+18 Relajándonos en Río de Janeiro (Ben, Arlette, Gus)

Recuerdo del primer mensaje :

Arlette dijo eso y asentí, era cierto que a pesar de las miles de complicaciones, las ideas y venidas, y todo los rollos en los que nos veíamos inmersos... no nos estaba yendo tan mal. Seguíamos queriéndonos y eso ya era mucho decir.
El viaje se pasó entre una charla y otra, por primera vez lograba conversar con Arlette como si de verdad fuese una amiga, sin las presiones de la locura de las muertes de Gus y Ben, sin andarnos con indirectas ni nada así... demasiado habíamos pasado como para seguir buscando problemas, quizá era tiempo de aceptar que no estaba tan sola en el mundo... pero tampoco quería dejarme llevar demasiado por esa sensación.

Finalmente Gus y Ben se despertaron con las maniobras del aterrizaje en Río. Bajamos del avión y escuchar el brasilero ya era una sensación bonita. Una sola vez había estado en Río, había sido un viaje muy rápido con Zack y apenas había podido disfrutar de todo eso que decían de la gente de allí... y de las playas! Esperamos las maletas y me acerqué a Ben. -Morir cansa, no? Es que se han echado todo el viaje durmiendo...- murmuré de broma mirándolo y un poco también a Gus.

Gus dijo eso primero y entrecerré los ojos mientras sonreía por el modo en que estaba coqueteando conmigo. Soltó que lo bueno se hacía esperar y me mordí un labio enseguida. -Cuento con eso.- dejé caer solamente pero ya tuve que desviar un poco mi atención porque Arlette acababa de tomar la iniciativa otra vez y empezaba a besarme los pechos haciéndome perder un poco el control que estaba teniendo de la "situación". No dije nada, sólo me dejé llevar y una de mis manos fueron a la nuca de ella, acariciándola con total delicadeza, buscando que supiera lo mucho que me estaba gustando eso. Seguía mirando a Gus mientras movía mi mano en la nuca de Arlette, provocándolo sin siquiera proponérmelo... Pero Ben no se quedó afuera ni un instante más y me estampó un beso hundiéndose en mi boca de una vez y haciendo que perdiera todo interés en Gus y que me quedara ya en sus ojos y en su boca, suspirando allí y lamiendo sus labios, mordiéndolo como me daba la gana. Casi que protestando por cómo habíamos acabado metidos en tremendo lío... pero no podía quejarme, estaba pasándolo demasiado bien.

[off: ]

Nos fuimos besando y pude notar como se descargaba contra mi boca al mismo tiempo que sentía también el deseo que sentía gracias al vinculo de sangre... Alma siempre era tan contradictoria que me daba algo. Suspiré contra su boca y me aparté un poco al notar como Arlette se movía un poco. Seguí con mi mirada sus manos y observé como jugaba con el borde del short de Alma- ¿Me ayudas?- me susurró con una voz de inocente que casi me da algo. Asentí como un tonto y llevé mis manos también hacía el short de Alma. Lo fuimos deslizando por sus piernas ayudándonos mutuamente y sin cortarnos en caricias por sus piernas... Gus por su parte no dejó de mirar a Alma, al contrarío, después de ese "juego" de palabras que habían tenido la miraba más, casi que desafiándola, provocandola... Fue mirando su boca y fue bajando lentamente su mirada por sus pechos... Por su cintura... Por sus piernas...

Arlette comenzaba a jugar en el borde de mis shorts y yo sólo me desquiciaba en la boca de Ben, descargándome un poco con él hasta que escuché a Arlette decirle eso con absoluta complicidad. Joder... suspiré y sentí como Ben le hacía totalmente caso y en un segundo estaban bajandome los shorts entre los dos. Pero lo peor seguía siendo Gus su mirada recorriéndome, podía sentir como me quemaba y me iba a dar algo, así que volví a mirarlo a los ojos... sin cortarme para nada, advirtiendo como me iba recorriendo el cuerpo y sabiendo que estaba también deseándome, aunque no lo dijera, aunque no se moviera. Ben y Arlette iban jugando como niños con mis shorts y mis piernas, besándose cada poco y luego besándome a mí. Sentía sus caricias por mis piernas y suspiraba de placer, pero ya no apartaba mi mirada de Gus, no podía hacerlo.

