ido para que me tortures de esta manera- dije entornando los ojos y quejandome de paso un poco.
Arlette ya se metió y aproveché para mirarlas algo más, iban todavía vestidas con esa especie de camisón de hace dos siglos... No era precisamente una ropa sexy pero se les pegaba tanto al cuerpo que no dejaba demasiado a la imaginación...-Es que tenía parte de su encanto esa época tenéis que reconocerlo... Ahora todo eso mejor por las libertades pero si que era más un "mundo de cuento"- dijo Gus dándo su opinión. Hoy estaba mucho más hablador que de costumbre y se notaba que era porque ya estaba en mucha confianza también con Alma.- No sé, supongo que hubiese sido gracioso ver como Alma se desenvolvía por allí... Creo que pega bastante para esa época- dije medio bromeando. Es verdad que en algunas cosas no parecía alguien propia de esa época (lógico porque no lo era!) pero ya la había visto una vez puesta en escena cuando habíamos hecho una "cita de mi época" y recordaba haberla visto bellisima. Hubiese estado bien verla otra vez aunque fuese por un segundo.

Reí cuando Ben dijo es sobre lo que habría hecho para que me metiera con él... -Nunca lo sabrás.- dije de broma mirándolo a los ojos mientras igual cogía algo su mano. Gus habló y ví como Arlette asentía. -Sí, vale, tiene su magia... No lo niego, pero porque ha sido solo un día. Y no era una sociedad muy bonita en realidad... He tenido que lidear con los pensamientos de todos tus invitados a la famosa recepción y no quieres saber lo que pensaban!.- dije ya mirando a Ben con una sonrisa. -Ahora es lo mismo.- dijo Arlette. -Sí, no sé, supongo que en ciertos ámbitos debe ser lo mismo...- dije pensando más que nada en los lugares de poderosos o en la diplomacia, pero luego en la vida diaria la gente no se metía taaanto con los demás, o sí? Quizá sí... -Luego hay cosas que sí eran muy agradables, el vestido que usé en la recepción me encantó.- dije tocando un poco la ropa que ahora tenía, que también tenía su gracia pero no era lo mismo. -Si hubiera sabido que volvería en el tiempo así vestida me lo hubiera dejado puesto... Sólo recuerdo haber visto alguno de época de los que guardaba Aitana... pero nunca había visto uno que no estuviera arruinado por el tiempo. No quiero ni pensarlo, haber perdido esa oportunidad dan ganas de llorar.- dije con una pequeña sonrisa. Pero por poco importante que les pareciera a los demás a esas alturas sabían perfectamente la importancia que le daba yo a esas cosas. Ben dijo que me pegaba la época y sonreí. -No me costó nada entrar en la sala de la recepción, bajar por esa escalera... Fue extraño, pero me sentí a gusto. Luego ya bailar esos ritmos no es mi fuerte así que Arlette me dió un curso intensivo y no sé si lo hice bien o Sebastián y tú eran lo suficiente caballeros como para no ponerme en evidencia... Bueno, tú no eras taaan caballero conmigo, a ver... buscabas bastante indagar sin guardar demasiado las formas.- dije explicándome mejor. -Fue una entrada grandiosa.- dijo Arlette. -Si antes de eso era un misterio quién demonios era Alma y qué hacía ahí, luego de esa entrada se convirtió en objeto de todas las miradas y los comentarios... Fue gracioso escuchar los pensamientos de todos.- agregó con un sonrisa algo orgullosa, finalmente la que había armado todo el asunto de que era una Polignac y el vestido, el peinado, etc... era ella.

- Pues sigue así y hoy dormirás en el sofá- dije enarcando una ceja como si por tanto pique al final fuese a tener sus consecuencias. - Creo que hoy en día es lo mismo, tal vez porque ya no nos movemos por esos ambientes pero en cualquier parte es cosa de todos los días, en el instituto mismo, tal vez no te fijaras tanto porque eras humana y realmente siempre has sido bastante pasota pero allí cada cosa es mirada con lupa, ya sabes que están los populares y luego el resto y... Bah, te podría contar miles de pensamientos que leí mientras iba aquí al instituto de Fell´s, parece mentira que en un pueblo tan pequeño sean así-dije entornando los ojos porque a veces parecía difícil de creer.  Habló un poco de mi en aquella época y reí levemente- Supongo que nunca he sido de guardar demasiado las formas...-hoy en día desde luego que no lo hacía y ella lo sabía de sobra, y de más jóven siempre me había costado, a pesar de haber tenido a una institutriz mandona de trás de mi por muchos años...- Que pena no haberlo visto, de verdad que ahora tengo curiosidad- dijo Gus sonriendo levemente ante las palabras de Arlette. Yo asentí también, desde luego que me hubiese gustado ver como Alma había dejado a todos callados y sorprendidos, seguramente me hubiese sentido hasta orgulloso en un punto, de hecho un poco lo estaba y eso que no lo había visto.

