Cruzándonos por la calle (Laine)

Era bastante temprano pero yo nunca había sido de dormir demasiado así que aprovechando que era temprano decidí salir a dar una vuelta y si eso comprar alguna cosa que necesitaba. Llevaba apenas un par de minutos caminando hacia una de las pocas tiendas que había en el pueblo cuando a lo lejos vi a Laine... No la veía desde lo sucedido el otro día cuando se había marchado molesta... Lo mejor sería ver como estaba- Hey, Laine-dije en voz algo alta para que me escuchara y dejara de andar para alcanzarla y acercarme hasta ella.

Iba caminando en la calle con una bolsa de supermercado. Nunca en toda mi vida había ido antes por provisiones, así que no estaba segura si lo había hecho bien, al salir me puse mis lentes obscuros y trate de no tocarme el pache en mi cuello, era increible que me siguiera escosiendo.
Me fui directo hacía la casa cuando alguien me llamo. Sabía quien había sido pero tenía la esperanza de ver a alguien más al girarme, pero no, era Ben.
Tuve la tentación de sonreír o saludar, pero el recordatorio de la otra noche fue suficiente para girarme y seguir caminando sin dar más uestras de que lo había visto. Mejor que siguiera pensando que seguia molesta.

I'm wearing this:

Vi como se giró y como al ver que era yo empezaba a caminar de nuevo. Suspiré, no podía ser más odiosa cuando le daba la gana. Pensé en dejarla ir pero al final me di por vencido y caminé hasta ella- ¿Qué pasa? ¿No me has oido?- comenté cuando me puse a su altura y comencé a caminar a su lado.

Lo miré de reojo y fruncí los labios. Respiré hondo, pensé que se enojaría y me dejaría en paz, pero no. No tenía otra opción, sería aun más molesta, mejor para el odiarme a que se involucrara en esto.
Suspiré.
-Por que no regresas con tu esposa, Ben? Como vez no estoy de humor para más polvos -le dije lo más acidamente que pude. Enojate y vete, pensé, enojate y vete.

Enarqué una ceja en cuanto dijo eso, estuve apunto de soltarla una bordería pero me contuve- Que te lo crees tu... Si quisiera haría que estuvieras de humor para un polvo...-dije muy seguro de mi mismo y con una sonrisa ladeada mientras seguía caminando a su lado- Venga, no sigas enfadada que te pones muy fea...-dije intentando que dejara de "huir" de mi.

Apenas contuve una sonrisa y puse los ojos en blanco.
-Que te den Ben... eres la persona más molesta que conozco, sabias? -le dije deteniendome y cruzandome de brazos-. Venga que quieres que te diga? Que si estoy molesta? Si y mucho.

-No eres la primera que me lo dice...-dije sonriendo y sin inmutarme ante eso de que era molesta. Separó diciendo eso y me paré a su lado- Creía que se te habría pasado el cabreo... Tampoco fue para tanto...-dije sin creermelo ni yo y mirando un poco hacía otra parte.

Lo miré incredula y me quité las gafas.
-No para nada, no fue nada... ya sabes como soy, chico que veo, chico que beso -dije sarcastica pero sin sonreír-. Por cierto, como te fue aquella noche con Alma? Pudiste dormir, o tu ya estas tan acostumbrado a que "no pase nada" con otras, que ya ni te sientes culpable al regresar con tu esposa? -Vale, me pasé. Pero estaba molesta por esa noche, y no solo exactamente con Ben, pero era al unico al que se lo pdía echar en cara.

Me empezó a hablar con sarcasmo y entorné los ojos, si es que me la sabía de memoria, siempre actuaba así cuando andaba molesta. Pero ya después dijo lo demás y la miré totalmente molesto- Vete a la mierda- claro que me sentía culpable y encima todavía no la había dicho nada porque era jodidamente cobarde cuando me daba la gana...- ¿Sabes qué? Ahí te quedas, si estas despechada porque no me quise acostar contigo es tu problema- dije empezando a andar y dejándola esta vez yo allí colgada, pero es que no la iba a permitir que me soltara esas cosas...

Abrí los ojos sorprendida. Ok sabía que se iba enojar, sabía que me había pasado, pero también me dolió lo que me dijo.
Fruncí el entrecejo y en un arranqué de rabia le lancé la bolsa de cosas a la cabeza, con un golpe certero. Traía algunas latas, bien le habría dolido pero no me importo.
-Que te den! -le grité lo más furte que pude hata sentí como se desprendía un poco la gasa que tenía en el cuello y la sujeté con la mano-. Eres un malagradecido cabron, que te den!

Estaba ya largandome cuando me golpeó con la bolsa en la cabeza, no me lo podía creer.- Eres una estúpida- dije cada vez más molestó girandome a mirar justo para ver como se tapaba el cuello- Joder, ¿qué tienes ahí?- dije apartandola la mano casi de un manotazo y molestó porque a pesar de todo me terminaba preocupando por ella.