-Pensé que querías hablar- la retó con una sonrisa de suficiencia por como antes Alma se había puesto pesada con eso de hablar llevando la contraría a Arlette- ¿Ya no quieres hablar? ¿Te cansaste?- la picó mientras la miraba con deseo manteniendo sus ojos en ella en todo momento, más al notar la mirada desafiante de Alma mientras nosotros la hacíamos todo lo demás.
Arlette por su parte se puso en pie y no hizo falta que dijese demasiado. Desabroché su falda y la dejé caer al suelo antes de besarla. Sonreímos y esta vez se sentó al lado de Alma para no acapararla tanto- Yo creo que era pura palabreria- se metió Arlette en la conversación bromeando mientras me tomaba de la nuca y me llevaba a uno de sus pechos. Sonreí mirando a Alma un instante y después complací a Arlette enseguida, lamiendo su pecho y mordiendo. Ella suspiró pero aún así siguió jugando también con Alma, acariciando sus pechos, su cintura... Aventurándose por momentos por sus piernas, no dejando de jugar con ella en ningún instante...

Gus empezó a provocarme diciendo eso y sonreí mordiéndome un labio. Arlette se puso de pie y se quitó la falda antes de sentarse ya a mi lado y llevar a Ben a sus pechos mientras se metía picándome un poco también. -Ya lo he dicho, me encantaría que me toques pero no quiero apresurarte.- murmuré mirando a Gus con picardía y siendo totalmente descarada con él. -Además... me gusta que me mires.- susurré sin quitar mi mirada de sus ojos. -Sé que me deseas, venga... dilo... has querido saber el gusto de mis labios desde el principio, sólo que no te atreves.- susurré sin dejar de mirarlo ni por un segundo. Joder, es que lo deseaba de verdad y me estaba desquiciando... sobre todo porque Ben ya no se detenía, lamiendo los pechos de Arlette con absoluta impunidad al lado mío y a mí me estaba por dar algo.

-¿Por qué tendría que tocarte? Podrías tocarme tu si quisieras- murmuró mirando a Alma con picardia y sin dejar de jugar con ella en ningún momento. Gus adoraba ahora mismo ese juego, veía a Alma más sexy que nunca y jamás pensó que ella le fuera a desear tanto con unas miradas. Dijo lo demás y se acercó algo más hasta sus labios pero sin llegar a tocarla, solo mirándola más de cerca- Yo creo que eres tu quien me desea y quien lleva deseando probar mis labios desde el principio, reconocelo y tal vez te toque- susurró con picardía antes de apartarse mirando sus labios y después bajando su mirada hacía sus pechos donde estaban las manos de Arlette tocando sus pezones y pellizcandolos según yo besaba los suyos- Sigue Ben, joder...-susurró apretando mi nuca y guiandome más contra sus pechos.

Gus se acercó más diciendo todo eso y sonreí con picardía entrecerrando mis ojos. -Quizá...- respondí a lo primero mientras escuchaba lo que me iba diciendo después. Me interrumpió el pedido de Arlette y miré un segundo como Ben le hacia caso, besando sus pechos sin cortarse. Sonreí bastante excitada por esa imagen, joder... podía empezar a imaginarme la "dinámica" de los tres. Volví ensgeuida a mirar a Gus mientras alzaba una mano y tomaba levemente su mejilla, apenas rozándolo con mis dedos, pasando mi dedo pulgar por su boca muy despacio. -Claro que quiero besarte, llevo queriendo hacerlo desde hace rato... pero a Ben no le gustaba la idea.- murmuré siendo completamente abierta con él sin dejar de mirarlo intensamente a los ojos y de jugar con mi pulgar en sus labios. -Ahora, que está entretenido con tu mujer, yo creo que sería más sencillo... pero... eres tan correcto, me sentiría mal besándote si no me lo pidieras.- murmuré provocándolo sin echarme ni un centímetro para atrás.

Gus la miró con una sonrisa picara cuando Alma fue jugando así con el dedo en su boca y fue siendo tan directa. Por eso no había participado desde el principio, no solo por Ben, sino porque Arlette también había estado algo paranoica, ella lo sabía, el tiempo que habían estado solos los tres en Ámsterdam Gus siempre había estado en medio, mediando entre las dos, y de alguna forma a su esposa eso le había molestado... Así que había querido ser cauto. -No sé si estoy preparado...-susurró por molestarla mientras mordía despacito su dedo- Tal vez deberíamos empezar por besos más sencillos, ¿no crees?. Tal vez... por aquí-susurró señalando su cuello y "retando" de nuevo a Alma sonriendo por eso de que ninguno quisiese perder y ser el primero en dar un beso.