Ben dijo eso primero en relación a que ahora era lo mismo y asentí. Es que seguramente sí fuera medio parecido, pero nunca había prestado demasiada atención. -No, deja... prefiero ni saberlo.- dije riendo cuando mencionó los pensamientos que había escuchado estando en el Instituto de Fell's. -Tengo presente en la universidad la cantidad de cosas que pensaban y ya es demasiado. Quizá tengan razón y sea siempre lo mismo...- dije encogiéndome de hombros. Ben dijo eso de que no había sido nunca de guardar las formas y asentí. -Te controlabas bastante, pero no tanto como estimo que era lo apropiado... Igual también yo un poco generaba eso, es que me costaba por ejemplo hablar poco.- dije riéndome y mordiéndome un labio, pero era cierto. -Bueno, y tambien no mirar a los ojos. Apenas llegar al castillo Arlette desapareció con no sé qué excusa y quedé a solas contigo un instante. Intercambiamos unas pocas frases que fueron más bien preguntas de tu parte y respondí lo que me pareció pero al rato noté que te hablaba mirándote a los ojos y eso te... no sé... te incomodabao algo así.- dije porque era raro de pensar pero eran cosas que me habían costado. -Arlette inventó una historia sobre que nos habían atacado unos ladrones, no sé... El punto es que en el primer instante en que nos quedamos solos indagaste sobre mi origen y apenas dije que era la primera vez que viajaba sola ya soltaste una frase como que "te costaba creerlo" o algo así... Definitivamente de ser verdaderamente una Polignac creo que hasta me habría indignado por tus modos, pero como eras tú... pues me lo tomé un poco a gracia y te seguí la corriente.- dije en broma con una pequeña sonrisa.
Ya dijeron eso de la recepción y sonreí levemente. -Estuvo bien, no sé, fue raro y apenas acabé de bailar con Ben ya busqué la manera de largarme de ahí, me atormentaba un poco la cantidad de cosas que pensaban y rumoreaban sobre mí. Les llamaba la atención todo, hasta cualqueir tontería como que fuera alta o rubia, que se yo... Enseguida me acerqué a Sebastián con alguna excusa y se ofreció a acompañarme a caminar un rato por las tierras de tu familia hasta que ya nos vino a buscar Arlette con el cuento de que más tiempo era inapropiado o no sé, algo así.- dije sonriendo porque ni recordaba, pero en ese momento había aparecido el mensaje de mi padre.

Es verdad que en la universidad también se pasaban pero es que nunca habíamos sido demasiado discretos y siempre dábamos mucho de que hablar... 
La miré y sonreí, me podía imaginar que eso me podría haber incomodado, a cualquier hombre de ese siglo en realidad ya que no era algo a lo que estuviésemos acostumbrados- Uff, no me extraña que le incomodara, me cuesta hasta imaginarme a una chica de esa época haciendolo- dijo Gus medio sonriendo e intentando ponerse en la situación- Si, digamos que es algo raro... Creo que ni Arlette me miraba demasiado a los ojos y eso que estábamos comprometidos- dije sonriendo por lo disparatado que sonaba. Ella misma rió y asintió- No me mirabas demasiado pero bien que me besabas tras las columnas- se burló un poco. Enarqué una ceja sonriendo porque me recordaba a cosas que yo mismo hecho en mi época...- De hecho también me notabas rara a mi, decías que actuaba raro y... Estabas también un poco desconfiado conmigo- me explicó, estaba claro que había evolucionado y no se había comportado taaan acorde a la época como hubiese hecho en su momento.- Supongo que era muy perspicaz- dije de broma a lo que Arlette entornó los ojos porque era obvio que no lo había sido, sino me hubiese dado cuenta de lo suyo con Gus mucho antes...- Aún así no estuvo mal, Alma se comportó bastante acordé, parecía realmente de la clase alta y como los Polignac eran de otra región todo el mundo pensó que su acento raro era por eso- nos fue explicando mi prima. Sonreí y entrelacé algo más los dedos con los de Alma. No dudaba de su capacidad de adaptación, mucho menos tras verla con esa "sangre fría" en el Berlín de hace 10 años. - ¿Y no hicisteis nada raro? En plan... no sé, ¿beber de alguien o usar vuestros poderes con alguien para vuestro beneficio?- preguntó Gus por saber si habían hecho algo de eso, nosotros no quitando al final con Zack... Pero bueno que nuestros juegos no habían sido muy normales del todo, bastante habíamos tenido con librarnos realmente de mordernos el uno al otro.

