+18 Luego de París sorprendiendo a Ben

Recuerdo del primer mensaje :

Llegué de París por la tarde y me tumbé enseguida en la cama, pero cuando me desperté y empecé a ordenar un poco todo, descubrí que mis plantas no estaban en casa.
El jazmín japonés que le había encargado a Miriam aún seguiría en casa de Ben... durante la temporada en Europa había trabajado y salido de fiesta sin pensar demasiado y estaba funcionando, pero de pronto pensar en el jazmín me hizo volver a ver en un segundo todos los recuerdos y me sentí una tonta.

Me puse unas botas, un vestido corto negro y me fuí a beber a algún bar... hacía rato que sabía que no era solución pero tampoco encontraba el modo de sacarme a Ben de la cabeza, lo mejor seguía siendo no pensar. Estuve un par de horas hasta que ya cerraban así que me fuí caminando a casa. Pasé por la casa de Ben y ni siquiera era del todo consciente de ello cuando me encontré llamando a su puerta.

Me senté a esperar que abriera mientras me encendía un cigarro.

Spoiler:

-Vaya... qué poco original.- dije con una sonrisa luego de separarme de sus labios. -Fantasié con prender fuego el árbol, me desperté algunas noches y casi lo hago... pero me gustan demasiado los árboles, ya lo sábes... el pobre no tenía la culpa.- murmuré con una pequeña sonrisa y volví a besarlo.

- Siempre has sido poco original...-dije bromeando por eso que siempre la estaba diciendo que era la tipica humana pija con problemas con sus padres...- Pero... Me alegra que no quemaras el árbol la verdad- dije todavía contra sus labíos- Yo la verdad es que no me deshice de nada...-dije porque nunca lo hacía- Solo de tu asquerosa comida humana que había en la nevera- dije sonriendo.

-Ya... es que no he dejado tampoco nada aquí, o sí?.- dije sonriendo por lo de la comida. Pensé en las plantas, la verbena, la comida... y no recordaba haber dejado nada más... aunque con la velocidad y el estado en el que me había ido podía ser que me hubiera olvidado cualquier cosa.

- Ya... Y yo tampoco me deje nada en tu casa y aún así te libraste del sofá y del resto de las cosas...- dije enarcando una ceja ante eso porque realmente desde que habíamos vuelto a Fell´s no había pisado ni su casa.

Escuché lo que dijo y sonreí. -Lo sé, es que es claro que soy mucho más sentimental que tú y te extrañé muchísimo más...- le dije con una sonrisa en broma mientras volvía a acercarme.

- ¿A si? Demuéstrame cuando me has extrañado...-dije con una sonrisa picara tras escucharla decir eso de que era más sentimental que yo y lo otro.

Me alejé un segundo mirándolo y mordiéndome el labio... volví a sus labios, besando levemente su labio inferior y jalándolo hacia mí. -Hecho.- susurré apenas soltarlo y mirándolo a los ojos.
-Pero si tú me demuestras que tanto extrañar no ha sido en vano...- murmuré acercándome a su oído y comenzando a bajar luego de besar detrás de su oreja y yendo por su cuello.

- Hecho- repetí como ella con una pequeña sonrisa mientras sentía sus besos por mi cuello. Sonreí y la cogí de la cintura estrechandola más contra mi para sentirla más cerca.

Sonreí cuando respondió eso y me dejé mover con Ben, lo hacía con tanta facilidad que me había acostumbrado a eso... continué con nuestros labios unidos, recostándo su cabeza en el respaldo del sofá y profundizando el beso mientras con mis manos jugaba en su camisa, en los bordes, en el cuello... sin acabar por desprenderla hasta que comencé con el primer botón.

Comencé a acariciarla por encima del vestido negro mientras nos besábamos y sentía sus manos jugando con los botones de mi camisa, la había hechado de menos y estar así con ella de nuevo era genial.

Acabé de jugar con su camisa y ya desprendí uno a uno los botones mientras iba profundizando los besos y haciéndolos más seguidos e intensos... Sus manos acariciándome por encima del vestido me estremecían.

Nos separamos un poco para poder quitarme la camisa ya desabrochada y la ayudé un poco a librarnos de ella. La miré después unos instantes a los ojos y ya después me acerqué de nuevo a ella para besarla, jugué con sus labios unos instantes antes de bajar por su barbilla mordiéndola ligeramente hasta bajar a su cuello y besárselo lentamente mientras llevaba mis manos hacía la cremallera de su vestido.