Gus dijo eso primero que nada mientras me miraba todavía con intensidad y mordía levemente mi pulgar... joder, estaba siendo tan sexy que costaba ahora mismo reconocerlo. Dijo lo demás señalándome su cuello y sonreí mirándolo. -¿Más sencillos?.- susurré mirándolo todavía y sin dejar de sujetar un poco su cara. -Se nota que nunca te he besado todavía...- murmuré provocándolo todavía un poco, como si esos besos no fueran nada sencillo y pudiera perder fácil el control. Ben y Arlette seguían a lo suyo, me acariciaban todavía pero sobre todo Ben estaba descargándose con los pechos de Arlette y manteniéndola bastante "entretenida", lo que ayudaba considerando lo mucho que estaba disfrutando el estar coqueteando con Gus tan descaradamente. -Pero me vale, ya dije que llevo queriendo besarte desde hace mucho rato... así que...- murmuré sin decidirme a hacerlo más por seguirle el juego que otra cosa, fui jugando con sus labios algo más, metiendo apenas mi dedo pulgar en su boca mientras me acercaba a sus labios pero en cambio iba hacia su barbilla, dándole algún pequeño mordisco, sintiendo su piel por primera vez con mis labios.

Arlette desistió ya con Alma que pasaba completamente de ella. Demasiado heterosexual, estaba claro que había captado mucho más su atención Gus... Así que se giró ya del todo hacía mi para estar más cómodos y me tomó de la nuca llevándome hacía sus labios. Nos besamos con intensidad y mordí su labio como un tonto cuando sentí como Arlette comenzaba a soltar los botones de mi camisa entre nuestros besos. Me la terminó de desabrochar y me la quité con algo de su ayuda entre sonrisas antes de que volviésemos a besarnos.
Gus por su parte sonrió complacido al ver que por una vez "ganaba" en ese juego con Alma. Chupó descaradamente el dedo que Alma metía en su boca y cuando fue hasta su barbilla suspiró al notar por fin los labios de Alma-Ahora si que me dan muchas ganas de tocarte...-susurró bajando la mirada hacía ella un instante pero sin llegar a tocarla todavía.

Arlette ya dejó de acariciarme y bufé por eso, antes de mirar como se disponía a besar a Ben, no acababa de resultarme fácil verlos... Empezó a soltar los botones de la camisa de Ben y suspiré mirándolos todavía un poco de reojo, hubiera intervenido... joder, quería hacerlo pero es que ahora mismo necesitaba que Gus me besara de una vez o me daría algo. Por su parte, otra vez llamó mi atención cuando chupó mi dedo sin cortarse ni un poco, sonreí de lado comenzando a bajar un poco por su cuello besándolo levemente mientras con mi otra mano iba hacia Arlette, acariciando su pierna despacio, subiendo un poco por allí. No pensaba dejar que se lo montaran al lado mío mientras Gus apenas se atrevía a hacer más que mirarme. Gus dijo eso y volví mis ojos a él. -Quitate la camisa.- le dije enseguida sin cortarme. -No sería justo que fueras el único vestido...- murmuré con picardía. -Y yo soy una persona muy justa...- susurré de broma mientras volvía a besar su cuello y metía la mano que había tenido en su boca por debajo de su camisa, acariciando su abdomen mientras mi otra mano iba subiendo por el interior de las piernas de Arlette.

Gus siguió la mirada de Alma un segundo y comprobó como nos estaba "vigilando". Podía entenderlo, a él mismo no le resultaba a veces muy fácil. Pero Alma le dijo lo de la camisa y se olvidó por un momento por eso, más cuando coló las manos bajo su camisa- Lo entiendo, yo también soy justo- dijo mirandola mientras comenzaba a desabrocharse la camisa. La dejó a un lado ni bien se la quitó y ni bien miró a Alma ya no pudo mantenerse tan al margen, acercó una mano a su cuerpo y comenzó acariciando su nuca según ella besaba su cuello bajando después por su espalda poco a poco.-¿Mejor así?-murmuró sonriendo por eso de estar ya con el torso descubierto.
Yo escuché a Arlette jadear de sorpresa y cuando bajé la mirada pude ver que era porque Alma había comenzado a acariciar sus piernas metiéndose un poco de nuevo entre nosotros.-Me estáis volviendo loca-murmuró ella encantada mientras acariciaba mi abdomen comenzando a bajar hasta mi pantalón, jugando con los botones de mi jean según nos besábamos.