Tanto a Ben como a Gus les pareció raro que mirara así a los ojos y me encogí de hombros porque en realidad a mí ni siquiera se me habría ocurrido, simplemente lo noté y luego intentaba no hacerlo pero me costaba. -Y qué sensación daba que mirara así a los ojos? Cómo que era una chica sin educación o algo así?.- pregunté porque es que no acababa de entender qué era lo que podía haber pensado sobre mí a raíz de eso. Ya Arlette comenzó a decir eso de que la besaba detrás de las columnas y entorné los ojos. -Bueno, precisamente, ahora que lo mencionas fue por esas escapadillas suyas que acabé con Sebastián caminando por ahí... es que en un punto de la fiesta a Arlette le dió por desaparecer y definitivamente no me animaba a quedarme allí sola a riesgo de meter la pata. En ese momento todavía no sabíamos que no podíamos modificar el futuro.- dije recordando eso. -Y, aunque era la razón de tanto revuelo, Sebastián parecía la más inofensiva de las personas que estaban allí.- dije porque recordaba que había evaluado eso, era el que menos indagaba así que me sentía cómoda con él.
Arlette dijo después que me había adaptado bastante bien y yo hice un pequeño gesto como asintiendo pero cerrando apenas los ojos e inclinando algo la cabeza en plan cosas de esa época. -No, no les dije antes que claramente nos habíamos confundido de época para viajar.- dijo Arlette como respuesta a lo de Gus. -Sólo a Sebastián le hicimos olvidar todo y lo mandamos de vuelta a la casa tras la aparición del mensaje de mi padre... dije recordando eso. -Bueno y a Ben al final también lo hipnotizaste un poco...- me dijo Arlette con una sonrisa algo maliciosa. -Sí, vale, lo mínimo indispensable.- dije riendo y también Arlette se rió, ya antes le había dicho a Ben esa misma frase, que le había mentido lo mínimo indispensable.

-No tanto como si en educación pero si de una mujer muy atrevida, incluso de gente un tanto trabajadora tal vez que ha vivido mucho... - fue diciendo Gus- Mujeres de vida libertina también- dijo Arlette siendo más clara y riendo un poco. Sonreí y negué con la cabeza. No eraaa tan así, pero bueno un poco si. Comentó sobre Sebastian y sentí, en realidad era un buen chico y no descartaba que fuese una de las mejores de esa fiesta así que había tenido suerte de poder escaparse con él.
- ¿Así que me hipnotizaste? Vaya Alma que decepción, ni si quiera fuesta capaz de convencerme por ti misma, y encima estas mala conmigo... Cada vez te estas ganando más boletos para dormir en el sofá- la piqué mirándola con una sonrisa- Bueno si no recuerdo mal tu también lo intentaste- acotó Gus haciendo que le mirase mal por un segundo. Pero era verdad, lo único que no había funcionado.- ¿En serio? Quiero escuchar eso más atentamente, ¿fue mal?- dijo Arlette sonriendo - Pero primero... ¿Puedo ir a por algo de bebida sin que penséis mal de mi?- se burló un poco por como la lanzabamos siempre pullas mientras se ponía en pie y llevaba ya nuestras tazas vacía hacía la cocina y para poder servirse lo que la apeteciese ahora mismo.