-Nada... -respondí quitandome molesta, pero eso solo arrancó el parche de primeros auxilios y sentí ardor cuando el aire dio en la herida que aun seguia sin curarse en el cuello. Miré el piso. Ahora tratar de decir que la herida no era nada era como tratar de convencerlo que no le había arrojado la bolsa de viveres.
-Ves lo que haces? -dije molesta arrancandole el parche de la mano para ponermelo de nuevo.

- Claramente esta herida no es "nada"- dije mirandola y enarcando una ceja- ¿Qué te ha pasado? -dije mirandola un poco preocupado y ya con menos mala leche, de verdad que esa herida no tenía buena pinta, se la tendría que haber curado ya, ¿no? Después de todo eramos vampiros, esas cosas no duraban mucho.

-Eso es lo que me paso por el polvo de anoche -respondí friamente pero ya sin animos de seguirle gritando o arrojandole cosas. Bajé la mirada y vi mis compras de supermercado regadas e inservibles y suspiré. Tendría que ir de nuevo a por ellas.
-Mi esposo es menos comprensivo, sabias?

Entorné los ojos por lo del polvo porque como siguiera así me iba a largar y la iban a dar por muy herida que estuviera... Pero me dijo ya después lo otro mirando hacia el suelo y la miré alucinando- ¿Qué? ¿Estas casada?- dije casi sin podermelo creer. ¿Pero... ? ¿Desde cuando?- dije pensando en que no me había dicho nada.

Suspiré y enarque las cejas. Miré a Ben y sonriendole.
-Ya ves lo que son las cosas. De verdad que no me quería perder tu boda... pero tuve que salir corriendo para llegar a la mía -dije con desgana empezando a caminar al supermercado de nuevo y me giré para verlo-. Me acompañas?

La miré casi alucinando. -¿Por qué no me habías dicho nada?- dije enseguida viendo como empezaba a caminar hacia el supermercado. Esta vez si la seguí- Venga... ¿Es todo lo que vas a decirme? ¿Tu marido te hace eso y te quedas de brazos cruzados?- dije todavía sin podermelo creer. La Laine que yo conocía no se dejaría hacer eso...

-Que querias que te dijera, Ben? -le dije con voz cansada atravesando las puertas automaticas del supermercado y tomando un carrito-. "Oye, me case con un psicopata hijo de puta, quiero mi enhorabuena y mi regalo?". Si lo hice es por que no tenía opción, y si me dejó que me haga estas cosas es por que tampoco tengo opción... -le dije mientrás recorría los pasillos tratando de recordar que llevaba una despensa.

- Puedo ayudarte...-dije tomandola del brazo para que dejara de andar entre los pasillos del supermercado y me mirara. No podía dejar que la pasara eso, ¿no?- Venga, siempre hemos hecho buen equipo juntos... Tal vez no podamos librar de él o algo- dije mirandola y sin soltar su brazo para que no siguiera andando y pasara de mi.

Le sonreí y le acaricié la mejilla con mi mano.
-Ojala fuera asi de facil, cher. Creeme que yo misma le clavaría la estaca pero... no puedo. Él la mataria, y no puedo dejar qu eso pase solo por una mordida. Soy un poco más resistente que eso.

-¿Me terminas de contar la historía o qué?- dije suspirando cansado de que me contara todo a cuentagotas, pero es que parecía que ahora había otra persona involucrada en el medio que podía morir... Me daban ganas de matarla por estar tan tranquila ante todo eso.

Le sonreí y me solté para poder seguir avanzando y eché al carro la primera caja de lo que encontré.
-Fue hace ya tiempo, cuando regresé a America, de eso hará unos... treinta años, creo. Nunca me he quedado en el mismo lugar por mucho, y casi nunca me relacionó con nadie. Tu habías sido una excepción y Melanie tambien. Era una niña, algo... rara, siempre se me quedaba viendo como si... supiera que era yo... Mmm... esto es comestible? -dije arrugando la nariz mientrás examinaba una sopa instantanea. Me encogí de brazos y eché unas seis-. Para no hacertela de rollo, me encariñe otra vez, y otra vez la cague.

Fue escuchando toda la historia y cuando me preguntó lo de la sopa me encogí de homnbros sin saber que decirla, ¿quién sabe? Hacía mas de 200 años que no sabía de que iba la comida humana... Terminó de hablar- Ya... Osea que tiene a esa niña escondida en algún sitio y te amenaza con matarla- dije mirandola para ver si había entendido bien- No me parece tanto problema. Se salva primero a la niña y después se mata a tu marido, y listo- dije con una pequeña sonrisa mirandola como si fuera lo más fácil del mundo.

Levanté una ceja y no pude evitar sonreír.
-Es en serio Ben? Creo que las latas que te arrojé si te afectaron un poco -dije bromeando como antes-. Y dime, vampiro maravilla, como pretendes hacer eso sin que mate de por medio a Melanie... o a ti? -le le dije cruzandome de brazos y enarcando las cejas.

La miré mal cuando dijo lo de las latas porque era obvio que no me tomaba en serio.-Pues... No lo sé, algo se nos ocurrira pero no me matarían, soy genial matando a gente, ya verás...-dije bromeando por no hacer un drama de todo eso- Aparte... Si me pasara algo no sería taaan malo, seguro que sería un alivio para ti librarte de mi- dije medio bromeando y mirandola.