+18 Llegando a casa (Alma)

Recuerdo del primer mensaje :

Había estado esquivando un poco a Alma desde lo de Aitana. En el fondo aunque me jodiera reconocerlo era algo cobarde para estas cosas así que evitaba contarlo pero no podía seguir así por mucho tiempo. Llegué a casa y enarqué una ceja nada más entrar en casa, no esperaba que Alma estuviera, pero la escuchaba en el salón. Suspiré armandome de valor y ya entré- Hey...-saludé tras cerrar la puerta, quitarme la chaqueta e ir al salón.

Sonreí con eso porque no era que la viera precisamente sosa pero esa conversación no dejaba de hacerme gracia- Luego me encontré con otra chica...- dije siguiendo con mi "historia".- Y me la tiré también.... Estaba molesto y terminó masturbandome, ¿te lo puedes creer?- dije como si no diera credito o algo- También me pidió que la mordiera y en fin... Que ya te puedes imaginar el resto...-dije sonriendo picaramente.

Mordí mi labio enseguida que dijo eso y suspiré como una idiota porque la conversación me encendía al tiempo que me hacía gracia. -Sí, me lo puedo imaginar...- murmuré. -¿Y era sosa también o con eso de masturbarte y pedirte que la mordieras ya estuvo un poco mejor?.- le pregunté mirándolo con una sonrisa y siguiéndole el juego.

La miré por su suspiró y sonreí- No estuvo mal... La sangre es cierto que fue un punto a su favor...-dije sonriendo ligeramente mientras cogía su mano y jugaba con sus dedos antes de mirarla e ir subiendo a poco acariciando su brazo.

-Sólo la sangre?.- murmuré casi poniéndome del lado de esas "chica" sin darme cuenta cuando sentí que jugaba con mis dedos y comenzaba a subir por mi brazo acariciándome. Volví a suspirar y cogí un nuevo trocito de pastel de "casi" chocolate.

- Si solo eso...-dije como si fuera totalmente cierto y con una sonrisa mientras la miraba- La tercera fue mucho mejor...-dije prosiguiendo con la historia- Falto lo de la sangre pero bueno...-dije con tono de drama en broma- A esta la masturbé yo haciendo que gimiera hasta que no pudo más...-murmuré muy suavemente mirandola y quitando la mano de su brazo para llevarla hacia su pierna y acariciarla allí- Me llevó casi al límite e hicimos el amor sin cortarnos para nada...

Cuando empezó con eso de la tercera casi me da algo. Su tono de voz y esa tontería de acariciarme levemente la pierna ya me habían encendido mucho más aún. -Joder Ben...- murmuré olvidándome de todo el rollo porque me estaba enloqueciendo de sólo pensar. -No vas a dejarme dormir esta noche, verdad?.- le dije mirándolo con carita de pena, estaba exhausta pero también tenía ahora muy pocas ganas de dormir a decir verdad... a cada palabra que soltaba más excitada estaba. Dejé a un lado el plato con el pastel y tomé su mano sobre mi pierna acariciándome con ella el interior del muslo sin cortarme.

- Pídeme que te deje dormir y lo haré...-murmuré con una pequeña sonrisa mientras sentía como tomaba mi mano y se acariciaba ella misma. La miré a los ojos sin cortarme dejando que guiara ella mi propia mano por allí.

-No te pediría eso y lo sábes...- murmuré vencida porque ahora mismo era claro que por más que ni comiera y estuviera agotada no podía librarme de las ganas de estar con él de mil formas. Me miró y sonreí de lado mientras conducía ya su mano por mi pierna colándola por debajo de la toalla hasta llegar a mis muslos y acariciarme el interior.

- ¿Y qué me pedirías?-murmuré mirándola y acercándome a morder su labio mientras sentía como subía su mano por debajo de la toalla- ¿Quieres que te haga el amor o prefieres que te masturbe?- murmuré suavemente siendo completamente directo como llevaba haciéndolo toda la noche mientras subía yo mismo algo más mi mano todavía sujeta con la suya hasta llegar a su sexo.

[off: Me voy, bye! ]

Mordió mi labio y dijo lo primero. Suspiré y sentí como conducía mi mano con la suya a su sexo al tiempo que me preguntaba eso. -Masturbame...- susurré acercándome a su oído como si fuese algo que no podía decir en voz alta. -Me encanta como lo haces.- suspiré y llevé mis labios a los suyos pero en lugar de besarlo me dediqué a morder ligeramente su labio inferior.

[off: Ok. Bye! ]

Suspiré tras escucharla porque era jodidamente sexy.- Lo que quieras...- dije contra sus labios cuando se decidió- También me encanta masturbarte... -murmuré suavemente sintiendo como mordía mi labio inferior. Todavía seguía tomando mi mano pero esta vez cogí yo la suya haciendo que fuera ella la que tocara directamente su sexo, acariciándose superficialmente pero siempre siendo guiada por mi propia mano.