Gus y Ben aclararon lo de mirar a los ojos y negué con la cabeza. -Qué mala época! Qué injusto... De hecho, si mal no recuerdo tú me miraste bastante de más apenas nos quedamos solos.- dije mirando a Ben con una sonrisa. -Si no te conocieras pensaría que te llamaba la atención mi ropa "moderna", pero conociéndote te aseguro que no fue pura curiosidad.- dije riéndome un poco porque recordaba como había paseado la vista por mi cuerpo hasta que notó que ya lo estaba mirando algo "incómoda".
Ya empezaron con eso de haberlo hipnotizado y negué con la cabeza. -Nooo, no quiero dormir en el sofá, te aseguro que fueron de verdad mínimas e indispensables. Mira, sólo dos órdenes y muy inofensivas: que te quedes allí donde estabas y que no te asustes.- dije con una sonrisa explicándole eso. -He sido muuuy buena, lo demás fue pura persuación de la común y corriente.- dije con una sonrisa y ya cuando Gus dijo lo demás lo señalé con el dedo. Ah... bueno... sí que no tienes cara!.- dije riéndome antes de que Arlette se fuera a buscar las bebidas.
-Tomabas verbena? Cuando estuve cerca de tu cuello no lo sentí.- preguntó Gus, volvió a mencionar lo del desafío de sus colmillos en mi cuello y nada más pensarlo me daba algo de nuevo. -Es que no, no tomaba verbena, ni siquiera sabía que existía... En Berlín no hacía tanto que estaba con Zack, apenas unos meses.- dije sacando cuentas.
Volvió Arlette con las bebidas. -Bueno, ya está... Venga, cuenten cómo fue eso.- dijo acomodándose en el sofá.

-Bueno cariño como ya te he dicho muchas veces: La vida no es justa- me burlé un poco. Era algo que la decía mucho y que ella odiaba. - Y yo si tenía derecho a mirar- dije con tono creído, no era taaan así pero es verdad que los hombres teníamos más libertad en eso.
Arlette volvió y me serví yo también una copa de las bebidas que había traído por hacer tiempo. Joder es que no quería hablar de más pero tampoco quería mentirla- Digamos que fue cuando todavía no sabíamos de que iba el hechizo, queríamos que Alma nos ayudara un poco e intenté usar mis poderes con ella para lo mismo que hizo ella, para que no se asustara y colaborara- comenté recordando como no había servido de nada- Después pensé que era por un colgante que llevaba así que te lo arranqué- dije mirando a Alma por un instante- Era un collar normal que te debiste de comprar en cualquier parte así que no funcionó... Dimos por hecho que tomarías verbena pero es que Gus no había captado nada, fue raro- dije porque ese había uno de los grandes fallos de mi plan.- Pero si dice que no tomaba verbena... ¿qué podría ser? Debía llevar algo en lo que no nos fijamos- dijo siendo lo más lógico posible. - A lo mejor es que simplemente estáis perdiendo facultades, la edad no perdona para nadie- se burló Arlette y sonriendo.

Ben dijo eso en tono creído y negué con la cabeza. -Ya, eso dices ahora... pero te dejé sacarte las ganas porque eras tú. Haber sido otro tío y te aseguro que te dejaba sin derechos en el acto.- dije con una sonrisa maliciosa. Ya empezaron a contar un poco más claramente cómo habían sido las cosas... sentía que no iban al punto pero antes había entendido que había cosas que querrían guardaarse para hablar más en privado (como me pasaba a mí) y se veía que tenía que ver precisamente con el final del viaje en el tiempo.
-Me rompiste un colante? Qué violento... podrías habermelo pedido con cualquier excusa... Ves, a eso me refiero, por ansioso seguro que no usaste lo mínimo indispensable como para persuadirme... Ya me estoy imaginando, me parece que el que se queda en el sofá eres tú.- dije picándolo con una sonrisa. Arlette soltó eso y me hizo reir, pero la verdad es que no sabía la respuesta. -A lo mejor era otra cosa, no tenía pendientes o anillos o pulceras? Zack solía regalarme cosas... a lo mejor...- dije pensando en eso. Bueno Stefan en su momento me había regalado una pulcera, no era tan raro que Zack hubiera hecho lo mismo para protegerme, no?

-Ya, seguro- dije entornando los ojos sin hacerla ni caso. No me la creía para nada con lo que la gustaba llamar la atención en otros tíos.
Comentó que parecía un acto violento y Gus se rió entre dientes porque si ella supiese...- Es que estabas muy pesada y no te callabas- dije para toda explicación como si eso explicara el acto en si.- Nada de sofá, te garantizo que estaba justificado- dije con mi mejor cara de niño bueno.- Que tío de verdad, hubiese dado lo que fuera por veros- dijo Arlette entornando los ojos. La verdad es que habíamos sido un show para que mentir.- Y bueno llevabas anillos y pulseras...-admití. No le había dado realmente importancia porque Alma era algo que solía llevar. Era muy pija respecto a la ropa y a los complementos (pasando incluso por la ropa interior) así que no era algo que hubiese llamado especialmente mi atención más allá del collar ese. Parecía el lugar típico para llevar la verbena...