Hasta las narices de tanto libro

Recuerdo del primer mensaje :

Llevava ya dos dias investigando sobre los lycanes y ya estaba hasta las narices de estar entre la libreria, la biblioteca y mi dormitorio por lo que fui a un cafe del pueblo. Al entrar pedi un buen cafe y me sente en un lugar tranquilo a leer lo ultimo que habia leido con un lapir y el bloc de notas sobre la mesa.

Lo fulmino con la mirada.
-Esto es culpa tuya...-le dije mientras recogia mi libro y lo metia en la pequeña mochila que llevava-Vamonos o pensaran que el local esta encantado-dije mientras me ponia de pie, movimiento poco acertodo ya que me maree y volvi a sentarme antes de caer-Aunque creo que es mejor que lo piensen...-comente divertida

-No muerdo, no es luna llena

Dijo sonriendo

-Aunque puedo hacerlo si lo pides...

Largó una risita

-Quieres venir?

Dijo extendiéndole una mano

-Esta bien...-respondi. A fin de cuentas no tenia a ningun sitio al que ir a parte de mi dormitorio en la casa de Huespedes a la cual dudaba que llegara en aquellos momentos. Tome su mano y me puse de pie, esta vez no tan rapido. Resulto que no me encontraba tan mal como me esperaba y pude caminar perfectamente, mas o menos.
-¿Y donde queda tu apartamento?-le pregunte cuando salimos del cafe tras haber pagado.

-En el pueblo... un poco alejado, pero es confortable, puedo asegurartelo...

Diciendo esto, rodeó con su brazo los hombros de la chica y comenzó a caminar con una sonrisa en el rostro

-Te veo muy contento...-le dije divertida al ver aquella expresion que llevava en el rostro.

-Siento que esta será una noche... Mágica?

Rió ante su propio comentario

Aquel comentario no me hizo ninguna gracia.
-¿Te burlas de mi?-le pregunte y luego le di un empujo con una mano solo que sin llegar a tocarlo. En vez de la fuerza de mi cuerpo utilice la fuerza de viento y una potente rafaga lo colpeo fuertemente haciendolo moverse de tal forma que quedo a un paso separado de mi.
-¿De veras crees que mi poder es tan limitado?-le pregunte molesta.

-No, no dudo de tus poderes. Ahora puedo dudar un poco de tu sentido del humor

El chico la miro y le dio un toque en la frente, sonriéndole

-No tienes por qué enojarte

Bufe, me di la vuelta y eche a andar.
-Magica, ja-comence a decir sarcastica-perdona Lee pero no le encuentro la gracia-le dije dandome la vuelta para verlo mientras seguia andando-mi vida es la magia y una cosa es entretenerse con ella y otra cosa muy distinta burlarse de mi-continue. Definitivamente el alcohol no me hacia bien.

Decidió acercarse a ella

-Solo dije que sería especial pasar esta noche contigo, no creo que dijese nada particularmente malo, es mas... era un halago

Dijo el chico con una expresión un poco sorprendida, así y todo le tomó la mano

-Puedes perdonarme?

Me detube un momento y lo sopese unos segundos.
-Esta bien-le dije no muy convencida del todo mientras liberaba mi mano-de todas formas creo que es mejor que me vaya a casa, a fin de cuentas le prometi a un lobo que lo ayudaria con un problema de magia...-le dije un tanto bromista guiñandole un ojo.

-Dulce

Al decir esto le besó y la cargó en su espalda

-No dejaré que vayas sola...

Me rei cuando me subio a su espalda.
-No deberias, lo pasaras mal si piensas llevarme hasta mi casa...-le dije divertida

-Y eso por qué? una bella dama a mi cuidado, no es tan malo

Le sonrió y comenzó a caminar

-Aunque necesitaré tu guía

-Hay que salir del pueblo, en direccion al bosque, mas o menos por donde nos conocimos...-le explique-Y yo me referia al echo de la naturaleza de mis compañeros de casa-le dije

-Mmmm, buen punto, no me caen bien los chupasangre... si quieres puedes dormir en mi apartamento, creo que está mas cerca

Dijo titubeando, pero sin dejar de caminar

-Va enserio, quiero encontrar la forma de hacer que la piedra funcione y para eso necesito mis libros-le dije en tono un tanto cansado mientras encondia mi cara contra su cuello.

-Eso entra en conflicto con las ganas que tengo de pasar la noche contigo... puede haber una solución que nos contente a ambos?

Dijo con una risita complice

Rei sordamente sin mover mi cabeza de como estaba.
-Solo si encuentras la solucion al problema de la piedra-le dije divertida.

-Eso no es justo

Dijo Lee con una voz que sonaba al reproche de un niño

Rei divertida.
-Eso te enseñara a no ligar con quien le has pedido un trabajo, por cierto ¿que hora es?-le pregunte

-Las 12:10 de la noche, y no ligo contigo por el trabajo, simplemente me llamas poderosamente la atención

Estaban en el medio del bosque y el la bajó caballerosamente de su espalda, para luego apoyarla lentamente contra un árbol y besarla con esa misma pasión animal que había mostrado con anterioridad

Las 12 y 10 de la noche pense para mi y la idea retumbo por mi cabeza mientras Lee me besaba y yo me dejaba llevar por él devolviendole aquel beso.

Lee comenzó a bajar por el cuello de la muchacha, apasionadamente, mientras dejaba caer limpiamente su sobretodo negro al suelo. Las caricias del hombre lobo eran suaves, pero su actuar era sensual y salvaje a la vez, no podía negarlo, la bruja atraía todos sus sentidos

Mi cuerpo ardia ahi donde el tocaba y con cada caricia y cada beso sentia que me derretia cada vez mas y mas.
Con un simple movimiento deje caer la mochila que tan solo llevava colgada de un hombro y comence a quitarme la cazadora negra dejando a la vista un vestido de manga larga y a medio muslo en un beige perla y con detalles en negro.