Lo escuché decir eso y sabía que estaba ahora mismo completamente encendida. No había discusión posible, me tenía en sus manos. Comenzó a guiar mi propia mano hacia mi sexo haciendo que me tocara yo misma y como siempre me dejé llevar, siguiéndole el juego y llegando hasta allí para acariciarme con las yemas de mis propios dedos guiados por su mano.

Continué con eso sintiendo como se iba excitando poco a poco. Besé y tironeé sus labios con pasión sin cortarme demasiado, consiguiendo incluso que sangrara su labio inferior un poco. Suspiré por la sangre y ya aparté su mano dandola placer yo mismo con mis dedos como sabía que la gustaba mientras la besaba una y otra vez sin descanso.

Nos besamos con intensidad y consiguió hacer que sangrara de tanto mordisquear mis labios. Lo sentí suspirar y chupé mi propia sangre mientras sentía como ya apartaba mi mano para comenzar a darme placer él mismo. Aún estaba sentada y recostada contra el respaldo de la cama así que ni siquiera me había tumbado del todo, pero lo que hacía me dejaba inmovilizada y sólo podía dedicarme a suspirar de placer.

Me aparté de sus labios para poder ya mirarla e introduje de nuevo un dedo en su interior para continuar excitandola y acariciandola con intensidad con mi otra mano por todo su cuerpo.

Dejámos de besarnos un segundo y me miró a los ojos antes de introducir un dedo en mi interior y continuar acariciándome. -Joder Ben... eres perfecto.- murmuré y lo tomé de la nuca atrayéndolo así sentados como estábamos porque necesitaba besarlo ya mismo.

La escuché y suspiré porque todo eso ya me estaba encendiendo a mi también otra vez, no podía ser que no me cansara de ella- Tu si que eres perfecta...-murmuré suspirando, me acercó un poco y volvimos a hundirnos en la boca del otro besandonos mientras volvía a introducir otro dedo en su interior y acariciaba su clitoris cada vez con más intensidad.

Lo escuché decir eso y suspiré pero no tuve tiempo de nada porque en medio de ese beso intenso que comenzábamos introdujo otro dedo y comenzó a acariciarme sin cortarse haciendo que me estremeciera por completo y que no pudiera más que dejar mi boca contra la suya pero casi sin fuerzas para besarlo.
Me estaba llevando al límite y no podía sentirme mejor.

Con mi mano libre fui acariciando todo su cuerpo, sus pechos e incluso su espalda aprovechando que no estaba tumbada del todo sobre el colchón.- Mírame...-murmuré apartándome un poco de sus labios y queriendo que me mirara y no cerrara los ojos porque me encantaba ver como iba llegando al límite y como la costaba controlarse mientras introducia mis dedos en su interior cada tanto con intensidad y acariciándola sin descanso.

Lo escuché decir eso y suspiré porque era demasiado, pero no podía evitar complacerlo así que levanté la mirada clavándola en sus ojos y sosteniéndola allí mientras abría mi boca casi inconscientemente a medida que él iba aumentando sus movimientos. Sabía tocarme perfectamente, quedándose donde lo precisaba y moviéndose casi como si leyera mi condenada mente, era increíble y no podía estar disfrutando más de todo eso. -Háblame.- murmuré mirándolo en el mismo tono en el que había dicho que lo mirara porque ahora mismo sólo quería escuchar su voz, lo adoraba.

Alzó la vista mirandome y sabía que por momentos la costaba pero de todas formas no apartó sus ojos de los míos mientras la veía abrir la boca inconscientemente por todo lo que sentía. Me mordí un labio para no besarla y cuando la escuché suspiré- Te quiero.... Muchisimo, y eres jodidamente sexy... No sabes lo que provocas en mi...-murmuré hablandola como quería mientras intensificaba mis caricias, presionando justo donde sabía que la gustaba e introduciendo ya un tercer dedo en su interior sin esfuerzo por lo excitada que estaba.

Lo escuché decir todo eso y sonreí sin dejar de mirarlo hasta que ya introdujo otro dedo más y me sentí al límite, no tardaría en llegar al orgasmo, sabía como tocarme y estaba siendo totalmente perfecto. Tuve que dejar de mirarlo y recosté mi cabeza en el respaldo de la cama mientras cerraba los ojos y con una mano casi inconscientemente acariciaba su otro brazo.

Cerró los ojos ya sin poder evitarlo y me acerqué hasta su cuello, estampando besos por allí y diciendola un montón de tonterías al oído un poco picantes que sabía que la gustarían. Intensifiqué cada vez más los movimientos de mi manos, ayudándola ya a llegar al orgasmo, la sentía totalmente desbordada bajo mis manos y me encantaba, siempre me había encantado verla en ese estado apunto de estallar.

Se acercó a besar mi cuello y soltó muchas cosas que me hicieron encender más si era posible. Enseguida continuó a lo suyo y logré llegar al orgasmo soltando algún gemido sin poder evitarlo, había sido completamente increíble. Realmente estaba exhausta.

Llegó al orgasmo entre gemidos como me gustaba escucharla y ya me aparté un poco dejando que se tumbara en la cama porque parecía ya realmente cansada. Sonreí ladeadamente y me tumbé también un poco de lado para poder mirarla mientras recuperaba la respiración.