Cuando nos miramos, volví a tener la sensación de que estábamos haciendo lo correcto. Sonreí un segundo antes de volver a besarnos y continuar ya luego disfrutando de sus besos y los pequeños mordiscos por mi barbilla y cuello hasta que comenzó a bajar la cremallera de mi vestido... acaricié su espalda mientras lo hacía y lo ayudé a terminar de quitarme el vestido.

La quité el vestido con algo de su ayuda y enseguida volvimos a pegarnos el uno al otro. Sentía su piel desnuda ya contra la mía y era imposible que pensara en algo que no fuera ella. Volví una vez más a besarla y suspiré, nuevamente estábamos ahí, habíamos pasado por numerosas complicaciones desde que nos conocíamos pero ahí estábamos juntos de nuevo... Continué besandola sin pensar en nada mientras acariciaba su espalda buscando ya el cierre de su sujetador.

Nos abrazamos ya sintiendo el contacto con la piel desnuda... se libró de mi sujetador y suspiré mientras continuaba besándolo...
No entendía aún qué misterio me había llevado una vez más a su puerta, pero agradecía la borrachera y mi falta de conciencia... nunca lo hubiera hecho de otro modo, lo necesitaba. Lo quería como a nadie y no me importaba nada más en el mundo que no fuera él, ni siquiera sabía en qué momento había dejado de ser un capricho para convertirse en la persona con la que realmente quería estar cada jodido día... pero había sucedido.

Me libré ya de su sujetador y enseguida lo deje a un lado antes de comenzar a tumbarla en el sofá como había hecho ya tantas otras veces. Continué con nuestros labios unidos, recostándo su cabeza suavemente en el sofá y profundizando el beso mientras me posicionaba sobre ella intentando no aplastarla demasiado.

Me recostó en el sofá y quedó sobre mí mientras nuestros labios seguían unidos. Lo tomé dela parte de atrás de su cabeza para acercarlo aún más mientras abría algo mis piernas para hacerle un sitio. -Te quiero...- murmuré entre los besos, no me cansaba de decírselo y agradecía poder volverlo a hacer.

Suspiré cuando dijo eso porque me encantaba escucharselo decir y más después de todo lo que había dicho. Me acomodé mejor entre sus piernas cuando las abrió y volví a besarla- Yo también te quiero...-murmuré contra sus labios sin separarme de sus labios.

Continuamos besándonos y escuché lo que dijo con una sonrisa, realmente me encantaba como sonaba en sus labios eso.
Habíamos pasado muchas cosas y si insistíamos en permanecer juntos era porque al final habíamos acabado reconociendo que valía la pena y era algo de lo que no me arrepentía.

Continué besandola, apenas habia separación entre nuestros cuerpos y podía notar el suyo a la perfección pegado al mio mientras nos besábamos, era magnifico. La quité la última prenda de ropa interior ya completamente desesperado por ella y por sus besos.

Terminó de desnudarme y a la vez intenté dejarlo a él sin ropa. Entre besos y caricias fuimos anudando nuevamente nuestros cuerpos me sentái realmente feliz de estar allí otra vez.

Me terminó de desnudar entre besos y caricias y finalmente me hundí en ella antes de marcar un ritmo continuado y buscando profundizar lo más posible, la conocía perfectamente y por suerte sabiamos lo que nos gustaba, Alma era genial.

Lo sentí otra vez dentro mío y era una mezcla de sensaciones... de un lado lo había extrañado tanto... y del otro era como si el tiempo no hubiese pasado para nada, seguía siendo todo tan cotidiano, tan simple... era fácil estar, dejándonos llevar por nuestros cuerpos, desconectando la mente y simplemente haciendo lo que nos viniera en gana, era realmente genial.

Continué con el ritmo de mis embestidas y lo fui aumentando según lo necesitabamos. Podía sentir de nuevo el rápido sonido de su corazón e incluso el de su respiración y me encantaba, realmente la había extrañado y me encantaba que estuvieramos juntos de nuevo.

Lo abracé por la espalda ayudándolo a moverse y sintiendo al máximo cada movimiento, cerré mis ojos y busqué sus labios besándolo lentamente porque no podía mantener demasiado el beso y simplemente dejando mis labios rozando los suyos mientras respiraba y sentía su cuerpo unido al mío.