Gus dijo eso, sobre que también era "justo" y sonreí alzando la mirada para ver sus ojos antes de que ya se pusiera a eso de quitarse la camisa. Enseguida acarició un poco mi nuca y el sólo contacto de su mano bajando despacio por mi espalda me estremeció. -Sí, muchísimo mejor.- susurré volviendo a su cuello pero apenas soltando algún beso por allí, dedicándome más a acariciar su abdomen despacio... aprovechando que ahora lo tenía descubierto. Escuché a Arlette y me mordí un labio enseguida, sabia que iba por mí así que me giré a mirarla un segundo antes de volver a centrarme en Gus. -Ya lo has evaluado lo suficiente?.- le pregunté en un susurro con mucha picardía mientras iba subiendo ahora por el cuello de Gus y me quedaba mordisqueando su barbilla. -Me refiero a... la situación... porque, verás, sigo teniendo realmente muchas ganas de que me beses...-[/color] murmuré provocándolo sin cortarme para nada.

Gus se mordió un labio cuando dijo eso- Eso creo- susurró provocativamente mientras se estremecía por las caricias de Alma en su abdomen, no tenía sentido esperar mucho más cuando ambos lo estaban esperando. Tomó su rostro para que dejara su barbilla y ya fue hacía sus labios. Deposito sus labios junto a los suyos y la besó, primero solo jugando con sus labios y después poco a poco más su boca dejando ya que sus lenguas se tocaran y pudiesen jugar, tomándose toda la calma del mundo en cada cosa.
Por nuestra parte ibamos muy encendidos así que Arlette fue soltando mis pantalones y los comenzó a bajar sin andarse con muchas vueltas- Joder- susurré antes de mirar un segundo a Alma y a Gus viendo como ya se estaban besando.

Respondió eso y enseguida me cogió el rostro tomándome de la barbilla y acercando su boca a la mía para besarme de una vez. Lo hizo despacio, tomándose todo el tiempo del mundo. Al parecer así era Gus, o así quería mostrarse... pero todo llevaba tiempo con él, le seguí el ritmo disfrutando de ese ritmo tranquilo, descubriendo su boca sin apuros y entregándome de a poco, abriendo mis labios, sintiendo su lengua. A mi lado Ben soltó ese joder y sonreí contra los labios de Gus. A saber por dónde iban ahora las intenciones de Arlette pero era evidente que le gustaba jugar con todo el mundo y por el vínculo de sangre podía sentir perfectamente lo bien que estaba llevando las cosas con Ben... Gus ya no se cortaba y yo empezaba a reconocer internamente que lo había deseado mucho, ahora mismo estaba derritiéndome por completo en su boca y sabía que no era solamente por ser un tío guapo que no había besado nunca. Había logrado llamar mi atención y generarme intriga desde el principio, y ahora estaba entregada a seguirle el juego a él y a todo el mundo, no quería que todo eso acabara por nada.

Nos libramos de mis pantalones y Arlette sonrió con picardia mientras cogía mi mano- Juguemos con ellos- susurró por no hacer todo tan "individualizado" tras darme otro beso- Ayúdame, nunca he hecho esto- me susurró mientras llevaba nuestras manos hacía el cuerpo de Alma. No sabía exactamente que quería pero coló nuestras manos por debajo de la ropa interior de Alma y me hicé una idea... Joder... Tomé la mano de Arlette y la fui guiando por allí, haciendo que tocara poco a poco el sexo de Alma...
El cuerpo de Alma reaccionó obviamente ante el contacto por lo que Gus rompió un segundo el beso y bajó la mirada justo para ver lo que estabamos haciendo. Suspiró y volvió a sus labios, esta vez con algo más de intensidad mientras ya no se podía contener demasiado y llevaba también una de sus manos a uno de sus pechos, tocando su pezón con el pulgar y tocándoselo como le daba la gana.

No había prestado mucha atención al diálogo entre Ben y Arlette, estaba demasiado enganchada a ese beso con Gus, de modo que cuando sentí las manos de los dos coládnose por debajo de mi ropa interior casi me da algo. -Joder.- suspiré en los labios de Gus sintiendo como empezaba a arquearme de placer. Él empezó a acariciarme los pechos con una de sus manos sin intenciones de detenerse y mordí un poco sus labios descargando ahí lo desquiciada que estaba... en medio segundo sentí como me ponía al límite. -Joder... Sigan, sigan...- les pedí sin cortarme, sintiendo como Ben iba acariciándome y Arlette también hacía lo propio. Gus no dejaba de rodear mis pechos con su mano, apretando mis pezones y haciendo que se endurecieran de placer, estaba en el séptimo cielo y no quería salir de ahí por nada del mundo.

Alma nos pidió más y casi me da algo al verla en ese estado. De pronto Alma había vuelto a ser el centro de atención y ahora mismo todos estabamos más centrados en ella que otra cosa. Fuimos acariciandola por allí y en un punto al notarla tan desquiciada fui ayudando a Arlette a que introdujese un par de dedos en su interior y los fuese movimiendo. Arlette suspiró y cuando fue cogiendole el tranquillo ya aparté mi mano y comencé a quitarla la ropa interior a Alma, deslizándola por sus piernas para que no molestara... por su parte Gus siguió besándola, devorando su boca, permitiendo que ahogara los gemidos contra su boca y tocando sus pechos una y otra vez buscando excitarla y sacarse el mismo las ganas de tocarla que había tenido todo el rato.

No acabé de entender en qué punto pasé a sentirme otra vez como "atacada", pero definitivamente me estaba encantando eso... no podía ni entender la mezcla de sensaciones que me invadían por todas partes, estaba desesperada de placer de verdad. Besé a Gus una y mil veces, gimiendo en su boca y enredando mis dedos en su cabello, desquiciándome contra sus labios mientras ahogaba los jadeos que me provocaba la forma en la que Arlette me iba tocando, alcé mis piernas, las flexioné, las bajé, las abrí... ayudé a Ben a quitarme del todo mi ropa interior y otra vez solté gemidos, hundiendo mi boca en la de Gus con descaro, mordiéndolo como se me antojaba. Llevé mi otra mano al cabello de Arlette, acariciando su mejilla y luego su boca, metí un dedo en su boca mientras me sentía derretir de verdad. Estábamos todos al límite y yo era el condenado centro de esa "situación" extrañísima en la que habíamos acabado metidos. Quería hablar, gritar, decir cualquier cosa... Arlette chupó mi dedo mordiéndolo después y supe que estaba excitadísima con todo eso. -Joder, Ben... fóllala.- le pedí separándome un segundo de los labios de Gus, ni sabía porqué lo decía, pero lo deseaba, quería verlo. -Quiero que lo hagas mientras ella sigue dándome placer... Eso quiero.- solté totalmente descarada y sin cortarme para nada antes de hundirme en los labios de Gus descargándome con él... es que ya no me importaba nada.

De golpe todos estabamos excitadisimos en medio de esa rara situación, era una locura, pero una locura que ponía a mil. Alma soltó eso y casi me da algo, de hecho no fui el único, pude sentir como Arlette se estremecía al escucharlo mientras lamía su dedo y como Gus mordía sus labios por sus palabras mientras volvía a besarla mil veces más.- Joder Alma...-murmuré totalmente a mil, pero no me negué... Joder, no podía. Estaba a cien y le tenía ganas a Arlette desde hace un buen rato así que el tener su permiso y que Gus no dijese nada solo hacía todo más fácil. Me quité los boxers y me encargué de quitarle también a Arlette su ropa interior entre caricias- Arlette ponte de lado- susurré recostándola en el sofá de espaldas a mi y dejándola cerca de Alma para que continuara dándola placer. Me coloqué tras ella y tras besar un poco su espalda y su cuello me fui hundiendo en ella poco a poco en su sexo- Ahh... Ben...-gimió Arlette mordiendo el dedo de Alma casi sin pensar mientras aumentaba el ritmo de sus dedos en el interior de Alma según yo comenzaba a penetrarla poco a poco.

Ben dijo ese "joder" que sólo ponía en evidencia las muchas ganas que tenía de hacer eso. Sentí a Arlete morder mi dedo con una mezcla de placer y de queja. Sabía que acababa de descolocar a todo el mundo y no me importaba en absoluto... además, nadie se quejó... Gus no protestó, Ben no protestó y Arlette menos que menos. Ben le indicó que se pusiera un poco de lado y se pegó a su espalda hundiéndose en ella enseguida tal era lo excitado que estaba. Sentí los gemidos de Arlette nombrándolo y era una completa locura. Gus ya no dejaba de besarme y acariciarme como un desquiciado, perdiendo los pocos modales que todavía le quedaban y Arlette empezó a tomarle al gusto a eso de masturbarme, moviéndose al ritmo que Ben la penetraba. Bajé mi mano desde el abdomen de Gus y la fui colando dentro de sus pantalones sintiendo como ya tenía una erección y para comenzar a acariciarlo por allí pero sin meter mi mano todavía dentro de sus boxers. -¿Te importa?.- le pregunté provocadora muy cerca de sus labios. -Ya te he dicho que soy una persona muy justa...- murmuré en plan juego por eso de que era el único al que nadie estaba tocando todavía.

[off: me voy un rato... creo que vuelvo luego ]

Era una locura, pero me daba lo mismo, lo estaba disfrutando y eso no me lo quitaba nadie. Mientras Arlette seguía masturbando a Alma la tomé cintura según la iba penetrando y con la otra fui acariciando sus pechos según hundía la cabeza en su cuello y la iba besando por allí. Estaba totalmente desquiciado ahora mismo y no me pensaba cortar para nada...
Por su parte Gus también estaba ya muy excitado así que cuando Alma coló la mano por sus pantalones sintió todo su cuerpo derretirse de placer- Adelante- susurró clavando sus ojos en los suyos por un momento- Ya te dije que también era una persona muy justa- susurró mientras él mismo se quitaba los pantalones para que no molestaran y dejando en evidencia que había dejado toda diplomacia de lado al estar tan excitado. Es que ya no sé podía controlar. La deseaba muchísimo y quería tener su mano ahora mismo en su miembro lo antes posible.

[off: Jajjaj Vale, ya veremos si coincidimos! Bye! ]

Apenas podía ver como Ben seguía embistiendo a Arlette, buscándola con total descaro... Gus dijo eso perdiendo la poca diplomacia que le quedaba y sonreí al ver como directamente se quitaba de un tirón los pantalones para que no nos molestaran. Metí mi mano en sus boxers y comencé a masturbarlo según sentía el ritmo que Arlette mantenía conmigo. Estaba siendo una locura, lo sabía... pero tampoco importaba, mañana sería otro día. Hoy había que disfrutar y lo estaba haciendo, claro que lo estaba haciendo.
Me giré un poco a ver a Ben y a Arlette y después volví a mirar a Gus que no dejaba de mirarme ni por un segundo. Lo besé y ahogué un poco los jadeos por la forma en la que Arlette me tocaba. -Te gusta?.- susurré en los labios de Gus mientras iba aumentando la velocidad. -A mi me parece que sí...- murmuré con picardía pero es que ya tenía una erección desde el principio, era evidente que se había estado cortando, pero no precisamente porque no estuviera excitado. -Cómo quieres que siga? Dime... No te conozco, más fuerte? más lento?.- fui soltando provocándolo sin intenciones de detenerme.

Alma coló la mano por dentro de sus boxers y Gus jadeó contra sus labios sin poderse creer lo que había estado deseando eso. Parecía mentira como se había ido dando todo-Claro que me gusta- susurró enredando las manos en su pelo besandola y ahogando sus supiros contra sus labios- Más fuerte- susurró besándola- más fuerte- la fue pidiendo sin cortarse... Por su parte Arlette ya iba desquiciada y también me pidió por más- Tu tambíen Ben... Más fuerte por favor- gimió según apoyaba una de las manos en el abdomen de Alma para sujetarse mejor. Ya estábamos practicamente pegados a ella por mis embestidas, era díficil ahora mismo saber donde empezaba uno y acababa otro, los cuatro estábamos completamente conectados-¿A ti te gusta Alma o quieres que vaya más fuerte también?- preguntó entre gemidos

Gus me dijo que le gustaba mientras enredaba sus manos en mi cabello y volvía a besarme, enseguida me pidió que fuera más fuerte y eso hice. Moviéndome con más rapidéz y ahogando mis propios gemidos en su boca. Escuché a Arlette y suspiré, sentía la presión de ella y de Ben contra mí y estaba enloqueciendo. -Sí, joder Arlette... más fuerte... Venga, no te cortes ahora... Sigue, por favor, sigue.- le pedí contra los labios de Gus concentrándome en él y buscando que disfrutara tanto como fuera posible. De verdad que estábamos ahora mismo todos conectados y era dificil saber donde comenzaba uno y terminaba el otro. No sabía cómo sería mañana pero ahora mismo esta locura estaba siendo perfecta y no quería que acabara, eso lo tenía en claro.